POV Yoon Gi
Ambos estábamos en la pieza, solos, sentados en el piso, tomando una lata de gaseosa cada uno. La forma en que Jimin llevaba la boca de la lata a sus labios era, por así decirlo, muy sexy. No podía dejar de mirar sus labios, esos labios tan apetecibles que me volvían loco.
- Yoon Gi ¿por qué me miras tanto? - Preguntó el pelinegro.
- ¿Yo? - Pregunté. - Por nada, sólo me quedé en blanco.
- ¿En blanco? - Preguntó sonriendo. - ¿Seguro no me estabas observando los labios?
- ¡¿Qué?! ¡No! - Negué exaltado.
- Sabes... yo tampoco puedo dejar de ver tus labios. - Dijo Jimin apoyando la lata en el piso. - Me gustaría... darte un beso.
El menor se acercó a mí e intentó juntar sus labios con los míos, pero antes de poder lograrlo volteé mi rostro.
- Ya veo. - Dijo regresando a la misma posición que antes. - Creo que no te gusto.
- Jimin... no. - Negué.
- ¿No? - Preguntó. - Entonces tengo razón.
- No. - Negué.
- ¿Entonces? - Preguntó.
- Sí me gustas. - Afirmé alzando un poco la voz.
El menor se sorprendió por mi reacción, pero rápidamente se colocó enfrente de mí y juntó nuestros labios.
- A mí también me gustas. - Afirmó luego de separar un poco sus labios de los míos.
El pelinegro volvió a besarme, sólo que ahora abrí mi boca lo suficiente como para que el menor pudiera irrumpirla con su lengua. De a poco sentía cómo su mano se posaba en mi nuca y me acercaba más a él. Ambos nos separamos y deslicé ambas manos hasta la parte baja de su remera y de a poco comencé a quitársela.
- Vaya que eres rápido. - Dijo Jimin a penas le quité la remera. - Eso me gusta.
Las manos del menor comenzaron a desprender los botones de mi camisa, la cual luego me quitó. Llevé mi mano a la zona de su pantalón en la cual se hallaba su miembro, el cual sobé y apreté hasta que se puso duro.
- Jimin siéntate en la cama. - Ordené.
- ¿Por qué? - Preguntó.
- Sólo hazlo. - Dije.
El pelinegro se sentó en el borde de la cama mientras yo me arrodillada enfrente de él. Bajé la bragueta del pantalón de Jimin para poder quitárselo lentamente; lo dejé sólo con su ropa interior, de la cual se asomaba la punta de su glande.
- ¿Te aprieta? - Pregunté tomando su miembro por sobre la ropa.
- U - un poco. - Respondió. - S - si me hubieras dicho desde un principio que ibas a chupármelo me hubiera sentado sin preguntar.
- ¿Eso quiere decir que quieres que te la chupe? - Pregunté relamiéndome los labios.
- Sólo pensar en que me lo chupes me excita. - Dijo.
Llevé ambas manos al elástico de su ropa interior para poder quitársela y dejar al descubierto su erección, la cual tomé con mi mano y guié a mi boca. Al introducir todo el miembro del menor en mi cavidad bucal comencé a mover mi cabeza de arriba hacia abajo. A la vez que me movía más rápido los gemidos del mejor se hacían más continuos.
- Yoon Gi, por favor frena, sino voy a venirme. - Gimió Jimin.
Quité el miembro del menor de mi boca y me puse de pie enfrente de él.
- Ahora te toca chupármelo. - Dije.
Jimin bajó la bragueta de mi pantalón y comenzó a quitármelo. Me quedé sólo con mi ropa interior. La mano del menor se introdujo dentro de mi bóxer y sentí cómo iba tomando lentamente mi miembro para poder empezar a masturbarlo.
- Gimes tan lindo. - Dijo.
Quitó su mano de mi bóxer y llevó ambas al elástico del mismo para así quitármelo. Mi miembro estaba completamente duro, Jimin se quedó observándolo durante unos segundos, luego de lamer sus labios lo tomó con su mano y lo introdujo lentamente en su boca. Apenas comenzó a mover su cabeza de adelante hacia atrás no pude evitar no gemir de placer, lo estaba haciendo tan bien que no podía ni siquiera disimularlo un poco.
- Jimin ah! Lo... lo haces tan bien... - Gemí de placer.
De a poco el menor empezó a moverse más lento, hasta quitar mi miembro de su boca. Jimin se levantó de la cama y volvimos a besarnos.
- Te ves tan lindo sin ropa. - Dijo el pelinegro mientras me miraba de arriba a abajo.
Ambos nos recostamos en la cama, cada uno pasaba su mano por el cuerpo ajeno a su gusto, hasta que nuestras manos tomaron el miembro del otro. Nos masturbamos mutuamente, hasta que Jimin soltó mi miembro y tomó la mano con la cual lo estaba masturbando.
- Yoon Gi... ya quiero metértela. - Dijo Jimin mientras sostenía mi mano.
- Entonces hazlo. - Dije.
El menor se colocó sobre mí y luego de acomodar mis piernas posó su glande en mi entrada.
- Jimin...
- Tranquilo, lo haré despacio. - Dijo.
De a poco el pelinegro comenzó a presionar su glande con mi entrada, hasta que el mismo entró por completo.
- Du - duele. - Gemí mientras con mis manos me tomaba de las sabanas.
- Espera, aguanta un poco más. - Ordenó.
Jimin siguió ejerciendo fuerza, hasta así poder introducir su miembro por completo en mi entrada.
- M - me duele mucho. - Gemí en voz baja. - Pero quiero que sigas.
- Yoon Gi... está bien. - Afirmó un tanto triste.
- No te pongas así. - Ordené. - Hazlo.
El menor tomó mi mano y entrelazó nuestros dedos. Posteriormente empezó a moverse dentro de mí, no voy a mentir, al principio dolió pero a medida que pasaban las embestidas, empezaba a gustarme cada vez más.
- Jimin uhmm... se siente tan bien. - Gemí de placer.
De a poco el pelinegro aumentó la velocidad de las embestidas, lo que provocó que mis gemidos se volvieran más constantes y difíciles de controlar.
- Yoon - Yoon Gi ya voy a - a venirme. - Gimió el menor.
Sentí toda su esencia correr por el interior de mi entrada. La sensación era tan rara, pero se sentía tan bien.
- Perdona por venirme dentro de ti. - Se disculpó apenas se recostó a mi lado.
- No te disculpes. - Ordené antes de ponerme sobre él. - Ahora es mi turno.
- Espera. - Ordenó. - Acuéstate de nuevo.
- ¿Por qué? - Pregunté.
- Porque quiero complacerte. - Respondió.
No había entendido del todo su respuesta, pero le hice caso y me recosté nuevamente a su lado. Jimin se levantó y se colocó sobre mí. Colocó su entrada cerca de donde se hallaba mi miembro. Tomó mi pene y lo colocó en su entrada, de a poco empezó a meterlo en la misma, hasta que mi glande entró.
- Ah! Yoon Gi. - Gimió.
- Falta poco. - Dije.
Apenas logró meter todo mi miembro en su entrada comenzó a moverse. Ambos gemíamos, pero los gemidos de Jimin eran mucho más agudos que los míos. Llevé mis manos a su cadera y luego de colocar una a cada lado de la misma lo ayudé a moverse. Cada vez los movimientos eran más rápidos. No duré mucho tiempo más y me vine dentro de él.
Ambos estábamos agotados y Jimin se recostó a mi lado.
- Te amo. - Dijo el pelinegro mientras acariciaba mi rostro.
- Yo también. - Afirmé antes de besarlo.
- Yoon Gi....
- ¿Qué? - Pregunté.
- Esta cama... no es de...
- Maldición es la cama de Jin. - Dije. - Mejor será que nos cambiemos y nos acostemos en nuestras camas antes de que vuelvan.
- ¿No quieres que nos vean juntos? - Preguntó.
- No es eso. - Negué. - Tengo miedo de que Jin se enoje.
- En ese caso yo también tengo miedo. - Dijo. - Está bien, vamos a cambiarnos.
Ambos nos cambiamos, y media hora después los demás llegaron.
- ¿Estuvieron bien? - Preguntó Jin.
- Sí. - Afirmó Jimin.
- Seguro se la pasaron durmiendo. - Dijo Ho Seok.
- Durmiendo o haciendo cosas raras. - Dijo Tae Hyung.
- Cosas raras Jimin. - Dijo Jeong Guk. - Yoon Gi seguro se quedó durmiendo.
- No, estuvimos hablando. - Dije.
- Jin... - Llamó Nam Joon apenas se sentó en la cama del mayor. - ¿Por qué tu cama está mojada?
- ¿Cómo que está mojada? - Preguntó Jin, quien tocó la parte que Nam Joon dijo que estaba mojada. - ¿Qué demonios hicieron en mi cama?
- Jin, déjame verte la mano. - Pidió Nam Joon.
- ¿Qué es? - Preguntó Jeong Guk.
- No va a gustarte lo que te voy a decir. - Dijo Nam Joon mirando a Jin, luego de ver su mano.
- Dímelo igual. - Dijo Jin.
- Es semen. - Dijo.
- ¿Qué? - Preguntó exaltado. - Los voy a matar, ¿Quién de los dos fue?
- Pues...
- Fuimos ambos. - Respondió Jimin.
- ¿Lo hicieron en mi cama? -Preguntó. - Sean sinceros.
- Sí. - Afirmé.
- Bien, Nam Joon, ve a lavar mis sabanas. - Ordenó Jin.
- ¿Yo? ¿Por qué? - Preguntó.
- Porque si no por una semana no hacemos nada. - Respondió.
- Pensé que ibas a decirle que era porque era negro. - Dijo Tae Hyung riendo.
- Es negro, pero mí negro. - Dijo Jin tomándole la mano a Nam Joon. - Y volviendo al tema ¿Desde cuándo?
- Hoy es la primera vez… - Dije.
- Bueno, por esta vez los perdono, pero la próxima vez si piensan tener relaciones háganlo en una cama que no sea la mía. – Dijo Jin sonriendo.
- Pero... si casi nunca estás en tu cama. – Protestó Tae Hyung. – Siempre estás con Nam Joon.
- Tae, cállate. – Ordenó el mayor.
- Yoon Gi… - Llamó Jimin. – ¿Crees que podamos dormir juntos?
- Sí. – Afirmé con una sonrisa.