HakYeon despertaba lentamente, miró a su alrededor y se dio cuenta de que se encontraba en su habitación, la cual compartía con Ravi, cerró los ojos tratando de recordar cómo fue que llegó hasta ahí, lo último que recordaba era haber caminado hasta el Rio e intentar saltar, pero había sido detenido por sus compañeros de grupo, su último recuerdo es llorar en los fuertes brazos de Leo, sin embargo, luego de eso ya no podía recordar nada más. Lentamente se sentó sobre la cama, dándose cuenta de que ésta no era la suya, sino que era la de su amado Ravi, inconscientemente sonrió y acarició de manera lenta las cobijas de la cama
-Si supieras lo cuánto te extraño y lo arrepentido que estoy-dijo, para luego suspirar
Se puso Zapatos y luego se levantó de la cama, caminó despacio hacia la salida de la habitación, sentía que su vejiga explotaría, por lo que sin hacer ruido se dirigió al baño y se adentró en éste, luego de hacer sus necesidades, lavó sus manos y su rostro, se miró al espejo unos segundos y lo que vio no le gustó para nada
-Soy un desastre-se dijo a sí mismo
Su piel morena se veía mucho más opaca, sus ojeras se veían muy marcadas, sus labios estaban resecos y sus ojos no tenían ese brillo que solían tener hace un tiempo atrás. Movió su cabeza de lado a lado y luego salió del baño, al abrir la puerta se topó de frente con un pecho que él conocía perfectamente, levantó su cabeza sólo para asegurarse de que su mente no lo estaba engañando y vio los oscuros y profundos ojos de Ravi, sintió alegría por tenerlo cerca, pero también tristeza porque sabía que aunque estuviese cerca físicamente, su corazón ya no le pertenecía
-¿Hace cuánto que despertaste?-preguntó el rapero, sin emoción
-No hace mucho-respondió el mayor
Luego de ese pequeño intercambio de palabras, se hizo presente un incómodo silencio, el cual ninguno de los dos se atrevía a romper, de hecho ni siquiera se atrevían a moverse de sus posiciones, por lo que siguieron estando de frente y muy cerca el uno del otro, sin embargo, esta situación desesperó al líder, por lo que decidió romper el hielo preguntando algo que lo tenía intrigado desde que despertó
-¿Cómo llegué aquí?-preguntó N
-Yo te traje… Luego de encontrarte en el Río, decidí traerte aquí, Leo ~hyung me amenazó con matarme si algo malo te pasaba, así que te traje, pues pensé que estarías cómodo si despertabas en un lugar que conocías-explicó calmadamente el rapero
-Ya veo-murmuró el mayor, con un semblante triste y apagado-Mmm… Yo… Voy a la habitación… Sacaré algunas cosas y luego me iré
HakYeon rodeó a Ravi y se dirigió a hacer lo que dijo que haría, luego de poner un poco de su ropa y su billetera en una mochila, volvió a salir de la habitación y caminó hacia la puerta de salida del departamento, sin embargo, cuando iba en la sala, fue detenido por su ex novio
-No dejaré que te vayas
-¿Qué?
-No dejaré que te vayas…
-¿Por qué?
-Si te vas y te pasa algo, mi integridad física corre peligro, así que no permitiré que salgas de este departamento
-Por un momento creí…-dijo N, dejando la frase inconclusa, para luego suspirar
-¿Qué creíste?
-Por un momento creí que aún te preocupabas por mí, pero… Supongo que pensar eso es ser muy iluso-dijo el líder con una pequeña sonrisa triste
-Eres el líder de VIXX, me preocupo por ti así como me preocuparía por cualquier otro integrante
-Supongo que sí… Ravi, no te preocupes, saldré y estaré bien, tu integridad física no correrá peligro
-No puedes asegurar eso, la última vez que saliste solo estuviste a punto de matarte y yo estuve a punto ser arrojado al Río, no me arriesgaré de nuevo-dijo Ravi
El moreno ya no quiso insistir más, era obvio que el menor no lo dejaría salir, así que en silencio volvió a su cuarto, dejó su mochila apoyada contra la pared y se recostó sobre la cama, abrazó su almohada y dejó que sus lágrimas fluyeran libremente, su corazón dolía, su cabeza también, ya no quería seguir sufriendo, se había equivocado, lo admitía, pero sentía que ya había pagado su error. Sin poder ni querer evitarlo, se durmió
Por otro lado, Ravi se encontraba sentado en uno de los sofás del departamento, maldiciéndose a sí mismo, su plan era que cuando HakYeon despertara, le pediría perdón por ignorarlo y hacerlo sufrir y le pediría empezar todo de nuevo, sin embargo su máscara de rudeza le ganó a los deseos de su corazón y volvió a tratar mal a su amado líder. Pasó sus manos por su rostro, tratando de despejarse y muy decidido se puso de pie y caminó hacia su habitación, donde encontró el moreno profundamente dormido, se recostó a su lado y le acarició el rostro
-Perdóname-susurró contra la frente del mayor
Siguió en su labor de acariciar el rostro y cabello del mayor, sin darse cuenta de que éste había despertado y se dedicaba a disfrutar de las tiernas y tan anheladas caricias del menor
-Perdón por tratarte así
-No tienes que pedir perdón-dijo N, haciendo notar que estaba despierto y generando que Ravi papara sus caricias-Por favor… sigue acariciando mi cabello, sé… Sé que no me lo merezco después de lo que hice, pero por favor… Sólo por unos minutos más, sigue acariciándome
-…-Ravi no respondió, pero retomó su labor de proporcionar cariño
-Gracias-dijo N, pasados unos minutos, derramando gruesas y silenciosas lágrimas
-¿Por qué?
-Por hacerme sentir querido de nuevo… Si pudiera retroceder el tiempo, lo haría y cambiaría mis acciones, pero no puedo, sólo puedo pedir perdón una vez más y cargar con mi culpa y mi castigo
-Eres un idiota HakYeon
-Lo soy-afirmó el mayor
-Pero no por las razones que piensas-dijo el menor, desconcertando un poco al líder-Eres un idiota por lo que hiciste, eres un idiota por haber descuidado tu salud, eres un idiota por haber dejado de alimentarte bien, eres un idiota por haber intentado matarte, pero… A pesar de todo eso… Eres mí idiota y no voy a dejar que nada ni nadie te aleje de mí, aunque tenga que retenerte en contra de tu propia voluntad, te aseguro que no permitiré que te alejes de mi lado
-¿A qué te refieres?
-Me refiero a que te amo HakYeon y no quiero seguir alejado de ti
-Ravi…
-Perdón por haber destruido al N del que yo me enamoré, perdón por no haberte querido escuchar, perdón por ser tan orgulloso-dijo Ravi, mirando directamente los ojos de su amado
-Yo… No tengo que perdonarte nada… Yo… Yo sé que fue mi error, fue mi culpa el que hayamos terminado, mía y sólo mía…
-Vuelve conmigo-pidió Ravi-Vuelve a ser mi novio, hagamos todo bien esta vez, volvamos a ser la pareja feliz que solíamos ser, volvamos a estar juntos y te prometo que esta vez será para siempre y te haré el hombre más feliz de este mundo
HakYeon no pudo evitar que en su rostro se formara una sonrisa de felicidad pura y que de sus ojos se derramaran lágrimas de alegría, lentamente se acercó a Ravi y unió sus labios con los contrarios, dando inicio a un beso que era deseado por ambos desde hace mucho tiempo. Si bien la respuesta de HakYeon no fue con palabras, si fue con acciones, ese beso significaba que habían vuelto a ser novios, significaba que se amaban, significaba que estaban dispuestos a intentarlo una vez más, pero por sobre todo, ese beso era el sello de una promesa que ambos estaban dispuestos a cumplir, la promesa de amarse para siempre y no volver a separarse