Capitulo XV
El castaño aun seguía lamiendo y divirtiéndose con los pezones de Joey, quien paso las manos por la espalda del castaño. Lento, del mismo modo en que Kaiba lo hacia.
En estos momentos, habia decidido estar con Kaiba, asi, como Joey. No queria seguir pensando mucho en ello porque sabia que terminaría por encontrar algo que le haría arrepentirse. Pero tampoco era como si quisiera pensarlo. Tan solo se habia quedado con una idea en mente, el resto ya no importaba: Iba a ser real.
Nada de sexo por mera lujuria. Kaiba no iba a acostarse con Jamie hoy.
Los brazos de Kaiba rodearon la cintura de Joey nuevamente, abrazandolo. Sus besos subieron nuevamente a su cuello, lamio la manzana del cuello de Joey, beso su barbilla y subió a besar sus labios otra vez. El rubio correspondía y dejaba al otro que lo tocara asi. Era una sensación muy calida, se sentia demasiado bien ser tratado asi. Se sentia tan bien que Kaiba fuera tan dulce.
En algun momento de todas estas cosas, Joey comenzó a pensar de otro modo con respecto a Kaiba, y paso de mirarlo como un abusador que hacia lo que se le venia en gana a quien no le importaban nada los sentimientos de los demás, a estar tan contento de estar aquí, ahora mismo, con él.
Sus pensamientos se fueron bastante lejos cuando, aquellos brazos que lo rodeaban se apartaban para tan solo dejar sus manos y acariciar la cintura del rubio, el abdomen, sus pezones, los cuales parecieron entretener a Kaiba porque jugueteaba con sus dedos en ellos, haciendo que Joey se separara del beso con un sonrojo bastante fuerte en su cara y soltara más gemidos. Fuera como fuera, era muy vergonzoso gemir asi por toques en esa zona, porque nunca creyó que algo asi podría producirle ese tipo de estimulos. Y los estaba disfrutando demasiado, y la cara que Kaiba ponía tras oir los gemidos que le sacaba, viéndolo fijamente, solo hacia que le diera aun más vergüenza, por lo cual apretó los ojos.
Pero tampoco se queria quedar asi, recibiendo sus buenos tratos. Un fuerte impulso en su interior tambien le estaba pidiendo atacar al otro. Bajo sus manos, tanteando por su abdomen hasta llegar a sus pantalones, tocando su cinturón. No era justo nada más él estar desnudo y siendo tocado de ese modo nada más. Tambien deseaba ver más. Tambien deseaba tocarlo más. Kaiba se levanto y retiro sus manos tras darse cuenta de lo que Joey intentaba, asi que se levanto un poco y el mismo se fue deshaciendo de la ropa que le quedaba de poco a poco hasta quedarse completamente desnudo delante de él.
Joey podía darse cuenta de como la cara de Kaiba decía “Mirame”. En definitiva, eso era lo que estaba haciendo. No hacia más que mirarle de arriba hacia abajo aun con toda la vergüenza que tenia.
“No soy gay” pensó Joey, en algun momento de todo esto.
Pero haber pensado algo asi habia sido completamente estúpido después de todo lo que ya habia hecho hasta este punto. Sobre todo ahora que tenia Kaiba se acostaba más sobre él, llevaba una de sus manos a su zona trasera…pero ya no a su espalda. Con la otra, separo sus piernas para asi acomodarse el entre ellas, de modo que no tuviera la opción de cerrarse.
Una punzada a su pecho.
Comenzo a sentir un poco de miedo. Pero no tenia la intención de parar.Por el contrario…después de haber visto el cuerpo de Kaiba desnudo, tenia aun más ganas que antes de hacerlo con él. Kaiba regaba algunos besos en su pecho, mientras Joey, que de por si respiraba ya agitado, se tenso bastante al sentir los dedos de Kaiba tanteando en su entrada, y que ahora habia un dedo introduciéndose en su interior. No le dolia, en comparación a cuando Kaiba habia entrado en él como Jamie, asi que no demostró dolor en si. Y al parecer el castaño se percato de ello porque habia metido otros dos dedos en su interior. Eso si lo habia sentido más, y arqueo la espalda.
Ya se sentia listo…ya lo necesitaba.
-ya…estoy listo-
El rubio se sorprendió tanto de haberse escuchado decir esas palabras. Estaba bastante seguro de que las primeras palabras que le había dicho a Kaiba ahora que habia recuperado su cuerpo eran esas.
Kaiba tras escuchar eso retiro sus dedos. Joey, a pesar de lo mucho que le apenaba, levanto sus piernas contra su pecho y las sujeto con ambas manos. De verdad, lo necesitaba demasiado. Miro el rostro de Kaiba ruborizado. No sabia si esto era por el alcohol o que él mismo se había puesto de ese modo al verlo asi.
No lo sabia, pero fuera el motivo que fuera, era muy lindo.
Se inclino hacia el frente, sosteniendo las piernas de Joey tambien. Cuando el rubio sintió aquel grande y caliente miembro chocar contra su entrada un escalofrio le recorrió todo el cuerpo. Y ahora que había comenzado a ser penetrado, hecho la cabeza hacia atrás mientras gemia audiblemente. Kaiba tenia los ojos cerrados, mordiéndose el labio inferior de manera bastante sensual.
-¡Ahhh.! ¡Kaiba! – grito, sin poderse contener el de ojos miel.
Aquel miembro se iba abriendo paso a través de su estrecha entrada lentamente. Era doloroso, era muy doloroso. Si como Jamie le había dolido…esto dolia como el mismo infierno. Pero estaba haciendo su mayor esfuerzo para no demostrar el dolor que sentia.
Finalmente Kaiba termino de entrar en él, y ambos jadearon, Joey más, que sentia que el aire le estaba volviendo.
-¿te duele?- pregunto, mientras se inclinaba a besar sus labios unos segundos. -¿quieres que salga?
-Es…estoy bien…dejame…solo dejame acostumbrarme…- Hablo el rubio, muy apenas.
A pesar del dolor, se estaba sintiendo muy contento. Se sentia muy bien haber llenado aquel vacio en su interior…aunque, en estos momentos aplicaba con doble sentido. Aunque lo que más le había gustado fue que Kaiba preguntara si se encontraba bien.
Ya que Kaiba las detenia, solto sus piernas y llevo sus brazos al cuello del castaño, abrazandolo de este para estar mas cerca de él y besarle en los labios. Deseaba mucho besar esos labios ahora. Deseaba mucho seguir sintiéndose amado por él.
Pero aun asi estaban en una posición que provocaba que ese beso se convirtiera en algo muy candente y seductor. Habían empezado a besarse de manera lenta, pero de inmediato ya estaban acelerando su ritmo y sus lenguas se entrelazaban con desesperación, recorriéndose las unas a las otras. Ni siquiera se percato del momento en el que Kaiba había empezado a mover sus caderas, lo cual significaba que ya no dolia.
-Me estabas…apretando….mucho…- dijo entre besos.
Joey se ruborizo, pero prefirió no decir nada. Los gemidos que llegaba a emitir entre besos lo decían todo. Las embestidas se volvieron mas fuertes, obligando al rubio a separarse del beso. Volvio a echar la cabeza hacia atrás y gemia bastante fuerte con cada embestida que le daban, se aferraba aun más al castaño quien embestia con más ganas en cada estocada, y ahora besaba su cuello otra vez, aunque tambien lo succionaba, marcándolo asi.
-Eres mio- habló el castaño, palabras que hicieron que ahora empujara con mas rudeza. –Mai se puede ir al carajo…tu eres mio ahora, ¿entiendes? Solo mio- decía, dejando más marcas en su cuello, y ahora en sus hombros.
El corazón de Joey latia tan fuerte que sentia que se le saldrá en cualquier momento. Aun cuando se portara tan amable, él seguía siendo Kaiba, el mismo hombre posesivo.
Eso le gustaba.
-Tu…tuyo…-
Las embestidas dejaron de ser dulces y amigables tras aquellas breves palabras que compartieron, y se volvieron más desenfrenadas. Sus cuerpos se movían con más velocidad, haciendo rechinar la cama. No queria decir que Kaiba estuviese siendo igual de brusco y violento como cuando lo habia hecho con Jamie, esta vez era más natural, ambos lo disfrutaban a pleno, ambos gozaban de ese descontrolado vaivén de placer, ambos gemían por el deseo que los poseía el estar juntos en estos momentos.
Kaiba golpeo en un punto clave en el interior de Joey, sacando un agudo gemido de sus labios. Esto pareció gustarle bastante al castaño, porque ahora embestía con el fin de golpear más en esa zona, algo que logro tras sacarle más gemidos iguales a ese al rubio, a lo cual esboso una sonrisa. Tal vez lo había hecho demasiado, ya que las paredes del rubio se volvieron tan estrechas de repente, gimio por ultima vez y regó todo su semen sobre su abdomen.
Para Kaiba, era la vista más hermosa que había visto en su vida.
Y como acto instintivo, su excitación subió demasiado tras aquella escena, recargo la cabeza en el hombro de Joey y se termino por correrse en su interior, provocando otro gemido del rubio.
Se quedaron asi, quietos unos segundos mientras respiraban bastante agitados. Kaiba levanto la cabeza, y le dio un beso en la mejilla a Joey.
-No me dejes- dijo, en un susurro a su oído.
-No lo hare- respondió, con sinceridad.
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Se revolvió entre las sabanas. Joey se encontraba bastante cerca de Kaiba, este le tenia abrazado. Había dormido ahí, con él….No recordaba cuando habia sido la ultima vez que se sintió tan bien en su vida. Cerro los ojos, ruborizado y sonriendo. Se sentia un poco tonto por estar asi de feliz estando con Kaiba. Era algo graciosa la situación.
Pero su sonrisa se borro en unos instantes.
Abrio los ojos, y se miro a si mismo. No estaba en el cuerpo de Joey. En algun momento de la noche, volvió a convetirse en Jamie.
Dio un suspiro. No podía escaparse de esta situación, porque no iba a volver a escaparse de Kaiba, se lo había prometido,y además, obviamente este iba a necesitar explicaciones.
Este sentimiento que albergaba en su pecho ahora, era muy doloroso. Iba a tener que mentirle a Kaiba. Iba a tener que hacerle creer que lo que había pasado esa noche no había sido nada más que una mentira, un sueño, una alusinación provocada por el alcohol que bebió. Despues de haber compartido un momento asi, ya no queria seguirle mintiendo.
Si, tal vez era algo repentino, tal vez se lo tomaba a la ligera. O tal vez era que Kaiba de verdad logro tocar su corazón.
Porque sabia que lo que sentia por él se había vuelto muy grande en tan poco tiempo.
Se acerco a este, y beso su mejilla.
“Voy…voy a decirle todo. Voy a decirle la verdad. Voy a decirle…que Jamie es Joey” Pensó, mirándolo fijamente.
Kaiba lentamente comenzó a batirse en la cama, soltándose del abrazo que tenia con Joey, quien se retiro un poco del otro porque sabia que no le iba a hacer muy bien que Jamie estuviera en su cama y no Joey.
-Agh..- gruño por lo bajo, dándole la espalda a Jamie.
Joey se estaba preparando para lo peor cuando por fin se giro en su dirección.
Jamas creyó que iba a ver una cara de decepción tan grande en el rostro del castaño. Desvio la mirada, parecía estar analizando algo.
-¿me embriague?- pregunto, aunque por el modo en que se sujeto la cabeza indicaba que tenia resaca.
Joey, aun con todo el dolor de su corazón,asintio.
-….quiero estar solo-
El rubio trago saliva, y asintio. Kaiba parecía haber sacado sus propias conclusiones despus de haberle afirmado su pregunta. Se levanto con cuidado de la cama, junto sus ropas, se puso el vestido blanco de la fiesta anterior porque era lo que tenia, y se dirigió a la puerta. Antes de salir bajo la mirada y se detuvo en la puerta, mirando al suelo.
-Lo…lo siento-
Joey no podía creer como algo que habia sido tan hermoso para ambos, ahora se estaba convirtiendo en un gran dolor.
No podía seguir con esto.
Tenia que decírselo, no podía dejar que Kaiba estuviera sufriendo asi.
Pero no fue lo suficientemente valiente…tuvo miedo, mucho miedo de saber cual seria su reacción.
Salio de la habitación, y por fin le dejo solo.