Capitulo III
Tras haber entregado el papel y dado una breve explicación sobre “su primo Joey Wheeler”, salió de la dirección y decidió pasear un rato por la Universidad. Si, tan solo quería pasear mientras pensaba y analizaba aun más la situación en la que estaba metido. Yugi tenia razón, ponerse a maldecir a Mai no iba a hacer que esto mejorara, por el contrario, tan solo iba a empeorar las cosas. Termino suponiendo que la idea de que Mai le resolviera las cosas era para que fuera más sencillo permanecer como mujer y darle una cuartada para que el resto creyera que de verdad era una chica…por lo tanto, estaba seguro de que si le decía a alguno más de sus amigos de seguro le iba a ir muy mal, por lo que la idea de hacerle saber a alguien más no era una opción.
¿Qué podía hacer mientras?
Bueno, a decir verdad, siendo mujer…no se le ocurrían muchas cosas, pero algo vino a su cabeza de inmediato.
“¿no te gusta ser mujer? Te querías coger a un hombre, ahora te los puedes coger con mas facilidad ¿no crees?”
Esas habían sido palabras que Mai había utilizado el dia anterior.
En ese momento le habían parecido una reverenda estupidez.
Pero ahora que estaba asi, vagando por la universidad mientras perdia el tiempo caminando para ir al baño, fue que se dio cuenta de que…esa idea no sonaba tan mal.
De algun modo, el simple hecho de pensar en eso seriamente le parecía ridículo pero, al mismo tiempo, le daba curiosidad. Porque como Yugi había dicho tambien… ¿Cuántas veces en la vida puede un hombre ser una mujer? Si se lo pensaba mejor, la curiosidad era muchísimo más grande, y después de todo, ya estaba metido en todo este embrollo.
¿y si lo aprovechaba de verdad?
Tenia una apariencia física increíble, que ni siquiera la misma Mai Valentine se le habia hecho que tenia tan buenos atributos como los que él poseía ahora.
Ahora que era mujer, bueno, lo que le faltaba abajo le sobraba arriba, y a pesar de haberse cogido a un tipo la noche anterior, una cosa era meter algo en otro hombre…y una muy diferente que se la metieran. Eso era lo que le hacia dudar.
“soy un maldito enfermo” pensó, mientras un escalofrio recorría su cuerpo “¿Cómo puedo siquiera considerar que otro hombre me…me haga eso? No no, estare en un cuerpo de mujer, pero no voy a caer tan bajo no…”
Llego al baño por fin, los pasillos y todo estaba vacio ya que las clases recién habían comenzado, por lo que le resultaba mas comodo no tener a nadie cerca. Se hecho un poco de agua en la cara, dando un suspiro mientras se miraba al espejo y analizaba nuevamente. Estaba tan frustrado otra vez, que no sabia ni que pensar. Fue entonces que cayó en cuenta de algo.
-Me…me meti al baño equivocado-
Menciono en voz alta, no parecía haber nadie, pero en definitiva apenas noto que se habia equivocado al elegir baño. Era un detalle minimo y estúpido, pero aun asi no tenia por que ser descuidado. Rápidamente iba a salirse antes de que alguien lo viera, pero escucho un ruido de la puerta abriéndose y se alarmo, no quería ser visto por nadie, asi que se metió en uno de los cubículos que decía ‘fuera de servicio’ y por ende nadie intentaría asomarse a él ni nada.
-Rapido, metete en un cubículo antes de que nos vean.-
Una voz increíblemente familiar se escucho, mientras dos jóvenes entraban en uno de los cubículos justo al lado del de Joey.
-¡No! No podemos hacer esto…no aquí..nos van a descubrir Marik, nos vamos a meter en serios problemas si…
-¡shhh! Ya no hables, se que nos van a matar, por eso mismo es que debes guardar silencio!
Efectivamente, las voces eran dos que el conocía muy bien. Un sonido metalico se escucho, y luego como ropa descendía.
-De…deprisa…-
-Calmate, rayos, ¿acaso tengo cara de que se la he chupado a otro hombre antes?
-¡Ya ya esta bien pero ahora eres tu quien debe callarse!
Joey, inevitablemente se habia sonrojado al escuchar aquellas cosas. Esos que estaban ahí eran dos de sus amigos, Ryou y Marik, quienes tenían una estrecha amistad desde hace buen tiempo, pero, jamás se iba a imaginar que estos dos podían llegar a ser capaces de hacer algo de este tipo. Primero había sido aceptar lo de Yugi con Atem, y ¿ahora esto?
Un gemido de completo placer le saco de sus pensamientos, cuando escucho la voz del peliblanco emitiendo aquel ruido. Estos dos estaban en su onda tan concentrados que era el momento oportuno para escapar.
Ah, pero, en vez de ello…Joey cometió una enorme estupidez. Se habia parado con cuidado sobre el excusado y haciendodose el cabello para atrás para evitar inconvenientes, se asomó para comprobar con sus propios ojos que lo que escuchaba era verdad.
Sus ojos se abrieron ampliamente al ver como Ryou se encontraba parado, pero aun asi doblado hacia el frente sosteniéndose de la puerta con una mano y la otra acariciaba la cabeza de Marik, quien se encontraba hincado en el suelo mientras chupaba toda la extensión del peliblanco. Los gemidos de Ryou aumentaban, aunque intentaba callarlos por el obvio miedo de ser escuchados. El otro movia la cabeza cada vez con más rapidez, y al mismo tiempo le acariciaba las piernas a su ‘amigo’, las cuales comenzaban a temblarle. Un agudo gemido salió de la boca del peliblanco, quien se había corrido en la boca ajena. Marik de inmediato se aparto y al parecer se lo habia tragado pero aun asi empezó a toser después.
-¿te…te lo tragaste..? ¡p-perdon!
-c-callate y vámonos, antes de que yo me ponga duro tambien.
Joey mientras se aparto rápidamente, sus mejillas las sentia arder, y su corazón latia a mil. Sentia como todo su cuerpo se ponía caliente. A pesar de que a quienes acababa de ver eran dos de sus amigos, se habia calentado de mas con tal escena…en definitiva no estaba bien. Su mente estaba tan perturbada que no sabia ni que pensar. Intento bajarse con cuidado, pero sentia que sus piernas le temblaban y cuando se paro en el suelo, se resbalo y se termino golpeando la cabeza con la puerta, haciendo un fuerte ruido con esto.
-¡Auch!- exclamo, se habia dado de lleno contra la puerta de frente, pero gracias a eso escucho como Ryou y Marik que ya parecían estarse marchando, se detenían en seco.
-Marik..-dijo el peliblanco, acto a lo cual ambos corrian al ultimo cubiculo.
-Ya sabemos que estas ahí y nos escuchaste…mas te vale salir ahora mismo si no quieres que entremos a la fuerza y te demos una paliza- hablo Marik amenazante, aunque para Joey eso sonaba como un método desesperado.
Suspiro levemente, y tras haberse recuperado del golpe y sus mejillas seguían aun muy sonrojadas, abrio lentamente la puerta.
Cuando los dos chicos lo miraron se quedaron completamente sorprendidos, ninguno de los tres sabia que decir. Aunque se notaba que ellos dos estaban muchísimo mas apenados que Joey.
-M-me…equivoque de baño…y…no quería ser vista…- hablo ‘Jamie’ con lentitud, mientras se frotaba uno de sus brazos finjiendo una obvia inocencia para no ser descubierto.
-N-no..e-es que..diablos…- hablo el moreno, mientras un sonrojo le invadía las mejillas.
-¡No voy a decir nada a nadie!- dijo Joey, la verdad es que solo quería irse de ese sitio de inmediato, su cuerpo seguía caliente por lo recién visto y al mismo tiempo tenia cierto colapso nervioso por no saber que pensar. –Si…¡ustedes tampoco dicen que me meti al baño de hombres por error!-
Marik y Bakura se miraron, completamente apenados, y asintieron levemente a lo que Joey había dicho.
-¡Bien bien será mejor que me valla!- hablo la rubia, y de inmediato salió corriendo del baño.
-Oye, Marik…esa chica…¿no crees que se parecía muchísimo a Joey?
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Corrio por los pasillos de la universidad, estaba dispuesto a irse a su casa de una vez por todas, o a hacer quien sabe que para bajarse la calentura.
No podía creer todavía todas estas cosas, era como uno de esos sueños estúpidos y sin sentido en los que pasan cada ves mas y mas estupideces.
Por ir de distraído, otra vez se estrello con alguien…genial, ¿ahora a quien de todos sus amigos se habrá chocado?
-ugh, ¡¿ahora que?!-exclamo completamente cansado.
-perdoname, no veía por donde iba…-
Joey levanto la vista…ah, ahora no era ningún conocido ni nadie. Era solo un joven promedio de la universidad. Se sonrojo con bastante pena.
-No, no, fue mi culpa, tuve un mal dia es todo- dijo con completa naturalidad, dando un suspiro.
Pero el otro tipo no respondió, es mas, se le habia quedado viendo con un leve sonrojo en sus mejillas. Joey miro al chico con curiosidad, no se veía taaan mal físicamente. Asi que se decidió a hacerle un par de preguntas no muy discretas. Iba a hacer un pequeño experimento que se le ocurrió recién, ¿Qué iba a perder? De todos modos básicamente era otra persona que ni siquiera existe.
-Oye, tu…¿crees que soy bonita?- el tipo pareció apenarse más, pero como si se hubiese transformado, habia sonreído levemente.
-¡Claro! Eres…eres una de las mujeres mas hermosas que he visto en mi vida- hablo un tanto coqueto. Bingo, habia caído justo donde quería.
-¿Crees que alguien se acostaría conmigo solo si se lo pidiera?- hablo con completa desvergüenza, mirándole fijamente mientras este parecía volverse a sonrojar y su faceta coqueta se rompia. Quizas habia sido muy directo..pero era divertido.
-E-eso…bueno…yo creo que si..-
-¿Tu lo harias?-
-q-que…-
Joey se hecho a reir ya sin poderlo evitar. Ok, eso habia sido algo cruel.
-¡Estaba jugando contigo!-
Después de haber dicho eso volvió a salir corriendo, dejando al tipo aquel completamente avergonzado en su lugar.
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Y asi se la había pasado todo el rato vagando por la universidad Joey, haciendo preguntas indecentes a los chicos que veía, la mayoría se apenaba, muchos no sabían como responder, y otros eran unos completos sin vergüenza que ahí mismo se lo pudieron haber hechado sin importarle nada.
Escucho como el timbre sonaba, como no tenia en si mucho que hacer hasta poder volver a ver a Yugi, se había quedado a esperarlo. Aunque era un tanto peligroso, porque no se había puesto a pensar en las consecuencias de ello y el poderse topar con otro conocido.
Las personas iban saliendo de sus aulas para retirarse, por lo cual debía apurarse y llegar rápido al salón de su amigo. Pero una mano le jalo del brazo y le obligo a detenerse.
-Hey, preciosa, ¿A dónde crees que vas?
-ugh…- Joey frunció el ceño al voltearse para ver quien le habia detenido, aunque luego suspiro y rodo los ojos -¿Ahora que Mai?
-¿Qué? Yo debería preguntarte eso a ti, ¿Qué haces aquí todavía? ¿andas buscando a quien llevarte a la cama?
-No seas inmadura Mai…¡yo soy incapaz de eso!- respondió de inmediato, aunque lo que dijo no era totalmente cierto, si habia estado haciendo ese tipo de preguntas. –Ahora que me converti en mujercita, no se que hacer
-¿Realmente no tienes idea de que hacer, eh? Bien, entonces llego la hora de meter la cuchara en la sopa.
-¿de que diablos estas hablando?
Mai le solto del brazo, y después de haber tecleado un monton de cosas en su celular, volvió a agarrarle del brazo con rudeza y comenzo a caminar tirando de él.
-¡Hey! ¡Suéltame loca! ¿Qué estas planeando ahora?- pregunto, intentando zafarse del agarre aunque nada mas se estaba lastimando –me están secuestrando ayudaaaaaaaaaaaa-
-¡Ya no seas llorona y mueve tu trasero!
-solo dime a donde diablos vamos!- Joey frunció el ceño nuevamente y de mala gana la siguió.
-es una sorpresa.-
Dejaron de caminar cuando por fin llegaron a la entrada de la universidad, donde los ojos de Joey se ampliaron cuando diviso a las personas que estaban ahí.
-¡no no no no no vete al carajo Mai suéltame!
Mai tan solo se hecho a reir mientras llegaba a donde el grupo de personas estaba.
-¡Heeeey chicos! ¡tengo alguien a quien presentarles!- exclamo con una felicidad completa.
Todos los presentes voltearon a verla cuando hablo. Ahí se encontraban todos sus amigos. Yugi, Atem, Tristan, Tea, Duke, Marik y Ryou.
-hija de puta- susurro por lo bajo, algo que solamente Mai alcanzo a escuchar y le provoco una risa de completa satisfacción.
-¡Chicos! Les presento a esta hermosa chica, ¡Es la prima de Joey! Se llama Jamie Hiroki.
Yugi se veía bastante nervioso, los demás observaban con completa sorpresa al oir lo de ‘prima de Joey’, Atem, Tea y Tristan tenian la razón de verle asi porque el parecido que tenia con Joey era increíble y jamás imaginaron ver a alguien tan idéntica a su amigo. Duke, además de haber pensado eso mismo cuando se la topo anteriormente, no se imagino que aquella chica podía ser algun familiar de Joey; y Marik y Ryou, bueno…ellos estaban que se querían morir de la vergüenza ahora mismo, y lenta y discretamente se fueron retirando del grupo aprovechando que todos estaban distraídos.
Lo peor del caso, o almenos para Joey, era que ya se habia topado con tres de los presentes de no muy buena forma en el transcurso del dia. Pero ahora mismo debía comportarse. Haberse topado con sus amigos y ser visto de un modo tan raro por ellos le ponía los nervios de punta.
-Es…¡un placer conocerlos chicos!- hablo por fin, haciendo una leve reverencia ante los chicos. Ya no podía seguir estando tan inseguro, era la hora de tomarse el papel de ‘Jamie Hiroki’ más enserio…por lo menos si de sus amigos se trataba. –Esto…hum…Joey..mi primo…tuvo que salir de la ciudad por una emergencia familiar..y yo estare quedándome en su casa por un tiempo para cuidarla en lo que regresa…
-¿No es un encanto esta niña? Joey me pidió a mi y a Yugi que la cuidaramos en lo que no estaban, ¿no es asi pequeño?- Yugi tan solo asintio de manera obediente. –y ya que todos somos amigos de Joey, ¡creo que lo mejor es que la hagamos sentir comoda y le brindemos nuestra compañía!
-¡Pues claro!- hablo tea animada, caminando a donde estaba Joey para tomar un mechon de su cabello y acariciarlo amigablemente. -¡Nosotros vamos a cuidarte bien Jamie! Todo sea por Joey!- hablo con una sonrisa en su rostro. Tristan y Duke no se hicieron esperar, y corrieron a tomar una de sus manos cada uno.
-¡Si! Todo sea por Joey- hablo Tristan.
Yugi y Atem se habían acercado tambien, pero sin embargo no habían hablado con la misma emoción que los otros, no porque no la siguieran si no porque no eran taaan expresivos como estos.
Joey, enternecido por la actitud tan buena de sus amigos, le sonrio y abrazo a los tres cercanos, Tea, Duke y Tristan.
-¡muchas gracias!-
Se separo sonriéndoles nuevamente, aunque sabia que iba a ser algo duro el tener que hablar con sus amigos como si no lo fueran, la verdad es que si se sentia muy feliz.
-¡Aww! Oigan, ¿no creen que deberíamos hacerle una fiesta de bienvenida a Jamie? Seria muy divertido!- sugirió Tea, algo a lo cual Mai amplio una sonrisa.
-¡Que estupenda idea Tea!
-Nada mejor para conocer a la prima de Joey que en una buena celebración- comento Tristan, mas que animado ante aquella idea.
Joey sin embargo no estaba muy seguro de esto.
-Hum..no se…yo…¡ah! El equipaje con mi ropa aun no llega a mi casa y no tengo que ponerme asi que tal vez..-comenzó a excusarse con algo que sonaba ideal de una mujer común que se preocupa por su apariencia.
-¡no te preocupes linda! Yo te prestare algo bonito- hablo Mai, a lo cual Joey sintió un fuerte deseo de asesinarla. –¡ni creas que te zafaras de la fiesta!
-Ya se…yo me ofrezco para la organización de la fiesta, solo lleguen a mi casa a las 6 y todo estará listo, ¿Qué opinan?- dijo Duke, de los presentes se podría decir que era el mas adinerado de todos, por lo que tenia mas facilidad de organizar algo que el resto.
Joey termino por dar un suspiro nuevamente, pero no quería ser grosero, sus amigos estaban haciendo algo lindo por ‘ella’ y no quería hacerles sentir mal.
-Es…¡esta bien! ¡fiesta! –dijo, tratando de sonar lo más emocionado posible.
-¡Entonces esta decidido! ¡Fiesta en la casa de Duke a las 6!- hablo Tea con emoción sincera, levantando una mano en el aire.
-¡Yo llevo la cerveza!- Hablo Tristan, recibiendo una mirada fulminante de Tea, pero el resto de los presentes simplemente se rieron, inclusive Joey.
-¿Por qué no me contaste sobre esto Yugi?- pregunto Atem, en voz baja, ya que estos dos se mantenían un poco al margen de la conversación fiestera que los otros llevaban. Yugi le miro un poco apenado.
-Lo siento…te lo iba a decir..fue algo repentino, no pensé que Mai se adelantaría.- termino por mentir, odiaba bastante mentirle a su novio pero…no podía revelar el secreto de Joey.
-mh…esta bien- dijo, sonriéndole levemente y dándole un beso en la frente. –entonces creo que lo mejor va a ser que nos preparemos para la fiesta.
Yugi sonrio, asintiendo. -¡Si!-
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Después de una hora de ponerse de acuerdo, cada quien se fue por su parte. A excepción de Mai y Tea, que se llevaron a Joey para comprarle un vestido de regalo. Tea iba encantada, para ella ir de compras era muy divertido al igual que para Mai, pero fue una completa tortura tener que aguantar a esas dos mientras le decían que se probara mil vestidos que desde su punto de vista todos eran iguales. Peor que después de haberle escogido uno por fin estuvieron toda la tarde maquillándole, peinando su cabello, y arreglándolo para que se viera bastante bonita.
Por supuesto que Mai estaba gozando el sufrimiento de Joey a pleno.
Al final, la hora de la dichosa fiesta llego, y Mai llevó a Tea y Joey en su auto a la casa de Duke después de que estas se arreglaron tambien.
Era una fiesta entre amigos, y Joey se preguntaba porque demonios tenia que arreglarse tanto. ¿Las mujeres hacían todo esto cuando iban a salir? Al parecer se mujer era mas tortura que libertad.
¡y para colmo! Llegaron como con media hora de retraso.
La fiesta había sido divertida. Habian bailado, jugado, se contaban y platicaban anecdotas de cosas que a pesar de que Joey ya conocía la mayoría, fue bastante entretenido revivir momentos asi. Duke y Tristan se habían peleado algunas veces para ver quien debía bailar con él, algo que le pareció muy gracioso y termino bailando con los dos. Tristan si había llevado cervezas, y todos se habían tomado minimo una botella, a excepción de Tea y Yugi que sabían como terminaban las cosas si llegaban a hacerlo. Sorprendentemente Atem y Duke se habían puesto a competir para ver quien tenia mas aguante con el alcohol, y Duke salio victorioso en esto mientras Yugi intentaba no ver como su novio se ponía hasta el tope de borracho.
Al final la mayoría estaban cansados, y se habia empezado a hacer tarde. Yugi fue el primero en retirarse, para llevarse a Atem quien se estaba poniendo bastante raro a causa del alcohol. Mai se ofreció a llevarlos a casa en su auto para evitar problemas. Duke se habia ofrecido a llevar a Joey a su casa, pero solo debía esperar un poco para que se le bajara el alcohol. Tea se habia quedado dormida recargada al hombro de Tristan, y este se habia quedado dormido recargado en el sofá tambien.
-valla…estos sujetos no tienen nada de resistencia- dijo Duke en broma, tomando un poco de agua mientras Joey se sentaba al lado de él con un vaso de refresco en su mano, ya que este era el único que se había quedado despierto.
-Almenos saben como divertirse, yo tambien estoy agotada- hablo Joey tomando un sorbo de su refresco, habia sido un dia muy pesado para él y tan solo moria por descansar un rato. Duke sonrio de lado, acomodándose mejor en su lugar, poniéndose comodo.
-Sabes, cuando te mire en la mañana y te pedi la foto, quería tomartela para mostrársela a Joey…no puedo creer que hayas resultado ser su primo-
-oh…- Joey desvio un poco la mirada, rascándose la mejila –Lamento haberte dicho enfermo, es que no es normal que alguien te pida una foto asi como asi.
-Bueeno, en eso tienes razón, asi que no tienes por que disculparte.- Duke recargo su brazo en el respaldo del sillón, teniendo de este modo el brazo detrás de Joey de modo que lo estaba rodeando.
Joey levanto una ceja ante aquella acción, le parecía esas tácticas ridículas que hacían los adolescentes cuando llevaban a sus novias al cine y ‘disimuladamente’ las rodeaban con el brazo.
Espera.
¿acaso Duke estaba intentando algo mas..?
Claro, es Duke, todavía recordaba como había intentado ganarse a su hermana hace no mucho tiempo y el como se comportaba con la mayoría de las mujeres que tenia enfrente. O quizás era que haber tomado alcohol lo tenia mal y solo estaba pensando en cosas sin sentido. Duke habia tomado mucho, y Joey se habia tomado una botella…pero nunca había sido muy resistente al alcohol.
No estaba seguro, la vista de Joey se habia mantenido fija en el rostro de Duke, y este hacia lo mismo. Joey estaba seguro de algo, y eso era de que jamás habia puesto tanta atención al rostro de alguien como lo estaba haciendo ahora.
Algo estaba pasando. Algo estaba mal con él. Y no estaba muy seguro de que le estaba sucediendo a su cuerpo, pero se sentia bastante tenso.
-Eres… muy bonita- Hablo Duke, con una voz tan sensual que le había erizado la piel. Acerco una mano a su mejilla, y la acaricio con suavidad.
Joey no supo como reaccionar, pero lo ultimo de lo que estuvo consciente fue que él mismo termino acercándose más y termino uniendo los labios con el.
Si..en definitiva se estaban besando. Lo que comenzo con un pequeño beso de inmediato se habia vuelto mas candente conforme ‘la rubia’ sentia su cuerpo arder.
No sabia que estaba sucediendo pero sabia que en definitiva no quería dejar de hacerlo. En estos momentos Joey no estaba reaccionando, no estaba pensando con la cabeza, y aunque quisiera tampoco tenia cabeza abajo con la cual pensar.
Duke le cargo, y entre besos y caricias terminaron llegando a la habitación del pelinegro.
Se tumbaron en la cama, ambos se despojaron de sus ropas de inmediato sin decir una sola palabra en ningún momento. Ni siquiera les importo que Tea y Tristan estuvieran en la sala de su casa aun. Los gemidos no se hicieron esperar, y tanto Joey como Duke gemían mientras se terminaban de desnudar. Joey habia reaccionado un poco cuando observo a Duke completamente desnudo. Todo su cuerpo estaba tan caliente, tan deseoso de sexo. Ya no estaba pensando en lo que hacia. Observo a Duke colocándose un condon, lo cual le pareció sumamente excitante. Sin pensarlo dos veces se habia abierto de piernas para el otro.
No estaba bien, le repetía su mente. No estaba nada bien. Pero ya no podía parar, porque su cuerpo le pedia más-
Y no pudo detenerse en definitiva cuando habia sido penetrado por Duke, arqueando su espalda con violencia. Era una mujer, su cuerpo era el de una mujer…pero aun asi, se sentia como si no lo fuera. Cuando Duke le estaba embistiendo con bastante fuerza, volteo hacia abajo para ver algo que llamo su atención. Joey podía ver su cuerpo, pero no lo veía como el de mujer, el veía su cuerpo de hombre siendo penetrado por otro hombre. ¿eso era normal?
Claro que no era normal, nada de lo que estaba pasándole lo era. Aunque llevo sus manos a su pecho, seguia sintiendo los dos bultos diciéndole que habían un par de senos ahí, pero no los veía.
Termino sucumbiendo por el placer, y antes de que se diera cuenta el orgasmo habia llegado para ambos.
Pero habia sido nada más el primero de esa noche.
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Al dia siguiente, al despertar, sentia que su espalda le estaba doliendo bastante. Se revolvió en la cama con cansancio, y lentamente abrio los ojos. Lo primero que vio fue a Duke dormido, rodeándole con un brazo.
Sus mejillas se tornaron de rojo con bastante intensidad.
Oh no.
No no no no no no no no.
No podía ser posible
No solo se había acostado con un hombre.
Había sido ÉL el penetrado por un hombre.
Un hombre que es uno de sus mejores amigos.
-Soy tan…imbécil…-dijo, en voz baja, cubriéndose la cara con ambas manos.
Pero la verdad de todo era que a pesar de lo estúpido que había sido haber hecho aquello… Lo había disfrutado muchísimo.