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¡No soy tu conejillo de indias! por Nira Tao

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Notas del capitulo:

Hola mundo he vuelto!! .w. y si aun estoy con vida jojojo... 

En fin lo sé, tarde un mes, pero es todo culpa de mi marido!!

usagi: ¬¬ porque siempre he echas la culpa?

Nira: .w. nada mas... jajaja pero en serio me quito la lap donde tengo el fic y no me dejo escribir por dos semanas, y despues se me va la insporacion!! y para colmo me voy enterando que saldra un anime llamado Super Lover, dije o se ve bueno, es hora de buscar el manga...

usagi: ¬¬ y te pusiste a leero... y buscar otros mangas y fics con incesto, ¿no?

nira: -w- si... pero fue tan hermoso *0*!! quien no lo haya leido lo recomiendo... aunque aun no esta terminadao -.-||| solo llega hasta el cap 23 T.T

usagi: YA PON EL CAPITULO!!

nira: ok ok... -.- que genio... Disfruten

Los días pasaban y Usagi junto a Izaya se la pasaban sus días investigando hasta la más mínima cosa para poder exponer al líder que fabricaba “La dama de negro”. Shizuo, de vez en cuando se encontraba con Usagi cuando paraba a comer en una pequeña cafetería en compañía de Tom y Varona. La primera vez que Usagi se dio cuenta de la presencia de la rubia, le preguntó al respecto a Shizuo.

-¿Quién es ella?

-¿Varona-chan? Es mi kouhai, trabaja conmigo. Ven te presentaré- Ese día Usagi había ido a pedir un par de cafés para Shiki y Akabayashi, cuando se encontró con Shizuo  en la fila- Solo, no vayas a hacerles nada.

-Tranquilo, no soy como Iza-nii- dijo con una amplia sonrisa.

-Chicos, les presento a Usagi. Usagi, ellos son Tom, mi jefe y un amigo desde secundaria- señaló al moreno- Y ella es Varona-chan, no tiene mucho tiempo trabajando con nosotros, pero es muy buena peleando.

-Hola, es un placer- saludó la albina.

-Oh, yo te vi una vez, eres la chica que Shizuo cargó una vez, ¿no es cierto?- dijo divertido Tom.

-Ah, sí, Soy yo.

-Es raro que Shizuo haga amigos con una chica tan linda y joven. Espero que no te haya hecho nada raro- dijo entre risas- ¿Cómo se conocieron?

-No le metas cosas raras a la cabeza, por favor.

-Está bien, Shizu-nii es muy bueno. Y no tiene mucho de hecho que nos conocemos, un poco más de un mes creo.

-¿Eres familiar de Orihara?- dijo seria la rubia, viendo de arriba abajo a la albina. Dentro de ella, decía que no confiara en aquella chica de ojos rojos, que eran idénticos a los del informante.

-Iza-nii es muy famoso aquí, ¿verdad Shizu-nii?- vio como Shizuo asintió con la cabeza- Jeje, sí soy su prima, de hecho- sonrió dulcemente, pero cuando vio a Varona a los ojos, ambas supieron que eran asesinas- Bueno, me retiro, ya está mi pedido. Fue un placer conocerlos, Adiós. Shizu-nii esta noche prepararé albóndigas por si quieres ir a cenar, nos vemos- y con una base de cartón con café y una bolsa con algunos bocadillos se fue.

-Es raro que dejes que alguien modifique tu nombre- le sonrió su jefe- En especial alguien que es pariente de Orihara.

-Usagi no es tan molesta como la pulga, y no me molesta porque no lo hace para burlarse de mí.

-¿Entonces la has adoptado como tu hermana menor?

-No, pero a veces me gusta molestarla- sonrió ante su fallido intento de asustarla junto al informante.

-¿Senpai está enamorado de ella?- dijo Varona sorprendiendo a ambos. Tom intentó reprimir una carcajada.

-¡Claro que no!

-Sí es por la edad, ella no parece estar en desacuerdo. Al contrario parece interesada-siguió la rubia.

-No es tan joven como lo parece, solo es un par de años más joven que yo. Y no está interesada en mí de esa manera.

-¿Estás seguro? Te invitó a cenar a su casa a solas- Tom empezó a darle leves codazos, y lo miraba con picardía.

-No vive sola, se queda en el departamento de la pulga- dijo tranquilamente- A veces mi invita a cenar o algo cuando está aburrida y no puede molestar a Izaya- tanto Tom como Varona, se sorprendieron al ver que no decía el nombre del informante con odio como siempre, más bien, era prácticamente tabú mencionar su sola existencia.

-Oye, como que pareces tolerar más a Izaya-kun desde que ella está aquí, ¿no?- le dijo Tom algo nervioso.

-Umm, ahora que lo mencionas sí. Pero todo empezó por la culta de la mini pulga- ambos lo vieron confundido- Usagi… Ella nos metió en… problemas se podría decir, y terminamos llevándonos bien por algunos ratos- se puso de pie al ver como un jovencito le llamaba para entregarle su orden.

-No confío en ella.

-No podemos juzgarla Varona-chan, aunque sea familiar de Izaya-kun, no quiere decir que sea como él. Sus hermanas son diferentes.

-No me refería a eso…- Cambiaron de tema apenas llegó el rubio. “Ella es una asesina, lo vi en sus ojos, y ella también sabe de mí” Pensó algo irritada.

 

 

-Usagi estoy por llegar- dijo Shizuo por el celular, dando vuelta en la esquina donde podía ver el edificio donde estaba el departamento del informante.

-Ok, ya te abro- colgó.

Apenas había llegado Shizuo a la puerta Usagi ya lo esperaba, y ambos subieron tranquilamente por el ascensor. Al entrar al departamento Shizuo pudo sentir el aroma a comida casera, se quitó los zapatos y al sentarse en la mesa fue cuando se dio cuenta que Usagi llevaba puesto un vestido sencillo de color azul cielo y un mandil negro con lunares verdes.

-Iza-nii no comerá con nosotros, dijo que llegaría algo tarde de su reunión con Shiki- se sentó en frente de Shizuo.

-Está bien, gracias por la comida.

Una vez terminaron de cenar, conversaron un poco. Usagi le enseñó una foto de ella cuando era una niña de diez años con sus hermanos mayores, el más grande rondaba los veinte, tenía el cabello blanco y ojos color miel, de mirada seria; a su lado otro chico igualmente albino de ojos miel, se veía con una gran sonrisa, rondaba alrededor de los diecisiete y tenía un brazo sobre los hombros de otro chico de dieciséis años de cabellos negros y ojos cafés, quien sonreía tímidamente y abrazaba con el joven albino a Usagi.

-No se parecen mucho entre ustedes- dijo el rubio.

-Es normal, todos somos medios hermanos- Shizuo se disculpó- Está bien, mi padre tuvo tres esposas, la mamá de Yuu-nii-sama se fue por alguna razón, nadie sabe el por qué, solo mi padre lo sabía pero nunca nos dijo. Shun- nii es el segundo hijo de mi padre, su mama murió por cáncer. Cuando mi mamá conoció a mi padre, ella ya tenía a Kazuki, mi nii-chan, Kazu-nii y Shun-nii se llevaron bien a la primera solo tienen un año de diferencia, y cuando yo nací fui la princesa de los tres- rio con nostalgia- Siempre me consintieron y protegieron, cuando mi mamá murió fue cuando me sentí como la inútil de la familia…

-¿Por qué?

-Todos mis hermanos practican artes marciales, yo entrené desde pequeña, pero… un día alguien nos asaltó a mi mamá y a mi… yo no pude defenderla por miedo, cuando llegó mi nii-sama mamá dio su vida por mí…

-Solo eras una niña, no podrías contra adultos- puso una mano sobre su cabeza.

-Je, dijeron lo mismo mis hermanos, después de eso. Contacté con Iza-nii, él me consiguió la información que necesitaba, descubrí quien fue, entrené aun más duro y entré a una academia secreta, igual Iza-nii la consiguió para mí, encubrí la verdadera naturaleza de la escuela diciendo que era para tener una licenciatura en gastronomía… y funcionó. Me fui a china y ahí fue donde apareció Lady Killer- rio divertida.

-¿Cómo lograste engañarlos?

-La academia nos dan clases normales y un certificado autentico de la carrera que decimos estudiar realmente. Por eso sé cocinar de todo, antes de eso no sabía hacer más que cereal y emparedados.

-¿Sabes hacer comida española?

-Sí, sé algunas recetas. Tengo un recetario donde vienen muchos países y sus principales platillos. ¿Quieres algo en especial?

-Umm… Paella

-Jajaja de acuerdo, cuando lo prepare te llamaré- volteó a ver al gran ventanal y vio que comenzaba a nublarse- Parece que va a llover.

-Entonces me voy, gracias por la cena.

-Espera- Usagi corrió a la cocina y a los pocos minutos regreso con un gran bento en forma de panda- Guárdalo bien en el refrigerador, y caliéntalo para almorzar mañana.

-¿Estás segura?

-Sí, debes de comer bien- lo acompañó hasta la entrada y le dio también un paraguas- Solo por si acaso.

-Gracias, nos vemos.

-Adiós Shizu-nii. Sí vez a Izaya mañana puedes darle el bento- al entrar de nuevo al departamento y recoger la mesa, escuchó cómo caía la lluvia- Que bueno que le di el paraguas…

 

 

Esa noche Izaya se había atrasado más de lo que pensó en su reunión con Shiki y Akabayashi, terminaron cenando en el Russian Sushi. Después de su largo día, el informante caminaba tranquilamente a su departamento, por suerte Akabayashi le dio un paraguas pues apenas salió de la estación empezó a llover.

Solo le faltaba un par de cuadras para llegar cuando en medio de la lluvia vio algo que le llamó la atención, y con mucho cuidado subió por algunos tejados de las casas cercanas. Con la poca luz que había a esas horas de la noche, no sabía bien qué era lo que pasaba, pero cuando lo vio cerca de una de las lámparas de la calle lo vio sorprendido, para luego sonreír conmovido, cuando una divertida idea cruzó por su cabeza.

 

 

Al día siguiente Shizuo fue molestado por Tom por traer un lindo bento, pero cuando su jefe y la rusa escucharon que fue de parte de la albina, se sorprendieron. Varona se veía algo molesta, aunque como siempre sabía disimular muy bien, en cuando a Tom, empezó a decirle que al fin podría conseguir una linda novia, aunque sea familiar de su mayor enemigo.

-Sabes que lo que dices no tiene sentido alguno, la mini pulga no me interesa de esa manera-  Todo había comenzado cuando después de su recorrido llegó la hora del almuerzo y sacó el bento que Usagi le había dado- Es una sádica mocosa, tiene su lado bueno… pero es muy peligrosa.

-¿Qué cosas dices Shizuo? Se ve que es una dulzura, mira hasta te prestó su bento de panda. Un panda.

-Las apariencias engañan- rió ante su recuerdo de la paliza que la albina les dio a ambos. “Ultimadamente me siento cómoda con las pulgas, eso no puede ser bueno, ¿cierto?”

El resto del día por alguna razón varios pandilleros se metieron con él  ocasionando la destrucción de la mitad del parque central. Tom tenía una idea del porque tanto alboroto contra Shizuo no era la primera ni última vez que eso pasaba.

-Pensé que estos encuentros no los vería de nuevo- dijo para sí mismo Tom.

-¿Senpai?- Varona vio como Shizuo tenía aun en la mano una señal de transito, tenía el cabello y las ropas desarregladas, claro, como no estarlo después de golpear alrededor de treinta pandilleros, la mayoría por no decir que todos eran de otras ciudades, muy pocos locos de Ikebukuro se enfrentaban a Heiwajima Shizuo.

-¡IZAYAAA!

En ese momento Shizuo empezaba a arrepentirse de pensar en que tal vez, solo tal vez, él y el moreno podrían llevarse un poco mejor. Por alguna razón este seguía teniendo el afán de joderle la existencia. En definitiva mataría a la pulga sin importar que Tsugaru estuviera enamorado de Psyche, claro que sería una lástima perder a la bola rosa pero la pulga se lo buscó.

-Shizuo, creo que ya acabaste con todos…

-Orihara Izaya a las doce en punto- Varona interrumpió a Tom, en su intento de calmarlo. Muy cerca de donde estaban logró ver la capucha del abrigo de Izaya, y este dando saltitos.

El rubio volteó a ver en todas direcciones cuando sintió levemente el aroma de Izaya, y a lo lejos lo vio su capucha cubriendo su cabeza, sin pensárselo dos veces lanzó la señal de tránsito que tenía en mano contra el informante, seguido de otros que se encontraban en el suelo.

Vio como Izaya esquivaba todo lo que le lanzaba hasta que cuando le lanzó un cubo de basura, que esquivó de un salto, le siguió pocos segundos después una barra de metal ocasionando que quedara colgado de su abrigo clavado en una pared de concreto de un edificio. Al lograr su cometido se acercó a paso lento y con una sonrisa sádica en el rostro.

-Ahora si estás muerto pulga- tronó sus dedos y cuando estuvo lo suficientemente cerca se dio cuenta de su error- ¿Usagi?

-Shizu-nii…- la albina estaba usando el abrigo de Izaya, llevaba una falda negra y mallas del mismo color, por lo que no se molestó ver al rubio casi medio metro debajo de ella- Yo no te hice nada…- lloriqueó, haciendo sentir mal al rubio.

-Lo siento… pero la pulga… ¿Por qué llevas eso puesto?

-Iza-nii escondió toda mi ropa, solo me dejó una camisa de tirantes que no pienso usar fuera de casa y usé su abrigo para cubrirme… Iba a comprar algo que usar… Cuando me atacaste- hizo un puchero y se cruzó de brazos- ¡Ahora bájame! O te volveré a convertir el perro Shizu-nii

-A veces pienso que era bipolar, ¿sabes?- Tomó a Usagi de los tobillos para bajarla de un tirón, pero sintió como algo voló muy cerca de su rostro.

-Oh~ Shizu-chan ataca a niñas inocentes a plena luz del día- ambos voltearon a ver molestos a Izaya, entre sus dedos jugaba con otra de sus navajas y por alguna razón traía puesta la capucha de su abrigo.

-Pulga… te mataré

-Pero si lo haces Tsugaru se pondrá triste…

-Usagi, creo que sería buena idea traer de regreso a Tsugaru y a Psyche para que continúen lo que dejaron pendiente- vio con malicia a la albina.

-Sí, eso sería buena idea- vio con burla a Izaya, esa sería una buena venganza por usarla de señuelo.

-Que crueles dos contra mi solo…- sonrió y se echó a correr.

-¡No escaparás pulga!- tomó una máquina expendedora y empezó a darle caza.

-¡Esperen! ¡Primero bájenme!- suspiró desganada- Par de idiotas…- vio que a pocos metros se acercaba alguien con sombrero- ¡Ey! ¡¿Podrías ayudarme?!

 

La persecución siguió, dejando a muchos transeúntes corriendo por sus vidas. Objetos de gran tamaño volando por todos lados y filosas navas cortando todo a su paso.  Izaya no se detuvo hasta llegar a un callejón no muy lejos del Russian Sushi, al voltearse solo ladeo un poco el rostro para ver como pasaba si lado un gran contenedor de basura.

-Shizu-chan~ Amas a los animales, ¿verdad?- dijo de repente con una amplia sonrisa marca Orihara.

-¿Ah? ¿De qué rayos hablas pulga?- Tomó una máquina expendedora y la alzó por sobre su cabeza listo para lanzarlo- Me causaste muchos problemas esta tarde insecto, te mataré… Te voy a arracar esa asquerosa sonrisa del rostro, te despellejaré y haré un abrigo para luego mandárselo a la mini pulga- dijo el rubio con ira.

-Waaa, que aterrador- fingió temblar de miedo- Pero sabes… esas palabras no le quedan, a alguien que salva gatitos en medio de la lluvia- Izaya estaba más que complacido por la expresión que tenía Shizuo en esos momentos, estaba entre aterrado y furioso, dejando caer la máquina expendedora a sus espaldas- Si te preguntas como lo sé… pues… de regreso a casa te vi tomando aquella caja con gatitos y ponerlas bajo un techo…

El rubio lo recordaba, al irse del departamento de las pulgas, escuchó como un par de gatitos lloraban bajo la lluvia, no podía llevarlos a su departamento estaba prohibido, por lo que optó por ponerlos en un lugar donde no lo mojara más de lo que estaban. “Aquí ya no se mojarán. Apresúrense a ser adoptados” Les dijiste a ese par de gatitos, uno era completamente negro con las patas blancas y de grandes ojos amarillos, el otro era un gato blanco con orejas negras y de ojos azules. Una vez que se aseguró que no se mojarían siguió su camino a casa.

-¡CALLATE!- gritaste a todo pulmón.

-Opsi… Parece que he dado en el blanco con tu amor a los animales… Eres tan obvio Shizu-chan, incluso podría decir que fue muy “tierno” aquello…

-¿Qué estás tramando pulga?- molesto arrancó una señal de transito, vio como Izaya reía levemente.

-Dime Shizu-chan~  ¿Qué harías si el gran Orihara Izaya, el ser que más odias y los gatos que tanto amas?- Izaya vio como Shizuo empezó a tomar posición para pegarte con el señal como si de un bate de beisbol se tratase- ¿Estuvieran juntos?- se quitó la capucha de su abrigo dejando ver a un par de gatitos cómodamente recostados en su cabeza.

Shizuo se quedó de piedra, ese par de gatitos era los mismos que había protegido de la lluvia esa noche. Aun tenía la señal de transito en sus manos listo para golpear pero al ver a ese par de gatitos, viéndolo con sus grandes y tiernos ojos. No podía, y lo sabía… dejó caer la señal justo detrás de él.

-Nos vemos… Shizu-chan~- y con una amplia sonrisa Izaya se fue en compañía de sus nuevos compañeros.

Shizuo se quedó viendo como se iba y simplemente vio cuando Celty y Simon se acercaron a él, parecía que habían presenciado la “pelea”, sin decir nada agachó y abrazó sus piernas, dejándose rodear por un aura oscura de depresión.

-Vamos Shizuo, no te deprimas. Come sushi, el sushi te hace feliz- le dijo Simon intentando animarlo.

-Realmente amas a los animales, ¿verdad?- alcanzó a ver el texto del PDA de Celty.

-Estúpida pulga – murmuraste más para ti que para el par que intentaba levantarte el ánimo.

 

 

Izaya feliz por ver en primera final la cara de contradicción de la bestia de Ikebukuro fue la cereza del pastel de su día. Aun con ambos gatitos en su cabeza los volvió a cubrir antes de llegar a su apartamento. Al subir se encontró con Usagi, al verlo le dedicó aquella mirada de “Habla antes de que te mate” Aun usaba el abrigo de Izaya roto.

-Oh veo que lograste bajar

-Eres un…- suspiro y vio a Izaya detenidamente- ¿Por qué me usaste de señuelo? Y devuélveme mi ropa tengo que salir- se quitó el abrigo roto dejando ver una camisa blanca de tirantes casi trasparente con un pikachu en el centro.

-Solo para molestar a Shizu-chan antes de reunirme con un cliente- Vio a Usagi suspirar y masajearse la sien- Encontré estos gatitos, ¿Los quieres conservar?- se quito la capucha dejando ver a los gatitos.

-Oh, son tan lindos- abrazó a ambos y los dejó en el sofá para acariciarlos- Me gustaría pero como está la situación no creo poder cuidarlos- vio triste a ambos gatitos bajar de un salto y recorrer la casa- Pero puedo buscarles un hogar.

-Haz lo que quieras- empezó a subir las escaleras- Por cierto tu ropa está dentro del horno en una bolsa- empezó a reír con fuerza antes de encerrarse en su oficina.

-Iza-Baka- dijo antes de ir por su ropa y darse un baño.

 

 

Después del baño Usagi se volvió a disfrazar para su reunión con Akabayashi y otros chicos, usaba una peluca peli roja larga, atada en una coleta. Vestía una camisa gris a botones sin mangas, una corbata morada, pantalones negros con un cinturón morado y unas zapatillas blancas, sus ojos ahora eran de un color gris oscuro.

-Iza-nii, me voy yendo. Llegaré tarde- tomó su bolso y una especia de maleta de mano donde acomodó a los gatitos, dejando ver sus caritas por encima del cierre.

-De acuerdo- Izaya bajaba tranquilamente con una taza vacía en mano- Yo saldré en una hora. ¿Llevarás a los gatitos contigo?

-Sí, sé donde serán bien recibidos.

-Nos vemos luego amigos, prometo que si nos volvemos a ver les invitaré un buen salmón- recibió un maullido de parte de ambos felinos como respuesta- No hagas tanto caos.

-Eso debería de decir yo- rio y antes de salir por la puerta vio seriamente a Izaya- Iza-nii, lleva contigo el chocolate que te dije, las cosas se están poniendo feas por las noches…

-Lo sé, igual ten cuidado. Sí encuentro algo te lo mandaré si es de suma importancia- Usagi asintió con la cabeza y se marchó.

 

 

Eran alrededor de las seis de la tarde el sol aun no se ocultaba del todo, por lo que la vista era hermosa en aquel puente, sabía que corría el riesgo de encontrarse con Shizuo por segunda vez ese día, pero tenía que entregar un par de fotos e información a una pequeña empresa. Había quedado de verse en un pub con el dueño de la pequeña empresa, solo tenía veinte minutos para llegar, tenía tiempo de sobra por lo que decidió caminar a paso lento, disfrutando de la vista que le daban sus amados humanos.

“Tal vez pase por un poco de sushi para la cena” No tenía pensado beber ni mucho menos comer con su cliente, y con los posibles riesgos que estaban por venir prefería quedarse en casa a salvo para seguir investigando.

Un escalofrió le recorrió la espalda, y un entraño sentimiento lo invadió, no estaba seguro que era, pero si instinto le puso en alerta. Tomó una de sus navajas, pero sin sacarla de su bolsillo, vio a su alrededor, habían aun varias personas circulando, no era el lugar más adecuado para atacarle. Si preocupación disminuyó un poco cuando escuchó el sonido del metal desgarrándose.

-Izaya-kun~- frente a él estaba un Shizuo muy molesto, tenía un gran buzón de color azul entre sus manos justo frente a él- Ahora si te matare maldita pulga. Y esta vez, ni Tsugaru ni Psyche me detendrán de lograr mi cometido…

-Oh, eso es cruel- rió suavemente- Pero lamentablemente no tengo mucho tiempo, tengo que encontrarme con alguien, así que dejaremos nuestro juego para después. Así que…

De un movimiento rápido Izaya dio un salto hacia Shizuo aterrizando en el buzón, se puso en cuclillas y acercó su rostro al del rubio. Shizuo, no se movió en absoluto al ver a Izaya saltar hacia él, más que nada porque no vio señales de que fuera a atacarlo con su navaja, tal vez huiría, pero… ¡Estaba muy cerca de su rostro! Y estaba, no… no lo haría. Sí, sus bocas se encontraron por un pequeño instante.

-Tómalo como “disculpa” por lo de hoy- puso un dedo sobre los labios del rubio, quien seguía en shock- Sigamos nuestro juego después, Shizu-chan~- Y de un salto se bajó del buzón y emprendió su huida, antes de despedirse con una divertida sonrisa.

Shizuo estaba confundido, todo su ser era un caos. Aun en estado de shock dejó caer el gran buzón a sus pies, viendo por donde había desaparecido su némesis… quien lo había besado, y hasta cierto punto, ¿disculpado?

Detrás del rubio se encontraba una linda rubia de ojos azules llenos de furia, había visto como su compañero había salido corriendo tras susurrar un “Te matare, Izaya” Supuso que tal vez con algo de suerte cumpliera con su objetivo. Recordó haber encontrado a Shizuo siendo consolado por Simon y aquella motociclista que tanto le había dado batalla aquella vez que se encontraron. Solo se acercó lo suficiente para alcanzar a escuchar que la razón de su estado de perturbación fue causada por el informante. Tal vez su broma fue peor de lo haya hecho antes.

Siguió a Shizuo hasta que se topó con aquella escena que le causó una gran ira. Izaya besó descaradamente a SU senpai, y este no lo había impedido, cosa que le dolió un poco. Un lindo mapache de plástico que sostenía un letrero sufrió su ira, dejándolo decapitado.

-Shizuo-senpai- dijo sin mostrar expresión alguna, se acercó lentamente hasta estar muy cerca de él, estaba punto de tocar su hombro cuando se detuvo al escucharlo hablar.

-Cierra la boca Tsugaru…- susurró molesto. En su mente Tsugaru parecía sonreírle, diciendo que era lindo que Izaya le besara como disculpa. Se preguntaba por qué rayos hablaba con él en ese preciso momento.

“Porque estas empezando a aceptar que sientes algo por…” Empezó a decirle tranquilamente su alter ego en su mente, cuando Shizuo lo mandó a callar, ocasionando que sonriera aun más. “Ya no tiene caso resistirse” y con esas últimas palabras no lo volvió a escuchar. Con un suspiro y revolviendo sus cabellos, se dio cuenta que no estaba solo.

-El nombre de Tsugaru no me es familiar- dijo Varona, llamando la atención del mayor, podía ver que estaba algo nervioso por aquello- Puedo apoyar a senpai con la eliminación de aquel ser nombrado, Orihara Izaya.

-No es necesario Varona- suspiró y puso una mano en la cabeza de la rusa- Vamos, Tom debe de estar esperándonos.

Sin decir más empezaron a caminar para ir a la oficina para dar como finalizada su jornada de ese día. Varona era muy astuta, se dio cuenta que Shizuo había evadido su primera pregunta, ¿Quién será esa persona llamada Tsugaru? ¿Qué relación tenía con su Senpai? ¿Y por qué lo nombró estando él solo? No entendía muchas cosas, eso le molestaba, tal vez debería de buscar en algún libro referente a psicología o algo parecido. ¿Un amigo imaginario tal vez? No, el guardaespaldas no era un niño.

 

 

Después de haberse “despedido” de Shizuo con un beso se fue corriendo al pub para encontrarse con su cliente, la reunión duró un poco más de lo que hubiera deseado. Aquel hombre había quedado satisfecho con su trabajo por lo que había empezando a encargarle otro, sospechaba que su hija estaba involucrada en asuntos peligrosos y su supuesto novio no era de fiar. Así que le encargó un trabajo fácil, a ojos de Izaya. Sin más tomó el dinero y se fue, si cliente insistía en que le invitaba un trago pero se negó y marchó con su típica sonrisa.

-Tardé más lo que hubiese deseado- sacó su celular y vio que eran las siete de la noche- Aun puedo pasar con Simon.

Caminó tranquilamente por aquella solitaria calle, algo no andaba bien, lo podía sentir. Entró en un callejón que no tenía salida, pero había bastantes contenedores de basura, escaleras de emergencia y otras cosas con las que podría escapar si era necesario.

“Izaya” Aquella voz llamándole la conocía, se acercó a un viejo espejo que estaba contra la pared y vio a Psyche con sus ropas blancas y rosadas.

-Psyche… ¿Cómo?

-Besaste a Shizuo-san- le sonrió, ocasionando que Izaya lo viera con molestia- Pero no vengo para recortarte eso, Izaya-kun algo no está bien…

-Entiendo, pero no sé…

-Escucha, ve rápido a cualquier otro lugar que sea concurrido, Tsugaru vio algo extraño cuando tu y Shizuo-san se separaron.

-¿De qué hablas?

-Izaya, alguien nos persigue… Y no es solo uno… Usa-chan no está en la ciudad- Psyche empezaba a ponerse cada vez más nervioso- Estamos solos, debes ir rápido con Shizuo-san.

-No quiero meter a la bestia en esto.

-Sé a lo que te refieres, pero por el momento solo él… ¡Corre!- Psyche desapareció y volvió a ver su reflejo, cuando a sus espaldas logró ver que aparecían varios hombres en la entrada del callejón.

Sin pensarlo subió al techo de uno de aquellos edificios bajos, usando su parkour pudo deshacerse de lo que parecían ser tres hombre armados. “Demasiado fácil” pensó, normalmente sus enemigos ponían más dificultad a la hora de secuestrarlo. Caminó tranquilamente por el techo y cuando llegó a una calle un poco más iluminada, siguió su camino en la acera. No había muchas personas, y eso que aun era temprano.

Se confió, a pocos metros había un hombre de negro, con lentes oscuros y sombrero parado de pie en medio del camino, intentó cambiar disimuladamente de dirección pero otro hombre ya lo esperaba.

-Vaya, vaya. Parece que esta vez pusieron más entusiasmo para poder cazarme…- dijo para sí mismo sin borrar su cínica sonrisa- Hace mucho que no me divierto

Izaya tenía que evitar demostrar que estaba nervioso ante esa situación, podía ver que estaba completamente rodeado. Las entradas de las calles, en frente y detrás de su camino, incluso los que parecían ser simples civiles lo veían detenidamente en la entrada de algunas tiendas.

Tenía un par de navajas en su bolsillo, tal vez podría escapar si creaba alguna clase de distracción, pero el estar completamente rodeado lo tenía en completa desventaja. Miró a su alrededor, cuando vio un delgado poste luz, era parecido al que había cortado en una ocasión para deshacerse de Shizuo.

Descaradamente sacó su celular para buscar un número de contacto, antes de poder marcar el número su celular recibió un balazo. Lo que buscaba, sonrió y cuando vio a varios hombres moverse a su dirección lanzó su navaja para cortar aquel delgado poste, distrayendo a los que se encontraban a si derecha y frente a él, puesto que cayó cobre uno de sus compañeros. Ahora quedaban los de su izquierda y los que estaban detrás de él. No lo pensó dos veces, cortó las cuerdas que sostenían un gran letrero en forma de zorro, cayendo sobre algunos otros, en ese momento emprendió la huida.

Escapó por aquellos callejones que se sabía de memoria, al menos era bueno ser perseguido por Shizuo prácticamente diario, sabía cada obstáculo que podría haber por aquellos caminos. Muy cerca, estaba muy cerca del centro, pero frente a sus ojos un viejo edificio se vino abajo bloqueándole el camino. Los podía sentir a sus espaldas y otros sobre los techos.

-Tks, no me queda de otra- de su bolsillo sacó aquel chocolate que le había dado Usagi- Espero al menos no morir.

-¡Ahí esta rápido!- un hombre estaba detrás de él.

Vio frente a él que algunos escombros se acomodaban perfectamente para proporcionarle una salida, solo habría de tener cuidado de no pisar algo suelto. Al dar el primer salto se sintió más ligero, con una sonrisa empezó a subirse al techo donde los esperaban un par de hombre, sin problemas los apuñaló dejándole la vía libre. Perfecto ahora podría escapar.

-Señor, lo tengo en la mira. ¿Disparo?

-No lo mates, lo quieren vivo. Usa los dardos.

-Confirmado.

Corrió lo más rápido que le dieron sus piernas,  y eso era decir muchos, si de por sí era rápido con aquel chocolate se sentía “Flash”. No faltaba mucho para llegar al Russian Sushi, con Simon ahí estaría a salvo por un rato, hasta que llamara a Celty. Se escondió detrás de un gran letrero donde promocionaban alguna película. Con un suspiro inspeccionó si tenía la vía libre, pero un repentino dolor de cabeza lo hizo detenerse, seguido de una extraña sensación de que le estiraban la columna.

-Maldición…- al tocarse la cabeza lo sintió, algo peludo y suave, le hacía cosquillas y se movían cada vez que las tocaba- Orejas…- con horror vio a su costado y había una larga y suave cola negra saliendo de la parte baja de su espalda- ¡Y una cola! ¡Usagi te mataré!

En su monologo de como se vengaría de la albina por volverlo una especie de gato humano, aunque no lo negaba, usar el ADN de un felino para volverse más ágil y veloz era una buena idea. Tal vez solo un postre de broma bastaría esta vez.

-Bueno, a ver a Simon- cubrió sus orejas con su capucha y trató de meter su cola en su abrigo. “Atrás” LA voz de Psyche de nuevo lo puso en alerta, y apenas lo escuchó lanzó su ultima navaja hacía donde le dijo, pero fue demasiado tarde.

La navaja voló hacía aquel francotirador que se encontraba a espaldas de Izaya, clavándose en su pecho, pero ya había disparado aquel somnífero, así que ambos cayeron al suelo, uno inconsciente y el otro desangrándose.

-Lo tengo jefe… ya pueden ir por él- antes de perder la conciencia, en medio de la oscuridad creyó ver a alguien salir corriendo de donde se encontraba en informante, una pequeña sombra, tal vez, era producto de su imaginación y la escaza luz.

 

 

-----------------EXTRA ALTER EGO --------------

 

 

Izaya se encontraba en su lada de estar, por alguna razón Psyche y Tsugaru se encontraban con él, tal parecía de algún modo lograron salir de sus cuerpos. Verlos actuar tan acaramelados y ver sus rostros con una expresión a la que no suelen mostrarse entre él y  Shizuo era sumamente extraño. Tenía en que busca en qué mantener su mente ocupaba para ignorar a esos dos. Suspiró.

-¡La felicidad de Izaya! ¡La atrapé!- Psyche saltó justo frente a él, parecía como si huera matado a un mosquito, al “aplaudir” de esa manera. Lo vio confundido.

-No lo hagas Izaya-kun, si suspiras de esa manera se irá tu felicidad, ¿Lo sabías? Tsugaru me lo dijo- Psyche era tal inocente con esas cosas… sería divertido molestarlo. Volvió a suspirar.

-Papá, papá. Izaya-kun está en la etapa de rebeldía- lloró Psyche en brazos de Tsugaru.

-Tranquilo, Ii-kun, no debes de hacer llorar a mamá de esa manera, ¿entendido?

-¿Quién rayos Ii-kun?- dijo molesto y algo perturbado. “¿Juego de papá y mamá?” pensó al verlos.

Notas finales:

Listo!!! *w* he cumplido

USa: DEspues de un mes de retraso...

Nira: Calla, xD tarde horita un poco más porque no quiero dejarlos en espera mucho tiempo ya tengo el capitulo que sigue, pero lo subire apenas y termine el otro. 

Ademas creo que por ahi se me ocurrirá un nuevo proyecto, pero no lo subire hasta que este este en los últimos capitulo

nos vemos!! *w*


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