Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Ex Novio por MrGhoul

[Reviews - 12]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Tokyo ghoul no me pertenece, todos los derechos le corresponden a su creador Sui Ishida.

No tengo la mejor redacción del mundo así que mis disculpas si en algunas ocasiones usted puede llegar a confundirse.

Notas del capitulo:

Esta historia contiene Yaoi, Oc, Lenguaje Explicito

Pareja: TsukiyamaxKaneki        

Soy mi propio beta así que disculpas por las faltas de ortografía

Tokyo ghoul no me pertenece, todos los derechos le corresponden a su creador Sui Ishida.

 

No tengo la mejor redacción del mundo así que mis disculpas si en algunas ocasiones usted puede llegar a confundirse.

Había comenzado con un día normal como todos.

Leyó un libro de su autora favorita Takastuki Sen, apreciando su elocuencia y delicadeza de su escritura, paso su tiempo en la universidad con Hide para luego ir al apartamento de este y escucharlo de cómo se quejaba constantemente de su maestro de Historia.

Después Hide insistió para jugar un partido en su nueva consola.

Hide estaba sentado en su cama con el control en las manos y Kaneki estaba al lado de él tratando de acostumbrarse al control y recordar que botón era para que cosa, después de unos cuantos minutos Hide término siendo el vencedor de esa partida al igual que todas las anteriores.

“Wow amigo eres realmente malo en este juego y yo pensé que cuando lo dijiste solo estabas exagerando”

“Te dije que no estaba mintiendo, por eso no quería jugar”

Hide golpeo a su amigo en el hombro para reconfortarlo pero fue demasiado brusco provocando que Kaneki callera de la cama con la cara contra el piso.

“Ups, lo siento, lo siento”

“Preferiría estar leyendo un libro a tener mi cara en el piso sabes”

“Oh, sí perdón”

El rubio ayudo a su amigo a levantarse

Kaneki frunció el ceño mientras que con la boca hacia un pequeño mohín molesto.

“Vamos no te pongas así, podemos hacer otra cosa”

Dijo el rubio tratando de animar a su amigo.

“¿Cómo qué? ¿Se te ocurre algo?”

Kaneki pregunto cuando al fin estuvo de pie, no tuvo un mal día, solo era de esas ocasiones que no tenía ganas de hacer nada, aun así el día pudo a ver sido mejor.

“¿Qué tal si vamos al centro comercial? Ya sabes podemos ir a comprar helado, algunos videojuegos, palomitas, películas, refrescos, ya sabes, ¡Podemos tener una noche de películas, videojuegos y todo lo que podamos hacer y comer! Además podíamos comprar algunas cosas, tu refrigerador se está quedando sin comida”

“Eso es porque tú te comes todo Hide”

Kaneki regaño a Hide pero no estaba molesto de hecho mientras decía esto si cara mostraba una pequeña sonrisa de lado.

“¡Hey! La comida que compras es deliciosa, además casi no comes, veo la misma comida sin abrir por una semana, ¡eso no es normal viejo!”

Kaneki estaba un poco preocupado por eso, tendría que tirar comida de vez en cuando para que su amigo no sospechara nada, ser un medio ghoul no era fácil, y más si siempre tienes a alguien que siempre está junto a ti y analizando lo que está mal contigo hasta saber el último detalle.

“Entonces vamos, no podemos estar encerrados aquí todo el día, necesito vitamina d, necesito que el sol toque mi piel”

“Está bien, no parece una mala idea”

“¡Te prometo que no te arrepentirás!”

Kaneki solo pudo sacudir la cabeza con una pequeña sonrisa, su amigo podría ser muy enérgico.

.-.-.-.-.-.-

“¿Tú vas a pagar cierto?”

Dijo Kaneki mientras veía todo lo que había en el carrito de compras que casi se desbordaba de toda la comida chatarra y una que otra cosas que no era comestible que Hide puso en el carrito.

“No seas malo, vamos a pagar mitad y mitad y así es justo, además no creo que yo puedo pagar todo esto yo solo”

“Tú vas a comerte la mayoría de esas cosas quiera o no, pero bueno, ¿no tengo opción verdad?”

“Nop, no la tienes, venga vamos a pagar esto”

“Sabía que ibas a decir eso, pero por lo menos voy a comprar un libro que me gusto cuando me desvié a la sección de libros”

“Eh bueno yo te esperare aquí de todo modos la fila es demasiado larga, pero no me vayas a cambiar por un libro mientras estemos mirando las películas, porque cuando se supone que solo seremos dos, esos libros siempre se meten en nuestra relación y estoy harto, se supone que es una noche de mejores amigos no de tu y ese libro y yo como la tercera rueda”

Kaneki rodo los ojos por la tontería dicha por Hide.

“Bueno, vuelvo en unos minutos”

“Más te vale, no quiero averiguar que te fugaste con ese libro”

“Muy gracioso Hide”

.-.-.-.-.-

No tomo más de quince minutos para que Kaneki fuera y tomara el libro y regresar, pero cuando lo hizo no vio al rubio solo vio al carrito de compras fuera de la fila, empezó a buscarlo con la mirada para no obtener ningún resultado y empezó a moverse para tener mayor campo de visión pero cuando dio el primer paso para ver a la fila donde Hide había estado con anterioridad, sintió como una mano era puesta sobre su boca y otra sobre sus ojos para finalmente ser arrastrado lejos  de ahí.

Iba a gritar pero finalmente la mano se retiró, dejándolo ver atravesó de su ojo no parchado a Hide aun con la mano en la boca del pelinegro y un dedo sobre sus propios labios señalando que guardara silencio.

Cuando Kaneki se calmó, Hide quitó la mano de la boca de Kaneki para después ser golpeado en el pecho por unos pequeños puños pertenecientes al pelinegro para después cruzar los brazos enfadado mientras Hide frotaba donde había sido golpeado.

“¡Que fue eso Hide!”

“Shhh, ¡cállate! No grites, o él podría escucharte”

“¿el?

“Si ‘el’ ¿no lo recuerdas?, es al único que llamamos el”

Kaneki abrió los ojos en el horror mientras tapaba su boca con sus dos manos.

“¿Estás seguro de que era el?”

“¡Si! Lo reconocería en cualquier parte, estaba cerca por donde yo estaba formado, con suerte no me vio”

“¿P-pero que hace aquí en Tokyo?”

“Yo que sé, pero hay que irnos ahora mismo”

Dijo Hide mientras jalaba a Kaneki hacia la salida.

“¿Pero qué hay de todo las cosas que íbamos a comprar?”

“Olvida eso, hay que irnos”

Hide arrastro a Kaneki mientras corrían hacia la salida pero no se dieron cuenta de que alguien los estaba mirando.

.-.-.-.-.-.

Estaban jadeando, tratando de recuperar el aliento.

Habían corrido hasta entrar al apartamento de Hide sin parar, evitando así cualquier riesgo.

“N-no… puedo… c-creer que este…en Tokyo de nuevo, pensé que se había ido para siempre”

“Y-yo nunca lo pensé así, sabía que algún día volvería, pero yo creía que no iba a volver al distrito 20 sabes y sin mencionar que también nos encontraríamos, si se puede decir así…”

“¿Cómo que sabias que regresaría?”

“Umm, bueno pues digamos que me dijo algo que me dio a entender eso, pero nunca le tome mucha importancia”

“¿No tomaste enserio la palabra de un psicópata de mierda? ¿En qué rayos estabas pensando? Y ¿Qué es lo que te dijo para que te diera a entender eso?”

“P-pues la verdad no lo recuerdo muy bien pero dijo algo como: ‘Vas a volver a ver mi cara de alguna manera u otra en este lugar de mierda’ o algo así”

“¿Es enserio que me ocultaste esto durante todo este tiempo?”

“Es que no le di mucha importancia la verdad”

“¿Debo darte una cachetada o un golpe en la cara? Porque la verdad para mi sonó como una amenaza”

“No creo que sea realmente una amenaza, bueno al menos en su totalidad no, además no creo que él me haga algo pues…”

Antes de que Kaneki pudiera continuar, Hide tomo al pelinegro por los hombros y lo sentó en su sillón, quedando el rubio de pie enfrente de él.

“Kaneki no, malo Kaneki, malo ¿Estás pensando realmente lo que estás diciendo? ¿Estás escuchando lo que dices? Él es un maldito, ¿Recuerdas todo lo que te hizo?, vamos Kaneki reacciona o quieres que te de la bofetada”

“L-lo siento, definitivamente tienes razón Hide, a decir verdad me siento bastante asustado de que este aquí en el distrito 20 y que este tan cerca como para que estuviéramos en el mismo lugar y y-yo…n-no puedo…”

Kaneki bajo la mirada respirando irregularmente, cerrando los ojos fuertemente y sobre su cara cubriendo sus ojos.

Hide reacciono con rapidez sintiéndose un poco culpable, sentándose al lado de Kaneki y dándole algunas palmadas en la espalda reconfortantes a las que el pelinegro no rechazo.

“Ahora yo lo siento viejo, yo no quería hacerte sentir mal recordando malos momentos, ¿Quieres seguir con el plan de noche de películas? Incluso puedes quedarte a dormir el día siguiente también ¿Eh? ¿Qué te parece?”

Hide solo vio la cabeza de Kaneki asintiendo tímidamente.

“Yo sé que tú tienes muchas películas de terror, suspenso y acción en tu colección pero… ¿p-podríamos ver algo más suave como comedia o alguna película infantil animada? No sé si podría ver algo que me de miedo en este momento…”

“¡Por supuesto! No hay ningún problema, no te preocupes, solo voy a la cocina por algunos bocadillos para los dos así que quédate aquí ¿sí?”

“S-sí, p-pero ummm, yo no quiero nada de comer, creo que no voy a ser capaz de retener nada, pero un café no estaría mal”

“¡Un café a la orden Neki-chan! En un momento regreso”

Kaneki solo pudo dar un pequeño ‘si’ mientras se acurrucaba en el sofá del salón, tratando de tranquilizarse y pensar con claridad o al menos tratar no pensar.

.-.-.-.-.-

Hide observo a su mejor amigo durmiendo al lado de el con su cabeza en su pecho y sus manos apretando su chaqueta como si fuera un salvavidas.

Kaneki se había quedado profundamente dormido a media película, dejando al rubio en sus propios pensamientos.

Tenía que matar a ese hijo de puta cuando lo volviera ver.

Si es que él no lo mataba antes de que pudiera dar un simple paso.

Ese imbécil, no bastaba con que se había metido con Kaneki sino que también tenía que ser extremadamente peligroso.

Que hijo de puta.

.-.-.-.-.-

Kaneki estaba trabajando en la cafetería, pero su rendimiento no era el mismo.

Se observaba que tenía ojeras al solo ver su ojo que no estaba cubierto por el parche, ya que no había dormido nada el día anterior, solo había fingido dormir para no seguir viendo la película que Hide había elegido para elevar su ánimo.

Se veía algo ansioso y melancólico a la vez.

Hide había estado aquí hace media hora, él lo había acompañado durante todo el día cuidando de él, pero tenía que ir a la universidad, así que había tomado sus cosas y se fue, dejando a Kaneki ‘solo’ en esa situación después de lo que había sucedido el día anterior.

Cuando las Fuegochi entraron por la puerta forzó una sonrisa en su cara para recibir a las dos de la mejor forma.

“¡Buenos días a todos!”

Hinami saludo con entusiasmo a todos los presentes para después acercarse específicamente hacia Kaneki para saludarlo directamente.

“¡Buenos días onii-chan!”

Dijo Hinami mostrando una sonrisa con los ojos cerrados, pero en cuanto los abrió, vio el aspecto deplorable de Kaneki.

“Hola, Hinami-chan”

Kaneki respondió lo mejor que pudo a la niña en frente de él, pero Hinami notó lo mucho que el pelinegro se esforzaba para fingir estar bien.

“¿Onii-chan? ¿Estás bien? Te ves muy mal, pareces muy cansado”

Dijo la castaña preocupada, en cuanto dijo esto todos fijaron su mirada en el pelinegro, estando de acuerdo con Hinami.

“Hinami-chan tiene razón Kaneki-kun, ¿Ha pasado algo?”

Pregunto Koma después de compartir una mirada con Irimi.

Hinami y Ryoko entraron a la parte trasera de la cafetería pero también tenían esa mirada preocupada que iba dirigida hacia Kaneki.

“¡O-oh! P-para nada, estoy bien, no tienen por qué preocuparse…”

Respondió Kaneki suavemente con la mirada al suelo mientras tocaba su barbilla con la mano izquierda.

“¿Quién se está preocupando? Ponte a trabajar y cambia esa cara tonto”

Hablo Touka mientras daba un golpe en la cabeza a Kaneki, aunque ella había dicho eso, los demás se dieron cuenta de que también estaba preocupada y solo estaba tratando de levantarle el ánimo.

“S-si Touka-chan”

Respondió Kaneki con el ánimo más bajo que antes mientras repetía mentalmente las palabras:

‘Cambia esa cara tonto’

Demonios.

Ahora todo le recordaba a él.

Touka al ver la cara triste de Kaneki, no pudo evitar rodar los ojos y resoplar un poco al ver al pelinegro.

Normalmente se vería torpe, nervioso, con una actitud un tanto inocente y una sonrisa tímida pero se veía feliz, Kaneki era un cambio refrescante para todos en la cafetería, el ex-humano provocaba un ambiente más relajante.

Este chico era su dolor de cabeza, pero sin duda era un gran amigo para él.

Pero no es como si el pelinegro tuviera derecho a saberlo, eso fue lo que pensó Touka.

Estaban limpiando algunas mesas hasta que se escuchó la campanilla de la puerta indicando que alguien había entrado.

“Bienvenido”

Dijo Kaneki al ver entrar al cliente.

Alto, cabello violeta bien cuidado, ropas brillantes pero elegantes a la vez, con rasgos italianos y de un buen parecido.

Kaneki solo pudo pensar que parecía un modelo.

El hombre en cuestión inhalo profundamente el olor a café, para luego tocar su nariz suavemente.

“Que gran aroma, definitivamente me siento más relajado aquí, Irimi-san, Kirishima-san tanto tiempo sin verlas ¿no es así? A usted también Koma-san”

“¿Qué quieres aquí Tsukiyama?”

Touka pregunto mientras volteaba y empezaba a hacer otras cosas

“Veo que eres tan fría como siempre Kirishima-san, pero supongo que eso es uno de tus encantos”

“Eres repugnante maldito bastardo engreído”

Dijo Touka con una mueca de desprecio.

“Touka-chan, es un cliente no puedes tratarlo así”

Kaneki replico hacia el comportamiento de Touka, acercándose al nuevo cliente llamado Tsukiyama.

Tsukiyama vio a su pequeño defensor, el pelinegro era un mesero que no había visto antes el mayor, así que decidió llamar su atención.

“Tú, el del parche en el ojo, eres nuevo aquí ¿verdad?”

El pelivioleta empezó a analizar a Kaneki y a observarlo, caminando alrededor de él haciendo que el menor se pusiera más ansioso.

“¿Cuál es tu nombre?”

“U-umm, m-me llamo K-Kaneki”

Tsukiyama olio descaradamente el cuello de Kaneki, provocando que el pelinegro soltara un pequeño chillido asustado.

‘Que aroma tan misterioso, pero él es diferente a los demás pero no puedo deducir realmente que es’

Pensó Tsukiyama mientras se sentaba en una de las mesas vacías de la cafetería.

“Oye, estas interfiriendo con nuestro trabajo y das asco es mejor que te vayas”

“Eres muy poco elegante ¿no crees?, además no es como si tuvieras el derecho a echarme, soy un cliente; estoy aquí para ver a Yoshimura-san y de paso beber un café”

“Pues yo no voy a servirte nada, así que piérdete”

Touka contesto molesta mientras se cruzaba de brazos, Irimi no daba ninguna señal de hacer algo y Koma está en ningún lugar para ser encontrado.

Kaneki observo nerviosamente a las dos mujeres y luego a Tsukiyama.

El pelinegro un poco dudoso se acercó a Tsukiyama con bandeja en mano como si de un escudo se tratase al apretarlo fuertemente contra su pecho.

“Umm, D-disculpe Tsukiyama-san ¿Qué es lo que pedirá?”

Tsukiyama rio suavemente ante su pregunta.

“Soy un ghoul ¿Que otra cosa aparte de café negro podría tomar?”

Kaneki inmediatamente se asustó ante este hecho, ni siquiera tenía la mente para recordar el único tipo de café que los ghoul tomaban.

“L-lo siento, se lo traeré en unos minutos”

Fue a la barra y empezó a preparar cuidadosamente y lo más lento posible el café para no arruinarlo ya que al parecer su sentido de razón había estado yéndose y regresando desde que comenzó en día.

A pesar de las miradas desaprobatorias de Touka, regreso nuevamente con el pelivioleta entregándole su taza dejándola en la mesa.

“Aquí está su café, que lo disfrute”

Kaneki estaba a punto de darse la vuelta cuando Tsukiyama llamo por su nombre.

“Disculpa Kaneki-kun puedes sentarte conmigo un momento, quisiera disculparme por mi tan fuerte y grosera introducción”

Kaneki vacilo por un momento pero el aura del mayor por alguna razón, ahora le hacía sentirse más relajado y le daba la sensación de confiar y no estar tan asustado.

Se sentó lentamente en la silla que estaba enfrente de Tsuikyama y ya podía sentir la mirada de Touka sobre ellos.

Si las miradas mataban no sabía quién habría muerto.

El o Tsukiyama.

“Me presento, Tsukiyama Shuu, lo siento profundamente por cómo me conociste Kaneki…”

“Ken, Kaneki Ken”

Completo amablemente por el pelivioleta, mientras apretaba sus manos en su rodillas tímidamente, sintiendo sus mejillas calentarse por ninguna razón en particular.

“Un gusto Kaneki Ken-kun, sintetizando, tal vez lo que dijo Kirishima-san sobre mí no fue agradable en lo absoluto, debió darte una mala imagen de mí y mi comportamiento digamos que lo empeoro”

“No, solo es que no he tenido un buen día, en realidad y es por eso que estoy más ansioso de lo normal”

No sabía porque le estaba hablando de esto a un completo extraño, lo único que pensaba es que ya había perdido la cabeza por completo.

No se sorprendería si empezaba a decir cosas sin sentido y de pronto su cabeza explotara.

“Oh, es entendible si me lo preguntas, pero ¿Puedo preguntar por qué?”

Pero había límite para la locura.

“No, no realmente, lo siento tengo que seguir trabajando, ni siquiera debo estar sentado aquí en este momento”

Kaneki se levantó y se fue a la parte de atrás de la cafetería antes de que el mayor tenga oportunidad de decir algo o reaccionar totalmente sorprendido y muy confundido.

Sinceramente no sabía que pensar.

Confiar en extraños siempre había sido su mal hábito.

No quería pasar por lo mismo de nuevo, ya estaban pasando tantas cosas que no quería hacer su vida más miserable de lo que era.

Si Hide estuviera aquí ya lo habría abofeteada y le gritaría que dejara de decir cosas negativas y deprimentes mientras se comía la mitad de las cosas en su refrigerador.

Pero él no estaría siempre a su lado para cuidar de él  como si de un bebé se tratara.

Tenía que empezar a valerse por sí mismo en todos y cada uno de los ámbitos posibles.

No querría seguir siendo un inútil.

.-.-.-.-.-

Kaneki estaba sentado en el césped debajo de un árbol haciendo su tarea con Hide a su lado, estaban en el campus de la universidad como muchos a su alrededor.

Podían hacer su tarea en casa sin apuros ya que no es como si fuera mitad de semana y tuvieran que entregarla para mañana o ese mismo día, de hecho ya iba a ser fin de semana y no tenían más clases ese día.

Pero Hide insistió en ir a una fiesta que compañeros de la universidad habían estado organizando en la que solo los de primer año irían realmente.

Aunque Kaneki se resistió al principio, Hide finalmente pudo convencerlo.

Así que ahí estaban.

Haciendo su tarea como par de imbéciles aun cuando tenían todo el fin de semana para hacerla.

No miren a Hide, Kaneki insistió.

“Es enserio Kaneki, podemos hacerla después, esto es aburrido”

“No, no podemos, además fue una condición mía para ir a la fiesta ¿Lo recuerdas?, además es una ventaja, mientras más aburrido estés más disfrutaras la fiesta ¿No crees?”

“Eres cruel Kaneki, de seguro Papa Noel no te trae nada en navidad”

“A veces eres tan tonto que ni siquiera sé porque pasaste a la universidad”

“¡Que cruel!”

.-.-.-.-

Kaneki estaba de pie en una esquina incomodo esperando a su amigo para traer algunas bebidas.

Se sentía totalmente desubicado, nunca había estado en una fiesta así de grande, la última fiesta que recuerda haber ido, fue la fiesta de graduación de la preparatoria y solo fue porque era obligatorio.

Antes no sabía si realmente disfrutaba las fiestas, pero en este momento sabía que realmente no eran los suyo, que es de esas personas que prefieren mil veces estar en casa y hacer sus cosas tranquilamente en vez de estar escuchando el ruido ensordecedor de la música y las luces led que pasan sin aviso por su cara.

Realmente no le gustaban este tipo de fiestas, veía a algunos chicos entrar por la puerta con cervezas en mano, mientras otros empezaban a sacar cigarrillos de sus bolsillos y empezar a pasarlos entre la demás gente.

Le recordaba mucho al pasado y sinceramente quería dejarlo ahí, en el pasado y nada más, un mal recuerda que no quiera tocar.

Solo podía esperar a Hide y ver como la demás gente hacia sus tonterías.

Se sentía como si estuviera disfrutando de un apocalipsis, viendo como el caos surgía poco a poco.

Bueno tal vez estas fiestas no eran tan malas.

Aunque estaba seguro que ya no solo era una fiesta de universitarios, cuando por un momento vio al chico que trabaja en la tienda de comida mexicana por donde estaba el Dj bailando con su compañera Misaki.

No es que le importara demasiado, pero sabía que partir de ahora las cosas iban a descontrolarse un poco.

O quizás mucho.

Vio a su amigo rubio ir hacia el con las bebidas en la mano, tratando de no chocar demasiado con las demás personas y derramar las bebidas en el proceso.

“Por fin, uno de los tipos que sirve las bebidas era todo un imbécil, solo se la pasaba coqueteando con las mujeres y retrasaba la fila haciendo enojar a todos incluso a sus compañeros, te juro que el insulto más leve tenia estas palabras: madre, joder, puta, imbécil y lo último era ‘porque me sale de los putos hue-“

“Si, si, si Hide ya entendí, no necesitas ser tan grosero”

“Oh por favor Kaneki, como si tu no pensaras en decir ese tipo de expresiones algunas veces, a veces tu cara puede decirlo todo”

Dijo mientras le tomaba un trago a su bebida y le entregaba la suya a su amigo más bajo.

“Por quien crees que me estas tomando ¿por ti? Yo no soy así”

Le tomo un poco a su bebida pero después se relamió los labios con una expresión confusa.

“¿Hide esto tiene alcohol?”

“La verdad no lo sé, nunca lo he probado ¿Por qué lo dices?”

“Porque sabe a alcohol”

“¿Y tú como sabes a que sabe el alcohol?”

“Sabes que olvídalo, solo no bebas eso ¿entiendes? Podría tener algunas cosa rara como droga y no lo sabes, así que déjala”

“Eres aburrido”

“Aburrido no, yo lo llamo ser precavido”

“Pues yo lo llamo ser aburrido”

“Hide ni siquiera somos mayores de edad, esto es ilegal ¿Lo sabias?”

“Está bien, pero solo lo hago porque tú lo dices”

“Gracias”

Los dos se quedaron callados por un momento, viendo a todos bailar y como de apoco empezaba la promiscuidad entre los adolescentes, olvidándose de realidad que los rodeaba.

Que repugnante.

Por eso no le gustaban este tipo de ambientes, le recordaba a muchas cosas que vivió, y que pudo haber sido.

Perdido en sus pensamientos, tomo de un solo trago la bebida que aún tenía en la mano.

Antes de que Hide pudiera decir algo, Kaneki le arrebato la bebida de la mano al rubio, haciendo lo mismo que con la suya.

“¿Hide me podrías traer más de esa cosa?”

Hide solo pudo asentir lentamente confundido, para después marcharse.

Siendo honesto, realmente no podía saborear la bebida con gusto, sabia mal, pero aun así presentía con esperanza que tendría el mismo efecto tanto en humanos como ghouls.

O al menos eso quería que pasara por alguna razón que el desconocía.

Probablemente era un idiota ahogándose en melancolía.

.-.-.-.-

Se despertó como siempre con una gran preocupación en su pecho.

Aunque el olor a humo no era lo que lo había despertado de nuevo a las 2 de la mañana, si no era el vacío y frio en la gran cama en la que estaba acostado.

Con los pies descalzos, busco a tientas el suelo.

Levantándose en nada más que un bóxer y una playera negra de gran tamaño, dejando expuesto el delgado cuello blanco y la clavícula del pelinegro.

Busco entre los cajones para buscar un chándal, cuando lo encontró, se lo puso y dispuesto salió de la habitación, recorriendo toda la casa hasta llegar al salón para encontrarlo…

Vacío.

Al parecer no estaba, y no es como si pudiera hacer algo al respecto sobre ello.

Así que se dispuso a encender el televisor y tumbarse en el sofá para esperarlo.

Él siempre le decía que no lo esperara, pero Kaneki insistía enormemente, quería estar ahí cuando el llegara y quería estar con el cada vez que salieran.

De todos modos no es como si él lo dejara salir solo.

Era estúpido y sin sentido, lo sabía perfectamente bien, pero quería sentirse útil, ya que el siempre decía que su día no era más una mierda cuando veía al menor.

Siguió viendo la pantalla, entretenido con lo que sea que estuvieran pasando, porque la verdad Kaneki no tenía ni idea que estaba viendo, solo trataba de matar el tiempo.

Dieron las 5 de la mañana y Kaneki se quedó dormido en algún momento, pero despertó repentinamente por el ruido de las llaves y la puerta abrirse.

Se incorporó lo más rápido que pudo.

Unos pasos más y ahí estaba.

Cabello teñido color rojo, piercings y muchos tatuajes, alto y músculos bien formados.

Su cara no se veía muy bien, quitando que no se encontraba de buen humor, que eso pasaba siempre que llegaba a esas horas, tenía rasguños por todas partes y uno que otro moretón en su cuerpo.

“¿Qué estás haciendo aquí? Deberías estar durmiendo”

Dijo con dureza, como una orden en vez de una sugerencia, pero en su voz no había ninguna pizca de enojo que mostrara que estuviera molesto o enfadado, como siempre.

“Y-yo te estaba esperando, es que no estabas y-”

“¿Te sentías solo? Es normal en una casa tan grande, eres la única persona aquí, no te preocupes vamos a trasladarnos a una un poco más pequeña, voy asegurar de que alguien más siempre este contigo ¿de acuerdo?”

El pelirrojo empezó a quitarse sus botas después de lo que dijo.

Kaneki realmente no podía oponerse en las decisiones que el hiciera, de todos modos lo que hacía era por su bien, pero eso no le impedía expresar su sentir.

“No es que realmente me sienta solo, es que me gustaría que al menos estuvieras más conmigo durante las noches ¿sabes? Y realmente no quisiera estar tanto tiempo encerrado aquí, e ¿irnos de aquí? Pensaba que lo mejor era estar aquí según lo que dijiste, la verdad, si me siento solo, ojala Hide pudiera estar aq-“

Antes de que Kaneki pudiera empezar a decir más cosas, el pelirrojo bruscamente lo tumbo en el sillón, el mayor quedando encima del pelinegro, sosteniendo sus manos encima de su cabeza dejándolo sin movilidad alguna.

“Ya vas a empezar con tu lloriqueo por ese rubio, al único que necesitas es a mi ¿te a quedo claro o no lo has entendido?”

Kaneki solo pudo asentir temerosamente con la cabeza, después de ese, el más alto siguió hablando.

“Una casa más pequeña para que no se sentía tanto el vacío, personas que te cuiden aparte de mi para que no te sientas tan solo y puedan salir contigo sin la necesidad de que yo esté todo el tiempo contigo y así no tenga que preocuparme tanto y así no te sientas encerrado como una puta princesa en un castillo, nos iremos de aquí para que yo no tenga que irme de la casa tan seguido y cuando lo haga regrese casi de inmediato, ¿Ves que yo siempre se lo que necesitas? Y ya quita esa cara tonto, que sabes perfectamente bien que no te hare daño”

Kaneki solo se quedó ahí, mientras que el pelirrojo plantaba un leve beso en sus labios.

“S-sí, ya lo sé”

.-.-.-.-

Que estupidez.

“Kaneki”

El pelinegro giro y se encontró cara a cara con su amigo, el cual, al parecer ya llevaba un rato tratando de llamar su atención.

“¿Qué pasa Hide?”

“¿Te encuentras bien? Te ves distraído”

“No es nada”

Mentira.

“Bueno, no traje más de esa bebida, tú me dijiste que no la tomara, así que supuse que debe ser mala y no debe tomarla tampoco, ya sabes lógica Kaneki”

Kaneki se quedó mirando a su amigo para después bajar la mirada a sus pies protegiendo su cuerpo con sus brazos.

“Sabes que, quiero irme de aquí, no me siento a gusto aquí”

“U-um, está bien, ¿Quieres que te acompañe hasta tu departamento?”

“No es necesario, además ¿Aun quieres estar en la fiesta verdad? Y no me digas que no, que puedo verlo en tu cara”

“Bueno si, pero-“

“No, enserio, si quieres puedes quedarte, no quiero arruinarte la noche, descuida no te preocupes por mí, ahora podré empezar ese libro que compre el otro día”

“Ah, tú y tus libros ¿No es así?, cámbiame por ellos si quieres, pero ya verás”

Dijo Hide bromeando, a lo cual Kaneki respondió con una pequeña risa.

“Entonces no veremos mañana”

Después de eso, el menor se marchó con mucha dificultad tratando de pasar entre el tumulto de gente.

Finalmente llego afuera, era de noche y empezaba a refrescar, pero al menos podía respirar y no sentirse sofocado como antes.

Sin tan solo él no hubiera aparecido en su vida, tal vez esta sería mucho mejor, pero realmente no podía asegurar nada.

Él fue el que hizo que perdiera la esperanza de hallar a alguien quien realmente lo amara.

No había nadie para el allí afuera, y si es que lo había, nunca podría encontrarlo, no es como si simplemente apareciera en este momento frente a él.

O tal vez estaba equivocado.

Notas finales:

N/A: ¡Hola! Este solo será una historia de muy poco capítulos a menos que ustedes quieran lo contrario así que háganmelo saber en los comentarios sobre eso y de cómo les pareció la historia y cualquier cosa que se les ocurra, incluso si tengo faltas de ortografía. Esta historia la venia escribiendo desde principios de años pero nunca la termine, lo bueno es que cuando la leí otra vez para continuarla me gusto, si no hubiera tenido que reescribirlo o simplemente borrarlo.

Sayonara ~ n.n

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).