Desde esa noche, Harry tuvo el mismo sueño, se sentía un poco confundido y no tuvo la confianza como para contárselo a sus amigos, solo la profesora Nikoláyevna y Remus sabían de su sueño, pero ninguno de los dos podía explicarse el significado que este tendría o al menos eso parecía, Harry notaba a la profesora APril algo extraña.
Severus empezó a notar como Potter bajaba su rendimiento no solo en su materia sino también en las demás y por más que intentaba sacarle información a Nikoláyevna o a Lupin no lograba obtener nada. Lily y James empezaron a preocuocuparse por su hijo, ya que casi no comía y parecía no dormir bien.
Uno de esos días, James pidió permiso en su trabajo para poder hablar con su hijo, mientras avanzaba por los pasillos se encontró con April, ella estaba leyendo un libro que tenía en sus manos.
-Buenos días- la saludo.
April dejo su lectura y levanto la vista, su mirada cambio de inmediato de alegría a indiferencia total.
-Buenos días- meciono ella de mala gana, no quería parecer descortes.
Sin más cerro el libro y se fue de ahí sin mirar a James.
-¿Acaso sigue molesta?- se pregunto el moreno sintiendo un ligero tic en el ojo izquierdo .
Mejor no averiguo más y fue en busca de Albus para que le permitiera hablar con su hijo. El anciano claramente se lo permitió, llamo a McGonagall para que guiara al hombre al salón donde recibía clases Harry, durante el camino Minerva y James se pusieron al tanto de los sucesos ocurridos en esos días. Antes de llegar al salón donde estaba Harry, James volvió a encontrarse con Nikoláyevna, la peli-plata saludo a Minerva con entusiasmo mientras que a él lo ignoro olímpicamente.
-Hola, de nuevo- dijo mientras le mostraba una sonrisa.
-April, él es James Potter uno de los mejores Aurores que ha tenido el mundo mágico- dijo Minerva orgullosa.
-Se quién es- dijo Nikoláyevna sin emoción alguna- es el auror idiota, si me disculpan.
Si más se retiró dejando a Minerva sorprendida y a James sin palabras, definitivamente esa mujer seguía enfadada con él.
Como si le importara.
... ¿Acaso lo había llamada auror idiota?
¿A él?
¿El mejor de los aurores del mundo mágico?
Esa mujer, a pesar de ser pequeña podía guardar mucho rencor, ya la había visto enojada y no tenía ganas de verla enfurecida, no despues de tremendo golpe que había recibido.
Minerva le pidió permiso al profesor de encantamientos para que Potter saliera por el resto de la clase, despues se encargo de excusarlo de las demas materias. Harry se sintió algo mal cuando vio a su padre junto a su profesora de transfiguraciones; Minerva los dejo solos pues tenía que dar una clase a los de segundo y ya iba atrasada.
-¿Caminamos?- pregunto James.
-Claro.
Estaban en los jardines cuando James se detuvo y miro a su hijo.
-Tu madre te ha visto decaído- empezó- ¿ocurre algo?
-No es nada- mintió.
-Harry- James abrazo a su muchacho por los hombros- no me mientas, sé que algo te pasa casi no comes y tienes bolsas bajo los ojos, por favor tu madre y yo estamos preocupados por ti.
Harry sintió un sentimiento de culpa creciendo en su pecho, odiaba ocultarles cosas a sus padres pero esto era algo que ni ellos podían solucionar.
-Es solo que…he tenido un sueño extraño últimamente- confeso.
-¿Voldemort?- pregunto ya sin miedo de pronunciar ese nombre.
El chico inmediatamente negó.
-Son distintos- dijo- pero me tienen algo angustiado.
-¿Quieres hablar de ello?
-Remus y la profesora April están ayudándome con eso- dijo Harry.
James se sintió algo más tranquilo cuando supo que lunático trataba de ayudar a su muchacho, aunque él tambien quería hacerlo, pero algo en él se removió al escuchar el segundo nombre.
-Bueno, si estas con Remus me siento más seguro- dijo James- estoy seguro de que él tiene mejores consejos para ti que yo, solo recuerda Harry, cuando te sientas mal cuéntanoslo, siempre estaremos para ti.
-Lo sé, papá- dijo el muchacho.
-Como sé que no me dirás más- continuó James- es mejor que vayas a descansar, pídele a la enfermera que te de algo para poder dormir sin sueños, estarás más tranquilo.
-Está bien.
-Te acompaño.
Padre e hijo fueron rumbo a la enfermería siendo observados por un par de ojos azules hasta que los perdió de vista.
-Potter sigue con esos sueños- dijo- comienzo a sospechar del porqué.
En la enfermería, James y Harry encontraron a Nikoláyevna hablando con Poppy. El menor de los Potter saludo a su profesora con fingida alegría, mientras que James no dijo nada, ya era la tercera vez que se encontraba con esa enana.
-¿Qué te trae por aquí, Harry?- preguntó April.
-Venía por una poción sin sueños- dijo- no he podido dormir bien últimamente.
-¿El mismo sueño?
-Si.
-Es extraño, usualmente las personas tienen sueños distintos- dijo ella- no el mismo siempre, pero es buena idea lo de la poción, le diré a Poppy que te de una por cuestiones de salud, así no tendrás que dar explicaciones.
-Gracias profesora.
-Te he dicho que me digas April, Harry- sonrió- eres igual a Severus cuando de mi nombre se trata.
James se sintió ignorado por ambos y eso lo frustro un poco, esa profesora comenzaba a caerle realmente mal.
-Oh, el auror idiota- dijo la peli-plata de repente- ¿desde cuándo estas ahí?
-Entre junto con mi hijo- mascullo.
-No te vi- dijo ella simplemente, encogiendose de hombros.
Harry sabía que sería malo si se reía pero la manera en que su maestra le hablaba a su padre era realmente divertida. April se retiró un momento para ir donde Poppy y le pidió la poción para Harry.
-Aquí tienes- dijo entregándosela.
-Gracias.
-Espero que puedas dormir esta noche.
-Yo también espero eso, bueno me retiro- comento el muchacho- creo que no estaría mal si fuese a descansar.
-Espera Harry, voy contigo- dijo Aprilynne- necesito estar tranquila, toca clase doble con los de Gryffindor y los de Slytherin.
-Está bien.
-¿Vas a venir ote quedaras ahí parado como estupido?- dijo April llamando a James.
James sintió una extensa ira recorrer su cuerpo pero lo disimulo y lentamente negó.
-Solo pedí un rato para salir, así que ya me voy—dijo lo más calmado que pudo- nos vemos Harry.
-Adiós, papá.
Cuando desapareció de la vista de April y Harry, ambos emprendieron la marcha la sala común, el chico esperaba que sus amigos le hubieran llevado sus cosas, no quería ir al aula de encantamientos por ellas.
-Realmente James Potter es un auror idiota.
Aprilynne había dicho eso sin pensar y sin recordar que Harry estaba a su lado. El de ojos verdes rio levemente sacando a su maestra de su ensoñación.
-Te diría que no se lo mencionaras, pero ya se lo he estado diciendo desde que llego- dijo ella sonriente.
-Sé que debería molestarme después de todo es mi padre, pero es realmente divertido- confeso.
Nikoláyevna acarició la cabeza de Harry como si de un niño se tratase sorprendiéndolo, ella simplemente sonrió y siguió el camino hacía el aula siendo seguida por el muchacho poco después.
“Realmente Harry es distinto a ese auror idiota.”