Pasadas las tres de la mañana Jungsoo frunció el entrecejo, comenzó a entreabrir los ojos hasta que notó los números rojos en el despertador sobre la mesa de noche.
Talló sus ojos para que su visión se aclarara y tras hacerlo, ubicó que ya estaba en la cama de Minsoo, en su casa, recordó que se había acostado esperando que el día siguiente fuera menos estresante en el trabajo.
Suspiró para volver a conciliar el sueño, pero escuchó como Minsoo pasaba saliva tras de él.
Sonrió un poco adormilado todavía, dándose cuenta de que él estaba tras de sí, le abrazaba por el vientre y pegaba su cuerpo al suyo. Entonces se dio cuenta de que “algo” se estaba pegando a su espalda baja.
-CAP.- susurró intentando despertarlo.
Sentía como el miembro erguido de Minsoo se pegaba a su cuerpo. Pese a que no le incomodaba del todo, le daba un poco de gracia.
-Oye, ¿estás dormido?- susurró girado su rostro por encima de su hombro, dándose cuenta de que Minsoo tenía sus ojos cerrados y los labios levemente separados. –¿Chuchu?-
Sin embargo el nombrado no respondió de ninguna manera, seguía dormido.
Así que sólo se encogió de hombros y volvió a acomodarse para continuar durmiendo.
…
-Bueno días.- escuchó la voz de Leeteuk, lo que le provocó fruncir el entrecejo y comenzar a despabilarse. Se talló los ojos y bostezó. –¿Dormiste bien, Chuchu?-
Iba a contestarle que “cómo bendito” a no ser de la humedad que sentía en su parte noble provocado que de inmediato tomara la cobija para descubrirse y al segundo siguiente saliera corriendo hacia el baño más cercano.
Leeteuk sólo se rió levemente divertido mientras se levantaba de la cama para quitar las cobijas, seguramente ya era momento de lavarlas. No por el sueño húmedo de Minsoo, sino porque hacía más de dos meses que no las aseaba.
-Supongo que dormiste bien.- dijo Jungsoo saliendo de la habitación con las cobijas en sus brazos. –Yo tampoco tuve frio.- sonrió divertido al ver que la puerta del baño se abría, pero se volvió a cerrar de inmediato. –¿Sabes? No hay nada malo con tener sueños húmedos.- Minsoo que estaba recargado tras la puerta sólo negó lentamente mientras sonreía.
Si bien tenerlo era normal, sólo que no esperaba hacerlo mientras dormía con JungSoo.
Suspiró una última vez, luego tomó la perilla de la puerta y la abrió lentamente. Salió con cuidado de no hacer ruido y bajó las escaleras buscando a Jungsoo.
-¿Me viste?- preguntó Minsoo entrando al cuarto de lavado, en donde Leeteuk vaciaba detergente dentro de la lavadora. –Buenos días.-
-Si tenías “intenciones” me lo hubiera dicho.- contestó finalizando con la lavadora para girarse sobre sus talones y recargar su pelvis en el electrodoméstico.
-Estabas muy casando.- contestó Minsoo sonriendo nervioso.
-Quizá pero pudimos hacer algo, mínimo, pero rico.-
-¿Podemos dejar de hablar de eso?- preguntó un poco nervioso. –¿Qué quieres que prepare de desayuno? Hoy lo haré contigo.-
-¿También el desayuno?- dijo JungSoo riéndose levemente por las mejillas rosadas de Minsoo.