-akihiko, tengo un favor que pedirte
Hay está takahiro, en la puerta de mi casa, la persona que yo más amo en el mundo pidiéndome un favor, me pregunto qué es lo que lo tiene tan agitado.
- ¿qué pasa takahiro?
- mi hermano misaki va a tener una presentación en un concurso de piano, y no voy a poder ir, necesito que vayas tu – supongo que takahiro no se da cuenta de lo que eso significa para mí, no sabe lo mucho que yo lo amo.
- ni siquiera lo conozco
- lo conociste durante mi cumpleaños ¿no te acuerdas? – ahora que lo mencionas… takahiro me presentó al chico hace un mes en Osaka, solo nos saludamos, era bastante guapo pero ni se comparaba con mi adoración.
- bien, iré, pero ¿por qué tan preocupado por él?
- no me gusta dejar solo a misaki, nuestros padres murieron cuando él iba a presentarse por primera vez, estaban llegando tarde por lo que se apuraron y chocaron, por eso, no me gusta dejarlo solo en las presentaciones, además será su cumpleaños y no podré verlo hasta la noche.
- bien, iré – no me gusta ver a takahiro con esa cara de tristeza.
Me preparé para ver al famoso chico, no tenía muchas ganas, sobre todo porque debería escuchar la canción 26 veces antes de escucharlo a él, pero no importa, esto va por takahiro, quién apenas terminada la presentación se fue a hacer sus cosas, me pregunto qué es eso tan urgente que decía.
Fui al teatro pero no pude verlo, supongo que ya estaba detrás del escenario preparándose… ¿me pregunto si debo comprarle algo al chico? No creo, ni siquiera lo conozco.
Me pongo en los últimos asientos, el lugar está bastante vacío, pero tiene su modesto público, supongo que eso es porque es la primera ronda… me pregunto por qué.
Pasan los concursantes un por uno, estoy bastante aburrido, la misma canción… no se mucho de música, pero escuché que es Chopin, una y otra y otra vez… hasta que por fin algo llamó mi atención.
Número 27, takahashi misaki… apenas mencionaron el nombre todos empezaron a susurrar, pude escuchar cosas como “es el mejor de todos” “cuando toca transmite unos sentimientos hermosos” “es diferente a todos los demás” “sin duda va a ganar” “su música transmite sentimientos”
yo lo vi, no era el mismo chico que vi en el matrimonio, era alguien completamente distinto, esos ojos verdes muy grandes, estaban felices, pero tenían miedo, su cabello estaba revuelto, pero se notaba que se había esforzado en arreglarlo, su caminar era rápido y seguro, pero sus manos temblaban, se puso en medio del escenario y saludó al público, se sentó al frente de un piano de cola muy grande, supongo que al lado de ese pequeño joven el piano se veía aún más majestuoso de lo que era, simplemente espectacular
Miró al público una vez más, empezó a tocar, era suave y rápido, todo tan armonioso. Felicidad, rabia, sorpresa, miedo, tantas emociones crecían en mí mientras me perdía en las notas que ese chico hacía sonar.
Su cara mostraba esfuerzo, pero a la vez lo disfrutaba, y mucho, esos ojos mostraban que yo estaba en lo correcto. Me perdí en esa hermosa melodía, que momentos antes me tenía cansado, estaba cautivado, perdido emocionado, enamorado de esas manos que me hacían sentir así.
Para cuando me di cuenta la canción terminó, él era el último, eso no podía ser, necesitaba ver a ese joven, necesitaba hablarle, tocarlo para saber que era real. Incluso una niña pequeña se puso a llorar.
Pasé por la puerta rápidamente, unos niños estaban hablando de lo que habían escuchado, diciendo cosas como “cuándo grande seré un pianista como el último chico que tocó”.
Llegué al hall, él todavía no estaba ahí, cuándo lo vi salir ni siquiera le pude dirijir la plabra, pues él se fue directo a ver la tabla de posiciones, mostrando una gran felicidad ante lo obvio “primer lugar”. Me acerqué a él.
- tú eres el hermano de takahiro ¿cierto? – debo aparentar mi nerviosismo
Si, nii chan nos está esperando en su casa, ¿vamos?
-si
Llegamos a la casa, nos abrió la novia de takahiro…
-misaki, akihiko, les tengo una gran noticia a ambos… ¡nanami y yo nos vamos a casar! – esa noticia cayó como un balde de agua fría ¿eso es lo que estaba haciendo? ¡cómo era posible! De todas formas yo debía esconder estos sentimientos!
- me alegro por ti nii chan
- yo también.
La cena transcurrió normal, creo que oculté todo como es debido. Ahora debía irme a casa con el mocoso, apenas él se fuera ya podía dejar salir mi tristeza en paz. Por fin llegamos a su casa.
- antes de ir a tu casa… ¿no quieres un poco de te?
- estoy bien, gracias
- vamos entra – me jaló del brazo y me hiso entrar, rayos, necesito estar solo.
- me sirvió el té y noté que la casa era bastante pequeña, solo dos abitaciones, en la primera estaba la cocina, un pequeño comedor, un piano de pared, un mueble con muchas partituras y un pequeño sillón, la otra pieza supongo que era su habitación y el baño.
El chico dejó el té al frente mío y se sentó en el piano, mientras se ponía a tocar claro de luna de Debussy (no la de Beethoven, les recomiendo escucharla para crear ambiente)
- ¿tú estabas enamorado de mi hermano verdad?
- ¿Cómo sabes eso? - no puedo estar más sorprendido en este momento, escondí muy bien mis sentimientos.
- las personas enamoradas tienen una luz que otras personas no tienen, por eso existen tantos amores no correspondidos. – mis lágrimas ya eran inminentes, yo lloraba como un niño, él no me miraba, solo me acompañaba con su música – por mi parte, vivo enamorado de la música.