CAPITULO 5
Un castaño de ojos esmeraldas se hallaba desorientado, pero entendiendo la situación, el hombre de cabellos negros frente suyo no le daría las respuestas. Esa figura estaba siendo buscada por la policía, tenía poco tiempo, pero suficiente.
A una distancia desconocida desde aquella imagen, se hallaba un desesperado novelista, el detective que había contratado aún no daba resultados “lógico si pensamos que misaki fue secuestrado hace 10 horas más o menos” le recordó su subconsciente, frustrándolo todavía más.
“Me esforzaré para ser feliz”, las palabras con las que me enamoré, aunque en ese entonces aún no lo sabía, el detective llamó a la casa del escritor.
- señor usami, el automóvil en el que escapó el grupo terrorista de la casa de misaki fue encontrado, no es el mismo que el que usó ijuiin para escapar de la policía, pero también es robado.
- ¿Dónde está?
- en xxxxxx
Gracias, voy en camino – le corta sin siquiera escuchar lo último que el detective tenía para decirle. “en un lugar alejado” pensaba para sí. Una vez que bajó las escaleras vio a varias personas reunidas, estaban hiroki, su novio nowaki y aikawa.
- tu detective nos dijo que te esperáramos aquí porque seguro ibas a pensar en ir solo – dijo el profesor de literatura.
- sensei, entendemos que ese chico por alguna razón es importante para usted ¡hagamos lo mejor posible! – animó la fiel editora.
- no conozco mucho a misaki, pero en las noticias dicen que lo pasó muy mal, espero que podamos ayudarlo en esto también.
- muchas gracias, tengamos cuidado en esto.
- sí – dijeron los tres al mismo tiempo, nowaki conducía una camioneta negra, mientras el resto buscaba la zona que el detective había indicado.
- misaki, me decepcionaste, me dijiste que guardarías el secreto – esto es horrible, quiero salir de aquí – para que la policía empiece a buscarte deben pasar 24 horas, y ya llevamos 10, tengo 14 horas para jugar aquí – no puedo hablar, no me puedo mover, quiero vomitar, quiero desaparecer “quieres morir” ¡no quiero morir! Tengo miedo ¡usagi san! – Pero tengo una idea mejor - ¿de qué está hablando? – ten tu celular, dile a usagi por un mensaje que no volverás a verlo, y conste que voy a leerlo antes. Vamos a hacer un lindo viaje juntos – menciona eso mientras saca las llaves de un auto.
- Muy bien, aquí está el auto – decía el chico de cabellos negros
- esos malditos que no buscan gente a menos que hayan pasado 24 horas, de verdad me enojan.
- no nos sirve lamentarnos ahora, hay que buscar a misaki
- ¡tengo un mensaje de misaki! – vociferó el hombre de cabellos plateados
“perdón por no haberte escrito. Insistiré con mis sentimientos y me quedaré con ijuiin. Sorprendentemente se arrepintió de todo lo que ha hecho. Olvidé mencionártelo antes, perdón por eso de veras. AYER vi a unos amigos, ellos me apoyaron en esto. Todos queremos ser felices. Espero que tú también lo seas. Veré que hago con mi futuro en otro lugar lejos de aquí. Entiéndeme por favor. Otra vez, yo intentaré ser feliz. Seguiré la flecha que me indica el camino”
Todos leyeron el mensaje muchas veces.
- no importa cuántas veces lo lea, aunque no conozca mucho a misaki, el mensaje es raro.
- opino lo mismo, la redacción es muy extraña – le respondió la editora al profesor de literatura.
- ¿ayer que día fue?
- domingo 11
- ¿por qué el nombre ijuiin no estará con mayúsculas si es un nombre personal? – preguntó nuevamente la editora.
- tal vez no tenía tiempo – aventuró el doctor
- pero se dio la molestia de hacerlo después de cada punto – recordó akihiko
- y la palabra ayer – recalcó la editora
- tal vez…
- P… I… S… O - ¡es un mensaje de misaki! Seguro ijuiin le dijo que leería el mensaje antes de mandarlo por lo que te mandó un mensaje en código! – decía feliz nowaki.
- ¿Qué viene después? – preguntó casi desesperado el novelista
- la palabra ayer
- entonces es un piso 11
- o tal vez un 7, ya que ayer también fue domingo
- ¿y luego qué?
- T… E… V… E… O
- entonces está en un piso 11 o 7 desde el cual puede vernos.
- siguen siendo muchas las posibilidades, puedo ver el piso 11 y el 7 de 5 edificios.
- necesitamos otra pista
- ¿ya lo mandaste?
- sí – dijo el pequeño con la poca energía que tenía – “usami san, desde aquí puedo verte, estoy justo al frente, en el piso 11, espero que lo hayas entendido, todos están reunidos alrededor del teléfono… por favor apresúrense”
- bien, esperaré a que me confirmen el vuelo
- ¿a dónde me vas a llevar? – “no debo mirar demasiado la ventana, sospecharía, que suerte que él se haya puesto de espaldas a esa veana, así no descucbrirá mi pequeño engaño"
- es una sorpresa, tú no te preocupes, me aseguraré de que estés cómodo… hasta entonces – ijuiin se abalanzó sobre misaki, besando su cuello y arrancando la camisa de un tirón. Con una mano ató las muñecas de su ex novio con su corbata, mientras la otra la introdujo en los pantalones del chico.
-usami san, ¡ese cartel tiene una flecha!
- y está justo al frente del piso 11 de ese edificio
- vamos – dijo con decisión en sus ojos violetas, los cuales ansiaban vislumbrar al joven