Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

My boyfriend is a werewolf por WhereWouldIBe

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

La luna llena esconde maravillosos secretos, desde la antigüedad hasta los tiempos actuales guardando mágicos secretos entre los que estamos vivos, y los que han muerto. El hombre lobo es uno de estos secretos, desde tiempos antiguos se ha pensado que la existencia del hombre lobo es un mito y que su explicación recae totalmente en la locura y la incapacidad de justificar actos de muerte inexplicables.

 

Este es mi primer fanfic original basado en este maravilloso mito, pero no deja de tener el suspenso que merece una historia acerca del hombre lobo, espero que les guste.

Notas del capitulo:

Es el principio, un poco de explicación, lugares, lo típico, pero no te pierdas ni un detalle, todo al final de la historia tiene una explicación y un porqué de su mención, sin más te dejo con este primer capítulo de esta bonita historia.

 

André Arnoul Bertiau, es un joven de 25 años originario de la ciudad de Lyon en Francia; terminó sus estudios de psicología en Paris para poco después comenzar a trabajar de psicólogo familiar en una clínica de la misma ciudad. Es un chico tranquilo y de fuertes expectativas, sin embargo siendo gay la vida le cuesta un poco más de lo normal. Francia es un país multiculturalizado y el tipo de personas que ahí deambulan en una onda única de trabajo, romance y locura, es lo que impulsa a André a seguir ahí y de vez en vez ir a visitar a sus padres, mejor amiga Sofía y su fiel amigo Mario en Lyon. Estos últimos fueron compañeros de André durante el colegio medio, hasta que se separaron, sin embargo no dejaron de lado la bonita amistad que habían cultivado desde entonces. Aunque ambos son buenos amigos de él, Sofía es quien tiene un mayor vínculo con André; habían tenido una relación corta, Sofía se dio cuenta de la homosexualidad de André pero no reaccionó de manera negativa, es más, aumento su bella amistad. Por otro lado Mario es quien se mete en problemas con André, fueron grandes amigos de salidas nocturnas y cacería de mujeres, por supuesto Mario se dio cuenta del tipo de gustos que tenía André, así que su amistad disminuyó un poco, pero poco después iban juntos a los bar gay de Lyon, y claro, Mario solo iba por un buen trago de licor, mientras André bailaba toda la noche rodeado de los mejores hombres de Lyon. No era raro que esto pasase, André es un chico guapo; su cara es blanca, casi como las nubes del cielo, sus ojos verdes como esmeralda en tibias aguas del Nilo; La piel suave como el algodón frío de Polonia; sus labios delicados y finos, como las rosas de la reina Isabel en Inglaterra; finalmente su cuerpo no tenía nada que pedir a un modelo de revista, la cintura, las piernas, los brazos, glúteos, todo, en perfecta sintonía con sus pasos de baile. La gente del lugar sabía cómo recibir su llegada, nadie era digno de bailar con él, claro, solo Mario de vez en cuando ganando así el desprecio de quienes visitaban el sitio. Ya pasadas las copas, el tiempo, y la música, André se iba solo a casa, Mario siempre encontraba una pareja con quien seguir la noche, aún si iban a los bares gay, alcoholizado Mario aceptaba cualquier cuerpo, André esto lo sabía por eso prefería regresar solo a paso lento por la oscura ciudad de Lyon, y con cierta confianza, no sufría algún miedo con referencia a la noche, a la oscuridad, o la luna, hasta ahora.

 

De tiempos cortos, largos, por emergencias o citas con pacientes especiales, la vida de André no era tan ocupada como el resto de especialistas presentes en la clínica, sin embargo no tenía demasiado tiempo libre, cuando su trabajo no lo requería, dedica su tiempo a realizar viejos hobbies que tenía desde niño, como pintar, cantar o bailar en una academia; también para ir de compras, regar el jardín, o hacer faena de su pequeño apartamento; si era mucho, como unas vacaciones iba de visita a Lyon, para recordar sus viejos tiempos, e incluso sacar brillo a la pista del bar gay “Aphrodita” a veces con Mario, otras con Sofía, pero la mayoría solo.

 

Este mes la clínica entró en huelga por falta de material en el departamento de cirugía, pero como todo, el problema creció poco a poco hasta que André tuvo que dejar temporalmente su trabajo para regresar a Lyon hasta que los problemas con la clínica se resuelvan.

 

_La luna está muy bonita este mes…_ decía André mientras conducía de regreso a Lyon, cuando miró por la ventana y observó a la brillante luna llena en el horizonte que lo acompañó hasta que llegó a Lyon.

 

Una vez ahí fue recibido por María Bertiau y Rene Arnoul, sus padres ya pensionados por su trabajo como oficiales de seguridad. Viven en una pequeña casa en un condado de Lyon, no pobre pero un poco lejano del centro; una morada de tono café con ventanas algo desoldadas; su jardín con pocas plantas y una que otra cactácea de México cuidadas por María que tomó como su último hobbie.

 

_ ¡Mamá!, ¡papá!_ dijo André con emoción al entrar con maletas a la casa de sus padres.

 

_ ¡André!_ dijeron ambos padres para después ir a abrazar a su hijo.

 

_No esperábamos tu visita hijo, ¿qué pasó?_ decía el padre de André mientras María tomaba las maletas para irlas a dejar en la habitación de André.

 

_ Nada malo papá, es solo que la clínica entró en huelga y tuve que dejar el trabajo por un tiempo, al menos hasta que arreglen sus conflictos, créeme, es un infierno trabajar en esas condiciones, y yo que soy psicólogo sé lo que te digo.

 

_Te creemos hijo, puedes quedarte todo el tiempo que necesites ya sabes que cuentas con nuestro apoyo, pero anda siéntate, tu padre y yo estábamos a punto de sentarnos a comer un poco de té y galletas.

 

_ Sí mamá, muchas gracias_ dijo André para sentarse en los sillones de la sala y ver la televisión junto con sus padres, mientras María se dirigió a preparar el té.

 

_ ¿Cómo están los barrios de París eh?, ¿algún problema?

 

_ Pues aparte de la clínica, ninguno papá, a veces el vecino de mi piso es algo pesado, se queja de cualquier cosa, no conmigo pero si con la pobre Hilda…, deberías verla, se ve ya tan demacrada, la trato bien cada que puedo.

 

_ Bueno, al menos no tienen problemas directamente contigo_ negó André con la cabeza mientras cambiaba de canal_ hace una semana vino Sofía, preguntó por ti.

 

_ ¿En serio?, cielos debería verla pronto, aunque no hay muchas cosas que tenga que contarle, ¿y Mario?, ¿él ha venido?

 

_Pues, no mucho, hace un mes, pero siguen viviendo en el mismo lugar, no tuvieron grandes planes como tú_ rieron mientras María llegaba con la comida

 

_ ¿Qué pasa caballeros?, ¿qué los tiene tan entretenidos?-

 

_ je, je, nada mamá, mejor dime, ¿ya tienes más plantas en tu jardín?_  dijo mientras tomaba las galletas y servía el té.

 

_ Hace poco me mandaron unas cactáceas, pero quien sabe si sobrevivan el clima de aquí no es el más adecuado para ellas…

 

Platicaron un largo tiempo, hasta que la noche ya había caído muy profundo en el cielo, André se despidió de sus padres para ir a su cuarto y descansar del largo viaje que tuvo. Abrió la puerta y vio cómo su ropa ya estaba puesta sobre la cama, su madre lo conocía muy bien, por lo que solo procedió a cambiarse de muda.

 

Lentamente tomó su suéter y comenzó a despojarse de él y la camisa también, poco a poco desbotonar su pantalón, para al final liberarse de los pesados zapatos, quedando así en ropa interior frente a su espejo. Se miró por unos segundos, y notó que bajo la cortina se estaba reflejando la blanca luz de la luna. Poniéndose de pie tomó las cortinas y las abrió de par en par para así ver como algunos cerros llenos de árboles eran iluminados por la intensa luz que una gran luna llena estaba reflejando hacía su cuarto y hacia su cuerpo, volviéndose al espejo miró a su cuerpo tomado por los rayos de luna, fue un momento muy placentero para André, pocas veces pensaba en su cuerpo, pero en esta ocasión imposible ignorar el narcicismo que incitaba la luna, sin embargo, un frío y extraño ambiente comenzó a caer sobre el cuerpo de André, este giró la mirada solo para ver a lo lejos una silueta, una sombra que lo miraba de manera profunda de entre los bosques. Lo miró fijamente, sus ojos eran ocultos por la sombra de los árboles agitados por el viento, pero André se sentía inmóvil, no podía moverse, solo se preguntaba, ¿por qué lo miraba?, ¿qué hacía ahí?. El extraño hombre comenzó a avanzar entre los árboles, en dirección a André; su cara no era nítida: era alto, y de piel blanca pero imposible de identificar, llevaba una gabardina negra. Poco a poco André comenzó a ver como el sujeto mientras avanzaba, caía lentamente en el suelo y su cuerpo se movía con cierta dificultad. Cuando este finalmente cayó André cerró las cortinas y se metió en las sábanas, tenía ganas de asomarse y ver qué pasó con el extraño hombre pero, si es un criminal no podría defenderse, ni él ni sus padres, pasaron los minutos hasta que poco a poco el sueño le fue ganando la batalla. En sueños André escuchaba un lamento, era una mujer frente a él, iba agachada y con las manos juntas en una sola empuñadura, el lamento que al principio era triste iba aumentando conforme ella iba caminando lentamente, hasta que se detuvo, alzó la mirada, sus ojos azules se llenaron de lágrimas, y su boca roja como la sangre dibujó un gesto de desesperanza, su lamento se volvió un grito de ayuda desesperada, horrorizada cruzó los brazos frente a él como si tratara de protegerse de algo o alguien, en ese momento André despertó y lo único que escuchó fue un profundo aullido que provenía del bosque, se levantó rápidamente de la cama y abrió las cortinas en un arranque de adrenalina, no había algo fuera de lugar, los árboles moviéndose con el viento y la luna en el punto máximo del cielo, los rayos de la luna ya no entraban por la ventana y la noche se sentía muy profunda, el hombre ya no estaba, quizá estaba ebrio, pensó André, pero había algo que no concordaba, ese aullido tan profundo, probablemente no pudo haber sido generado por un lobo común, además es demasiado extraño que en esa zona de Lyon haya especies de lobos, a la vista, ninguno se pudo observar en el bosque.

 

Poco después André volvió  dormir sin soñar, solo preguntándose, si le volvería a pasar una experiencia tan lúgubre como la de esa noche.

Notas finales:

Un poquito de suspenso je, je, aún hay más que contar para este principio, esta introducción, pero pronto comenzará lo romántico, el suspenso, el ¿horror?...


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).