Sasuke: Si quieres nos podemos conocer de nuevo, igual que en secundaria, cuando jugábamos videojuegos, basquek e íbamos al cine a ver pelis de acción. Puede que tu no recuerdes, pero yo lo haré por los dos. Déjame volver a conocerte Naruto, déjame conocer a todos nuestros hijos.
Tsukasa se interpuso entre ese tipo y su papi, pues no dejaría que nada llegase a perturbar la armonía que tenían, no quería un padre, no lo necesitaba y su papi solo sufriría.
Tsukasa: No hace falta que se conozcan, nos vamos.
Ren, el segundo mayor, de pelo negro largo, amarrado con una coleta y dos mechones a cada lado de la cara, con un peinado estilo samurai y ojos azules, puso su mano sobre el hombro de su hermano mayor.
Ren: Cálmate Tsukasa.
Naruto apartó suavemente con la mano a sus hijos y miró fijamente a Sasuke, con ojos valientes y curiosos, pero a la vez con algo de temor.
Naruto: Yo también quiero conocerte Sasuke Uchiha, pero tendrá que ser en otro momento, hoy han sido muchas experiencias diferentes para nosotros, y debemos asimilarlas, te prometo que pronto nos veremos de nuevo.
Sasuke: Tranquilo, lo comprendo, ha sido un día duro, ve y descansa.
Los Uchihas se fueron primero de la oficina.
William: Deberían leer las cartas que les entregue calmadamente.
Sasuke: Así lo haremos, gracias William.
Se despidieron de él. En la puerta de abajo, estaban estacionados 3 coches, 2 de los cuales eran de la familia Uzumaki y el otro de Sasuke, ya que vino en el suyo propio. Todos estaban subidos en sus coches, menos Sasuke y su pequeño hijo Noa.
Noa: Papa, quiero volver a verte en poco tiempo.
Sasuke: Descuida, no dejare de verlos.
Noa: (susurro) Papa, aquí esta nuestra dirección, mi teléfono y el de mi papi, así podrás comunicarte con nosotros cuando quieras.
Le dio un papelito donde venía indicado todo lo que había dicho, no dejaría que nadie se lo robase, aquella era una forma seguro de saber donde estaba su familia y poder hablar con ellos.
Sasuke: Lo cuidare con mi vida, y lo memorizare por si algo llega a pasar.
Tsukasa: Noa, date prisa.
Dijo el mayor subido en uno de los coches, con su tono autoritario.
Noa: Voooy!! (susurro) Papa, ¿puedo llamarte mañana?
Sasuke: (susurro) Claro que puedes, incluso si me llamas todos los días, estaré feliz de que lo hagas.
Noa: ¿¡De verdad!?
Sasuke: (susurro) Sip, pero vas tener que mantenerlo en secreto de tu hermano Tsukasa.
Noa: (susurro) Lo hare, será nuestro secreto papa.
Lo abrazo por última vez antes de que se fuera al choche, besó su frente tiernamente, pues no quería que se fuera nunca, pero así era.
Sasuke: Cuídate Noa.
Se despidieron con una sonrisa radiante. Sus ojos negros veía como se subía al carro, y los dos coches se iban. Noto como uno de sus hijos lo observaba anhelante, pero como si no se pudiera acercarse a él por alguna razón. Su pelo negro era algo largo, solo sobrepasaba un poco los hombros, estaba todo revuelto, era gracioso verlo, le daban ganas de desordenarlo aun más.
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Llegó a la mansión Uchiha y de nuevo se encerró en su despacho, que por suerte también era insonorizado. Podría llamar desde allí a Noa sin ninguna preocupación de que lo escuchasen. Se sentó en su sillón negro y sacó de un bolsillo de su chaqueta la carta de su abuelo Madara.
Carta:
Hola mi querido nieto Sasuke. Se que ahora debes sentirte feliz, triste, anhelante, enojado, frustrado. No puedo imaginarme tu sufrimiento en estos momentos, así como no pude imaginar cuan grande a sido todos estos años al lado de tu insufrible esposa, si le pudiese llamar así.
No te dije nada porque tu padre tenía amenazados a Naruto y su familia, lo sabes, y si quería que no les pasara nada tuve que esperar. Primero tenía que quitarles de encima a los que vigilaban sus pasos, lo cual llevó algún tiempo, pero al final luego de un par de meses al fin pude ir a ver a Naruto, para pedir disculpas en tu nombre y explicarle por qué terminaste con él. Pero no me imaginé encontrarlo en el Hospital, postrado en una cama y en coma... Y menos embarazado de ti, así que tuve que ponerlos a resguardo.
Nunca dudé que fueran tus hijos, como me describías a Naruto sabía que era alguien honesto y fiel, por lo que aunque no lo conocía en persona decidí confiar en él y en ti. Y como verás tuve razón...
Me llevó algo de tiempo poder ayudarlos pues te darás cuenta que Menma y Deidara son sobreprotectores, pero con el tiempo y saber el peligro que su hermano menor y sobrinos podrían correr decidieron que lo mejor era aceptar mi ayuda, por lo que todos menos sus padres que viven en el campo aceptaron mudarse conmigo a mi casa.
El resto ya lo sabes, pero hay algo más importante de lo que te tienes que encargar.
Tiempo después que Naruto y su familia vinieran a vivir conmigo te envié una carta para informarte brevemente lo que había pasado, se que pude haberte hecho una llamada pero me gustaban más las cartas... Esperé tu respuesta o alguna llamada tuya pero nada, eso me pareció extraño así que te llamé al celular varias veces, incluso al numero de la mansión, pero nada.
No sabía por qué no te comunicabas conmigo, hasta se me ocurrió que quizá alguien más pudo haber leído la carta. Pensé que quizá tu padre lo hizo, solo así me explicaba que no te comunicaras, así que contacté a un viejo amigo que trabaja en la policía y me ayudó a investigar.
Hizo muchas averiguaciones con algunos criados y vigilancias, incluso revisó su basura, solo así descubrió que la carta estaba ahí hecha pedazos con todo y sobre. Analizó los pedazos junto con el sobre y ¿Qué crees? Las huellas sobre la carta, a parte de las mías, eran las de tu esposa.
Sakura lo sabía, siempre lo supo, por eso no te enteraste. Ella leyó la carta siendo que yo la había escrito e iba dirigida hacia ti, no podía ser más indiscreta. No me extrañaría que cada vez que te llamaba al celular ella colgara todas las llamadas y borrara el historial... Te engañó Sasuke, te mintió, por ella no pudiste conocer a tus hijos sino hasta ahora, no los has podido ver crecer, algo que realmente me duele.
Espero le hagas pagar todas y cada una de las maldades que ha hecho.
Debes estar pensando "¿Por qué no pudo él venir en persona a decirme?" o "Si llamó a la casa ¿Cómo es que ningún sirviente me avisó?" Pues la culpa la tienen tu esposa y el padre de ella. Ella le contó a su padre lo que estaba pasando, y ninguno quería que por la aparición de tus hijos biológicos su matrimonio se acabara, a ambos les venía bien estar emparentados con los Uchiha.
El padre de Sakura vino a mi casa personalmente a amenazarme con hacerle daño a tus hijos si se enteraba que me aparecía por ahí, si hasta me puso vigilancia, por lo que no tuve más opción... Y aunque me las arreglé para mandar a alguien a hablar contigo nunca estabas, siempre era lo mismo, estabas de viaje por no se que razón. Me imagino que nadie te pasó llamadas mías porque Sakura ordenó que dijeran que no estabas.
Ahora que sabes la verdad debes hacer justicia, y lo primero es divorciarte de esa desgraciada, no quiero que estés sufriendo más a su lado sin ningún sentido.
Tienes suerte, aunque el matrimonio se haya consumado- más que por orden de tu padre que por gusto- no tuvieron ningún hijo y pasaron ya 18 años, no tienes motivos para no divorciarte. Ella deberá aceptar el divorcio de forma pacífica, aunque de estar vivo créeme que yo mismo me encargaría de hacerla pagar, que sufra por todo el daño que ha hecho.
Lamento no haber hecho más.
Como ves tus hijos son todos diferentes, Tsukasa es el mayor, es muy serio y responsable. Tan o más sobreprotector que tus cuñados. Vas a tener que ser muy paciente y no dejarte pisotear por él, suele hacer eso cuando no confía, así que persiste y lo lograrás.
Ren es el segundo mayor, a veces pienso que en él esta el alma de un samurai del pasado, sabe luchar con espada y utilizar el arco, al igual que tu cuando eras joven. Es más tranquilo que su hermano mayor y es muy confiable. No creo que tengas ningún problema con él.
Hayato es el de en medio, tiene casi un ojo tapado por su pelo, es muy tranquilo, demasiado, le encanta leer libros, siempre le veras con uno en la mano, además es un buen domador de aves, suele tener un halcón a su alrededor o en su cabeza, es muy gracioso verlo así, además es bastante despistado. Parece que en realidad no le importa nada a su alrededor, pero si lo hace.
Tora es el cuarto hijo, es uno de los donceles, los otros tres mayores son varones. Tora a pesar de ser un cabezota y tener una melena que no se deja peinar, puede llegar a ser muy dócil, pero antes créeme que te puede morder, ten cuidado, yo ya he recibido varios de sus mordiscos. Al principio puede que se haga el difícil, pero si quieres a sus gatos y ellos a ti, te irá bien.
Noa es el pequeño de todos, es otro doncel, aunque cualquiera se daría cuenta. Seguro ya lo conociste, siempre preguntaba por su padre y me rogaba, a veces le conté alguna cosa y empezaba a llorar de la emoción. Te aseguro que siempre te amo desde el corazón, aunque no te conociera. Suele andar subido a los árboles, a pesar de ser pequeño en estatura que no te engañe, es muy bueno en basket, y con Naruto suelen hacer una comida deliciosa.
Espero que a partir de ahora todo te vaya bien y el destino cambie de una vez tu suerte. Se que cuidaras a Naruto y a tus hijos. Te quiero mucho mi querido nieto Sasuke.
Atentamente Madara Uchiha.