Las imágenes se sucedían una a otra sin descanso:
El impacto del coche de sus padres contra el árbol.
La moto deteniéndose a un costado y de ella bajando el Soldado del Invierno.
El Soldado acercándose al coche
El Soldado extrayendo a su moribundo padre y sus palabras sorprendidas "Sargento Barnes" para después morir por los golpes propinados en su rostro.
El Soldado ignorando las súplicas de su madre "Howard... Howard..."
El Soldado devolviendo a Howard y rodeando el coche para terminar con la vida de su madre, ahorcándola.
El Soldado disparando a la cámara que grabó todo.
El video acabó y él solo deseaba una cosa:
Acabar con el hijo de puta que asesino a su madre.
Se volteó en dirección a Bucky Barnes o el Soldado del Invierno o quién diablos fuera en ese instante, dispuesto a todo, pero alguien más le detuvo, tomándole del brazo y evitando que atacara.
—¡No, Tony!—Pidió Steve, con semblante angustiado, pero no por él... No, por supuesto que no, estaba angustiado por su amigo.
—¿Lo sabías?—Preguntó, ya intuyendo la respuesta y al mismo tiempo implorando porque no fuera verdad.
Steve se mantenía estoico ante su interrogatorio.
—No sabía que él había sido—Respondió después de unos segundos y Tony deseó poder creerle, pero no lo hizo. Tony tenía la certeza de que Steve sí sabía de esto.
Lo supo todo el tiempo, y aun así, decidió ayudar a Barnes.
¿Cómo... Cómo pudo?
—¡No me salgas con mentiras Rogers! ¡Lo sabías!—Replicó con rabia contenida. Su última frase, más que pregunta fue afirmación. Y a pesar de ello, Steve tuvo el valor de responder.
—Sí
Fue la llana palabra de dos sílabas que salió de la boca de Steve y que le rompió el corazón.
Y no pudo soportarlo, se lanzó a atacar a Barnes, quien se había mantenido en silencio durante su conversación. El otro intento defenderse, más fue imposible.
Barnes no le agradaba, para empezar por ser una de las causas por la que los Vengadores se dividieron y Steve se fue. Y para terminar, esto.
¡Mató a sus padres! ¡Por amor a todo lo sagrado!
Así continuó, le levantó al tomarle del cuello y golpearle contra la pared. Le dispararía en la cara con el reactor de su mano. Pero este le detuvo, comenzó a aplicar fuerza en el guante y por poco lo rompe.
Tony supo que no sería fácil. Mucho menos cuando el escudo del Cap le golpeó por la espalda y originó el derrumbe parcial de la habitación.
Cuando se reincorporaba, escuchó claramente a Steve.
—¡Corre!
Oh Steve. La angustia evidentemente le ganaba y eso era palpable en su tono de voz y en la manera en que defendía a Barnes.
Se reincorporó y le vio ahí. Frente a él. Estaba en posición de ataque y el escudo en ristre.
—No fue su culpa Tony, HYDRA controlaba su mente.
No Steve, no. Por favor, deja de implorar por tu amigo. Ya no lo hagas más. Lo único que logras es incrementar las ganas de venganza de Tony.
—Muévete—Para Tony era bastante obvio que no importaba cuantas pruebas se le colocaran frente a Steve. Este no cedería en su objetivo. Y él tampoco. Por lo que ya no discutió, simplemente demandó que se moviera.
Esto ya no era por el Acuerdo.
Esto se había vuelto personal.
Así que ignoró a Steve y le sobrevoló con la intención de alcanzar a Barnes más el Súper Soldado logró detenerle al tomarle de la bota.
—¡Que no fue él!—Gritó desesperado Steve mientras golpeaba con fuerza su bota, ayudándose del escudo. Tony se defendió y alejó al Cap. FRIDAY avisó sobre el daño a su sistema de vuelo. Pero no se detendría. No de nuevo.
Le dio alcance a Barnes y después de intercambiar más golpes, Steve intervino de nuevo.
¿Porque Steve? ¿Por qué? Se preguntaba Tony en su fuero interno, escuchándolo advertirle a Barnes que "Seguirá en la pelea, corre".
Que bien le conocía. Y eso no disminuía las ganas de gritar y de acabar con Barnes y con Steve si seguía entrometiéndose.
Todo eso dejo de importar en cuanto le tuvo entre sus brazos, comenzando a asfixiarle...
Tal y como él había hecho con mamá.
—¿Al menos recuerdas a mis padres?—Le preguntó con esa rabia que le hacía bullir todas y cada una de sus terminales nerviosas.
—A cada uno de ellos...—Respondió con dificultad debido a la falta de aire. Igual, no necesito más porque nada de lo que dijera cambiaría los hechos. Había matado a sus padres. Y ya no importaba si había sido Bucky Barnes o El Soldado del Invierno. Lo había hecho y eso le bastaba.
—Tony, esto no cambiará lo que paso...
No, no lo haría, pero le brindaría la satisfacción.
—Todo el tiempo fue por él ¿no?—Decidió preguntarle y la expresión impertérrita de Steve no necesito confirmación—Por eso tu negativa a firmar los Acuerdos.
Steve le miró fijamente, reflejando por primera vez pesar.
—No Tony, esto fue por nuestro derecho a elegir.
—¡Patrañas! ¡Todo el tiempo fue por el soldado zombie! ¡¿Es que no lo ves?!—Gritó al perder por completo la paciencia—¡Separaste al equipo! ¡La mitad de nosotros está en prisión! ¡La otra mitad duda de lo que hace! ¡Estas peleando a golpes conmigo por él!—Señaló a su espalda, en donde había dejado a Barnes inconsciente y entonces, fue evidente que había cometido un error.
Porque no se esperaba esto. O al menos, pensó que no llegarían a este punto. Ambos le golpeaban en movimientos tan sincronizados que Tony creyó lo habían ensayado.
Y la furia que había sentido antes, regreso con más fuerza y le ayudo a zafarse de ellos. Primero con Steve a quien mando hasta el otro lado de la fría habitación, cosa que por lo visto no le gustó a Barnes porque los golpes fueron devueltos con renovada energía, tanta, que casi le arranca el reactor del pecho. Trató de alejarlo y la única forma de hacerlo, fue arrancándole de tajo el brazo metálico. Steve ya se había incorporado y ahora él le atacaba con un enojo que nunca antes vio. Le tenía contra la pared y cada mueca de furia proveniente de Steve, para Tony era un recordatorio más de que nunca fueron amigos y mucho menos, pareja.
Al menos, no para Steve.
Su IA le dijo lo evidente "No puede vencerle mano a mano", entonces respondió "Analiza su patrón de pelea" mientras seguía recibiendo los golpes, golpes brutales de parte de Steve. Cuando FRIDAY avisó de que estaba listo, su despecho ganó. "Hay que destruirlo" fue todo lo que dijo. Así que le detuvo y sacó volando el escudo y le disparó en el pecho. No lo dejo recuperarse y continúo golpeando. Le volvió a disparar con el propulsor y le hizo caer de rodillas. Detrás de Steve, se hallaba tirado Bucky.
—Es lo único que me queda...
Las palabras se clavaron como cuchillos. ¿Entonces que había sido él? ¿No fue su pareja? ¿Solo fue alguien con quien pasar el tiempo?
—Yo te amaba—Y le propinó otro golpe más en su mejilla izquierda, lo levantó y lo arrojo contra las columnas del lugar—Quédate ahí, última advertencia—Su voz salió fría. Aún más de lo habitual al hablar con el casco puesto.
—Podría hacer esto todo el día—Le respondió el otro poniéndose de pie de manera tan terca.
Estaba dispuesto a dispararle con el reactor, pero la distracción fue efectiva. Bucky le tomo por el tobillo de la armadura y él solo pudo voltearse a propinarle una patada en la cara, momento que aprovecho Steve para levantarle con todo y armadura, arrojarle contra las mismas columnas en las que había chocado y comenzar a golpearle a puñetazo limpio para rematarle con el escudo. Termino por romperle el casco y después el reactor del pecho.
Y fue ahí cuando se miraron de nuevo.
Y supieron que habían llegado lejos.
Steve se puso en pie de nuevo, arranco su escudo y fue en ayuda de su... amigo. Dejándole ahí tirado.
—¡El escudo no te pertenece! ¡No lo mereces! ¡Mi padre fabrico ese escudo!
Tony sabía que eso último fue simple despecho. Despecho por no poder hacerle sufrir como él lo estaba haciendo ahora mismo. Steve ya no volvió a mirarle, solo detuvo su andar con Barnes colgado a su izquierda y aun dándole la espalda, tiro el escudo.
Lo tiró como si no valiera nada.
Y salió de ahí.
OoOoO
Si firmamos esto, estamos entregando nuestro derecho a elegir.
Todo lo que hiciste durante esos años, no eras tú. No fue tu elección.
Desde el primer instante en que los Acuerdos de Sokovia llegaron a sus manos, supo que no lo firmaría. Perder la libertar de elegir, tenía resultados catastróficos.
Él lo supo de primera mano al reencontrarse con Bucky.
Bucky, la persona que más amaba y a la que era más cercano, le robaron su libertad.
Bucky, alguien que fue forzado a perder su derecho a elegir, termino convirtiéndose en otra persona.
Termino por convertirse en alguien peligroso.
Por eso, cuando el Secretario Ross, Tony, Rhodey, Vision y Nat le dijeron que firmara, él pensaba en Bucky.
Y en lo rota que una persona podía quedarse sin su libertad.
Y lo destruidas que las relaciones podían volverse cuando no había libertad.
Y en lo peligrosas que podían convertirse las personas sin su libertad.
Pensó en todos esos años en que Bucky no tuvo elección.
Así que no fue difícil tomar y defender su postura, hasta las últimas consecuencias. Incluso si eso implicaba renunciar a ser todo lo que el Capitán América representaba.
Ya lo había hecho una vez, cuando supo que Bucky estaba vivo.
Dejo de ser el Capitán América, para probarle que era Steve Rogers. Para probarle que no pelearía con él, porque era su amigo, era su casa, era su mundo.
Por lo que renunciar de nuevo, renunciar a todo por Bucky, renunciar a ser el Capitán América, renunciar a su posición, renunciar a su amistad y relación con Tony, nunca estuvo a discusión.
Porque aun cuando no tenía nada, tenía a Bucky.