Que separo un joven y dulce amor,
Él tuvo que ir al frente a luchar…
- entiende Shu, debo partir a la batalla, para asegurar tu bienestar y el de nuestra nación-
- ¿por qué Yuki?, por favor no me dejes- no pudo seguir hablando, su palabras se oprimieron por un nudo en su garganta y amenazaban con hacerse presente en formas de lagrimas, al notar esto Yuki decide, abrazarlo, haciendo rechinar el metal de su armadura, el abrazo fue tiernamente correspondido por Shuichi, mas el momento de felicidad duro poco, pues un emisario del rey llego para llevarse a los caballeros a la batalla, Yuki sin pensar montó su caballo dejando atrás a un triste Shuichi.
Fue una lanza la que atravesó
Mil sentimientos y un corazón,
Él murió de pie, nunca regreso
La lucha era ardua pero el recordar esos bellos ojos le hacían no desfallecer, hasta que…
- EIRI-SAN CUIDADO…-
Escucho ese grito y sintió como un agudo dolor lo partía en dos, una lanza lo atravesó y unas lagrimas rodaron por su pálido rostro, no le dolía tanto el morir, su más grande dolor se centraba en el hecho de que nunca más podría sentir esa piel que lo volvía loco, ni ver esas hermosas facciones, sus ojos color violeta, su boca roja que invitaba a un beso en cada palabra, su sedoso cabello rosa… nunca más…¿por Dios, por qué?.
Miró el cielo tratando de encontrar una respuesta, mientras la vida se le iba en cada suspiro.
Vuelve a mí, y dame tu mano al andar,
Vuelve a mí, y mira mis ojos llorar…
En la sencilla casa de un reino lejano, una mirada enfocada tristemente al horizonte, pedía con todas sus fuerzas por el bienestar de su amado mientras unas silenciosas lágrimas nublaban su vista.
- dile al sol que haga volar tu calor,
Hacia nuestro hogar,
Para que vuelvas a mí-
Su mente se encontraba en otro lugar lo único que hacia era recordar a su querido caballero y como este tubo que partir dejándolo abandonado, él aun era menor de edad y por eso no fue solicitado al frente de batalla…
Ella no olvida aquel frió adiós,
Se helo su sangre y tembló su voz,
Mientras se alejaba su joven amor…
Por que se tubo que ir si había tantos caballeros, que el rey podía mandar a la batalla, pero no, tubo que ser justo el,¿ por Dios, por qué?, mirando por el horizonte se asomaba el sol, así que se paro de su asiento y se encamino al patio de la casa…
Cuentan que todas las mañanas va,
A conversar con un viejo árbol gris,
Hay le habla de su gran soledad…
Se arrimo al árbol que cobijo su amor por primera vez, debajo de aquel silencio espía se confesaron su amor, y lo sellaron con un beso…
- hola amigo, tus hojas se ven bien…, sabes lo extraño mucho, ¿por que se tubo que ir?, por favor Yuki vuelve, no sabes lo mucho que te extraño mi amor- dijo mientas apoyaba su mano en el grueso tronco del árbol
Vuelve a mí, y dame tu mano al andar,
Vuelve a mí y mira mis ojos llorar…
Sintió a lo lejos el ruido de los cascos de un caballo que venia muy apresurado a su encuentro, era un jinete emisario del rey, sintió como su corazón se helaban de golpe, el sujeto desmonto su caballo y se aproximó con paso firme asía él
- Shuichi Shindo, familia de Yuki Eiri-
- Si soy yo…- dijo un hilo en su voz
- Le trigo un mensaje del frente de batalla- extendió su mano
Recibiendo el pergamino, que decía algo así
“Shuichi Shindo, tenemos el dolor de notificarle que el soldado Yuki Eiri, a sido muerto en combate, murió de pie como un digno caballero, sus restos no le serán devueltos por que cayeron en tierra enemiga, atendiendo a su comprensión,
El rey Uesagi”
Dile al sol que haga volar tu calor,
Hacia nuestro hogar,
Para que vuelvas mí
Sintió que las fuerzas le fallaban y que caía en un agujero sin fundo del que no quería salir…
…un agudo dolor en su pecho le hizo abrir los ojos, se encontraba en la cama, seguramente se desmayo y el emisario del rey le arrastro hasta dentro de la casa
¿Dónde estas amor?
¿Dónde duermes hoy?
Dame el beso aquel,
Que me digo adiós
Me digo adiós
Adiós
Por que todo era tan injusto no lo podía creer, de nuevo se encontraba en ese solo y vació mundo, sin Yuki la vida no tenía sentido…
Vuelve a mí, y dame tu mano al andar
Vuelve a mí, y mira mis ojos llorar…
Se incorporo sentándose en la cama que nunca más compartiría con Yuki…
Dile al sol que haga volar,
Tu calor hacia nuestro hogar
Para que vuelvas a…
Un fuerte viento azotó la puerta dejando ver en el umbral a ¿Yuki?, no esto no podía ser, su mente le estaba jugando una mala pasada
- hola Shu como estas, me extrañaste-
- ¿Yuki?, pero como, me acaba de llegar una carta del rey diciendo que habías muerto en la guerra y …-
- no creas en todo lo que te dicen Shuichi, ven aquí- digo abriendo sus brazos y un muy emocionado peli-rosa se cobijo en ellos
- nunca más nos vamos a separar Shu, te lo prometo- estas palabras murieron en un beso profundo, que expresaba el eterno amor
Vuelve a mí, y dame tu mano al andar,
Vuelve a mí, y mira mis ojos llorar…
A la mañana siguiente fue hallado el cuerpo de Shuichi tendido en el umbral de la puerta, se desconocieron los motivos de la muerte pero había una sonrisa tranquila en su rostro…
… el rey se sintió responsable y mando a forjar dos tumbas una frente a la otra, en una puso a Shu y cuando recupero el cuerpo de Yuki, le puso en la otra para que cuando llegara el juicio final y los cuerpos despertasen lo primero que vieran sea el rostro del ser amado…
Dile al sol que haga volar,
Tu calor hacia nuestro hogar,
Para que vuelvas a mí.
Buaaaaaaaaa por fin terminado, este fic esta dedicado a un amigo fan acérrimo de la oreja de Van Gogh, para ti Eduardo,
Shu murió por que le prometí a Ana-chan y Coñeñe-chan que no iba a separar a esta pareja, doy a entender que Yuki era el hijo del rey, y este lo mando a morir en batalla, por eso en ultima acción de amor recupero el cuerpo de su hijo, espero review por favor para saber que no me quedo tan mal, besos y cariños se despide Yuki Kunimitsu
Para mayor información vean mi correo yuki_kunimitsu Hotmail.com