-¡¿Y si lo secuestraron?!-preguntó un histérico Minseok.
-¡No!-respondió igual de alterado Chen mientras seguía insistiendo con su móvil-Contesta, contesta-suplicaba.
-¡¿Y si esta en el hospital gravemente herido?!-soltó nuevamente Minseok.
-¡No!-volvió a responder-¡Luhan contesta de una maldita vez!-casi le gritó al buzón de voz del móvil de su hermano.
-¡¿Y si...?!
-¡Seguro los alienígenas tienen a mi baby deer!-lloriqueó Chen.
-¡¿Cómo puedes salir con una tontería así de grande ahora?!-exclamó muy enfadado Min.
-¡¿Y por qué mi idea tiene que ser una locura pero que tú digas que lo mataron está bien?!-inquirió histérico.
-¡Deja de ser un tarado y haz algo!-exigió sujetándolo por el cuello de la camisa mientras agitaba violentamente el cuerpo de Chen para que moviera su trasero y recuperará a su pequeño-¡Haz algo, llama a la policía!-ordenó.
Chen asintió sin chistar y nuevamente tomó el teléfono y marcó rápida y costosamente el número de la policía, todo estaba dándole vueltas por culpa de Minseok y la forma en que lo había agitado cómo si fuese un muñeco de trapo.
-Estación de policía, ¿cuál es su emergencia?
-¡SALDRÁ CONMIGO!-gritó un emocionado Luhan que entraba repentinamente dando saltos de alegría.
Minseok y Chen gritaron debido a la sorpresiva y poco sutil entrada de Luhan que brincaba de un lado a otro con la sonrisa más grande que pudiera tener en su cara, los otros dos se miraron sin comprender absolutamente nada, la voz de la operadora seguía hablándoles pero ninguno reaccionaba y únicamente miraban a Luhan saltando y dando vueltas cual bailarina de ballet por todo el lugar, eso hasta que recordaron lo preocupados que Luhan los había tenido y la preocupación fue remplazada por el enojo.
-¡¿Dónde demonios has estado?!-le exigieron saber ambos al mismo tiempo.
-Consiguiendo que el chico que me gusta salga conmigo-respondió sin borrar su radiante sonrisa.
-Ya se volvió loco-dijo Minseok con cara de estar asustado.
-¡Te lo dije, te dije que este no era Luhan, es un clon del FBI o de los alienígenas!-señaló a Luhan que entonces fruncía el ceño-¡Habla clon extraterrestre, dinos donde tienes a mi baby deer!-exigió saber agitando el cuerpo del menor.
-¡Deja de decir estupideces Chen, soy yo!-dijo dándole un empujón para que lo soltara.
-No te creo-lo miró recelosamente y Luhan suspiró pésimamente.
-Cuando conociste a Minseok en la cafetería tú…
-Okay, okay si eres tú-dijo alarmado apresurándose a taparle la boca a su hermanito.
-Chen-llamó seriamente Minseok.
-N-no le hagas caso, no sabe lo que dice, es solamente un adolescente confundido por la comida chatarra y la televisión-rió nervioso-¿Q-qué decías acerca de un chico que te gusta?-se apresuró a preguntar para cambiar de tema.
-Oh es verdad-sonrió enormemente-¡Aceptó salir conmigo!-chilló alegremente.
-¿A sí?-masculló Chen cruzándose de brazos en plan de hermano celoso-¿Y quién es? ¿Qué edad tiene? ¿A qué se dedica? ¿Dónde se conocieron? ¿Sus intenciones son buenas? ¿Te ama o únicamente quiere sexo? ¿Es alguien de confianza? En una escala del cero al diez, donde cero es; "horrible" y diez es; casi "tan sexy como Chen, mi ardiente hermano mayor", ¿qué tan guapo es?
Luhan lo miró mal por todas esas preguntas, sobre todo la última que era una estupidez total además de la mentira más asquerosa del mundo, bufó por la actitud del mayor y se cruzó de brazos.
"Ni que fueses papá."
Le restó importancia a las tonterías de su hermano mayor al final y sin borrar su sonrisa tomó las manos de los dos mayores y los llevó a ambos a que se sentaran al sofá para sin demora comenzar a contarles absolutamente todo acerca de cómo había conocido a Sehun.
Tuvo que lidiar con la cara de desaprobación de su hermano y cuñado cuando les dijo donde había conocido a Sehun, del como Chen se rió por media hora por lo que había pasado una semana atrás en la tienda luego de su primer encuentro con Sehun y finalmente con la mirada de preocupación de ambos cuando les contó lo que había pasado esa noche.
-¿Te dio un mes?-preguntó Chen algo desconfiado por todo eso.
-Sí pero voy a lograrlo-aseguró mostrando en alto su dedo pulgar en señal de confianza.
-De alguna forma la descripción de ese chico me suena de algo, ¿cómo dices que se llama?-preguntó curioso.
-Oh Sehun-respondió sintiéndose emocionado solamente con mencionar su nombre, su bello nombre.
-¿O-Oh Se-Sehun?-inquirió repentinamente asustado Minseok.
-Sí-asintió feliz.
-¿Lo conoces Minnie?-preguntó Chen al ver la expresión de su novio.
-Sí-murmuró.
-¡Genial!-exclamó Luhan-En ese caso Minnie hyung podrá ayudarme con él-sentenció, porque no estaba preguntando, no, para nada. Minseok lo haría sí o sí porque de lo contrario Chen iba a enterarse de esa vez cuando el tipo de la pizza le dio su número y él no lo tiró a la basura, sí, recurriría al chantaje y no le importaba.
-No Luhan, tú no entiendes-negó con la cabeza-Ese chico no es bueno para ti además de que te lleva cuatro año.
-¡¿Cuatro años?!-exclamó horrorizado Chen poniendo una mano sobre su pecho de forma dramática.
-La edad no importa, ya no estamos en la edad antigua-bufó Luhan por la reacción ajena.
La edad era lo de menos para él, además de que Luhan siempre había tenido una debilidad por los hombres mayores y Chen lo sabía, todos sus novios o amores platónicos habían sido mayores que él por uno o más años, como su profesor de inglés en secundaria, ese hombre sí que era muy guapo, no como Sehun pero lo había dejado deslumbrado en su momento.
-De cualquier forma él no te conviene-repitió Min trayéndolo de vuelta al mundo real.
-¿Por qué?-inquirió con el ceño fruncido.
-Luhan no hay posibilidad de que tú puedas conseguir lo que quieres aunque dejemos de lado que es mayor que tú, aunque no lo fuera lo que tú quieres sería igual de difícil empezando por lo que ya nos dijiste, él es heterosexual. Además... él es muy difícil de tratar debido a su nefasta personalidad, es arrogante, sarcástico, cruel, egoísta, perverso, siempre está de un humor del infierno y la lista sigue y sigue con solamente cosas malas. Él es alguien que nadie quiere tener cerca y para Sehun todo mundo es indeseable y molesto, él ni siquiera tiene amigos o bueno sí, tiene uno en común conmigo pero Baekhyun simplemente le habla porque es como su familia y porque él quiere lo mismo que tú-Luhan frunció el ceño ante ese último comentario.
-Puedo hacerlo-afirmó muy seguro de sí mismo.
-No Luhan, y me temo que desde ya él está jugando contigo-le dijo con pena.
-¿De que hablas?-preguntó haciendo un puchero de forma inconsciente.
-Él le hace lo mismo a todas las chicas con las que sale, únicamente un mes y después las abandona, así como contigo ahora-explicó con pena, no le gustaba estar diciéndole eso a su pequeño pero temía por él.
-Pero... -murmuró, se negaba a creerlo y ni siquiera sabía el porqué si ni siquiera conocía bien a Sehun-Algo debe haber... lo sé...
-No Hannie, aléjate de él ¿sí?-pidió suplicante.
-No… yo...
Chen vio el difícil momento que Luhan tenía, todo lo dicho por su bello novio era suficiente para que le prohibiera a Luhan mirar a ese tipo pero había algo en la mirada de Luhan que no había visto antes y aunque más tarde iba a arrepentirse ya había tomado una decisión muy idiota seguramente.
-Lu-llamó suavemente Min-No hay...
-Luhan tiene razón-interrumpió Chen cortando las palabras de su novio-Algo debe haber-afirmó.
Eso lo hizo ganador de dos tipos diferentes de miradas, la de Luhan llena de esperanza mientras que la de Minseok no era más que reproches silenciosos que lo único que reflejaban eran sus deseos de picarlo en pedacitos.
-Tú lo dijiste Min, ese tipo no sale con hombres pero aceptó dejar que Luhan lo intentará así que... yo creo que es por algo-aseguró.
-Exacto, Jongdae sí me entiende-dijo un muy feliz Luhan que nuevamente ya revoloteaba feliz por todos lados.
-Jongdae-llamó entre dientes a su muy idiota novio-¿Podemos hablar?
Chen sabía que no tenía opción pero antes de poder decir que sí, su novio ya lo había tomado del brazo y lo arrastraba directo a la habitación, era seguro que iba a reclamarle lo dicho pero tenía una razón y rezaba porque Minseok la entendiera o le esperaban unos largos meses solo con su mano amiga.
-¿Sé puede saber qué...?
-Lo sé-lo cortó rápidamente-Sé lo que dirás pero de verdad tengo una buena razón para lo que hice.
-¿Y cuál es?-exigió saber mostrándole a Chen su ceño fruncido todavía.
-Bueno por una parte es que de verdad creo que algo de lo que dije es cierto-explicó mientras se rascaba la nuca en un gesto nervioso.
-Jongdae-gruñó amenazadoramente.
-Pero también es porque si me equivoco Luhan podrá darse cuenta por sí mismo que no vale la pena y va a dejarlo-aseguró seriamente.
-Pero ese chico va a jugar con él y...
-Y será una buena lección para Luhan, tú sabes cómo es él, es tonto, necio como una mula y solamente aprende a la mala así que debemos dejarlo intentar esto, es lo mejor-aseguró.
Minseok no respondió y se quedó mirándolo fijamente, su novio tenía razón y eso lo comprendía bien pero no podía no preocuparse por Luhan aunque era obvio que tendría que hacer un gran esfuerzo.
-Está bien-farfulló aún inconforme.
-Ese es mi Minnie-festejó dándole un gran abrazo a su lindo y comprensivo novio.
Para el nuevo día Luhan se levantó muy temprano y con una sonrisa casi psicópata estampada en su rostro, Chen miraba algo nervioso a su hermano que no borraba por nada su sonrisa, se despidió exactamente cuando el reloj marcó las 08:00 am y fue directo al pequeño café que le quedaba de paso.
Había leído anoche en internet algunos tips para pode conquistar a un hombre como Sehun y bueno sí, eran dirigidos más bien para las chicas pero algunos podrían servirle así que iba a usarlos.
Tip 1: Muéstrale que te preocupa.
Los hombres de carácter frío o indiferente tienden a ser muy independientes pero internamente les gusta que te preocupes por ellos, prueba con pequeños detalles, te aseguro que él los apreciara.
No estaba seguro de sí a Sehun le gustaba el café pero la intención era lo que contaba y seguro que a él iba a encantarle el gesto o por lo menos eso era lo que no dejaba de repetirse mientras iba de camino al subterráneo.
Lo que en realidad no fue absolutamente encantador fue lo difícil que fue mantener a salvo el café para así poder entregárselo a él; pero cuando el vagón se vacío considerablemente y lo vio entonces lo supo, fue ahí que supo que sus esfuerzos valieron la pena.
Él también lo miró y Luhan pudo haber muerto ahí mismo ya que en su tonta mente de chiquillo ilusionado, Sehun le sonreía y no tenía esa cara de fastidio, se sentía caminando en las nubes mientras se acercaba a él para entregarle su pequeño y modesto obsequio pero se trataba de él y Luhan ya debería saber que nunca nada le salía bien.
Y fue ese preciso momento que el tren decidió ponerse en marcha con un movimiento brusco que lo hizo perder el equilibrio, el vaso de café salió volando aterrizando finalmente sobre la cabeza de Sehun que se quedó totalmente paralizado mientras aquel tibio líquido escurría desde su cabeza al resto de su cuerpo.
"¡¿Por qué me haces esto a mí Dios?!"
-Se-Sehun... yo... -se había quedado en blanco a diferencia de Sehun que comenzaba a ponerse rojo de ira-Al menos no está caliente-fue su estúpido comentario.
Sehun gruñó furioso y bajó en aquella parada aunque no era la suya, Luhan suspiró con pesadez y deslizó su cuerpo por aquel tubo metálico hasta que estuvo sentado sobre el sucio y frío suelo del tren.
-¿Por qué soy así de torpe?-murmuró auto reprochándose lo sucedido.
Su día no mejoró en absoluto luego de aquello, su profesor de química lo había regañado tanto que Luhan pensaba que todo lo que le había dicho sería suficiente para el resto de su vida, había llegado a su casa decepcionado, desanimado y necesitando un buen amigo que lo escuchara pero en lugar de eso lo que obtuvo fue a Chen riendo descontroladamente luego de que le contara.
-¡Ya, deja de reírte!-exigió.
-Es... es que... -ni siquiera podía hablar-Tú tienes que llevarme mañana contigo-pidió entre risas.
-¡No seas idiota y ayúdame!-exigió haciendo un infantil puchero.
-Pobre chico-siguió riendo con fuerza.
-¡Chen!-chilló.
-Seguro que no querrá volver a tenerte a menos de tres kilómetros siquiera-habló volviendo a reír.
-¿Crees que no lo sé?-musitó con tristeza-No fue mi intención hacer eso, yo de verdad lo único que intentaba era ser lindo pero...
Chen dejó de reír entonces al ver la triste expresión de Luhan, se puso serio entonces y colocó una mano sobre el hombro de su hermanito para animarlo un poco y obtener su atención también.
-No fue tu culpa sino un accidente, esas cosas pasan así que no te aflijas tanto-sonrió-¿Por qué no en lugar de eso vas y pides una disculpa?, dijiste que trabaja cerca de aquí.
-No querrá verme-susurró afligido.
-Puedes llevarle un presente como compensación por lo del café, la repostería se te da bien y seguro le gusta-aseguró.
Luhan miró con emoción al mayor y se puso de pie de un salto, Chen tenía razón y además ya estaba listo, había preparado unos muffins al llegar a casa, hacer postres lo ayudaba a quitarse el estrés, no lo hacía a menudo pero ese día había sido un asco por lo cual había tenido la necesidad de hacer esos muffins de chocolate. Podía dárselos a Sehun para disculparse, se puso de pie y corrió a la cocina con ese pensamiento, los encontró en la barra justo donde los había dejado y luego los metió todos en una bonita caja y salió de la cocina con ellos.
-¡Hey, detente ahí loco!-chilló un horrorizado Chen al ver que se llevaban sus delicias de chocolate.
-Lo siento pero ahora son de Sehunnie-informó sonriente.
-¡¿Qué?!-exclamó dramáticamente-¡Estás loco si crees que dejare que te lleves mis preciosos para dárselos a ese chico amargado!
-Lo siento-dijo Luhan desde la puerta y salió a toda velocidad.
-¡NOOOOOOOOOOOOOOOOO!-gritó Chen de rodillas en el suelo-¡Mis preciosos!
***
-Hey Sehun-lo llamó alguien más en cuanto lo vio salir de la bodega donde había estado haciendo el inventario.
Un simpático chico con sonrisa resplandeciente, cabello negro, piel pálida y amable con todos era quien lo llamaba, se llamaba Kim Junmyeon, aunque Sehun lo conocía mejor con Suho, la persona más irritante, entrometida y fastidiosa que había conocido. Ah sí, también era su jefe y dueño de aquel pequeño local que no tenía mucho de haber abiertos sus puertas.
-¿Qué pasa?-preguntó con su habitual expresión de desinterés.
-Este encantador jovencito te busca-informó señalando al chico a su lado, claro que seguramente Suho pensaba que Luhan era el más inofensivo de los ángeles.
Sehun en cambio sintió un tic al ver ahí a esa pequeña amenaza peli-naranja mirándolo con aquellos ojos de cachorro abandonado, estaba punto de decirle a su jefe que no tenía ni idea de quién era ese mocoso, lo cual no era mentira del todo porque ni su nombre sabía, pero su jefe se adelantó.
-Ya casi es tu hora de descanso, puedes ir a charlar con tu amigo un rato-dijo dándole unas palmaditas en la espalda.
Por millonésima vez desde que lo conocía Sehun odio la infinita amabilidad de su jefe pero no pudo hacer nada y obedeció, salió del local con el peli-naranja siguiéndolo de cerca hasta que se sentaron en una de las bancas que había ahí en la plaza, entre más rápido averiguara lo que Luhan quería este más rápido iba a irse.
Ninguno dijo nada por mucho que ese niño pareciera muy incómodo con su silencio y rechazo, lo miró de reojo dándose cuenta que él la estaba pasando mucho más que muy mal y decidió hablar por fin.
-¿Cómo te llamas?-preguntó el rubio.
-Luhan-susurró apenas con su mirada clavada en el suelo y las mejillas algo sonrojadas, si Sehun era honesto debía admitir que Luhan lucía lindo de esa forma pero claro que no iba a decírselo porque lo que más quería era quitárselo de encima.
Nuevamente el silencio se apodero de ellos, Sehun se veía impaciente y Luhan todavía no había terminado de decidir que decirle, su mirada se fijó en la caja que tenía entre las manos y tomó aire dándose valor para hablar de una buena vez.
-Lamento mucho lo que pasó en el tren, de verdad que no quise hacerlo, fue un accidente, lo juro-dijo todo de forma ansiosa y sin respirar, tampoco lo miró debido a lo avergonzado que se sentía.
Sehun miró con atención a Luhan viendo lo arrepentido y avergonzado que se veía, de verdad que lucía lindo de esa forma, suspiró sonoramente llamando la atención de Luhan que lo miró de reojo algo decepcionado hasta que pareció recordar algo.
-También te traje esto-musitó extendiéndole la bonita y algo-demasiado-femenina caja-Es en compensación por lo sucedido, mi hermano mayor dice que lo único que realmente puedo hacer bien, además de tomar fotografías, son los postres-explicó.
Sehun miró la caja sin expresión alguna, la verdad era que no le gustaba mucho lo dulce, tal vez el Bubble Tea era lo único dulce que podía consumir pero nada más que eso, vio a Luhan dejar por fin la caja sobre la banca y empujarla hacia él porque era obvio que no iba a tomarla.
-Eso era todo, nos vemos-se despidió decepcionado.
Sehun lo vio ponerse de pie y comenzar a alejarse, tomó la caja abriéndola con cuidado y encontrando en el interior con muffins de chocolate, tomó uno levantando la mirada hacia Luhan que se alejaba cada vez más y dio una mordida al esponjoso bocadillo.
"Eres un imbécil Oh Sehun, ¿qué estás haciendo?"
-Luhan-llamó en voz alta mientras por dentro seguía maldiciéndose por detenerlo y no simplemente dejar que se largara por donde había venido.
El menor se giró a mirarlo con un singular brillo en los ojos, hizo una mueca ante eso y dio otro mordisco a su obsequio, era muy bueno en verdad y le gustaba mucho, casi rivalizando con lo mucho que le agradaba la expresión esperanzada y adorable de Luhan.
-No me gusta el café.
Luhan sonrió ampliamente ante eso y asintió, Sehun le hizo una seña con su diestra pidiéndole que se acercara nuevamente y lo vio prácticamente correr de vuelta y sentarse a su lado sin borrar en ningún momento su resplandeciente sonrisa.
-¿Saben bien?-preguntó refiriéndose al obsequio.
-Saben cómo deberían.
Luhan lo miró sin saber cómo interpretar esas palabras decidiendo al final que eran algo bueno y sonrió sin ser cociente que en realidad no estaba tan herrado y que Sehun realmente lo había halagado. El rubio suspiró sonoramente sin dejar de recriminarse el hecho de haber detenido a Luhan y continuó disfrutando de su dulce y suave disculpa.
¿Por qué lo había hecho?, se preguntaba sin parar cinco minutos más tarde mientras caminaba de regreso a la tienda con Luhan siguiéndolo, sí, iba a quedarse toda la tarde con él porque el peli-naranja se había auto invitado a la tienda y él lo había dejado también sin saber porqué.
-Oh hola de nuevo-saludó su jefe a Luhan al verlo de nuevo.
-Hola-saludó muy sonriente Luhan.
-Se quedara-le informó.
-Cla-claro-musitó un tanto confuso Suho para luego mirar a Luhan que no había borrado su sonrisa que incluso se había ampliado más.
Sehun puso los ojos en blanco al ver la forma en que su jefe también sonreía de vuelta y sin decir nada volvió a su trabajo comenzando a acomodar la nueva mercancía en el aparador tras el mostrador donde dejó lo que Luhan le había obsequiado.
-Wow esos muffins se ven geniales-dijo e intentó tomar uno recibiendo a cambio una palmada en la mano de parte de su empleado.
-Son míos-advirtió seriamente.
-¿Qué te cuesta compartir?-preguntó con un puchero en los labios.
-Son míos-repitió.
Luhan pudo haberse desmayado ahí mismo pero consiguió tranquilizar su enorme emoción, Sehun suspiró al verlo sonreír como un loco y continuó con su trabajo ignorando a su jefe que no dejaba de quejarse de lo egoísta que era.
-Los hice yo-confesó Luhan llamando la atención del compañero de Sehun-Puedo traer para ti también la próxima vez que venga-propuso.
-¿De verdad?-inquirió muy entusiasmado tomando las manos de Luhan entre las suyas.
-Claro-respondió sonriente.
-¡Ya siento que te amo!-exclamó atrayendo al menor a un fuerte abrazo.
Luhan rió a carcajadas ante eso, miró de reojo a Sehun notando su ceño ligeramente fruncido mientras miraba aquella escena y no pudo ser más feliz al describirlo celoso, porque sí, para Luhan aquello significaba que Sehun estaba celoso y nadie lo haría cambiar de opinión. Se alejó del pelinegro que lo abrazaba para ir junto a Sehun que no le prestó la más mínima atención y continuó con su trabajo como si nada a pesar de la acosadora presencia del menor.
El resto del día no fue diferente y con la única persona con la que Luhan pudo mantener una charla decente fue con Suho, Sehun lo había estado ignorando olímpicamente pero Luhan no se rendía manteniéndose a su alrededor en todo momento hasta cuando fue hora de cerrar, lo acompañó hasta la entrada del subterráneo donde Sehun finalmente lo miró con esa mirada penetrante que podría hacer que a Luhan cayera de rodillas listo para obedecer cualquier orden que le diera.
-Es tarde, vete a casa-indicó.
"¡Se está preocupando por mí!"
-Está bien-asintió muy obediente.
Sehun dio la vuelta comenzando a caminar hacia la estrada del subterráneo deteniéndose un metro adelante girándose nuevamente hacia Luhan que no se había movido ni un centímetro de su lugar.
-No hagas postres para nadie más si no es para mí durante este mes, ¿de acuerdo?-habló demasiado seriamente sin estar muy seguro del porqué de sus palabras pero en su defensa tenía que admitir que realmente había amado los muffins.
"¡Kyaaaaaaaaaaaa me muero!'
-Sí-respondió con entusiasmo-Sehun-llamó antes de que se diera la vuelta.
-¿Qué?
-Yo… -"Vamos tú puedes Luhan"-Quería saber sí… sí tú… ¡quisieras tener una cita mañana conmigo!-soltó totalmente sonrojado.
Sehun frunció el ceño ante esas palabras y lo alto que las había dicho, en realidad no quería hacerlo pero él mismo le había prometido un mes a Luhan, las citas era algo que el paquete incluía y tenía que hacerlo porque él siempre cumplía con su palabra.
-Bien.
"¡Dijo que sí Luhan, dijo que sí! ¡No hagas nada estúpido, no te desmayes!"
-Pero mañana debo trabajar, ¿puedes el jueves?
-¡Sí!-chilló sin poder evitarlo, se sonrojó furiosamente después de eso y se cubrió la boca con ambas manos, Sehun sonreía divertido por eso y continuó hablando fingiendo que no lo había notado.
-Muy bien, el jueves será, nos vemos afuera de la Universidad Nacional de Seúl a las tres, ¿te parece?
En esa ocasión Luhan simplemente asintió puesto que no quería que lo de minutos antes se repitiera, Sehun asintió también sin nada más que agregar y se marchó por fin, fue entonces que Luhan pudo comenzar a saltar de alegría e incluso besó en la mejilla a un ancianito que pasaba pero no era su culpa, lo que pasaba era que estaba demasiado feliz.
Los días venideros Luhan descubrió, con mucho pesar, que seguía odiando a morir el maldito subterráneo pero no podía negar que los escasos minutos que viajaba en él junto a Sehun eran la gloria para él, claro que Sehun siempre estaba callado y apenas lo miraba pero para Luhan estaba bien solamente con pararse a su lado y poder desearle un bonito día únicamente para escuchar un;"Igualmente" de sus labios.
Y el ansiado jueves llegó por fin y Luhan creía que podría desmayarse, repasó 37 veces los planes para ese día, su inseparable cámara colgaba de su cuello y tomó de la barra los dulces que había hecho para Sehun dando un gran respiro antes de ponerse en marcha para encontrarse con el mayor, había decidido poner en práctica el segundo tip y aunque estaba nervioso a morir daría lo mejor ese día.
Tip 2: Conoce sus gustos y sus intereses.
Será más fácil que él se abra contigo si tienen puntos en común y si dialogan sobre temas que les interesa a los dos por igual.
Sí, Luhan estaba totalmente decidido a volver a casa sabiendo hasta los más insignificantes hobbies de Oh Sehun.
***
-Hunnie~-llamó la cantarina y familiar voz de su único amigo en ese lugar.
-Hola Baek-saludó sin expresión alguna en su rostro, cosa que hizo que el pelirrojo frunciera el ceño.
-Pero no te emociones tanto por favor-bufó indignado.
-No entiendo de que hables.
-Olvídalo-suspiró-¿Ya te vas a casa?-preguntó haciendo una expresión adorable e infantil, ese era su día definitivamente, tendría una cita con Sehun ese día no importaba que tuviera que hacer.
-No, tengo una cita-respondió sorprendiéndose de sí mismo minutos después por su respuesta.
-¡¿Qué?!-exclamó sorprendido y a la vez molesto.
Sabía bien que Sehun era un bastardo que cambiaba de novia como lo hacía de ropa interior y que estaba siempre ignorando que aquello era algo que no necesitaba hacer porque ahí estaba él, le reventaba que el menor lo ignorara prefiriendo a cualquier zorra cuando podía tenerlo a él, ósea él era Byun Baekhyun.
-¿Con quién?-exigió saber.
-Con... -se detuvo en seco al recordar a Luhan, ¿deberías decirle a Baekhyun la verdad?
No lo sabía, podía fácilmente mentirle y era totalmente consciente de ello pero al tratar de inventarse una mentira algo se sintió mal cuando la imagen de aquella pequeña amenaza de cabello naranja llegó a él, el recuerdo de su sonrisa gigantesca, casi psicópata pero siempre radiante, dulce y sincera cuando estaban en el vagón del tren, sus centelleantes ojos y lo tierno que le resultaba en algunas ocasiones eran algo que últimamente estaba acostumbrado a ver por la mañana, Luhan era alguien que sentía no poder ni querer ocultar de nadie y por eso decidió no mentir.
-Con un chico que conocí en el subterráneo, se llama Luhan.
La mandíbula de Baekhyun casi tocó el suelo luego de aquella revelación, la ira comenzó a crecer en su interior y estaba por comenzar a gritarle todo lo que sentía a Sehun hasta que notó que él en realidad estaba ignorándolo y miraba a un punto en la distancia.
Su mirada asesina fue al mismo lugar donde Sehun miraba topándose con un insignificante chiquillo idiota que no le llegaba ni a los talones, era tan simplón y poca cosa en comparación suya y eso únicamente lo enfureció mucho más.
-Debo irme-habló Sehun.
-Espera-pidió rápidamente-¿No puedes dejar tu cita para otro momento?-inquirió poniendo su mejor cara de suplica.
-Baekhyun no comiences con...
-Es que de verdad necesito que me acompañes a un lugar-dijo rápidamente.
-Será para otra ocasión.
-Sehun por favor-suplicó.
-Baekhyun no sigas.
-Por favor, de verdad necesito que vengas conmigo-insistió y como el buen actor que era sus bellos ojos se llenaron de lágrimas mientras lo miraba.
-¿A dónde?-inquirió ya resignado.
-No te había querido decir nada para no preocuparte pero últimamente he tenido jaquecas frecuentemente e iré al médico pero tengo miedo ya que leí que estas jaquecas podría ser algo muy malo, no quiero ir solo-habló con la voz rota dando la estocada final con las lágrimas que casi se derramaban de sus bellos ojos.
-Está bien-aceptó el rubio al final, Baekhyun era como su familia y no podía dejarlo solo cuando lo necesitaba tanto-Iré a hablar con Luhan-informó.
Baekhyun asintió lentamente dejando que se marchar hasta donde ese chiquillo lo esperaba.
"No estoy celoso", eso era lo que Luhan se decía a sí mismo mientras veía a Sehun hablar con ese bonito chico pelirrojo, seguro que nada más era un bueno amigo y ya.
Se aseguró de poner la más grande y bonita de sus sonrisas cuando Sehun comenzó a acercarse, estaba muriendo de nervios y emoción pero estaba más que seguro de que valdría la pena, lo sabía, su sexto sentido se lo decía.
-Luhan-lo llamó y Luhan por poco se desmaya al escuchar su nombre saliendo de sus labios.
-Estoy listo-anunció con entusiasmo.
-Surgió algo y no podré salir contigo hoy, será mañana, ¿de acuerdo?
La emoción se fue entonces, sintió algo doler en su interior pero se las arregló para sonreír ampliamente y negar restándole importancia a lo sucedido, Sehun lo miró con atención unos segundos más antes de darse la media vuelta y volver hasta donde el chico pelirrojo esperaba.
Ese chico se arrojó a los brazos de Sehun en cuanto lo tuvo cerca y lo peor fue que él le devolvió aquel gesto e incluso dejó que besara su mejilla, el pelirrojo miró en su dirección y le mostró una sonrisa triunfal, y de verdad que dolió, nunca lo había sentido pero ahí estaba.
Era una fea punzada en su pecho que dejaba un sabor a tierra en su boca y un dolorcito creciente en su corazón, Sehun no solo había cancelado si no que lo había hecho por otro y ni siquiera pidió una disculpa, eso daba asco y de verdad que se sentía horrible. Fue ahí cuando algo húmedo recorrió su mejilla y Luhan alzó la mirada pensando que había comenzado a llover pero no lo hacía, era un día precioso de hecho.
Tocó entonces su mejilla y se dio cuenta que lo que ahí había era una lágrima y no entendió, él no lloraba fácilmente pero... ¿qué estaba pasando?, no se quedó a averiguar y salió de ahí rápidamente, era humillante estar ahí permitiendo que lo vieran así, no podía dejarse ver así de débil por un chico.
Al llegar a casa se sentía mal, dejó sobre la barra los dulces que había preparado y su cámara caminando luego hacia su habitación y dejándose caer en la cama, su pecho se sentía raro y no sabía por qué, las imágenes de Sehun y ese chico no lo dejaban haciendo que ese inexplicable sentimiento creciera mucho más.
-¿Luhan?-la voz proveniente de la puerta llamó su atención y lo hizo girarse hacia esa persona.
-Minseok hyung-murmuró-¿Qué me pasa?-preguntó asustado.
Minseok se alarmó y fue corriendo a abrazarlo cuando vio a Luhan a nada de comenzar a llorar, lo acurrucó en su pecho tratando de consolarlo a como diera lugar porque se veía demasiado confundido y él mismo no lo entendía.
-¿Qué pasó?-preguntó suavemente.
-Sehun cancelo-musitó.
-Ese imbécil-masculló molesto por lo que le habían hecho a su pequeño bebé.
-No-Luhan se apartó negando-Vamos a salir mañana-aseguró.
Minseok lo miró muy confundido entonces, Luhan hizo una mueca sin tener idea de cómo explicar la situación, sabía muy en el fondo que lo que lo hacía sentir así no era el hecho de que Sehun hubiera cancelado sino ese otro chico.
-Había alguien con él-susurró.
Minseok frunció el ceño al pensar que ese imbécil pudo haber estado con alguna chica y Luhan los había visto, el menor lo notó y tomó la mano de Minseok negando con la cabeza.
-Era un chico de pelo rojo, él... él hizo algo que yo tan sólo he soñado hacer... ese chico lo abrazó y Sehun no lo empujó y... y... debiste verlo Minnie hyung, él era muy bonito mientras que yo... -agachó la cabeza sintiéndose diminuto al recordar a ese bonito muchacho.
-No digas tonterías-habló con enojo Minseok-Tú eres muy guapo Luhan, Baekhyun no es ni la mitad de guapo que tú-aseguró.
-Estás mintiéndome-murmuró tristemente.
-Rayos, como lo supo-dijo con una voz muy graciosa logrando que el menor riera un poco.
-Pero de verdad hyung, ese chico...
-Baekhyun es guapo y yo también lo noto pero de verdad que tú podrías rivalizar con él si quisieras, lo que pasa es que tú jamás te arreglas más que para ir a alguna fiesta o cosas así, tú eres descuidado al punto de usar el mismo pantalón por una semana entera-rió al decir lo último.
-¿Qué hago entonces?-preguntó haciendo un puchero.
-Fácil-sonrió brillante-Imagina que todos los días son una fiesta-aconsejó.
Luhan no comprendió al inició pero terminó sonriendo brillantemente, se puso de pie de un salto y corrió fuera de la habitación gritando un gran "Gracias" a su hyung desde el pasillo, se apresuró a la habitación de su idiota hermano mayor y entró estrepitosamente únicamente para terminar gritando.
-¡MIS OJOS!-gritaba histérico mientras se cubría los ojos e intentaba salir de la habitación chocando tres veces contra la puerta-¡He quedado ciego!
-Es tu culpa por entrar sin llamar a la puerta-se reía Chen desde la cama mientras alcanzaba sus bóxers para ponérselos.
-¡¿Por qué a mí Dios?!
-Si serás exagerado-bufó ya algo molesto en esa ocasión-Deberías sentirte afortunado de haber visto algo tan sexy como lo soy yo sin ropa-aseguró apuntando directo a su hermano menor que casi e arañaba la cara.
-¡Mi vida está arruinada!-lloriqueó dramáticamente.
-¡Ya!-ordenó Jongdae ya indignado-¿Qué rayos quieres?-preguntó con el ceño fruncido.
-¿Ya estás vestido?-inquirió temeroso.
-Sí-resopló fastidiado.
Luhan se descubrió los ojos dejándole ver a Chen que los tenía cerrados, los abrió lentamente empezando con el derecho para comprobar el terreno y al ver a Chen vestido con cara de estar ofendido, se atrevió a abrir el otro y mirar con enojo al mayor.
-¡¿Acaso estás loco?!-inquirió manoteando al aire-¿Crees que tenemos dinero para pagar un psiquiatra para que me ayude con cada trauma que me provocas?-lo regañó.
-¿Trauma?-soltó ofendidísimo-Deberías estar agradecido, mi cuerpo desnudo será lo más bonito que veras en tu mundana vida-aseguró con orgullo.
Luhan fingió una arcada recibiendo una mirada fulminante de su hermano mayor, el menor se echó a reír escandalosamente por eso, importándole poco que Chen tratara de matarlo con la mirada, de verdad que era divertidísimo molestarlo.
-¿Qué quieres?-repitió la pregunta que había hecho con anterioridad una vez que Luhan se tranquilizo.
Luhan puso una sonrisa enorme, una muy aterradora cabe mencionar, Chen tembló al verla porque eso solamente significaba una cosa; su billetera iba a llorar mucho ese día.
-Necesito ropa nueva-anunció sin dejar de sonreír.
-Ya tienes mucha, no la necesita-aseguró cruzándose de brazos mostrando su postura de hermano mayor autoritario.
-¡Mentiroso!-chilló Luhan apuntándolo con el dedo.
-¡No me apuntes con el dedo y me digas mentiroso!-exclamó haciendo justo lo que se suponía Luhan no debería hacer.
-La última vez que me compraste ropa fue hace seis meses-masculló molesto.
-Pero la ropa sigue siendo buena, puede usarse más tempo-afirmó.
-¡Chen!-lloriqueó haciendo un berrinche en su lugar.
-¿Para qué quieres ropa nueva?-inquirió fastidiado-Ni siquiera la usaras, usas el mismo pantalón como por dos semanas-señaló con el ceño fruncido.
-¿Y de quién es la culpa?-lo señaló con el dedo-Tuya-sentenció.
-¿Mía?-soltó indignadísimo con aquellas falsas acusaciones.
-Sí, tú siempre has sido un vago y yo te he visto desde que soy un inocente pequeño, por tu culpa me visto como vagabundo, he copiado tus acciones desde que era un mocoso-afirmó.
-Ni que te lo hubiese pedido-bufó.
-¡Chen!
-¡No necesitas ropa nueva!-lloriqueó igual que Luhan demostrando su madures.
-Pero si no me arreglo mejor Sehunnie no va a prestarme atención, ¿eso quieres?-musitó con la voz en un hilo, un puchero en sus labios y ojos cristalizados.
-No creo nada de eso-rió al ver eso.
"¡Maldición, se volvió inmune!"
-Además, un chico que está contigo por cómo te ves y no por cómo eres, no te merece-afirmó seriamente.
-¡Yo tampoco creo nada de eso!-se quejó-También soy hombre, sé que la mayoría de nosotros primero vemos la apariencia y después la actitud-sonrió triunfal al ver la cara de odio de Chen.
-Esos son hombres malos, te mereces algo mejor-contraatacó.
-No lo creo-negó con su cabeza-A decir verdad yo primero me fijé en la apariencia de Hunnie-admitió como si nada.
-Luhan-soltó aparentando mucha sorpresa y decepción-Yo no te he educado de esa forma-murmuró dolido mientras se limpiaba una lágrima imaginaria.
-¡Exacto, tú me educas mal, es tu culpa que parezca un indigente!-fingió llorar también.
-¡Blasfemia!-exclamó ofendido.
-¡Por tu culpa Sehunnie va a preferir a ese tal Baekhyun y no tendré oportunidad alguna!-lloró más intensamente-Eres de lo peor, no puedo creer que no te im…
-¿Baekhyun has dicho?-lo cortó usando un tono de voz un tanto escalofriante que iba a la perfección con su expresión de asesino en serie.
-S-sí-tartamudeó algo asustado de repente.
-Ve por tus cosas, ninguna diva con exceso de maquillaje en los ojos va a ganarte-sentenció tenebrosamente, o por lo menos fue aterrador para Minseok que venía entrando a la habitación.
-¡Síííííííííííííííííííííííííííííí!-chilló mientras salía corriendo por sus cosas para salir de compras.