- Buenos días, Niles – saludó con una afable sonrisa Laslow desde el suelo.
El ex-ladrón estaba plácidamente situado sobre la rama de un árbol de cerezo, el cual era claro testimonio de la influencia de los recién llegados hermanos de Hoshido, pues hasta hace unos días la decoración del castillo era parecida a la de una lúgubre fortaleza, algo muy de Nohr.
- ¿Um...? - el hombre de cabello blanco se volvió a mirar con nulo interés hacia su interlocutor, pero de igual manera saludó – Buenas días, mi buen amigo Laslow. ¿Necesitas algo de mí? ¿Acaso... algún favor especial – dijo con una sonrisa socarrona y un cierto tono sugestivo.
Laslow suspiró, arrepentido de saludarlo.
- Nada. Sólo me preguntaba que hacías aquí tú solo sin molestar a nadie. Pensé que quizás estarías enfermo, pero ahora veo que solamente tomas un descanso -
- Así es. Lord Leo me dio el día libre – contestó antes de bostezar – Pero agradezco tu preocupación. Y debo decir me sorprende que te intereses en más cosas además de molestar chicas lindas -
- Ah, bueno. Se podría decir que hoy también es mi día libre... - dijo escogiéndose de hombros, no pudiendo esconder su vergüenza - Lord Xander me excusó por hoy de mis labores "hasta que se mejore mi conducta". Al parecer alguna chica del ejercito se quejó de mí por "mal comportamiento" -
- ¿Sólo una? - inquirió con una ceja alzada- ¿Tienes idea de quién pudo haber sido? -
- No lo sé. Tal vez Beruka, o Charlotte, o Effie, o Hana, o...incluso Saizo – dijo pensativo.
- ¿Ah? ¿Intentaste flirtear con Saizo? - preguntó sorprendido, no tanto porque se tratara de otro hombre sino que parecía que el bailarín tenía agallas.
- ¡¿Estás loco?! Estaba hablando tranquilamente con Kaze cuando Saizo apareció de la nada y me acusó de estar molestando a su hermano. Debió malentender algo. Pero supongo que tengo un encanto natural que hasta atraigo a hombres sin desearlo – dijo con orgullo.
- ¿Y no haz pensando que tal vez Saizo estaba celoso de que le hables a su hermano y a él no? -
Laslow frunció el ceño, intentando entender lo que Niles sugería con aquella mirada lasciva.
- ¿Insinúas que... Saizo quiere ser mi amigo? -
Al ex-ladrón le faltó poco para darse un golpe en la frente ante la idiotez de su compañero.
- Sí. Si te refieres a un amigo con derechos, sí. Pero estoy seguro que él busca algo más contigo –
- ¿Q-qué?.. - se ruborizó – No digas esas cosas, si es obvio que Saizo es heterosexual. ¡Y yo también! Aunque si alguien como Saizo se me confesará... ¡Quiero decir! ¡Agh! Realmente eres una mala influencia, ¿lo sabías? -
- Me alegra saberlo – contestó riendo. Niles no sabía que hablar con Laslow sobre hombres fuese tan divertido.
- ¡Hey! Es tan raro verlos conversar a ustedes dos – comentó Odin, ciertamente alegre de ver a su amigo y a su compañero de trabajo haciendo amistad - ¿De qué hablan? Si puedo saberlo, claro -
- De mujeres – dijo el bailarín a la defensiva.
- De hombres – dijo el de cabello blanco.
Odin rió al ver a Laslow tan atribulado.
- Entonces, Odin, ¿tú también tienes el día libre? - dijo el de cabello gris intentando cambiar el tema, pero no pareció funcionar.
- Sí, también. ¿Y de qué hablan? ¿Sobre quién es el más lindo del ejército o algo así? - inquirió con curiosidad.
- ¡¿Cómo puedes preguntar eso?! Y-ya te dije que hablábamos de chicas... -
- Oh, vamos. Soy el compañero del Señor Acosador. ¿Crees que nunca me ha hecho hablar sobre cosas así? Yo hablo sobre mí genialidad y Niles sobre la gente a la que le gusta acosar. Tenemos una sana relación de cordialidad sobre nuestros gustos -
- Ya veo... A decir verdad entiendo tu punto. Hago lo mismo con Peri – Laslow suspiró derrotado.
- ¿Y? ¿Tú qué opinas? - ahora preguntó el del parche.
- ¿Qué opino de qué? -
- Lo que dijo Odin, sobre quién es el más lindo del ejército -
- ¡¿Ah?! ¿En serio me están pidiendo que conteste? -
- Por supuesto. Es sólo por diversión – dijo el rubio guiñando un ojo – Será nuestro secreto. Además, admitir que otro hombre es atractivo no hará que se destruya el mundo. Al menos yo, como El Elegido, sé apreciar el don de la belleza en todos sus sentidos -
- Y yo, sin ser El Elegido, también – agregó Niles con una sonrisa burlona.
- Mira, yo empiezo. Creo que Hayato es lindo – dijo para incitar a su amigo a hablar – Tiene un aire de misticismo a su alrededor que es genial, no tanto como yo, claro. Lo malo es que él tiene una horrible personalidad. Es como un chihuahua enojado -
- Bien, de acuerdo, si es por diversión... Déjenme pensar – se llevó una mano a la barbilla – Creo que...Silas. Sí, él es lindo y muy amigable. Si fuera una chica no dudaría en invitarlo a salir. ¿Y tú qué dices, Niles? -
- Sin duda alguna, Lord Leo. Él es retrato de la lindura, con su cuerpo pequeño y la manera en que arruga la frente al enojarse -
- Uh. Te juro que creí que dirías Lord Corrin – dijo Odin sin afán burla. Estaba genuinamente confundido.
- Oh, sí. Lord Corrin también lo es... ¿pero quién creen que sea el más sexy? - dijo para continuar las preguntas.
Por supuesto que para ex-ladrón Corrin era el chico más lindo de todos, incluso más que su señor. Pero no era algo que podría admitir abiertamente, ni siquiera como broma. No cuando realmente tenía sentimientos hacia él.
- Subaki – dijo el mago sin pensarlo mucho – Aunque su cara de muñeca de porcelana a veces me asusta. Es como si no tuviera expresión en su rostro. Me pregunto si así nació o estará bajo alguna clase de hechizo... -
- ¿Pero que hay de Hinata? - preguntó Laslow para fastidiar – Es un chico muy guapo y siempre está pegado a ti, mirándote con sus ojos de perrito -
- ¡H-hey! - Odin se ruborizó al tiempo que retrocedía – Hinata quiere que le enseñe magia, ¡eso es todo! -
- ¿Sólo magia, eh? ¿Seguro que no busca otra cosa de ti? - guiñando un ojo.
- Hablando de perritos, ¿qué me dices tú de Keaton? - contraatacó con una sonrisa triunfante – A Keaton le gusta mucho olfatearte y a que le ayudes a buscar tesoros. ¿Cuándo le vas a entregar el "tesorito" entre tus piernas? -
- ¡Odin! ¡Qué vulgar! - le reprendió Laslow con ojos muy abiertos – Definitamente estar cerca de Niles te está afectando -
- ¿Yo qué? - preguntó el aludido haciendose el inocente – Pero él tiene razón, Odin. Keaton no está interesado en olfatear el trasero de Laslow. Él está más ocupado ayudando a Kaden a tener un pelaje brillante, si entiendes a lo que me refiero... - Laslow y Odin negaron con la cabeza - ¿Es que no han visto lo que hacen esos dos? Se acarician el pelaje entre si, se lanzan mordiscos amistosos y hasta se acurrucan juntos al dormir. Aah... Son un par de cachorros adorables – suspiró como si acabara de contar una historia de amor.
- Uh. Pues... Sí, sí me había dado cuenta de eso – comentó el bailarín sintiendose tonto al no haberse percatado antes de esa manera – Pero, eh...eso es normal entre los de su especie. ¿Qué no lo es? - miró a Odin en busca de ayuda.
- No estoy seguro – se encogió de hombros.
- Como sea – dijo Niles para regresar al tema – Pienso que Yukimura no es precisamente sexy, pero vaya qué es un DILF – se acomodó bocabajo sobre las ramas.
- ¿DILF? - repitió el de cabello gris. Odin cabeceó de manera de negativa.
- No preguntes. No te gustará saber la respuesta. CRÉEME -
- De acuerdo... ¿Sigue mi turno, cierto? Mmm... Objetivamente hablando, encuentro a Kaze bastante sexy. Si yo tuviese un cuerpo como el suyo atraería a más mujeres sin duda alguna -
- Extraño... Creí que dirías Saizo – dijo Niles para molestarlo, y funcionó.
- ¡B-basta con eso, Niles! Me estás metiendo ideas raras en la cabeza y eso no me gusta – le amonestó con la cara completamente roja.
- ¿Uh? ¿Por qué hablan de Saizo? -
- Cierto. Hace unos momentos no estabas – recordó – Intento decirle a nuestro buen amigo Laslow que es evidente que Saizo está enamorado de él, pero no me cree -
- Bueno, dicho así, a mí también me cuesta creerlo – dijo el mago con precaución, no estando seguro si su compañero bromeaba o lo decía en serio.
- ¿Entonces por qué Saizo ha estado espiando a Laslow desde que iniciamos esta conversación? -
Laslow enseguida miró tras su espalda y después hacia donde pudiera, pero solamente logró distinguir a lo lejos gente que paseaba y soldados que patrullaban.
- Esta broma está llegando demasiado lejos, Niles – amenazó con el cejo fruncido.
- Te mostraré que no bromeo – dijo bajando del árbol de un salto. Laslow quedó entre Niles y el árbol.
- Es..espera, ¿qué vas a hacer? -
El ex-ladrón llevó una mano al cabello de Laslow y éste retrocedió en el momento justo en que Saizo apareció frente a Niles.
- Listo – el ex-ladrón rió – Sólo te quitaba esto de encima – mostró un pétalo de cerezo y dio pasos hacia atrás.
- ¡¿Sa-Saizo?! - exclamó Laslow - ¡¿Qué haces aquí?! -
- Mis disculpas por interrumpirlos. Creí que iban a iniciar una pelea -
Laslow miró a Odin, quien lo miraba de vuelta con el mismo rostro sorprendido.
- N-no, sólo charlábamos amistosamente – dijo el rubio para ayudar a su amigo, quien claramente estaba ya sin palabras y reconsiderando todo lo que Niles le había dicho.
- Sí, una charla amistosa entre tres hombres. ¿Te gustaría ser el cuarto? - invitó Niles, apenas pudiéndose aguantar la risa.
- ¿Sobre qué hablan? - inquirió el ninja con suma curiosidad. Era obvio que desde la distancia que estuvo observando a Laslow no se oía gran cosa.
- ¡Creo que Lord Xander me necesita! - gritó el bailarín antes de salir corriendo.
- Ooh... Entonces seremos un trío de nuevo -
- Lo lamento, pero debo regresar con Lord Ryoma – dijo Saizo antes de desaparecer.
- Tenías razón sobre ellos... - dijo Odin, todavía sin salir de su asombro, y dejando monedas en las manos de Niles.
- Yo nunca me equivoco. ¿Quieres hacer otra apuesta? -
- ¿Qué tal tú y Lord Corrin? Si te dices que sí, te ayudaré a comprar el anillo -
- Me temo que debo declinar en esta ocasión– dijo cruzándose de brazos – Lord Corrin no debería si quiera acercarse a alguien como yo -
- ¿Oooh? ¿Entonces por qué Lord Corrin viene hacia acá? -
- ¡Mmph! No caeré en ese truco... -
- Niles... -
El ex-ladrón se volvió enseguida al reconocer la voz.
- ¡L-Lord Corrin! Siempre es un placer verlo – dijo con la voz un poco tambaleante, pero logrando mantener su postura tranquila.
- Lo mismo digo... Oh, hola, Odin -
- Lord Corrin – saludó el mago con una reverencia.
- ¿Necesita algo de nosotros? -
- Leo me dijo que hoy les dio el día libre, y me pregunta si... Niles, si no estás ocupado, ¿podrías acompañarme a la villa a comprar víveres? Sé que este es tu tiempo de descanso, y quizás tengas mejores cosas que hacer, así que... -
- Por supuesto, milord. ¡Lo que sea por usted! -
- Me alegra escucharlo – sonrió.
- La apuesta sigue en pie – susurró Odin guiñando un ojo.
Niles sólo sonrió como respuesta. Pero lo pensaría.