Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Fan número uno. por DanTamMu13

[Reviews - 27]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Ya les dejo aquí el nuevo capítulo del fanfic, y les digo que ya no falta mucho para el inminente final ): sí, me pone muy triste, me la he pasado muy bien haciendo esta historia llena de amor.

Al caer la noche supe que tendría que ir a la habitación que compartiría con Sasuke por más molesto que estuviera él conmigo y viceversa, y decidí esperar y postergarlo lo más posible, hasta que finalmente no pude más, necesitaba dormir.

Entré y la habitación estaba vacía, no sabía si Sasuke estaba abajo o había salido; pero traté de no pensar en eso, me cambié y me puse mi pijama para luego sentarme en la cama un rato. No podía sólo irme a dormir sin hablar con él. Tras pensarlo unos minutos me levanté de la cama y salí nuevamente del cuarto, bajé las escaleras y me encontré con que la luz de la cocina estaba encendida y podía escuchar claramente a Saki dentro.

 

-        ¿No dormirás? – le pregunté a Sasuke apenas lo vi, estaba agachado jugando un poco con Saki.

-        No, te alcanzo luego. – dijo sin voltear.

-        Te esperaré. – declaré mientras entraba a la cocina y tomaba una taza para prepararme un té.

 

Terminé de hacerme el té y me senté en la mesa del centro de la cocina, mientras que Sasuke seguía en la misma posición, aunque menos alegre a pesar de estar con Saki. No sabía qué decir exactamente, por lo que decidí esperar a poder hacerme una idea.

 

-        Perdón. – habló sin moverse de su sitio. – Tienes razón, eso es parte de tu pasado y yo no tengo derecho a meterme en eso, y menos a hacerlo un problema para nosotros.

-        ¿Podemos subir? – le pregunté honestamente con algo de súplica en mi voz.

-        Vamos.

 

Sasuke se levantó de su lugar, y caminó hacia a mí y una vez lo tuve en frente no pude evitar lanzarme a él y abrazarlo.

 

-        Lo lamento, lamento no haberte contado. – le dije sin romper el abrazo, y en ese instante sentí como me abrazaba con más fuerza.

-        Sólo olvidémoslo, ¿quieres? Ya, me lo has contado, ya está.

 

Subimos las escaleras juntos, y Saki nos seguía de cerca, como intentando averiguar si de verdad ya estaríamos bien o qué ocurría, aun así, entró con nosotros a la habitación, yendo directo a su cama. Sasuke sólo se cambió por su pijama y luego de eso la imitó, alcanzándome en la cama, recostándose a mi lado.

 

-        Solo me queda una duda, y prometo que no influirá en nuestra relación. – aventuró Sasuke apenas se acostó a mi lado.

-        Dila, prometo responderte en serio. – le dije mientras lo veía a los ojos.

-        ¿Lo quisiste? – preguntó sin evadir mi mirada.

-        Sí, lo quise; pero jamás hubiera podido tener algo con él, o al menos eso pienso ahora. – admití con pesar.

-        ¿Quieres contarme? – preguntó con calma.

-        No fue nada realmente, Sasuke. Él y yo salíamos, y al cabo de unos días comenzó a decir lo mucho que me amaba y que terminaría a su pareja por mí. Lo mismo que siempre dicen esas personas, y yo al inicio le creí; pero cuando vi a Gaara en su casa me sentí asqueado, asqueado de mí mismo, de lo que había hecho. No quiero ver a Hidan porque antes de que regresara aquí, me buscó, claro, yo ya no quería saber nada de él. Eso fue todo.

 

Sasuke no dejó de mirarme, por el contrario, su mirada se suavizó, y con una mano acarició mi mejilla de manera dulce y gentil para luego sonreírme tiernamente.

 

-        Fue sólo un imbécil que perdió más de lo que jamás sabrá. – declaró antes de besarme fugazmente.

-        ¿Te das cuenta que tuvimos nuestra primera pelea? – pregunté sonriendo un poco.

-        Y una muy estúpida, por cierto. – dijo riendo por lo bajo.

-        Prefiero pelear contigo por tonterías que por temas en serio importantes. – admití.

 

Me aferré al pecho de Sasuke, no quería soltarlo de ninguna manera y busqué sus labios casi por reflejo. En esta ocasión nos besamos sin buscar nada más allá que eso, sólo queríamos sentir que estábamos bien, que todo seguía como antes de la pelea.

Al separarnos nos acomodamos para dormir juntos, abrazados, olvidando el tonto problema que habíamos causado por una pequeñez.

 

Al día siguiente desperté y encontré a Sasuke todavía dormido, lo miré unos segundos, memorizando su rostro calmado, su tranquilidad, en ese momento lo entendí, podía pelear con él, podíamos pelear todo el tiempo, quizá; pero, por verlo así, por despertar a su lado, podría soportarlo. Podría con lo que estuviera por venir si él despertaba conmigo todas las mañanas y dormía a mi lado cada noche. Eso era lo único que quería, todo lo que esperaba.

Me sonrojé ante tales pensamientos, aunque no tenían nada de malo, sabía perfectamente que era cierto y que vivía con él, de ahora en más, así que me resigné, posiblemente tendría más pensamientos así de ahora en adelante.

 

Me levanté con mucho cuidado, procurando no despertarlo con mis movimientos, bajé en completo silencio, no quería molestarlo, en realidad, quería sorprenderlo. Comencé a buscar algunos utensilios de la cocina para hacerle el desayuno, pensaba en panqueques, o quizá crepas. Sin decidirlo terminé de encontrar todo lo necesario, y al sacar los ingredientes, de manera inconsciente, tomé sólo lo necesario para las crepas, dulces; pero crepas finalmente.

Las preparé haciendo el menor ruido posible, incluso tomé unas cuántas naranjas del frutero e hice un poco de jugo, preparé su café justo como le gustaba, y, luego de todo eso, arreglé la mesa, acomodé los manteles y platos, coloqué los cubiertos en su sitio, serví ambos platos, dejé el café y juego en su respectivo sitio. Yo me serví, además, un vaso de leche, no me apetecía otra cosa.

Y una vez estuvo todo listo, subí nuevamente a la habitación, dispuesto a despertarlo. Al entrar noté que estaba despierto, se estaba duchando, dudé por un segundo si podría haber llegado a percibir el olor del desayuno; pero decidí esperar a que él mismo lo comprobara bajando.

 

Regresé a la cocina a esperarlo, y no habrán pasado más de diez minutos cuando bajó, me sentí morir al verlo como había bajado, únicamente vestía su pantalón y seguía secándose el cabello con la toalla, tenía el torso completamente descubierto, aquella imagen difícilmente se me olvidaría, aunque tampoco me estaba quejando, obviamente.

 

-        Buenos días, Naruto. – me saludó riendo al darse cuenta que sólo lo miraba nervioso y sin hablar. - ¿Naruto? ¡Hey! – siguió intentando hacerme hablar; pero estaba tan apenado y tan embobado mirándolo que no tenía palabras. – Vale, iré por una playera, ya. – dijo molestando, cosa que, de inmediato, me sacó de mis pensamientos.

-        Bu-buenos días. – saludé apenas, sentí la sangre hervir en mis mejillas, estaba por demás sonrojado, eso era seguro.

-        Idiota. – dijo riendo un poco. - ¿En serio hiciste todo esto? – preguntó mirando los platos de desayuno.

-        S-sí, yo… uhm… lo siento. – hablé sonrojado todavía mientras giraba la vista a otro sitio.

-        Naruto – llamó mi atención, aunque no lo miraría, era demasiado vergonzoso perderme así en él. -, no sólo somos pareja, vivimos juntos, ¿recuerdas? Está bien, no me incomoda que me mires, es sólo que nunca lo habías hecho, no así. – dijo apenado, lo pude notar.

-        No, lo siento, es… no sé qué fue. – mentí sutilmente.

-        Claro que lo sabes, idiota. No me mientas. – pidió antes de acercarse.

 

Se paró frente a mí, cosa que me hizo perder completamente el control de mis sentidos, estaba tan cerca, aún escurrían algunas gotas de agua por su cabello, mismas que caían sobre su cuerpo, deslizándose a través de preciosa piel. Perdí por completo la noción del tiempo, estaba más nervioso que nunca, sentí su mano rozar mi mejilla, se acercó a mí y me besó con ternura, terminando de descolocarme por completo. Respondí aquel beso con gusto, casi ansioso, cosa que él notó de inmediato, aminorando el ritmo que yo intentaba imponer.

Tardé unos segundos en darme cuenta que estaba siendo más rudo de lo necesario, Sasuke sólo intentaba besarme con cariño, y yo me estaba dejando llevar por la imagen de su torso desnudo para intentar algo más. Me tranquilicé lo mejor que pude, lo suficiente para devolverle el beso con la misma intención con la que él lo había iniciado.

 

-        No esperaba tu reacción. – dijo él riendo por lo bajo cuando nos separamos.

-        ¿Mi reacción? – pregunté evitando verlo.

-        Sí, quiero decir, sé que te gusto; pero no sueles ser así. No esperé que ni siquiera parpadearas por verme así. – respondió riendo aún, casi molestándome.

-        Lo siento, es sólo que nunca te había visto así. – me defendí apenas.

-        Ya lo habías hecho, la vez que conociste a Saki; pero es culpa mía, siempre salgo así de la ducha, me resulta cómodo. – explicó.

-        Sí, bueno, esa vez intenté no mirarte mucho. – confesé.

-        Bueno, ahora que vivimos juntos espero no sorprenderte mucho cuando salga así. – dijo molestándome ahora sí, se acercó a besarme delicadamente, labio contra labio nada más.

-        Lo seguirás consiguiendo, Sasuke. – admití antes de tomar mi asiento en la mesa de la cocina. – Anda ya, que seguramente ya está helado. – dije apenado.

-        Gracias. – dijo antes de besarme la mejilla para dar la vuelta a la mesa y sentarse conmigo.

 

Desayunamos hablando de tonterías, de todo menos del día anterior. Ninguno quería recordar la pelea, no había pasado el tiempo suficiente, aunque no estaba seguro de si alguna vez sería suficiente, después de todo, era algo fuerte, algo complicado, y sabía que le había dolido sentirse excluido de mi vida, aunque no fuera esa mi intención.

Luego del desayuno me duché, él le sirvió su plato de comida a Saki, pues ya era su hora de comida, y se terminó de alistar. Al salir me vestí rápidamente para poder avisarle que estaba listo.

Salimos con Saki para que paseara un rato, mientras que, al mismo tiempo, nosotros nos despejábamos un poco y buscábamos una tienda de mascotas cercana a nuestra casa, Saki necesitaba comida y queríamos comprarle un par de cosas más, incluso estábamos pensando en adoptar otro cachorro, bueno, cachorra para evitar incidentes, aunque aún no era seguro.

Mientras caminábamos pude ver que unos niños se acercaban a jugar con Saki, quien parecía realmente feliz de verlos, me acerqué a ellos y conversé un poco con los pequeños, parecían muy animados. Me contaron lo mucho que les gustaban los perros; pero no podían tener ninguno donde vivían. Al cabo de un rato había hecho un pequeño trato con ellos y con sus padres que se habían acercado asustados, los fines de semana visitaríamos un parque que no quedaba lejos de ahí y ellos jugarían con Saki todo lo que quisieran, Sasuke estaba de acuerdo, aunque parecía divertirse más mirando, que hablando con los demás.

 

-        Dios, hasta los niños te quieren, en serio, ¿hay algo que no hagas? – me preguntó Sasuke cuando se marchó la familia.

-        No digas tonterías, hay muchas cosas que no sé hacer. – respondí apenado.

-        No te creo. – declaró antes de robarme un beso tierno.

-        Idiota. – susurré por lo bajo.

-        Vamos. – me invitó a seguir nuestro camino.

-        ¿Por qué no hablaste? – pregunté caminando nuevamente a su lado.

-        No me agradan mucho los niños. – explicó.

 

Aquello me dejó pensando seriamente muchas cosas, quiero decir, llevábamos poco tiempo juntos; pero yo sabía desde que era pequeño que quería tener una familia, claro que quería tener hijos, y aunque sabía que quizá Sasuke podría no ser la persona con la que pasaría toda mi vida, me hacía un poco de ilusión pensar que había una pequeña posibilidad de que fuera así, aunque ahora, bueno, no estaba muy seguro de poder renunciar a ese sueño que tenía sólo por estar con él.

Guardé silencio el resto del camino, no podía decirle nada del tema, apenas nos habíamos mudado juntos como para sacar a tema algo tan importante, pensé que, quizá, con el tiempo podría cambiar de parecer, a lo mejor con los meses, o años, Sasuke accedía, y esperaba que sucediera, pues yo estaba seguro de querer hijos, no importaba cuándo sucediera.

Notas finales:

Espero que les haya gustado, lectores hermosos, por ahora les dejo un abrazote aquí y un beso enorme.

Me encantaría leer sus comentarios abajito :3 

Los quiero un montón.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).