“Laberinto de emociones”
*Inseguridad
El era de aquellas personas que tenía una cabeza que no para ni un minuto, que cada segundo pensaba y pensaba. De aquellas personas que, una noche antes de algún día importante, pasaban horas pensando cada palabra que diría, reproducida una y otra vez en su cabeza lo que dirían y harían, las posibles respuestas, los temas que sacar, las palabras que decir.
Por ejemplo, si tenía una entrevista él una noche antes pasaría horas pensando de que hablaría, que diría, que podrían decirle y que responder.
Claro, ese no era el caso esta vez.
Aquí la situación era otra, una entrevista no era la razón por la que estaba dando vueltas en su cama.
La razón era Jung Min, su buen y mejor amigo Jung Min, su amor platónico Jung Min.
Y su próximo video musical.
Desde que el grupo se había separado él y su amado amigo no habían tenido mucho tiempo para verse. Ya no era lo mismo de antes. Se contaban cosas, pero cosas realmente importantes de cada llamada, no era como unos meses atrás cuando hasta lo mas mínimo se lo contaban con detalles, no se veían seguidos así que haiga detalles omitidos, y Hyung Jun sabía que esos detalles muchas veces eran importantes, y al sentir que no eran contados, sentía que de alguna manera, estaba perdiendo a su amigo. Porque llegaría un momento que amos cambiarían. Llegaría un momento en que Jung Min solo lo llamaría para decirle “Tengo novia” o hasta un “Me voy a casar” ¿Quién sabia realmente? El ya no estaba presente cada día para que su amigo le contara a quien conoce y el poder interferir. El no estaba ya junto a Jung Min para cuidar el puesto que el pertenecía pero le daba miedo reclamar.
No habían tenido el tiempo de verse desde hace unos meses, y tampoco lo tenían ahora. Sus tiempos, horarios y fechas, no coincidían, por más que se den los horarios completos del mes de los dos, no había una fecha que coincidiera y Hyung Jun se desanimaba más.
¿Y si el día que lograran verse Jung Min ya estaba cambiado? ¿Y si lo trataba diferente? ¿Si ya no era Jung Min, el que lo consentía? ¿Si le hablaba mal? ¿Si el desagradaba?
¿Si ya no tenían la relación de antes?
El tenia mucho autoestima, se amaba y cuidaba mucho de sí mismo, sabía qué hacer para que las fans gritaran, sabía qué hacer para verse tierno, o sexy, o serio, él sabía exactamente lo que quería y como obtenerlo.
Pero cuando se trataba de Jung Min… no sabía absolutamente nada.
No sabía cómo hacer que Jung Min lo observara y suspirada por él, le sonría, lo consienta, el se esforzaba mucho por conseguir esas cosas y las terminaba consiguiendo. Pero había una cosa que jamás logro y es la suficiente autoestima para creer que Jung Min lo podría ver como algo más que un caprichoso amigo al que quiere mucho.
_ Hola Jung Min, no, no es nada realmente importante solo que recordé que habías dicho que mañana estabas libre y pensé que podrías venir a la filmación de mi nuevo video musical ¿Qué me dices?-recito practicando lo que diría cuando se animara a marcar el numero, la noche cada vez se hacía más y más vieja, el tenía que llamar pronto si quería a Jung Min mañana allí.
_ No puedo decirle así, creerá que no me interesa, o me veré idiota…está bien, tranquilo…-inhalo y exhalo y entonces lo volvió a intentar-hola Jung Min ¿Cómo has estado? Hace mucho no hablamos ¿verdad?... ¡No, no, no! La haga muy larga, lo aburriré-suspiro.
Acostado boca arriba, tomo el celular en sus manos y los estiro para poder verlo, busco el contacto de Jung Min y sonrió al ver la foto que él había puesto.
Era una foto que le tomo la última vez que se vieron. Estaban comiendo y consiguió sacarle una foto en el momento que Jung Min abría su boca para meter el bocado y al mismo tiempo miraba hacia el curioso, un segundos después de que el flash salió y la foto fue tomada, Jung Min se quejo negándose a que el siga con el celular en su manos mientras estaban juntos.
Paso un dedo por su celular acariciando el rostro de Jung Min que se veía en la foto, una sonrisa se formo en sus labios, y el dedo siguió bajando, pasando de la foto al número, en un nervioso movimiento el dedo termino levantándose y bajándose en el dibujito que llevaba directo a llamar, y entonces la pantalla cambio avisando que estaba llamándole, dando un grito mudo se santo alarmado pensando “No, aun no sé qué decirle”.
Pero no podía cortar, sería extraño y por lo orgulloso que es Jung Min, si le llamaba y cortaba, luego no atendería. Froto su rostro con la palma de su mano y se resigno.
_ Hola-atendió Jung Min-¿Hyung Jun, eres tú?-pregunto.
_ He… si-dijo nervioso-hola Jung Min.
_ ¡Hola!-dijo mas animado Jung Min-¿ha pasado algo?-pregunto.
_ No, nada de eso, llamaba para… hacerte… una pregunta-decía tratando de escoger bien sus palabras.
_ Claro, dime.
_ Bueno es que… recordaba que… hace un tiempo tú… recuerdo que mañana tienes el día libre ¿verdad?
_ Oh, sí, sí.
_ Pensé que podríamos vernos…
_ ¿Tienes el día libre?-pregunto Jung Min.
_ ¿Tienes algo más que hacer?-ignoro su pregunta Hyung Jun.
_ Ahh, lo cierto es que tengo planes, me veré con alguien, lo siento, en otro momento será, te tengo que dejar, adiós-y la llamada fue cortada.
_ ¿Qué?-pregunto viendo su celular-¿eso que un rechazo?-parpadeo mirando aun el celular.
Jung Min nunca antes había rechazado sus invitaciones, solía cancelar lo otro y aceptar lo suyo… ¿Cuándo eso cambio?
Parpadeo aun más cuando el celular comenzó a sonar mostrando que Jung Min lo llamaba
_ ¿Qué?-se pregunto confundido y atendió-¿Jung Min?
_ Hola Hyung Junnie-saludo este alegremente como si nada-¿Cómo has estado?
_ ¿Yo?... ¿Qué…?-fue interrumpido.
_ ¿No crees que sea muy molesto hablar por celular? Mejor encontrémonos mañana ¿sí? ¿Qué dices de salir?
Hyung Jun entonces no sabia que hacer, si echarse a reír o llorar, un momento está lleno de miedo e inseguro, al otro sus inseguridades le ganan diciéndole “eres un perdedor al que rechazaron” y su mundo parece caerse y entonces la inseguridad se esconde cuando Jung Min llama y se da cuenta que era una broma.
_ Eres un idiota.
_ ¿Uno con el que saldrás mañana?
_ No, mañana tengo la grabación de mi nuevo video.
_ ¡Tú eres el idiota! ¿Para qué ilusionas?-sonaba enojado.
_ ¿No que tenias una cita?
_ Por eso te llame, para pedírtela, tonto. Si espero que tu deje de tartamudear se haga de madrugada,
_ Yo no tartamudeaba.
_ Dime ya de una vez que quieres si tienes trabajo.
_ Quería pedirte que vinieras a la grabación. Hace mucho no nos vemos, al menos ven y tendremos tiempos para hablar, será menos aburrido.
_ ¿A la grabación del video? ¿Seguro?
_ ¿No quieres?-pregunto pensando que tal vez Jung Min no quería pasar su día libre entre cámaras y personas desconocidas-está bien si no quieres, entiendo, solo creí que hace tiempo no nos veíamos y podríamos vernos al menos así.
_ ¿Qué? ¿Me extrañas?
_ No dije eso, solo dije que quería hablar contigo.
_ Verme en persona es eso… ¿O acaso estas nervioso y buscas mi apoyo?... ¿eso es?-pregunto-¿te sientes nervioso y vienes a mi corriendo? ¡Ohhh! Que tierno-dijo un tanto burlo-tranquilo allí estaré para consolarte-rio.
_ No es eso, no tengo nervios de esa manera, yo estoy confiado en mí.
Hubo un corto silencio.
_ Estaré ahí mañana, tranquilo, nada malo pasara, descansa y mañana nos veremos.
Después de que la llamaba término Hyung Jun supo que siempre ocurría lo mismo con él, siempre que planeaba que decir, todo salía de esta manera, nunca decía las cosas como las planeaba, hacia un lio de todo.
Algunos minutos después su celular sonó anunciando la llegada de un mensaje.
“Sabes que siempre que me necesites estaré ahí para ti. Así sea para darte mi apoyo o tranquilizar tus nervios y ansiedad, sé que es difícil para ti, para los cinco, el estar solo ahora, por eso, asegúrate, de que estaré allí mañana y cuidare de ti… como siempre”.
Era un mensaje de Jung Min que lo hizo sonreír al entibiar su corazón con el detalle de aquellas palabras tan cálidas.
*Preocupación.
Le había mandado un mensaje a Hyung Jun avisándole que en unos minutos llegaría.
Pero no le dijo la razón de su retraso.
Había parado a comprar algo para que su amigo desayunara. Sabía que sería un día largo para él y que estaría agotado y posiblemente muy ocupado para comer algo, o preocuparse en comprarlo. Así que decidió comprarlo y llevárselo, tal vez podría comer mientras lo maquillaban o algo así.
Le gustaba ver la expresión de Hyung Jun cuando recibía comida, hace mucho no podía verla, hace mucho esa expresión no era dedicada a el por ser quien le compre la comida.
Quería ver esa expresión, quería ver la carita sonriente, los ojos brillando, lo quería tanto. Lo extrañaba tanto que había aceptado pasar su día entre muchas cámaras solo por verlo, solo por hablar con él, para cuidarlo como lo hacía antes.
Cuando llego, lo vio a lo lejos como lo peinaban y él se veía al espejo los detalles, en un momento volteo su rostro y lo vio y su cuerpo cosquilleo de emoción cuando recibió la hermosa sonrisa de emoción.
Lo vio ponerse de pie y disculparse con la chica que parecía enojada pero a él no le importo y casi corrió a Jung Min, este abrió sus brazos pare recibirlo entre ellos con un fuerte abrazo, cuidando de no dañar el desayuno que sostenía en una bolsa en una de sus manos.
_ ¡Jung Min!-le grito feliz en el abrazo-llegaste.
_ ¡Llegue!-le dijo Jung Min apretujándolo.
_ Te tardaste-lo soltó y observo la bolsa-¿Qué trajiste? ¿Qué es? ¿Es para mí?-pregunto con esa sonrisa de niño emocionado que aun tenia.
_ Traje algo para que desayunes ¿ya has desayunado?
_ ¡Hyung Jun vuelve inmediatamente!-le ordenaron.
Sentado mientras era peinado, el tomaba aquel café y comía el bocadillo Y Jung Min sentado a su lado lo veía sonriente y escuchaba atento como Hyung Jun contaba como seria el video.
_ Es bueno verte Hyung Junnie, te he extrañado-comento Jung Min haciéndolo atragantar con el café.
_ Ten cuidado o mancharas el traje-lo regaño la chica que lo peinaba.
_ Lo siento-se disculpo el-y tu-miro a Jung Min-no digas cosas como esas tan de pronto.
_ ¿Qué? Solo comente lo mucho que te extrañe, es agradable verte y estar presente cuando te ves tan sonriente feliz y emocionado, me gusta verte así-le aseguro produciendo que las blancas mejillas queden rosas.
Hubo un momento de silencio en el que Hyung Jun bebía su café y Jung Min observaba el lugar en el que sería grabado, aun había gente acomodando los últimos detalles.
_Iré a buscar unos productos, no te muevas-le advirtió la chica ates de alejarse un momento.
_ Jung Min-llamo su atención Hyung Jun, este dirigió su vista a él-gracias por haber venido, por cuidar de mi con este desayuno, tal vez ahora no consigamos un momento a solas muy largo, pero trabajare para conseguirlo antes de que el día a acabe.
_ ¿Y porque quieres un momento a solas conmigo tan largo?-pregunto inclinando su cabeza confundido.
_ Solo… lo quiero.
_ ¿Por qué?-siguió preguntando.
_ No nos vemos hace un tiempo, te tengo aquí ahora, no desperdiciare la oportunidad.
_ Eso no responde mi pregunta.
_ Se te responderá sola más adelante en el día-contesto volviendo a beber del café.
*Ansiedad
Estaba allí, sentado, con muchas chicas alrededor cantando mientras la cámara lo grababa.
Y junto al camarógrafo estaba Jung Min observándolo curioso, atento, pensativo. Jung Min tenía esa mirada de “estoy pensando que sucederá”.
Sabía que lo había puesto ansioso al decirle que más adelante, en el día, sabría el porqué.
El sabia que hoy lograría algo, no sabia exactamente que, pero sería un paso a que Jung Min fuera suyo y ninguna extraña o extraño se lo quitara por más que el no esté alrededor todo el tiempo.
Sabía que Jung Min aun no conocía sus sentimientos. Pero podía hacerse una idea, en sus ojos debió ver algo. El podía hacerse una idea de que Jung Min sentía algo también, y el estaba seguro de que podría hacer que ese algo creciera hasta convertirse en lo mismo que él sentía.
Jung Min era suyo, siempre lo fue y lo seria, aunque no lo sepa, aunque todavía no fuera consiente.
Si seguía ocultando esos sentimientos solo conseguiría volverse loco.
Su mente comenzó a imaginar el momento que conseguiría estando solo los dos, su estomago comenzó a arder de ansiedad y supo que debía tranquilizarse,
Pero era tarde, la ansiedad estaba ahí y hasta que no viviera ese momento no se iría.
_ ¿Cansado?-pregunto Jung Min cuando el permitieron pararse para formar la próxima escena.
_ ¿De estar sentado y rodeado de chicas hermosas? ¿Quién se agotaría de eso?-bromeo.
Jung Min se cruzo de brazos y lo miro con una ceja alzada.
_ No, claro, nadie se cansaría-dijo con un toque de sarcasmo.
_ ¿He?-pregunto al notarlo.
_ Nada… ahora que no hay nadie alrededor ¿me dirás para que querías estar a solas?
_ Hay mucha gente alrededor.
_ Nadie prestándonos atención.
_ Supongo… que podríamos hablar-miro hacia todos lados.
_ Te escucho.
_ Es que…
_ ¡Hyung Jun!-escucho que lo llamaban, se giro y vio a la maquilladora que estaba entre las chicas que salían al video-ven aquí, te presentare a las chicas-le explico.
_ Ahora regreso, no me tardo-aseguro.
Jung Min lo observo con una ceja arqueada, de nuevo.
Bufo sin creer como Hyung Jun saludaba sonriente a las chicas, se dio la vuelta y fue a las sillas donde antes había estados entado cuando llego.
Desde ahí lo observo, sabía que Hyung Jun no regresaría pronto.
Tal vez no era el momento de hablar y su ansiedad llevo a tomar el momento indicado, tal vez debía esperar más para saber la razón por la que estaba aquí realmente.
Porque sabía que era más que solo apoyo, nerviosismo y extrañar, Hyung Jun tenia una razón oculta y el no dejaría que se acabara el día sin averiguarla.
Pero debía relajarse y hacer que la bola de ansiedad en su estomago se desvaneciera, que la bola permanezca no haría que Hyung Jun corriera a contarle.
Su pierna se comenzó a mover mientras esperaba, sabía que Hyung Jun no regresaría pronto, pero la ansiedad permanecía.
De pronto tubo la sensación de que estaba esperando algo, algo más que la razón, algo más importante, pero no sabía que era, la bola de ansiedad se hizo más intensa, más pesada en su estomago. No entendía porque esa sensación pero ahí estaba, esperando algo más que solo la respuesta.
*Celos
La ansiedad no se desvaneció, pero paso a segundo plano cuando otro sentimientos le pego.
Ver a Hyung Jun todo sonriente con las chicas no le gusto, ese niño estaba coqueteando con ellas frente a él.
Lo dejo a un lado solo y se fue a coquetear con chicas.
¡Ese hombre siempre era así!
Siempre lo dejaba en segundo lugar.
Ahora que lo veía coquetear tan tranquilamente, se preguntaba.
¿Cuántas veces su coqueteo funciono y consiguió una mujer para calentar su cama alguna fría noche?
¿Cuántas veces Hyung Jun pudo besar los labios de alguna mujer sin que él se enterada?
No había trascurrido mucho tiempo desde que sus carreras como solitario comenzaron, pero esa sonrisa en Hyung Jun y la forma tan natural de actuar y conversar con las chicas le decía que era algo que hacía a menudo varias veces.
Y ahora el ya no estaba cerca para decirle “No salgas con esa chica, vamos a comer o ver una película nosotros” No podía decir tampoco “no te conviene”.
O su favorito “sus piernas son flácidas, tienen celulitis” y entonces Hyung Jun creyéndole las descartaba, sabía que la debilidad de Hyung Jun eran las piernas.
Y eran incontables las noches que se paseaba frente a el mostrándolas, luciendo sus largas, morenas y suaves piernas, firmes sosteniendo un trasero igual de firme y grande… y ese hombre no pareció inmutarse.
Se cruzo de brazos ahí sentado, sintiéndose cada vez más celoso por las risita estúpidas de las chicas y la gruesa vos de Hyung Jun resonando en el lugar cuando les hacia un cumplido.
Tenía ganas de decirle a Hyung Jun “vete al demonio y que ellas te apoyen” e irse de allí, pero no tenía el coraje para abandonarlo ese día.
Sabía que Hyung Jun no tenía la culpa de sus sentimientos, en cambio, debería sentirse feliz de que su amigo coqueteo tan bien.
Pero demonios, ¿Cómo podría alegrarse de que el hombre que ama coquetee con mujeres frente a su cara?
El no era un hombre pasivo que soportaba mucho, el era de los que no soportaban estupideces de nadie.
Cuando vio el brazo de Hyung Jun estirarse y como los finos dedos tomaban un mecho de cabello de una de las chicas, sus celos lo dominaron, y la risita estúpida de la chica solo fue un colímenlo más fuerte.
“Si tan ocupado estas me iré y nos veremos en otro momento. Suerte hoy Hyung Jun”.
Después de enviar el mensaje vio como Hyung Jun leía el mensaje, el celular lo tenía en sus manos.
Cuando Hyung Jun leyó el mensaje y volteo a verlo con enormes ojos asustados, el se levanto y le hizo una seña de saludo antes de girarse a la salida.
Escuchaba el sonido de sus propios pasos mientras se acercaba a la salida, había sido una pérdida de tiempo venir.
Tal vez hubiera aprovechado mejor su día libre si hubiera dormido, limpiado, salido con amigos, incluso trabajar hubiera sido mejor, porque estar aquí solo provoco que entren sentimientos desagradables en el, pensamientos que durarían días y no podría sacarlos, el recuerdo de Hyung Jun coqueteando con esas chicas duraría los días suficientes como para que alguien note que algo lo tenía distraído.
_ ¡Jung Min!-escucho pisadas sonando fuertemente, cada vez más cerca-¡Jung Min!-la voz gruesa de Hyung Jun lo llamaba otra vez-¡espera!-dijo al alcanzarlo y tomarlo del brazo haciendo que girara.
_ ¿Dónde vas? ¿Por qué?-pregunto con una angustiada cara, esa mirada de decepción.
_ A casa, tal vez a dormir y salir con algunos amigos, n quiero molestarte, obviamente estas demasiado ocupado y tu nerviosismo y ansiedad pueden ser resulto con alguna de las chicas con las que coqueteabas-no pudo evitar el tono de celos que dominaba su voz.
_ ¿Coquetear? ¡Yo no coqueteaba con ellas!-aseguro firmemente.
_ ¿A no? ¿Y qué hacías? Solo sentías lo suave que era el cabello de la chica, solo comentabas como estaba e clima-bufo, cruzo sus brazos y miro a otro lado.
_ Pues si, en resumen si, el cabello de esa chica es muy suave y el clima es mejor que otros días ¿Por qué no comentarlo? ¿Po que no compartir con ellas las anécdotas de cuantas veces termine mojado por la lluvia?
_ Porque estoy aquí y a mi deberías contarme esas anécdotas, ¿quieres sentir mi cabello? También es suave. Pero ¡No! Ve con las chicas y yo me voy a casa.
_ ¡Jung Min, espera!-lo volvió a detener.
_ ¿Qué?
_ ¿Estás celoso?-pregunto observando los ojos furiosos y el ceño fruncido rodeado de dos gruesas cejas perfectamente formadas.
_ Claro que no-negó.
_ ¿Entonces, esto no es una escena de celos?
_ ¿Cómo se te ocurre que haría una escena? Eres idiota-tiro de su brazo quedando liberado.
_ Entonces, no pasa nada si te digo que una de ellas me gusta y planeo invitarla a salir ¿verdad?
_ Vete al demonio, Hyung Jun-dijo dándose de nuevo la vuelta, el no aguantaría eso de nadie.
_ ¡Jung Min! ¿Cuál es el problema?-pregunto Hyung Jun parándose rente a Jung Min.
_ El problema es que pierdo mi tiempo aquí mientras tú coqueteas con ellas.
_ ¡Hyung Jun!-lo llamaron para continuar.
_ Tengo que regresar.
_ Me voy, suerte.
_ No, espera-se negó a que se fuera-tu en verdad me volverás loco-froto su cuello y lo miro-solo no te vayas ¿sí? … ¿Por favor?-pidió.
Jung Min lo observo un momento y dejo escapar una risa.
_ Y tú no me volverás a mi loco ¿verdad?
_ ¡Hyung Jun!-volvieron a llamar.
_ Tengo que ir, pero no te vayas ¿sí?... No hay nadie más, asique tranquilo, solo es trabajo-le guiño un ojo y se alejo.
Jung Min lo observo volver cerca del director y escuchar lo que debía hacer.
Trago saliva y se acerco.
No se iría, después de ese “No hay nadie más” y el guiño… no podría irse.
*Sorpresa
_ ¿Ambos estarán en el video?-pegunto Hyung Jun agachándose ente a la jaula que contenía dos conejos, uno blanco y otro negros.
_ Si, ambos estarán, en diferentes escenas-explico el director.
_ Son muy lindos-dijo Jung Min metiendo un dedo dentro de la jaula para acariciar al blanco y esponjoso conejo.
_ El negro se parece a ti Jung Min-le dijo Hyung Jun acariciando la oreja del negro conejo.
_ ¿A mí?
_ Si, si te fijas bien, tienes el cabello tan negro como el suyo.
_ Tú te pareces mas al blanco.
_ ¡No tengo cabello blanco!
_ No, pero si la piel-se puso de pie riendo-incluso creo que eres más blanco.
_ He obtenido más color jugando al futbol bajo el sol.
_ No, yo creo que es puro maquillaje, lo único que obtendrás de eso serán enfermedades.
_ El sol no enferma.
_ A alguien con tu piel hasta el sol de otoño hace mal, te regalare una caja de protectores… tal vez-se alejo de las jaulas regresando a las sillas, ya habían pasado unas horas y aun no conseguían mucho tiempo a solas.
_ ¿Cómo “tal vez”?
_ ¿Qué si la compro y no te vuelvo a ver por meses?
_ ¿Me quieres ver más seguido?
_ Antes nos veíamos cada día…
_ Si me compras cosas, yo me haría el tiempo para verte.
_ ¿Y eso que significa?
_ ¿Qué crees que significa?
_ No sé, ¿un “avísame cuando quieras verme y me veras”?-pregunto Jung Min.
_ Puede significar eso.
_ ¿Y tú? ¿No tienes interés en verme?
_ Te pedí que vinieras ¿No?
Ambos estaban sentados en unas sillas mientras el director revisaba escenas y armaban lo siguiente, se suponía que venía la escena del conejo, por ello estaban los dos en jaulas.
Desde el lugar en el que ellos estaban se veían perfectamente bien a los conejos en las jaulas.
_ Pronto tendrán conejitos-comento Jung Min mientras ambos reían al ver a los conejos que resultaron ser un macho y una hembra, y como una persona del staff se apresuraba a separarlos.
_ Si el negro es el macho ¿se supone que yo sería la hembra?-se pregunto Hyung Jun.
_ Tal vez ambos son machos-comento Jung Min.
_ No creo.
_ Pues si lo son, entonces en verdad sería bueno ser conejos.
Vieron como se llevaban al conejo negro.
Hyung Jun vio como el hacían señas para que volviera a grabar.
_ No sé, pero si sé que me gustaría hacer y terminar eso seamos o no conejos-Hyung Jun se levanto para irse.
Por un segundo el cerebro de Jung Min quedo en shock, pero al ver la sonrisa que Hyung Jun le dio antes de girarse, hablo inmediatamente.
_ Si lo hacemos, que conste que yo soy el conejo negro-le sonrió de lado.
Hyung Jun se volvió a girar y le dijo.
_ Si ambos son machos no te hagas dueño de un lugar-trato de imitar la sonrisa de lado y continúo.
_ Y luego dice que yo lo volveré loco ¿Qué demonios es todo eso?-se pregunto en un susurro Jung Min.
El y Hyung Jun siempre bromeaban, se escondían tras leves indirectas tal vez, pero no tan… notorias. Estaba seriamente sorprendido por las palabras de Hyung Jun y las suyas propias que no supo controlar.
*Nervios
_ ¿Dónde está el conejo negro?-pregunto el director.
_ No lo sé, lo deje aquí, pero ya no está aquí-contesto la chica que lo había estado cuidando.
_ Búscalo.
_ Ya lo hice, no lo encuentro por ningún lado, no sé donde esta, realmente lo lamento-dijo la chica.
El director, se tomo la cabeza frustrado, no solo había que avisar a una protectora dueña que la pequeña hembra coneja podía estar preñada sino que ahora también el mecho se perdió. Trabajar con animales siempre era un problema, pero trabajar con personas irresponsables era un caos, miro a la chica queriéndola matar con la mirada, pero eso no arreglaría nada.
_ Quiero que busques ese conejo, tiene que aparecer antes del final del día, debe filmar una escena y ser devuelto a su dueña.
_ ¿Sabes?-le hablo Hyung Jun a Jung Min-yo estaba pensando en que tal vez podríamos tomar un descanso y tu yo podríamos ir a comer algo cerca, pero ahora pienso que el director esta lo suficiente estresado como para escuchar algo como eso.
_ ¿Y qué dices de que yo salga a comprar algo y lo traiga?-ofreció Jung Min.
_ No sé si podre sentarme a comer tranquilo.
_ Eso no importa, comes en cada momento libre y yo… mientras te observo.
_ Si… suena bien-miro hacia abajo y busco con su mirada la mano de Jung Min, dudo un poco, pero finalmente, la tomó y apretó-gracias por cuidar de mí.
Jung Min trago saliva viendo las mano, apretó también la de Hyung Jun y subió su mirada observado aquellos ojos rodeados de la pálida piel cubierta de de maquillaje.
_ Yo…-dijo algo nervioso-me agrada poder cuidar de ti después de este tiempo.
Hyung Jun lo miro y sonrió bajando, después, la mirada al sentir sus mejillas calientes.
Alrededor de una hora más tarde estaban ambos sentados y con la comida rente a ellos, mientras a Hyung Jun le retocaban el maquillaje.
_ Abrí la boca-le dijo Jung Min extendiendo su brazo para que la comida que sostenía con los palillos llegue a los labios.
_ Me estas maquillando-dijo el menor con ojos cerrados ya que estos estaban maquillándole.
_ Te maquillan los ojos, no el interior de tu boca, puedes masticar, ya abre-ordeno.
Y los labios del menor se abrieron algo temblorosos por los nervios.
_ No es necesario que me des en la boca.
_ No hables con la boca llena, preocúpate en comer y yo en alimentarte.
_ Ya esta, dejare que comas un poco y luego te retoco el labial-le aviso la maquilladora, luego miro a Jung Min-cuida que no se ensucie el traje.
Jung Min asintió y estiro su mano con una servilleta para limpiar los pequeños labios de Hyung Jun.
_ No soy un niño-se quejo avergonzado.
_ Pero si eres tan tierno como uno-Jung Min le pellizco la mejilla.
_ Ya, para, pareciera que fueras mi novio.
Jung Min no respondió enseguida, se quedo mirando la comida y revolviéndola con sus palillos.
_ ¿Y qué... que… tiene de malo… eso?-pregunto finiendo el nudo de nervios.
_ Na… nada… yo solo lo comentaba-respondió Hyung Jun.
_ ¿Me dirás ya eso que dijiste?-seguía mirando la comida.
_ No es gran cosa...-hizo una mueca con sus labios al ver que Jung Min no lo miraba.
_ Quiero saber… de todas maneras.
_ Tiene que ver con eso de “novios”-su mirada viajo por todos lugares menos Jung Min, buscando algo interesante en que centrarla, algo que lo calme antes de que empezara a tartamudear.
_ ¿Ah, sí? ¿Qué es?-pregunto tratando de no sonar tan interesado como estaba.
_ Ahora que tú y yo no nos vemos seguido… no sé, pensé que…-suspiro, pensó un momento, y estaba por decirlo… pero se hizo hacia atrás y pregunto otra cosa-¿estás saliendo con alguien?
Jung Min giro su cabeza para mirarlo.
_ ¿Yo? … no, en este momento… no-respondió.
_ ¿Y tienes planeado salir con alguien? ¿Estás viendo a alguien? ¿Te gusta alguien?-pregunto sin poder esconder su curiosidad.
_ No, a todas, la respuesta es: No-contesto aturdido-no tengo a nadie, ni busco a nadie… si fuera así sabes que te lo hubiera dicho… ¿y tú?
_ Yo… no. No salgo con nadie, pero… se que quiero a alguien, me gustaría una relación.
_ Oh…-fue lo único que salió de la garganta de Jung Min cuando su mente quedo en blanco.
_ Jung Min…-la temblorosa mano de Hyung Jun busco la de Jung Min, hizo que soltara los palillos y entonces la tomo entrelazando sus dedos, detrás del maquillaje sus mejillas estaban tan rojas que comenzaba a notarse y extenderse por su cuello-¿te gustaría estar con un hombre? ¿Te gustaría estar conmigo y vernos más seguido como más que amigos?-pregunto en un tono bajo, tratando de permanecer calmado y no tartamudear.
Ese momento era especial, no lo podía arruinar con tartamudeos.
*Enfado
_ ¿Qué?-pregunto cuando su mente salió del espacio en blanco-me dices que te interesa alguien primero y luego me dices que salga contigo ¿Qué clase de hombre cínico eres? No estaré con alguien que es así… ¿Qué crees? ¿Que estaré contigo cuando te gusta otra persona eso crees? Eres un…-fue interrumpido a mitad de sus quejas.
_ ¿Por qué siempre piensas lo peor de mí? ¿Por qué piensas que me gusta alguien más y solo te quiero porque esa persona no me quiere? ¿Por qué siempre para ti termino siendo el malo insensible? Tu eres el idiota que no entiendes nada, ni siquiera escuchas bien, solo te quejas-tomo aire y siguió hablándole enojado, con su celo fruncido profundamente-¿sabes? Si no querías nada conmigo solo dilo, di que te da asco o lo que sea, pero no me digas que yo soy el malo aquí o el cínico-tomo nuevamente aire al terminar.
_ ¡Hyung Jun!-lo llamaron, ya que debía cambiarse el vestuario.
_ No te vayas, primero dime lo que tanto me querías decir, he pasado todo mi día libre aquí sin sentido, todo porque tenias algo que decirme lo, dímelo-demando.
_ ¿Qué? ¿Ahora desperdiciaste tu día aquí? ¿Qué? ¿Quieres irte?
_ Tengo una vida, Hyung Jun, una vida aparte de la tuya y tu amistad, una vida y responsabilidades de las cuales son formas parte desde que estamos solos, ¿no lo recuerdas?
_ ¡Hyung Jun!-lo volvieron a llamar.
_ Así que ahora soy algo así como un “estorbo” en tu ocupada vida ¿no? Solo fue caridad de tu parte venir a apoyar a este amigo que te hizo perder el día-rio sin humor.
_ Tampoco quise decir eso así.
Hyung Jun frunció su ceño, nuevamente y lo miro.
_ ¿Sabes algo más? Ya no interesa, si quieres quédate, si quieres vete-miro a el rostro de Jung Min sin expresión mientras hablaba, y a la vez, su ceño fruncido se desvaneció y entonces se dio la vuelta alejándose de Jung Min y acercándose a la mujer que lo llamaba.
Su pecho dolía, pero el enfado era más grande, tenía tanta cólera de lo idiota que fue Jung Min. El todo el día preocupándose de la manera en que le podría decir, y cuando lo hace, el idiota no lo escucha, no compendio sus palabras… o mejor dicho, fingió no hacerlo.
Porque era obvio para el que Jung Min no quería nada, solo se hizo el desentendido, quiso hacer creer que entendió otra cosa, no quiso decir las verdaderas palabras de “me daría asco estar con otro hombre”.
Era comprensible, Hyung Jun fue idiota, no calculo que esa posibilidad era más grande que la de conseguir un “si”.
Jung Min también se dio la vuelta y allí se quedo, sin poder salir, sus manos se cerraron en puños, sus labios se apretaron cuando sus dientes también lo hicieron, su ceño se frunció y su mente aun procesaba lo sucedido.
*Orgullo
Dio un paso hacia la salida y se volvió a detener, su orgullo le decía:
“Vete, vete y que se quede solo por idiota”.
Su orgullo era el que mayormente dominaba su cuerpo y acciones, su orgullo era importante de tan grande que era. Pero algo lo detenía.
¿Enfado? ¿Dolor?
Desde que ese día empezó, gracias a Hyung Jun, solo había estado saltando de una emoción a otra.
Preocupación, ansiedad, celos, sorpresa, nervios enfado y ahora su orgullo… estaba comenzando a sentiré agotado, comenzaba a darle miedo la montaña usa a la que se subió cuando saco sus pies de la cama esa mañana.
Debió saber que no iba a ser un muy buen día cuando el cielo no se mostro lo suficiente celeste.
Pero ¿Qué haría ahora? ¿Esconderse del mal día? ¿Escaparse y esperar a un día mejor dejando los problemas con su amigo ahí?
Eso no sería correcto, sea bueno o no el día, el debía enfrentarlo como el hombre que era, aunque eso este encontrar de su orgullo.
Sabía que debía arreglar esa discusión que tuvo con Hyung Jun. He imaginaba que tendría una hora o más para pensar en que era exactamente lo que debía arreglar y quien de los dos debía pedir disculpas. Al menos una hora tenia ya que tendrán por una hora demasiado ocupado a Hyung Jun y el podría sentarse a observarlo mientras dialogaba con su orgullo y llegaban a un acuerdo.
Sentado, desde lejos, lo observaba, lo veía reír y disculparse cuando fallaba, su gruesa vos gritando un “lo siento” a todos.
Esa gruesa voz, era mucho más gruesa ahora que hace unos años, cuando lo conoció.
Si su mente regresaba a los recuerdos de esa época, podía recordarse a si mismo estúpidamente enamorado, como el adolecente que era, de esa voz, de ese chico alegre que parecía un niño, pero que en realidad era tan responsable como un adulto.
Ese chico que se comportaba como un niño pequeño entre sus amigos más grandes, pero si lo veían frente a su propio hermano pequeño, era todo un hermano mayor al cual el pequeño admiraba.
Ese hombre que ahora observaba, envuelto en un traje, y corriendo a una chica de largo vestido por los pasillos e ese laberinto… ese hombre es el que lo enamoro hace años, pero ¿cuando había cambiado?
Lo suficiente para ser diferente, pero no bastante para que el sentimiento dentro de Jung Min muera.
Su amistad, a lo largo de esos años, había superado muchas peleas, esta, sin duda, también, no era tan grande como otras.
Pero la sentía diferente, sentía que debía se hablada ahora y no después… o algo importante se perdería, pero su orgullo aun le decía “levántate y vámonos”, al parecer no todo el estaba de acuerdo en arreglar las cosas.
Pero, recordando, las palabras de Hyung Jun, supuestamente el no quiso escuchar, ¿Qué no quiso escuchar?
_ ¿Qué le gustaba alguien?-se pregunto pensando mientras lo observaba-el dijo “¿Por qué piensas que quiero a alguien más…?”-recordo-¿mas? ¿Eso quiere decir que solo quiere a una persona, ósea…yo?-se pregunto en leves y bajos susurros, cuando la comprensión de las palabras de Hyung Jun llegaron a su mente, sus ojos se abrieron un poco más de lo normal y luego se cerraron de golpes y su palma golpeo su frente cubierta por su negro flequillo.
Había sido un completo idiota al escuchar y no pensar un poco en las complicadas palabras que decía ese hombre, más bien, al no pensar que esas palabras en verdad significaban su sueño creído imposible.
¿Su orgullo donde quedo?
No lo sabía y sinceramente no le interesaba, había ocurrido bien lejos cuando se dio cuenta que no había razón para estar ahí por idiota que fue.
El esperaba un dia tranquilo, esperaba una grabación en paz, una tarde de risas con su amigo, no este laberinto de emociones.
Hyung Jun con sus palabras y algunas acciones, había alborotado todas sus emociones dentro. Lo había hecho saltar de una emoción a otra.
Ahora solo le preocupaba el cómo decirle a Hyung Jun que si quería que se vena seguido, que disculpe su idiotez.
_ ¿Cuál será la emoción que me falta experimentar hoy?-se pregunto con miedo sabiendo que en pocos segundos lo golpearía.
Ya había dado la vuelta en alguna esquina de ese laberinto y no faltaba nada para que sepa que emoción llegaba.
¿Y cómo se salió de ese laberinto? ¿Había una salida?
Continuara…