Mi hombre oculto
_ Tengo sueño-bostezo Baek Ho en la camioneta, camino al hotel, usando las piernas de Ren, que estaba a su lado, como almohada.
_ Yo también, pero no uso a otros de almohada-hablo Ren al sentir el enorme peso en sus muslos.
_ Cuando lleguemos ¿dormimos?-pregunto elevando la mirada hacia Ren.
__ ¿Juntos?
_ Compartamos habitación esta vez.
_ Olvídalo, Baek Ho, Ren duerme solo conmigo en Japón-hablo JR desde los asientos de adelante.
Ren sonrió enormemente ante esa reclamación de parte del líder.
Ren llevaba ya vario tiempo sintiendo esas mariposas volar y revolotear intensamente en su estomago cada vez que el líder cuidaba de él, le daba atención o abarcaba toda su atención.
Siendo el más pequeño del grupo y debido a su apariencia, solía recibir bastante atención de los miembros, y cuidados, pero solo cuando venía de JR las mariposas se alborotaban cosquilleando intensamente.
Ren no lo sabía, pero JR aprovechaba cada oportunidad que encontraba para tener su atención. Aprovechaba cada segundo que podía observarlo.
Su momentos favoritos eran cuando la cámara lo enfocaba y el liberaba ese ser encerrado tras la muralla de tranquilidad y silencio que le daba un aura misteriosa. Cuando él quería salía detrás de esa muralla de misterio y su luz explotaba en un baile sexy frente a cámara, mostrando toda esa sensualidad que poseía y mostraba solo si quería. Luciendo su mirada, sus ojos, sus labios su pelo, su cadera, piernas y acompañado de sus brazos, extendiendo su cuello.
El amaba bailar y disfrutaba haciendo coreografía de mujeres, eran mucho más sexy que la de los hombres, según él, con la de las mujeres su figura de contoneaba y se lucia más de esa manera.
JR bebía sediento de cada segundo de esos momentos, observándolo en silencio con una sonrisa muchas veces.
Pero también disfrutaba observando al Ren tranquilo con esa aura misteriosa, ese Ren callado que hablaba lo necesario, disfrutaba ver sus labios en forma de corazón moviéndose lentamente a cada palabra, las manos acompañando lo que decía, el cabello rodeando los bordes de la cara, ese cabello rubio con raíces negras, cabello lacio, tal vez con algún bucle hecho en la unta del flequillo, ese flequillo que cubría parte de su rostro, pequeño, redondo y hermoso rostro, también un ojo algunas veces.
Pasar tiempo en compañía del menor, también era agradable, increíblemente agradable.
Aunque el principal interés en Ren muchas veces era la moda o a música, cosa que no coincidían con el interés general suyo de los comic, alguna ve encontró algún comic que a Ren le interesada y logro que lo leyera para comentarlo, en otras ocasiones, una charla de moda se volvia interesante y productiva e informativa al tener que saber que vestir. Pero las charlas que mas disfrutaba eran las de músicas, grupos que a ambos le gustaban coreografías que ambos querían aprender y lo hacían juntos o competían para ver quien al aprendía más rápido y mejor, esas horas eran en las que mas reía, las que más disfrutaba. Ren muchas veces terminaba diciéndole “Ríes mucho”.
Cuando llegaron al hotel, el se aseguro, personalmente, que Ren y el compartieran habitación como siempre lo fue y seguiría siendo en Japón.
Cuando la noche llego, JR observó a Ren salir del baño, al haber terminado de ducharse, con su pelo húmedo, el delgado y pálido cuerpo cubierto de una camisa fina, blanca y debajo unos bóxer negros, Ren solía dormir así el ya lo sabía bien. El mismo dormía solo en bóxer asique no había pena entre ambos.
Pero el vero con solo una parte de leve luz alumbrándolo y con ese caminar y postura delicada y lenta por el cansancio del día, un cansancio que Ren parecía siempre llevar también, lo hizo pensar otra vez de cuán grande era el parecido de Ren con una chica, pero cuando este se tiro en la cama bostezo, todo con muy poca delicadeza y modales, el recordó que Ren era un hombre, un hombre en todas las palabras en cuanto a su comportamiento.
_ Si las fans te ven así se decepcionarían-bromeo al verlo JR.
_ Si las fans me ven así se tirarían sobre mi-bostezo.
_ Ahh, muy cierto… ¿Cómo? ¿Así?-pregunto tirándose sobre él, con una pierna a cada lado del delgado cuerpo y sosteniéndose por sus brazos a cada lado de la cabeza.
_ ¿Qué haces? Quítate-se quejo removiéndose bajo JR.
_ ¿Por qué?-pregunto con una pequeña sonrisa- ¿Lo hice mal? ¡Oh! Dei gritar ¿verdad? Las fans siempre gritan y luego se abalanzan.
_ Ya deja de bromear, bájate-inflo sus cachetes.
_ A diferencia de las fans, y no pierdo segundo gritando, es que, siempre me pregunte ¿no se dan cuenta que pierden como tres segundos gritando?
_ Expresan su emoción.
_ Mientras ellas expresan su emoción el ídolo escapa con esos tres segundos de ventaja.
_ Ya, bájate, hablo enserio- frunció su ceño, aun con los cachetes un tanto inflados y sus labios, en forma de corazón, fruncidos, formando un pequeño corazón arrugado.
_ ¿O qué? ¿Hablas enserio? ¡Ah, no! ¡Sacas tu lado hombre! ¿Verdad?-rio.
_ No te burles de mí-exigió como niño.
_ Hablo enserio-imito la voz de Ren y luego rio-¿sacaras esa fuerza escondida y me golpearas?
_ Puedo hacerlo si sigues de molesto.
_ ¿Y luego qué? Estoy aquí y me vengare-aseguro.
_ Y yo huiré y dormiré con Baek Ho.
JR frunció el ceño.
_ Eso no se vale.
_ Entonces dormiré con Minhyun.
_ Tampoco vale.
_ Con Arón.
_ ¡Tampoco se vale!
_ ¡Entonces déjame ir sin que te golpee!
_ ¡Tampoco se vale!
_ ¡¿Y que demonios se vale?!-exigió saber.
JR suspiro y se tranquilizo.
_ Que saques tu lado hombre pero no huyas.
_ Me tienes cansado con el lado hombre, soy un hombre ¿Qué? ¿Tengo un lado que no es hombre?
_ Claro, tienes ese lado delicado que parece chica.
Inmediatamente Ren se le olvido que podría ser golpeado, que JR era mayor, s ele olvido todo y lo mando a volar, impulsándolo con su cuerpo al aire y mandándolo al duro suelo desde donde el mayor gimió adolorido por su cabeza que dio directo contra la superficie.
_ ¿JR? ¿Estás bien?-pregunto varios segundos después cuando la culpa lo atrapo, se asomo por el borde de la cama y observo al mayor.
_ ¡¿Qué demonios te pasa?! ¿Por qué hiciste eso?
_ Tú empezaste-se defendió con un puchero en su rostro.
_ Yo estaba jugando.
_ ¡Dijiste que parecía chica!-grito recordándoselo.
_ ¿Y que? ¡Dije la verdad!
Inmediatamente una almohada comenzó a golpearlo una y otra vez, Ren estaba enfurecido, el no era un chica, era hombre, independientemente de cómo se tenía que ver.
_ Yo no soy una chica, soy hombre, no me trates de chica, te merecías que te tire, te merecías golpearte la cabeza, te merecías mucho mas, no soy una chica…-sus quejas seguían y seguían acompañadas de mal golpes.
_ ¡Yah!-grito sosteniendo la almohada y quitándosela, pero tan fácil como se la saco, Ren consiguió otra y volvió a pegarle repitiendo las quejas.
_ ¡Yah!-repitió el grito tirándose hacia la cama para quedar sobre la almohada que estaba sobre Ren, sus cuerpo solo se separaban por esa almohada, los brazos de Ren aun sostenía la almohada por los costados, la almohada llegaba hasta el borde de su barbilla.
Ren se encogió al verlo tan cerca y oculto la mueca de miedo en sus labios tras la almohada, pero sus ojos lo delataban, aunque esto aun tenía una chispa de furia.
_ No te lastimare, así que no mires con miedo.
_Dijiste que te vengaras.
_ ¿Y ahora te acuerdas? Después de todo lo que me golpeaste no sirve que lo recuerdes.
_ ¿Entonces qué quieres? ¿Qué e quede en silencio mientras me llamas chica? ¡No soy una chica, soy un hombre! Eres odioso cuando dices cosas que me duelen.
_ Yo sé que no eres una chica-le dijo en un susurro lo suficiente alto para que Ren escuchara-lo sé bien, todo lo sabemos, pero eso no evita que te veas delicado y hermoso, lo sabes.
_ Eso no me hace chica.
_ No eres chica-volvió a decir tranquilizándolo-detrás de todo ese pelo y delicada figura con hermoso rostro, yo mejor que nadie sabe, que oculto hay un hombre…mi hombre.
Los ojos de Ren se abrieron un poco más al escuchar las últimas palabras.
_ ¿Tu…?-pregunto susurrando.
_ Si… mío- sonrió lo que provoco que sus ojos se hicieran pequeños y finos, pero eso no importo porque los cerro y bajo su cabeza hasta que con delicadeza, timidez y precaución sus labios tocaron los labios rojos, dulces y en forma de corazón, de Ren.
Y Ren ya no pensó, nuevamente no lo hizo, no le importo si debería enojarse por ser besado como si fuera chica, no le importo saber el porqué del beso en sé momento, solo le importo corresponder a ese beso, a esos labios.
Mientras sentía a sus mariposas extender sus alas y volar haciendo que su estomago ardiera de ansiedad y emoción, sus manos soltaron la almohada y subieron para aferrar sus largos dedos al cuello y mentón de JR, sin dejarlo que se apartase, aunque no parecía este querer hacerlo.
El no sabia exactamente dar un beso, mucho menos uno que incluyeran lenguas húmedas y cálidas, pero sabía que quería eso y entonces dejo que su lengua avanzara y se deslizara por los labios de JR pidiendo entrar, una lengua suave y caliente lo recibió como si fuera el agua que espero durante horas, meses, incluso años sus bocas no se separaron pronto y ninguno sabia cuando cederían a dejar ir al otro, tampoco sabía que pasaría y dirían cuando al aire volviera a sus pulmones, pero no era cosa que les importara demasiado.
El principal objetivo en ese instante, es ese presente, era dar en ese beso lo mejor, tratar de demostrar lo que sentían y tomar todo lo que deseaban.
FIN.