Templo de cáncer.
Shun aun sigue sentado en el sofá pensando en lo ocurrido, aun no puede creer que Hades lo haya tratado así. Quiere regresar el tiempo atrás. Regresar aquel momento, cuando estaba en sus brazos fuertes y protectores, suspira cansado recordando aquella noche, el cual lo hizo suyo, gozo en su compañía- Solo esta usando a Afrodita, para darme celos, es eso lo que hace- pensó para si mismo y así sonreír de satisfacción. Ahora el jugara a su manera, le enseñara que es el mismo joven que conoció, y provoco aquella noche. Corre al baño a ducharse, ahora le dará una gran sorpresa que jamás olvidara, al estar listo se pone su mejor ropa – Tengo que verme muy atrevido para ese dios- desordenando su cabello.
-A esta hora Afrodita y Death ya deben de estar entrenado- sube casi corriendo aquellas escaleras. No dejaría que nadie le viese. El único que debe de verlo ese ese dios que cambio hasta su mundo, lo hizo alguien diferente. Al llegar cansado, pero no se detiene, entra al cuarto de huéspedes, pero, no esta ahí
- ¿Dónde estás Hades?- va al cuarto de Afrodita y ¡BUM!- ¿Hades duerme con él?- enojado, o más bien celoso por lo que ha visto reclama mentalmente- Se supone que es mi amigo y no debe de dormir con lo que no es suyo-
Tratando de controlar su tono de voz que le puede delatar su enojo, se acuesta a un lado- Buen día mi señor Hades- jugando con el cabello de él, para después irle dando pequeños y cálidos besos.
- Hades- lame su sus labios para después morderlo suavemente, se sube encima de él para hacer unos débiles movimientos.
-Afrodita- Ese dios le llama a gritos, con firmeza le toma de las caderas- Afrodita, sigue- al despertarse y ver que el que esta encima suyo no es él que desea se alarma- ¿¡Shun!? ¿¡Que haces aquí!?- Pero como el bien sabe a lo que vino le sonríe plácidamente, lo empuja de manera brusca para incorporarse a la cama con tanta tranquilidad- Pensé que eras Afrodita, pero recuerdo que no eres ni la mitad de él. Eres un regalado que viene aquí sin su permiso- bostezando para no tener que verle- Por que no haces algo más útil, vuelve con tu pareja-
Shun quedo alarmado-¿Qué dijo? ¿Le llamo Afrodita? ¿Es un regalado? ¿¡Amar a ese dios le hace regalado!?- Quedo atónito a lo que ha dicho, jamás creyó escuchar eso de él. De la persona que aun ama.
-Hasta inexperto eres, tratar de seducir y ni lo haces bien- Comento de nuevo aquel dios que rie de esa torpeza.
-Inexperto?- su voz se comenzó a quebrar, jamás creyó escuchar tal cosa- ¡Hades! Jamas me compares con el poca cosa de afrodita- grito aquellas palabras, que hizo que el mismo templo temblara- No me vuelvas a llamar inexperto, eso que yo hice por ti, a ti antes te gustaba- abofeteando el rostro de aquel dios.
Hades se contuvo, nunca nadie le toco el rostro- ¿¡Como te iba a pedir que te bajaras si era lo único que sabias hacer!? Y sin mis gemidos nunca te lo dijeron pues mis acciones si, recuerda que después del sexo te dejaba solo y era para buscar a alguien que me completara aquella noche catastrófica, y tu mismo lo has dicho antes, pero si nunca te dije esto era porque te quería de verdad, pero ya no.- El templo quedo en completo silencio, aquel dios esta enojado- ¡Cuando termines el teatro que has montado aquí, vete!-
Shun quedo sin habla, aquellas palabras le quedaron clavadas, eso lo más doloroso que ha escuchado de ese hombre, ni si quiera Death, que es cruel, le hablo de tal manera. Sin darse cuenta comenzó a llorar. Se ha callado ese que sentía por el. Al salir del cuarto, se topa con la mirada de sorpresa de Afrodita.
-Shun ¿Qué haces aquí?- colocando el vaso a un lado mientras le ve llorar- ¿Qué pasa? ¿Por qué lloras?-
Shun tomo como una forma de exagerar las cosas mientras sigue el llanto-Tuve una discusión con Hades, quería venirte a ver pero no sabía que estabas aquí, y al entrar, me trato muy mal y hasta me pidió que me largara de tu vida- abrazándolo para así buscar consuelo y cierta molestia entre esos dos.
En eso la puerta del cuarto, que ahora comparte con ese dios, se abre con cierta brusquedad, de nuevo todo quedo en completo silencio.
-Shun puedes retirarte de una vez- conteniendo los celos, le molesta que ahora le ponga las manos encima a lo que pronto será suyo- Afrodita y yo debemos de hablar-
Afrodita quería decir algo pero le temía a esa mirada que reflejaba molestia, se quedo en completo silencio- Shun, deja que yo hable con el señor Hades- la voz le tiembla pero trata de mantenerle la mirada.
Hades se llevo consigo y sin poder pensar las cosas le besa con obligación.
Continuara.