Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

"Corazones De Papel" -Osomatsu-san- por Syo Kurusu Love Love kokoro

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Bueno, aquí está mi actualización y para los que siguen mi fic de Sekaiichi, ya casi tengo listo el capítulo de Kisa. :3

Sin más, aquí les dejo el capítulo, y gracias por leer. ♥♥♥

-Ichimatsu-

No sé cuándo empezó, pero para cuando lo noté, ya era demasiado tarde, ya no había vuelta atrás, me sentí como un enfermo, pero ya estaba perdidamente enamorado de aquel idiota, ya estaba a merced de aquel tonto… Ya me había enamorado de mi propio hermano, de aquel que nos saca a todos de quicio, exacto… Yo me enamoré de… Karamatsu.

Luego de que me diera cuenta de este sentimiento, intenté actuar tan normal como me fuera posible, pero Karamatsu de un momento a otro había comenzado a evadirme o al menos eso parecía, porque cada vez que nos quedábamos a solas, él se precipitaba a retirarse, cuando intentaba hablar con él, me respondía cortante y se iba o cuando se tenía que quedar junto a mí, tomaba distancia y evitaba estar cerca de mí.

El día de hoy decidí ir al albergue a ver a los gatos que llevé hace unos días, pero el tiempo se me fue volando y anocheció, así que regresé a casa, pero al llegar vi a Karamatsu parado frente a la puerta, inmóvil y sin decir nada, así que me acerqué a él.

-Karamatsu, ¿qué haces aquí afuera? ¿Por qué no entras?

-¡¿E-Eh?! ¡¿I-Ichimatsu?!

-Eso es obvio, ¿quién más puedo ser, idiota?

Me sentía con una gran fatiga y el silencio de Karamatsu no ayudaba.

-¿Y bien?

-“¿Y bien?”

-¡¿Qué demonios haces afuera?!

Karamatsu parecía ido y yo me sentía de malas, así que le grité.

-Ah, lo siento… Es sólo que… Estaba esperando algo, creo que será mejor que me vaya.

Aquí iba de nuevo, me dio la espalda y avanzó algunos pasos, pero yo le detuve.

-¿A dónde vas? Ya es noche. Además… Hoy veríamos la película de terror que compramos, ¿acaso lo olvidaste, Kusomatsu?

-¿Eh? N-No, para nada. Yo… Iré a comprar algunas bebidas, después de todo es lo único que nos falta, ¿no?

-Sí, las botanas las compraron Osomatsu-niisan y Choromatsu-niisan hace un rato.

-B-Bien. Entonces, ya vuelvo. Entra ya, hace frío.

-No. Te acompaño, después de todo, no podrás cargar tú sólo las cosas.

-¡No! E-Está bien, iré solo. Good bye, my brother.

Tras decir eso, Karamatsu corrió y yo me quedé inmóvil, en verdad no entendía el por qué se comportaba de este modo, es decir, era imposible que se hubiera dado cuenta de mis sentimientos, él es un verdadero idiota… Entré a la casa y escuché a mis hermanos hablando de Karamatsu y de mí, así que me acerqué a la sala.

-¡Ichimatsu!

-¿Qué pasa, Osomatsu-niisan?

-Oye, Ichimatsu… ¿Acaso estás peleado con Karamatsu?

-No. No nos hemos peleado, ¿por qué lo dices?

-Pues últimamente parece que te evita y creímos que tal vez se habían peleado.

-No, para nada. A decir verdad, yo tampoco comprendo por qué me está evitando. De hecho estaba aquí afuera hace poco y me ofrecí para acompañarlo por las bebidas, pero se negó y se fue corriendo.

Estuvimos hablando un poco más del tema y después Todomatsu se levantó a poner la película, pero en ese momento llegó Karamatsu.

-¿Por qué tardaste tanto, Karamatsu?

-Lo siento, después de todo me fue difícil cargar las bebidas.

-Por eso te dije que me dejaras ayudarte, pero te largaste corriendo.

-Lo siento, Ichimatsu.

-Bueno. Sentados, ya está todo listo, sólo falta que tomemos asiento. A dos de nosotros les tocara estar en el suelo.

Osomatsu-niisan ya estaba acomodado en el sillón, al igual que Jyushimatsu, por lo cual tendríamos que decidir quienes estarían en el suelo… O eso creí, porque Osomatsu-niisan jaló a Choromatsu junto a él, a lo que Todomatsu comenzó a alegar y terminamos por hacer piedra papel o tijeras, que Todomatsu y yo perdimos. Debo de admitir que me hubiera gustado estar junto a Karamatsu, pero era imposible.

-Ah, rayos. Creo que de todas maneras me tendré que quedar en el suelo.

-No te preocupes, Totty.

-¿Eh? ¿De qué hablas Jyushimatsu-niisan?

-Si quieres, puedes tomar mi lugar. Yo quiero sentarme con Ichimatsu-niisan.

-¡¿Eh?! ¡¿En verdad?!

-Sí.

-¡Gracias, Jyushimatsu-niisan!

Todomatsu abrazó a Jyushimatsu, le besó la mejilla y se sentó al lado de Karamatsu.

-Ahora sí, tomen cada quien su plato de botanas, sus vasos y guarden silencio… ¿Ya puedo poner la película?

-¡Sí!

Vimos toda la película y hubo escenas que en verdad me asustaron, por lo cual terminaba abrazado a Jyushimatsu por impulso, cuando la película terminó se fue la luz y eso nos alteró un poco, así que nos fuimos a dormir, pero después de un rato, los idiotas de Osomatsu-niisan, Karamatsu y Jyushimatsu, nos asustaron al jalar nuestros pies mientras estábamos dormidos, por lo cual los golpeamos, después de eso se volvieron a dormir, pero yo no podía conciliar el sueño y me quedé observando a Karamatsu.

-Ichimatsu… Ichimatsu.

Él comenzó a susurrar mi nombre y me puse nervioso, pero acaricié su mejilla con temor y lo que me sorprendió fue lo que dijo después.

-Te… Te amo… Ichimatsu.

Al escuchar eso, me giré y le di la espalda, me sentía realmente avergonzado y sentía que estaba sumamente sonrojado, intenté calmarme y después me fui a tomar un poco de aire, pero me encontré a un gatito y me quedé con él, poco después llegaron Choromatsu-niisan y Todomatsu.

-¿Ichimatsu? ¿Qué haces aquí?

-No podía dormir y vine a tomar un poco de aire.

-Ya veo… Oigan, tengo una idea.

-¿Qué es Todomatsu?

-Deberíamos de regresarles la bromita a esos tontos, ¿no creen?

-¿Y cómo?

Estuvimos planeando el cómo asustarlos y efectivamente lo logramos, así que no podíamos parar de reír ante su reacción tan estúpida, ellos se levantaron molestos y entraron a la casa, así que nosotros hicimos lo mismo y nos dormimos como era debido, sólo que yo le di la espalda a Karamatsu para no sentirme tan incómodo y al no poder dormir hice una pregunta al aire, creyendo que Karamatsu estaba dormido.

-Karamatsu… ¿Por qué me evades?

-N-No lo hago.

Eso me sorprendió pero seguí hablando.

-Claro que sí, evitas quedarte conmigo a solas o estar cerca de mí, ¿por qué?

-Lo siento… Preferiría no decirte la razón, sólo… Intentaré ya no hacerlo, ¿te parece bien?

Escuchar eso me hizo enojar y le grité en voz baja.

-Haz lo que te dé la gana.

Me cubrí la cabeza y poco después me quedé dormido, pero me desperté después de un buen rato, al escuchar que Karamatsu me susurraba al oído.   

-Ichimatsu. Ya vamos a desayunar. Anda.

-¿Mmm? ¿Q-Qué hora es?

-Las diez de la mañana. Vamos, nos están esperando.

Cuando reaccioné, me separé rápidamente de él, al notar que lo estaba abrazando, Mi corazón comenzó a latir rápidamente y mi voz se sentí temblorosa.

-V-Vamos a desayunar, apresúrate Kusomatsu.

Tomé una almohada, me puse de pie y le aventé la almohada en la cara.

-I-Idiota, Kusomatsu.

-¿E-Eh? ¿Qué hice?

-¡Cállate y camina!

Me dirigí al comedor y tomé asiento junto a Jyushimatsu. Poco después llegó Karamatsu y se sentó junto a Totty. Estuvimos desayunando y después me fui a lavar la boca, al terminar me fui a la sala con ellos y Karamatsu se sentó a mi lado, pero me levanté rápidamente.

-¿A dónde vas, Ichimatsu?

-No es de tu incumbencia, Kusomatsu.

-¿Ichimatsu-niisan? ¿Estás molesto?

-No, Jyushimatsu. Y-Ya me voy.

-¿Eh? Pero dijiste que me acompañarías a mi práctica.

-No te preocupes, llegaré a tiempo.

Salí de la casa tan rápido pude y me fui a caminar por un largo rato hasta que mis pies no pudieron más y me senté a descansar cerca de un combini. Realmente me comenzaba a sentir como un verdadero idiota, pero… ¿Qué mierda puedo hacer ahora? El idiota de Karamatsu tiene la culpa… Si él no hubiera dicho eso… Yo no lo estuviera evitando ahora. Es todo culpa suya… Es culpa suya….

No sé porque, pero algo en mí se rompió y comencé a llorar, así que tan sólo oculté mi rostro y cuando me tranquilicé, me dirigí a casa.

-¡Ichimatsu-niisan!

-Ah, Jyushimatsu. Lo siento, llego algo tarde.

-No, no. Está bien. Karamatsu-niisan nos va a acompañar.

-¿Eh? ¿Por qué?

-¿No puedo?... Después de todo quiero ver a Jyushimatsu jugar y me vendría bien tomar algo de aire fresco.

-Jyushimatsu, ¿ya tienes todo?

-Sí, ¿y ustedes, Ichimatsu-niisan?

-¿Eh? ¿A qué te refieres?

-Estaremos hasta las siete de la tarde. Son cinco horas, ¿no llevaran nada para comer y beber? Después de todo hace demasiado sol y no hay bancas donde sentarse.

-Don´t worry, my Brothers. Ya tengo todo para ambos. Vámonos antes de que sea más tarde.

Ignoré la respuesta de Karamatsu y nos fuimos al parque donde jugaba Jyushimatsu, pero nos fuimos cerca de un gran árbol para cubrirnos de tan insoportable calor.

-Iré a jugar. ¡Hustle, Hustle! ¡Muscle, Muscle!

Jyushimatsu dejó su mochila, se fue corriendo y me quedé a solas con Karamatsu, así que de algún modo me comencé a sentir nervioso. Él colocó una manta sobre el pasto, se sentó y dejó la mochila a un lado.

-Ichimatsu. Sit down.

-Juro que si vuelves a hablar así te golpearé.

Karamatsu me miró extrañado pero no dijo más, así que me senté al otro lado, para estar alejado de él.

-Ichimatsu… ¿Hice algo que te molestara o porqué haz estado más distante de lo usual?

-No te creas demasiado, Kusomatsu… Simplemente no he estado de humor.

-¿De humor? ¿A qué te refieres?

-No es nada… Yo me entiendo.

-… Ven aquí, siéntate a mi lado.

-No, gracias. Aquí estoy bien.

-Por favor, necesito decirte algo.

-No me importa. Cállate.

Karamatsu dejó escapar un suspiro y se recorrió, hasta que quedó a mi lado.

-… Ichimatsu, ¿no has sentido alguna vez que estás tan solo pese a estar rodeado de gente?

-Claro que lo he sentido… ¿Por qué lo dices?

-Es que eso me pasa últimamente.

-¿Pero qué dices…? Siempre estás con Todomatsu y con Chibita.

-Jajaj, lo sé, pero… De algún modo, siempre que Totty está con ustedes es como si yo no existiera y es lo mismo con Chibita.

-Tú… Tú no tienes idea de lo que es estar solo, Kusomatsu.

-¿Pero qué dices? Tú siempre estás con los demás y con Jyushimatsu.

-Eso no tiene sentido… ¿Acaso eres estúpido?

-¿Qué quieres decir con eso?

-Cuando estamos todos, yo siempre me mantengo escuchando, es como si no estuviera y con Jyushimatsu ya casi no he pasado tanto tiempo, porque ha estado saliendo a jugar muy seguido, ¿acaso a eso se le puede llamar compañía? Al menos, tú hablas más con Chibita y Todomatsu, que yo con Jyushimatsu.

-… Ichimatsu, lo siento. Hablé sin pensar.

Ambos nos mantuvimos en silencio y nos quedamos viendo a Jyushimatsu jugar. De algún modo era… Algo cansado el permanecer cerca de Karamatsu. Había algo que me agotaba, algo que no me dejaba estar en paz.

Ya había pasado un rato y el silencio se comenzaba a tornar incómodo, pero Karamatsu lo rompió.

-No tenía idea de que Jyushimatsu también le enseñara a niños pequeños, ¿tú sí?

-Sí, me lo dijo hace tiempo. Dijo que mientras jugaba, le ayudaba a los pequeños que querían aprender a jugar.

-Ichimatsu… Siempre me lo he preguntado, pero… ¿Por qué Jyushimatsu y tú son tan cercanos? ¿De qué rayos hablan?

Eso me tomó por sorpresa y me mantuve en silencio por algunos segundos, hasta que fui capaz de hablar.

-Él y yo nos volvimos tan cercanos, porque-

-¡Ichimatsu-niisan! ¡Karamatsu-niisan!

Volteamos a ver a Jyushimatsu que corría tan entusiasta hacia nosotros.

-¿Qué pasa, my Little brother?

-Ya terminé, puedo descansar un momento. ¡Vamos a comer!

Jyushimatsu se sentó y sacamos la comida que traíamos.

-¡Ichimatsu-niisan! ¡Ichimatsu-niisan!

-¿Qué pasa, Jyushimatsu?

-¡Di, “Ahhh”! ¡Di, “Ahhh!

-¿Eh?

-Anda. Es algo que te gusta, lo hice para ti.

Solté un suspiro y abrí la boca, para que Jyushimatsu me diera la comida.

-E-Esto está delicioso.

-Lo hice yo mismo.

-¿Eh? ¿Qué es lo que le diste, Jyushimatsu?

-Son onigiris con relleno de frijol dulce. Son los favoritos de Ichimatsu-niisan.

-… Ya veo…

Karamatsu se había quedado inusualmente tranquilo durante toda la comida y se mantenía casi ajeno a la plática, pero cuando Jyushimatsu volvió a jugar, él me miraba de manera extraña pero se mantenía muy callado y serio.

-¿Y bien?

-¿Qué pasa, Kusomatsu?

-¿Por qué son… Tan cercanos ustedes dos?

De alguna manera, Karamatsu se veía distinto, parecía muy serio, desanimado, indiferente y triste, pero no podía comprender el porqué. El hecho de que él estuviera así, me ponía nervioso, ¿qué demonios tenía?, ¿cómo es que de un momento a otro se desanimó tanto?

-Pues él y yo-

-¡No! Olvídalo… Prefiero no saberlo…

-¿Qué mierda te pasa, Kusomatsu?

-No es nada. I´m fine.

-Si no me dices lo que te pasa, juro que te golpearé tan fuerte que podría matarte, maldito Kusomatsu.

-… Ichimatsu… En verdad los envidio… Ustedes dos son tan… Cercanos.

Notas finales:

Gracias por leer, espero les haya gustado y me dejen su opinión, nos vemos. ♥♥♥


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).