Un chico de cabello azulado corría detrás de uno de cabello castaño claro, hasta que este quedo rodeado en un callejón
-Este es tu fin...sera mejor que hables- amenazo mientras uno de sus ojos se empezó a transformar en un *kakugan
-...No tengo porque explicarte nada- respondió el castaño acomodando sus gafas mientras sus ojos se ponían igual que el del otro
-Tsk, eres una molestia...- dijo chasqueando la lengua
-Veo que eres de un ojo como Kaneki- dijo el castaño mirándolo fijamente
El otro se tenso ante la mención de su progenitor
-Quien te hablo de el?!- le exigió saber mientras liberaba un kagune *ukaku
-Así que el kagune de tu madre...- murmuro entrecerrando los ojos
Repentinamente, el ghoul de un ojo endureció su ukaku y comenzó a lanzarlos hacia el otro, el cual los bloque con su kagune, el cual era un *koukaku
-Tsk...eres desagradable, pero no puedo permitir que vayas por ahí, divagando información de mis padres!- exclamo y a la vez saco un *rinkaku
Se lanzo contra el castaño, el cual con un salto hacia atrás logro esquivar el ataque por poco
-También el Kagune de tu padre? Así que un *quimera eh...- el castaño se relamio los labios y libero un *bikaku con el que empezó ha atacar a la vez que se defendía con el otro
Ambos comenzaron a pelear, algunos ataques llegaban a su objetivo, mas la mayoría no, pues ambos eran fuertes, pero para entender que es lo que sucede ahí, regresaremos unos años atrás...
16 años atrás...
Kaneki se encontraba atendiendo en anteiku ha algunos clientes junto a sus compañeros
-Kaneki- lo llamo Touka
El albino se acerco a ella con una sonrisa
-Saldré un rato, estas a cargo, asegura te de que todo este en orden- pidió mientras se ponía su abrigo y bufanda
-Lo haré- la despidió y la chica salio
-Santo cielo!- los murmullos en el café se hicieron presentes, así que sin hacer esperar, Kaneki subió y entro al local, viendo como varias personas miraban hacia alguien, unas con preocupación otras con asco, había una charola en el piso y no muy lejos de ella estaba Nishiki de rodillas mientras vomitaba.
Kaneki corrió hacia el castaño y se arrodillo a su lado
-Estas bien?- pregunto preocupado mientras le palmeaba la espalda suavemente
-..S..- estuvo por responder pero una arcada lo hizo detenerse
Kaneki se puso de pie y ayudo a Nishiki a hacerlo
-Koma, Irimi, por favor limpien esto, volveré pronto- y con eso se llevo a Nishiki a las habitaciones de arriba
Una vez ahí, lo ayudó a recostarse y le tomo la temperatura, estaba algo caliente pero no demasiado
-Como te sientes?- le preguntó
-Con nauseas...- respondió cerrando los ojos en un intento de calmarse
-Comiste algo que no debías?- pregunto refiriéndose a la comida humana
-No...al menos no que yo recuerde- respondió negando con la cabeza llevando una mano a su vientre, como si así pudiera aplacar las náuseas
-Espera aquí, descansa, volveré en un rato- respondió Kaneki saliendo de la habitación
Cuando regreso al café, vio que ya todo estaba en orden y todos estaban atendiendo a los clientes adecuadamente.
El último cliente se encontraba saliendo del café después de unas horas, haciendo que todos suspiraran al terminar otra jornada de trabajo
-Bien, gracias a todos por su trabajo- agradeció Kaneki haciendo una leve reverencia
-Igualmente- respondieron todos a la vez
Todos comenzaron a ordenar el café antes de cerrarlo, hasta que la campana de la entrada sonó, dando a entender que alguien había entrado
-Lo siento, ya ce...rramos- las palabras quedaron en el aire al ver quien estaba ahí
-Kaneki-kun!- exclamó el recién ingresado
-Tsukiyama...- dijeron todos a la vez, algunos con sorpresa, otros con molestia, otros solo lo ignoraron
-Que haces aquí?- una voz detrás de él los hizo mirar a todos, Touka había llegado
-Solo vine a saludar- respondió con una extraña sonrisa
Tsukiyama analizó a todos los presentes, hasta que noto la ausencia de uno en específico
-Donde está Nishiki-kun?- preguntó arqueando una ceja
-No se sentía bien así que está descansando arriba- respondió Kaneki mientras limpiaba una taza y cuando volteo a ver el otro ya no estaba
-...-
-Que no había un psicópata obsesivo justo ahí?- preguntó Kaneki arqueando una ceja
El pelimorado apenas había escuchado en donde estaba el otro se había dirigido a la velocidad del rayo hacia donde se le había señalado
Nishiki se encontraba mirando al techo mientras pensaba en la razón de porque su malestar, ya tenía una vaga idea, pero no quería aceptarlo, por ese momento solo descartó esa idea y siguió divagando en la razón, tal vez había comido algo humano y había olvidado regurgitar lo, si, seguro que era eso.
Hubiera seguido en sus pensamientos, hasta que el ruido de la puerta abriéndose llamó su atención, se sentó sobre la cama y miro, se sorprendió al ver a Tsukiyama ahí
-Que haces aquí?- preguntó con sorpresa
-Me dijeron que no te sentiste bien, así que vine a verte- respondió sentándose a un lado del castaño- Como te sientes?
-Bueno, aún estoy algo mareado pero ya es menos- respondió suspirando mientras miraba hacia abajo
-Que pasa?- preguntó mientras se acercaba más al otro y ponía una mano en su hombro
-...- el otro no dijo nada, aunque no lo demostrará, estaba preocupado, se sentía extraño y ansioso al pensar en esa posibilidad
-Nishio...- lo llamo mientras lo tomaba de la barbilla y lo hacía mirarlo
Se quedaron viendo un momento, hasta que Tsukiyama se acercó y unió sus labios en un suave beso, el cual fue correspondido por el otro
-Que es lo que te preocupa?- le preguntó una vez que se separaron
-Yo...
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END :3
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