Ace había salido de la casa, caminó sin rumbo fijo siendo guiado por su olfato, pronto encontró el rastro que estaba buscando, llegó a un consultorio médico, antes de entrar fue detenido por una voz familiar
− ¿Ace ya?
El pecoso se giró para ver al moreno que llegaba con un poco de prisa
− ¡Hola!
− ¡Hola!, es un poco raro verte por aquí, justo acabo de despedirme de Marco ya en el colegio de los niños
− Bueno… es que hoy tengo algunas cosas que hacer, quisiera pedirte un favor
− ¿A mí?, ¿de qué se trata?
− Bueno en realidad estoy buscando a Kid, pero los vampiros no…
− Tienen olor, ¡lo sé!, ¿para qué lo buscas?
− Hay algo que quiero preguntarle, sé que Kid viene de muy lejos y ha estado en muchos lugares, por eso quiero preguntarle si acaso ha visto a alguno de mis hermanos
− ¿A tus hermanos?
− Yo… los había olvidado
− ¿Sufres amnesia?
El pecoso asintió
− Pero ya los has recordado ¿no?
− Sí, por eso quiero preguntarle si los ha visto o ha escuchado de alguno de ellos
− Puedes buscarlo en el estudio, debe estar practicando con su banda, grabarán la próxima semana, te daré la dirección, cuando llegues diles que yo te envié y te dejarán entrar
− ¡Gracias!
− También nos has ayudado, es lo menos que puedo hacer por ti
Ace sintió culpa al escuchar al moreno pero no dijo nada, Law escribió una dirección en el papel, se encontraba un poco lejos, agradeció al moreno y se retiró, tardó casi media hora en llegar al lugar a pesar de haber ido en autobús, cuando llegó tuvo que volver a mirar la dirección, no parecía un estudio de música, más bien parecía un edifico abandonado, pensó que quizás era para ahuyentar a los curiosos, cuando entró una chica de cabello rosa se le quedó mirando, se acercó hasta ella
− Hola, disculpa ¿sabes dónde puedo encontrar a Kid?
− ¿Quién?
− Law me envió, tengo que verlo
− ¡Oh! Vaya, así cambia el asunto, no puedo dejar que cualquiera suba a verlos, ¿entiendes?, pero si te envió Law no debe haber problema, ¿vienes a cuidar a Junior?
− ¿Está dándoles problemas?
− Un poco, cuando Kid llegó empezó a llorar y no ha parado
− Iré a ver
La pelirosa asintió, Ace subió las escaleras hasta el tercer piso, pudo escuchar el llanto del pequeño vampiro, tuvo un mal presentimiento, tocó la puerta antes de entrar
− ¡Adelante!
El pecoso entró y pudo ver al pelirrojo intentando calmar el llanto de su pequeño, sus compañeros le acercaban cualquier juguete o el biberón pero era inútil, Kid al verlo se acercó corriendo
− ¡Ace!, no sé por qué estás aquí pero me alegro de verte
− ¿Tienes problemas con el pequeño?
− No ha parado de llorar, lo dejé un momento en el asiento mientras bajaba sus cosas de la parte trasera del auto, lo escuché llorar y no ha parado desde entonces
Ace tomó al pequeño en sus brazos un ligero olor a aceite lo hizo arrugar la nariz, miró hacia donde había un hombre rubio de largo cabello
− ¿Eres un demonio verdad?
− Sí
− Podrías usar tus ojos en el bebé y decirme ¿qué ves?
El rubio asintió miró al pequeño y colocó una mueca extraña
− No sé qué sean esas marcas
− ¿Tiene marcas?
Kid se acercó hasta su pequeño
− ¿De qué hablas Killer, cuáles marcas?
Ace le colocó una mano en el hombro al pelirrojo
− Tranquilízate Kid, ¿puedes decirme qué forma tienen?
− Sí, puedo dibujarlas si quieres
El pelirrojo le acercó a su amigo papel y lápiz, el resto de sus compañeros observaban la escena en silencio, Ace se quitó un collar que tenía de lo que parecían perlas en color rojo encendido y se lo colocó al bebé, en ese momento dejó de llorar, el rubio le extendió el papel al pecoso cuando terminó el dibujo, Ace chasqueó la lengua, Kid estaba totalmente alterado
− ¿Qué pasa Ace?, ¿qué tiene mi hijo?
− Trató de hechizarlo
− ¿Quién?
− Kurohige, no tenemos tiempo que perder Kid, acompáñame
Kid tomó las cosas de su hijo y salió detrás de Ace
− Si necesitas algo, llámanos Kid
− ¡Gracias chicos!
El pelirrojo le indicó dónde se encontraba su auto, Ace le dijo a dónde debían ir, sabía que Kurohige los estaba observando, seguramente lo habría visto, tenía que darse prisa y no darle oportunidad a atacar al pequeño
− ¿Tienes el número de Law?
− Sí
− Llámalo
El pelirrojo marcó el número y le dio el teléfono al pecoso, conducía lo más rápido que podía, Ace escuchó la voz del moreno luego de un par de tonos
− ¿Qué ocurre Kid ya?
− Soy Ace, lo siento Law, ¿podrías ir a la casa de Rayleigh?, seguramente sabes dónde vive ¿cierto?
− ¿Con esa molesta hada?
− No puedo darte muchos detalles, pero por favor, ve cuanto antes y lleva a Nikky
− ¿Pero está todo bien?
− Date prisa, ¡no tardes!
El pecoso colgó tras decir lo último
− ¿Está bien que hayas asustado a Law de esa manera?
− Necesito que Law esté a la defensiva, si él viene no podremos proteger al bebé, terminará llevándose a tu hijo o a ti
− ¿Kurohige?
− Sí
− ¿Quién es?
− Yo… lo siento Kid, antes intenté llevarme a tus hijos
− ¿Qué?, ¿por qué hiciste algo como eso?
− Kurohige hechizo un collar que me colocó desde que era un cachorro, él me utilizó para robar a muchos niños demonios y elfos, es un comerciante de lo más ruin que puedas imaginarte, Nami y yo éramos sus esclavos, cuando me lleve a Loki, Marco y el señor Newgate fueron a rescatarlo y lo ahuyentaron, el señor Newgate nos liberó a cambio de haber ayudado a Loki, jamás fue mi intención causar ningún daño, pero no podía oponerme a las órdenes de Kurohige, supe quién eras desde la primera vez que te vi, él y su socio Burguess han estado intentando conseguir tu cabeza
Kid permanecía en mortal silencio mientras conducía
− El elixir de la vida eterna lleva como ingredientes las cosas más aterradoras e inhumanas que puedas imaginar, el ingrediente principal es la cabeza de un vampiro
El pelirrojo golpeó el volante con fuerza
− ¿Por qué no me lo dijiste antes?
− Lo lamento, no quería que me odiaran
− ¿Odiarte?, voy a patear tu trasero por no haberme advertido antes sobre ese tipo, si me hubieses dicho antes habría tenido más cuidado con mi hijo
El pecoso se sorprendió, había pensado que Kid lo odiaría pero el pelirrojo sólo parecía molesto ante la idea de tener un cazador tras su hijo, Ace se permitió curvar una sonrisa
− ¿Qué es el collar que le pusiste a Junior?
− Repele la magia de Kurohige, Rayleigh me lo hizo para evitar que en un futuro el obscuro decidiera volver a esclavizarnos, mi compañera tiene una pulsera
− Entonces ¿está a salvo?
− De momento sí, no pudo completar el hechizo, no podrá encontrarlo con su bola de cristal, pero muy probablemente a ti si, por eso debemos darnos prisa
− De acuerdo, sujétate y sujeta a mi hijo, estoy a punto de romper unas cuántas leyes
Ace se colocó el cinturón de seguridad y abrazó al pequeño en sus brazos, el bebé de cabello obscuro miraba curioso al pecoso, unos hermosos ojos grises tan claros que eran casi blancos se abrían mostrando sorpresa, Ace sonreía al pequeño y éste también lo hacía, Kid condujo saltándose algunos semáforos en rojo, tardó apenas 10 minutos en llegar, el pecoso había aferrado el cuerpo del pequeño, éste no parecía haberse dado cuenta de la velocidad, Ace suspiró aliviado, cuando vio la casa del brujo bajó a toda prisa, Law salía de la casa con el brujo detrás de él, el hombre mayor parecía confundido, Law iba a cargar a su pequeño
− ¡Espera!, no lo toques
− ¿Por qué?
− Rayleigh san, por favor, éste pequeño tiene un hechizo
El anciano lo miró, Ace le extendió el papel que el amigo de Kid había dibujado
− Vaya, no pudo completarlo, aún podemos hacer algo
El moreno miraba aterrado a su pequeño, el pelirrojo se acercó hasta él
− Lo siento, fue mi culpa, no debí dejarlo solo
Law parecía furioso pero no sabía si con el pelirrojo o con aquel que había hechizado a su hijo, el pecoso miró hacia los lados
− Tú tampoco estás a salvo Kid, será mejor que entren
El moreno se giró para abrazar a su pareja, el pelirrojo correspondió el abrazo
− Estaré bien, ¡vamos!
Law y el pelirrojo entraron, Ace miraba una vez más a los alrededores sin ver aun al hechicero, cuando entró vio al brujo poniendo algo sobre el pequeño, un cristal del tamaño de un pendiente, el bebé se encontraba acostado en un cojín en el suelo
− Hiciste bien en ponerle tu collar Ace, estaba a punto de completarlo, sólo bastó con que pudiera tocarlo por unos segundos para comenzar su hechizo es aterrador
− Lo sé
− ¿Por qué hechizaron a mi bebé?
El moreno parecía desconsolado, Ace tuvo que contarle la misma historia a Law, éste no podía reaccionar, el brujo interrumpió al pecoso antes de terminar
− Te estás dando mucho crédito muchacho, el obscuro hizo todo el trabajo, tú hiciste lo mejor que pudiste para mantener a esos niños a salvo, después de todo si te oponías él tomaba el control de tu cuerpo, pudiste haberlos asesinado sin darte cuenta, no debes culparte por haber hecho lo que hiciste, Kurohige es el único responsable
El moreno se escondió en los brazos de su pareja, Ace evitó a toda costa mirar a la pareja a su lado, en cambio observó al brujo trabajar, Nikky había permanecido en mortal silencio sentada en una esquina, estaba ahí desde el principio pero no había dicho ni una sola palabra, miraba únicamente al bebé, Rayleigh se levantó del suelo
− Casi hemos terminado, sólo falta…
La chica sentada en la esquina se puso de pie, se acercó al brujo y el bebé, se hinco a un lado de éste y extendió su brazo derecho sobre el pecho del pequeño donde estaba colocado el cristal
− ¿Lo harás tú?
− Sí
− ¿Estás segura?
− Kid no puede hacerlo y Law es un semi demonio, no sabemos qué podría pasar si él lo hace, es más seguro que sea yo
El brujo asintió, levantó un cuchillo sobre la mano extendida de la chica y la atravesó de lado a lado, ésta mordía con fuerza su labio hasta hacerlo sangrar, las gotas de sangre nunca cayeron en el cuerpo del bebé, fueron absorbidas por el cristal en su pecho, los círculos dibujados en su cuerpo se hicieron visibles pero comenzaron a desaparecer, al mismo tiempo el cristal sobre su cuerpo brillaba con un intenso color rojo, tan pronto como había brillado, un fuerte estruendo sacudió la casa, el brujo retiró el cuchillo de la mano de la chica, ésta la apretaba con fuerza mientras buscaba el origen de aquel estruendo, el brujo levantó al pequeño
− Estará bien, usen el cristal para protegerlo, estará a salvo, tiene la sangre de su guardián así que seguramente será más poderoso que el collar de Ace, el obscuro no podrá volver a hechizarlo
Law tomaba a su hijo en sus brazos y dejaba un beso en la cabeza de éste
− Mi pequeño Kid
El pecoso había vuelto a colocarse su collar y miraba hacia el techo, la castaña se cubrió su nariz
− ¿Qué es ese olor?
Ace había comenzado a temblar
− Es Kurohige, el hechicero está aquí
La chica tomó un pedazo de tela que encontró y lo ató en su mano, salió rápidamente de la casa seguida del pecoso, éste miró a la pareja dentro de la casa
− Lamento no haberles dicho nada antes, Kid no salgas de aquí, nosotros nos haremos cargo
Law iba a decir algo pero se escuchó como si un árbol hubiese caído, el brujo usó su poder para cerrar la puerta y ésta se iluminó, el moreno lo miró interrogante
− No podrá entrar aquí, tú debes proteger a tu hijo, aunque no pueda hechizarlo puede llevárselo todavía, el hechizo era una atadura, aún quiere matarlo, será mejor que permanezcan aquí dentro
Law apretó a su bebé contra su cuerpo, Kid lo abrazó fuertemente, afuera Ace observaba a la castaña tirada cerca de la pared, parecía inconsciente y Kurohige reía a su lado
− Kurohige…
El hombre volteó a verlo
− Pero si es mi mascota, ¿cuánto tiempo ha pasado?, ¿estás listo para volver?
− No volveré y tú tampoco
El hechicero soltó una sonora carcajada
− Puedes apostar a que yo volveré
− No, esta es la última vez
El hechicero estiró sus manos hacia Ace y un rayo color verde salió de ellas, el pecoso pudo esquivarlo, sin embargo uno tras otro los rayos salían de sus manos, Ace se movía de un lado hacia otro esquivando aquellos rayos, el hechicero se detuvo, parecía cansado, la puerta de la casa se abrió y el pelirrojo salió de ella
− ¿Estás buscándome, verdad?, ¿por qué no vienes por mí cobarde?
El hechicero se echó a reír estruendosamente
− ¿Qué estás haciendo Kid?, vuelve adentro
Ace no podía creer que Kid estuviera enfrentando al hechicero
− No te perdonaré lo que le hiciste a mi hijo, si quieres la cabeza de un vampiro ¿por qué no intentas tomar la mía?
El hechicero lanzó un rayo en dirección al pelirrojo pero lo esquivo sin mayor problema, Kurohige volvió a reír y Kid aprovechó para acercarse a él, le atinó un puño a mitad de la cara haciéndolo caer, cuando éste volvía a levantarse se echó a reír nuevamente
− ¡Qué ingenuo eres!
Kurohige volvió a lanzar un rayo, Kid intentó quitarse pero una enredadera que iba de su mano al suelo le impidió moverse, Ace llegó a tiempo para tirarlo al suelo
− No debes tocarle sin cuidado, asegúrate de causarle alguna herida o de lo contrario lanzará un hechizo, como acaba de hacerlo
Ace y Kid volvieron a ponerse en pie, entre ambos alternaban sus ataques haciendo que el hechicero se enfadará, Law miraba desde la ventana a su pareja, tenía a su pequeño en brazos y se aferraba a él, el brujo también observaba la pelea, Nami en el segundo piso junto a la esposa del brujo miraba horrorizada a Ace
− Ace es tan valiente, yo soy una cobarde
− No, no lo eres, pero no eres tan fuerte como él, si te metes en su pelea sólo pondrás en riesgo tu vida, es mejor no intervenir
El hada asintió miraba a Ace, estaba lastimado al igual que Kid, el hechicero también parecía empezar a cansarse después de lanzar tantos hechizos, el pecoso se acercó a toda prisa por su lado derecho, Kurohige lanzó algunos rayos en su dirección, Kid salió disparado hasta él, con sus uñas a modo de cuchillo cortó el brazo izquierdo del hechicero haciéndolo sangrar pero recibió un impacto directo de uno de sus rayos que arrojó con su otra mano, sintió como si hubiera recibido una descarga eléctrica, sintió cómo la garganta se le llenaba de algún líquido que escupió, descubriendo que era algo parecido a la sangre pero en color negro, su vista se había nublado, escuchó un zumbido por unos segundos, su cuerpo no le respondía, quedó tirado a unos pocos metros de Kurohige, que gritaba de dolor intentando parar la sangre de su brazo, miró furioso al pelirrojo
− ¿Prefieres que sea tu cabeza en lugar de la de tu hijo?, ¡pues me la llevaré!
Kurohige levantó ambas manos, una bola de energía del mismo color aparecía entre ellas, Kid aún no podía moverse, podía escuchar al hechicero pero no podía verlo con claridad, su cuerpo aún parecía recibir ligeras descargas, Law había gritado con fuerza dentro de la casa, se había apresurado a salir aún con su hijo en brazos, el hechicero se permitió reír al ver al moreno acercarse hasta su pareja pero la voz de la chica lo había hecho voltear a su lado
− ¡No lastimes a Kid!
La castaña en su forma de lobo mordía con fuerza el brazo del hechicero que Kid había lastimado antes haciéndolo sangrar aún más, Kurohige gritó de dolor, arrojo un par de rayos con su otra mano a la chica pero ésta se negaba a soltarlo, Ace apareció del otro lado igualmente convertido en lobo y mordió su otro brazo hasta asegurarse de atravesarlo con sus poderosos colmillos hasta sentir el sabor metálico de la sangre, él y la castaña desgarraban los brazos del hechicero con sus mandíbulas, causándole terribles gritos de dolor al hombre, que cansado suplicaba por que le soltaran, Ace dejó de morder su brazo
− Por favor, te lo suplico, no volveré a acercarme a ellos, déjame vivir
− ¿Acaso tú te detuviste cuando te suplique que me dejaras volver con mi familia?, ¿O cuando me golpeabas hasta dejarme medio muerto?, ¿O acaso te detuviste cuando Nami te pidió que no rompieras sus alas?, tu no mereces la compasión de nadie
El pecoso de un veloz movimiento abrió sus fauces y las cerró en el cuello de Kurohige, sintió el sabor de su sangre en la boca pero no se detuvo hasta sintió que el cuerpo del hechicero se había dejado de mover, la chica a un lado aún tenía clavados los colmillos en su brazo mientras gruñía, Ace podía ver unas lágrimas caer de sus ojos, sabía lo que la chica sentía en esos momentos, era lo peor que podía pasarle a cualquiera de su especie, había fallado como guardián, no quiso decirle nada volvió a su forma humana mientras limpiaba la sangre en su boca, la castaña apretaba con furia aquel brazo inerte, pronto comenzó a sacudir la cabeza, salpicando incluso a Ace de la sangre del hechicero, no se detuvo hasta que el brazo fue arrancado, sólo entonces la chica pareció tranquilizarse, al igual que Ace volvió a su forma humana y limpió su boca mientras escupía la sangre en el cuerpo del hechicero, había sangre en su frente, tenía una herida en la cabeza, pero no parecía importarle, el pecoso miró hacia donde Kid había caído, él abrazaba al moreno que aún tenía a su hijo en brazos mientras miraban a la castaña, el brujo había salido también, y Nami junto con su esposa miraban el cuerpo de hechicero, el hada con lágrimas en los ojos, el pecoso se acercó a la castaña
− ¡Déjalo Nikky!
La chica se permitió patear un par de veces el cuerpo inerte
− ¡Maldito!
− ¡Ya basta Nikky!, está muerto
La castaña apretaba los dientes con fuerza, no podía con el sentimiento de culpa, había fallado al proteger a Law y a su familia, había dejado que un hechicero tocara a su hijo y a su pareja, la chica odiaba a ese hombre en el suelo, una mano en su espalda la hizo detenerse, escuchó la voz del pelirrojo detrás de ella
− Es suficiente Nikky, tenemos que ir por los cachorros
La chica asintió, se alejó a paso lento del cuerpo del hechicero, Kid miraba a Ace
− ¡Estoy en deuda contigo Ace!, si algún día necesitas algo, no dudes en buscarnos
El pecoso asintió, vio cómo Nami se acercaba a la castaña dejando unas de sus lágrimas en sus manos, la chica había sanado sus heridas, la castaña dejó el resto en las manos del pelirrojo y se adelantó, Law de mala gana agradeció al hada, el brujo se había acercado hasta él
− Bien hecho muchacho, ahora ya no tendrán miedo de que vuelva, ¿verdad?
− Aún no…
− Bueno sí… tenemos que incinerar su cuerpo, yo me encargaré, no te preocupes, ¿qué harás ahora?
− Buscaré a mi familia
− Ojalá pudiera ayudarte en eso, en realidad has ayudado a muchas especies con lo que acabas de hacer, Kurohige era temido por muchos y ha causado daño terrible a mucha gente, lo que hiciste fue muy valiente, Law no habría podido ver cómo su pareja le quitaba la vida, ni tampoco cómo lo hacía esa chica, parecía estar sufriendo cuando la vio arrancarle el brazo
− Es normal, es parte de su familia
− Hablando de familias, ¿no deberías volver con la tuya?
Ace asintió, se puso de pie y no miró hacia atrás, se despidió de Nami y caminó hasta su casa, podía olerlos a todos dentro de la casa, era tarde, había caminado a paso lento hasta ahí, no había querido apresurarse, entró por la puerta trasera, no quería que lo vieran en ése estado, sin embargo cuando estaba a punto de llegar a su habitación se encontró con Izo
− ¡Oh Lucifer!, ¿pero qué paso contigo?, ¿estás bien Ace?
Izo gritó tan alto que Loki apareció corriendo por el pasillo seguido de Marco y de su padre, Loki había empalidecido considerablemente, Marco también pareció quedarse sin pulso, sólo el anciano Newgate tuvo la sensatez de acercarse hasta él, los hermanos de Marco se amontonaban en el pasillo para poder verlo
− ¿Te encuentras bien?, ¿te duele algo?, ¡mírame Ace!
El pecoso no quería alzar la vista pero el anciano lo revisaba en busca de heridas
− Estoy bien, tuve una pelea
− ¡Nada de eso!, estás bañado en sangre
− Llévense a Loki, no podrá dormir si sigue viéndome
− Pero Ace…
Izo retrocedió y tomó al pequeño, éste aún estaba en shock, otro de sus hermanos lo acompañó, el anciano lo miró severamente
− ¿Qué sucedió Ace?
− Asesiné a Kurohige, Loki estará a salvo
La manera en que el pecoso dijo aquello heló la sangre de los presentes, sobre todo del anciano que miraba entre aterrado y confundido a Ace
− ¿Lo asesinaste?
− Trató de llevarse al hijo de Kid, no tuvimos más opción que pelear y lo maté
Marco miraba asombrado al pecoso sin poder dar crédito a lo que escuchaba
− ¿Qué estás diciendo Ace?
− Lo que dije, trató de llevarse a su hijo, nos atacó en casa de Rayleigh, Kid se defendió, entre él y yo lo atacamos pero fue gracias a Nikky que pude matarlo
Los hermanos de Marco permanecían en sepulcral silencio, todos sabían la historia de Ace, pero no esperaban escuchar al pecoso decir que había asesinado al hechicero como si fuera lo más natural del mundo, el señor Newgate dudó por unos segundos antes de usar su habilidad en Ace, se sorprendió al sentir la gran tranquilidad que rodeaba al pecoso, no pudo juzgarlo pero a cambio le preguntó al pecoso sobre su muerte
− ¿Por qué lo asesinaste Ace?
− Porque era un ser cruel y vil, causaba daño a donde quiera que iba, jugaba con los sentimientos de los padres de los niños a los que secuestrábamos, destrozo familias, mató a criaturas inocentes y se divertía con el sufrimiento ajeno, no merecía seguir viviendo, no volverá a destruir nada
El anciano entendió entonces las acciones del pecoso, no lo había matado por resentimiento, Ace lo había asesinado pensando en los demás, no quería que sufrieran como él o como los otros que habían tenido la desdicha de caer en manos de Kurohige, al parecer todos sus hijos entendieron ése sentimiento, parecían aliviados cuando el pecoso terminó de dar sus razones, Marco había dejado escapar un suspiro de alivio, temía que Ace lo hubiera hecho por venganza
− Ace, será mejor que te des un baño, Loki querrá verte cuando salga de su shock
− Lamento haberlo asustado, no quería que me vieran pero Izo gritó y no pude evitarlo
El anciano sonrió
− Hazle caso a Marco, date un baño y luego deja que revise si tienes alguna herida, yo subiré a ver a Loki
Ace asintió, entró en su habitación y cerró la puerta, buscó algo de ropa que ponerse y entró al baño, se desnudó y se metió en la ducha, cuando el agua cayó sobre cuerpo limpiando la sangre que aun traía en el rostro y en sus manos había comenzado a llorar, por primera vez se sentía realmente libre, Loki y sus amigos no tendrían nada a qué temerle, él había protegido a su hermano de ese hombre, agradecía haber sido él quién pasara por aquello y no su pequeño hermano, él seguramente habría crecido feliz, en su casa rodeado por su familia, si algún día lo volvía a ver le diría lo mucho que lo amaba, al igual que a sus demás hermanos, terminó de limpiar su cuerpo y se vistió, al salir del baño vio al rubio sentado en la cama
− ¡Voy a revisarte!
− No hace falta, si tenía alguna herida, ya habrá sanado
− Mi padre me lo pidió y es lo que haré, siéntate
El pecoso se dejó caer a su lado, Marco hacía su trabajo como un verdadero profesional, revisó adecuadamente el cuerpo del pecoso
− Aún tienes una herida abierta aquí
Marco hizo presión en un costado del pecoso, éste ni se inmutó
− ¿No te duele?
− Puedo tolerar bien el dolor
El rubio tragó duro, recordó el cuerpo de Ace tirado con un montón de objetos sobre él cuando lo había visto por primera vez, recordó también al hada que llorando le decía que no podía quitarse, pensó en el pecoso siendo maltratado por el hechicero y sintió ira, luego volvió a ver el rostro de Ace, parecía relajado, se acercó hasta su rostro y le robó un beso, el pecoso no respondió al principio debido a la sorpresa pero después se había dejado llevar, Marco lo abrazaba posesivamente, el pecoso apenas y podía separarse de él, la puerta abriéndose estrepitosamente los hizo separarse
− ¡Ace! ¡Ace!
− Aquí estoy Loki…
El pequeño había entrado corriendo, de un salto subió a la cama y se arrojó sobre el cuerpo del pecoso, éste como pudo lo atrapó
− ¡Pensé que morirías!
− ¿Tan débil crees que soy?, yo soy más fuerte que tu papá
El niño se levantó y lo miró con sorpresa
− ¿Enserio?
− ¡Por supuesto!, luche con un vampiro y vencimos a un hechicero, apuesto a que tu papá jamás le ha ganado a uno
− ¿Venciste al hechicero?, ¿el hombre malo que te golpeaba?
− Sí, ya no hará más daño, lo encerraron en una jaula y rompieron la llave, no lo volverás a ver
− ¿De verdad?
− Sí, de verdad
− ¡Ace!
El pequeño miraba a Ace como si fuera un héroe, Marco se sintió un poco celoso
− Si me hubieras avisado, te habría ayudado, también soy fuerte
El niño miró a su padre
− ¿Has vencido a un hechicero?
− No pero he hecho otras cosas que también requieren fuerza
− ¿Pero nunca has vencido a un hechicero?
Marco chasqueó la lengua dándose por vencido con su hijo
− No
− ¡Ace es más fuerte que papá!
Loki saltaba en la cama mientras se apoyaba de los hombros del pecoso, Marco miraba un poco molesto la escena, luego el niño se acomodó en su regazo
− Ace, ¿te casaras con papá?
− No
− ¿Por qué?
− Porque no quiero
− Pero eres muy fuerte, yo quiero que protejas a papá
Marco miró asombrado a su hijo, iba a interrumpir aquella charla pero la risa de su padre desde la puerta lo sorprendió
− Parece que no tienes opción Ace, Loki te está pidiendo que protejas a Marco ¿qué piensas hacer?
− Supongo que protegerlo
− ¿Te casarás con papá?
− Eso es diferente Loki
− Yo quiero que te cases con quien te guste Ace, ¿no te gusta papá?
− Loki…
Ace miró al niño un poco confundido
− ¡Pero estaban besándose!
− ¡Loki!
Marco cubrió la boca de su hijo, éste miraba entre Ace y su padre, el pecoso tenía un ligero rubor en las mejillas, el anciano reía estruendosamente, Loki se soltó del agarre de su padre
− Puedes casarte con quien quieras Ace, pero si eliges a papá seré muy feliz, porque yo te quiero
El pecoso aún tenía un color carmín en el rostro, no miraba a Loki ni a Marco pero asintió, el anciano volvió a reír
− ¡Así está mucho mejor!, no quiero volver a verlos distanciados, no me gusta que discutan
El anciano se dio la vuelta y salió de la habitación
− Si no vienes me comeré tu postre Loki
− ¡No abuelo!
El niño salió corriendo detrás del anciano, Marco tomó la mano del pecoso y dejó un beso en ella, éste lo miró sorprendido, le regaló una sonrisa que al rubio le pareció la más hermosa que había visto en su vida, se acercó hasta juntar sus labios, apenas y fue un roce, la respiración de Ace se había detenido, Marco lo miraba intensamente, envolvió el cuerpo del pecoso en sus brazos, éste correspondió el abrazo
− Ace me enamoré de ti, ¿podrías corresponder mis sentimientos?
El pecoso se revolvió en los brazos del rubio
− Creo que también me enamoré de ti pero no sé qué hacer
− Yo te mostraré
Ace levantó su rostro para mirar a Marco, éste le sonreía
− Sal conmigo Ace
El pecoso asintió, Marco dejó un beso en sus labios, el ruido de un cristal rompiéndose los hizo voltear, Loki había soltado un vaso y los miraba con la boca abierta, levantó la otra mano y el pastel que traía en el plato salió volando
− ¡Tendré dos papás!, ¡Abuelo, Ace va a ser mi papá!, ¡Tío Izo, tengo dos papás!
El niño había salido corriendo por el pasillo, Marco miró divertido el desastre que su hijo había hecho, Ace dejó escapar un suspiro
− Parece que está feliz
− Tú nos haces felices a ambos
Ese día no hubo manera de detener el torbellino en el que se había convertido Loki, arrasaba con todo lo que se ponía a su paso, brincaba de un lado a otro festejando el compromiso de Ace y su padre, al día siguiente Ace volvió a llevar a Loki al colegio sin embargo no vio al pelirrojo ni a su pareja, tampoco vio a sus hijos, no quiso pensar en ello y se marchó de regreso a casa, ese día salió con Marco, los dos solos, el rubio lo llevo a varios lados donde pudieron disfrutar de un tiempo a solas, cuando fue la hora de la salida del colegio de Loki ambos fueron por él, el pecoso reparó en la castaña que había ido por los pequeños del pelirrojo pero no tuvo oportunidad de acercarse a platicar con ella, así pasó una semana, Ace no había podido hablar con la chica y tampoco había vuelto a ver ni al moreno ni al pelirrojo, era fin de semana y se encontraba jugando con Loki, estaba convertido en lobo y el niño jugaba a que era un dragón y él un caballero, el pecoso llevaba un disfraz especial para esa forma, el disfraz se ataba por la parte de abajo, era de color verde y tenía las espinas en su espina dorsal como un verdadero dragón que llegaba hasta la punta de su cola que se encontraba enfundada en el traje y una máscara graciosa con ojos enfurecidos que tenían dos huecos por los que podía ver y una especie de esponja en color rojo y amarillo que estaba pegado a la boca del dragón y que aparentemente era fuego, Ace fingía que gruñía y lo atacaba, Marco los miraba sentado en una silla bajo la sombra de un árbol mientras leía un libro, Loki corría de un lado a otro, esquivando al dragón, tenía una espada que era más bien un globo con esa forma y con la que atacaba a Ace, Marco les había prestado atención 5 minutos y había preferido terminar de leer su libro, no entendía cómo Ace podía jugar sin cansarse con Loki, el padre de Marco se paró en la puerta trasera de la casa
− ¡Loki, tienes visitas!
El niño se detuvo y miró hacia la puerta, sus dos amigos aparecían detrás de su abuelo, el primero en llegar corriendo hasta él era Belphegor
− ¡Wow!, es un dragón
Loki le dio un globo a su amigo, tenía muchos en una red cerca de donde jugaba porque los reventaba muy rápido
− ¿Quieres jugar?
El otro pequeño no lo dudó comenzó a mover su espada contra el dragón, Loki hacía lo mismo, Ace corría de un lado a otro huyendo de “los caballeros”
− ¡No huyas dragón!
El otro pequeño había ido a sentarse a un lado de Marco también traía un libro y sólo se había limitado a saludar y a sentarse en otra de las sillas acomodadas ahí, el rubio vio a sus padres acercándose a él, el pelirrojo cargaba al otro pequeño, Marco se levantó y saludó a ambos
− ¡Hola!, es bueno verlos por aquí, Loki es muy feliz jugando con Belphegor
Law estrechaba su mano seguido del pelirrojo
− También Bel chan parece más feliz cuando está con él
El pelirrojo observó cómo su hijo parecía haberle dado al dragón, Ace se había dejado caer, Loki y él se acercaron al pecoso, éste se levantó de un brinco y comenzó el contra ataque, se permitió una sonrisa
− Parece divertido
− Sólo Ace puede aguantarlos tanto
El moreno se dejó caer en una silla a un lado de su pequeño
− Y que lo digas, Zep chan, ¿no quieres jugar con tu hermano?
− No me gusta correr, me hace sudar y el sudor me hace oler mal y no me gusta oler mal
Law y Kid dejaban escapar un suspiro al mismo tiempo, Marco por otro lado entendía al pequeño, él tampoco era fanático de ese tipo de juegos donde corrías hasta quedar exhausto, Ace corrió hasta el árbol donde se encontraban, estaba siendo perseguido por los pequeños, el pequeño pelirrojo parecía mucho más veloz, el pecoso trepó un poco por el árbol y se impulsó para caer detrás del pequeño que no pudo frenar a tiempo y terminó contra las piernas de Kid, éste lo detuvo
− ¡Ten cuidado!
El niño ni siquiera había escuchado a su padre, se había vuelto hacía el pecoso
− ¡Oye, eso es trampa dragón!
Ace se sacudía
− Claro que no, eres muy lento
El niño salió corriendo de nuevo tras de Ace, Loki parecía haberse rendido, llevaba mucho tiempo jugando con el pecoso, se acercó hasta Marco
− Papá, tengo sed
Marco le dio una de las botellas de agua que había llevado para él, Loki se sentó en la misma silla que el otro niño, miraba el libro que leía, Law cuidaba a su otro pequeño mientras que jugaba con Ace, Kid también parecía metido en el juego, le gritaba indicaciones a su hijo desde dónde estaba y Marco observaba a Loki y al otro pequeño mientras platicaban, de pronto Kid había gritado un poco más fuerte
− ¡Corre Ace!
Loki, Zeppar, Marco y Law miraban donde venía el pecoso corriendo velozmente mientras era perseguido por lo que parecía un pequeño leopardo blanco que en realidad era Belphegor en su forma demoniaca, Ace lo esquivó, saltó de un lugar a otro sin dejarse alcanzar por el pequeño, Law lo miraba asombrado, nunca había visto a su pequeño con su forma demoniaca, Marco estaba igual, Loki hasta ahora no había sido capaz de demostrar su forma demoniaca y ese pequeño parecía muy acostumbrado a usarla, su hermano lo miraba sin poder entender, se acercó hasta el pelirrojo y llamó su atención
− Papá ¿a dónde fue Bel?