CAZADOR
"No importa lo que nos pasé en nuestra vida Sam, la prioridad es saber cuántas vidas pudimos salvar sin ver atrás, ni aquellos que se sacrificaron —Menciono Dean sonriendo de medio lado viendo un punto a la lejanía, sin pensar que estaba sucediendo en su alrededor, ni cuándo su hermano Sammy iba a contestar Dean sólo pudo vomitar sangre y dio una última mirada así su alrededor… "
El recuerdo hizo despertarse de un salto a Sam Winchester que se perdió en el recuerdo de ese día; era un cazador que nunca deseo esa vida, ni para él mucho menos para su hermano mayor pero las cosas no habían salido cómo querían al parecer tenían una maldición solo por poseer ese apellido y ser los elegidos para ser Recipiente de unos arcángeles. Muchas veces batallo con ese destino, su hermano fue el que sufrió por sus malas decisiones y por Dios Dean merecía ser feliz pero la vida debía odiarlos en demasía. No importaba lo que hiciera para huir, siempre la vida de cazador lo seguía, como dijo su padre era su herencia, aunque no lo quisieran.
Entonces apareció Castiel, el ángel del señor en sus vidas en especial en Dean, un ángel que se reveló, que luchó a su lado y de repente Dean ya no pudo seguir negándose a lo evidente, se enamoró por primera vez y Sam se rio al ver tan torpe a su hermano junto al ángel. Paso tanto hasta que los dos dieran el siguiente paso, pero se amaron como nunca. Pero ya había dicho que la vida los odiaba.
Su madre revivida, Lucifer en su caza y lo más insólito un Nephilim nacido en las entrañas de su hermano y Dean estaba feliz con lo que poseía en su vida, tenía a su amada pareja, un hijo, un hermano, su familia perfecta, pero Lucifer tenía la intención de un nuevo contener y qué mejor el hijo de su hermanito Castiel cómo su enemigo Dean.
La lucha fue terrible Rowena, Crowley se sacrificaron por salvar a Dean y su bebé. Que iluso fue al pensar por un momento que iban a ganar, incluso su terco hermano todo lastimado, desangrándose por la herida abierta de su abdomen en estado crítico, Sam sabía que debía ser tratado inmediatamente, solo esperaba que su cuñado pudiera sanarlo antes que fuera demasiado tarde, ya que con un bebé en la cuna luego de haber nacido hace un par de minutos necesitaba a sus dos padres, en especial a uno que no debió levantarse de la camilla para ayudarlos; pero Dean era Dean y salió para ayudar a Castiel, el rostro de su hermano se iluminó al ver salir a Castiel de ese portal y todo fue demasiado rápido, Lucifer atravesando con un puñal el corazón de Castiel, el portal cerrándose y su hermano al lado de su pareja.
"Sammy cuídalo, cuida a Jack, es tu sobrino por favor cuídalo, dile que… —Dean trataba de hablar, pero la sangre en su garganta se lo impedía miraba los ojos sin vida de su Pareja y no pudo evitar llorar ahogándose más en el proceso, no era justo, no lo era la vida no podía ser de injusta, ellos tenían tantos planes, Dean y Castiel hasta habían pensando en dejar esa vida, ellos solo querían ver crecer a su hijo —Dile que sus padres lo amaron, que hicieron lo posible para protegerlo, que lo esperaban — susurro Dean, cerrando sus ojos evitando llorar pero eran tantas emociones juntas que le fue imposible no dejar caer un par de lágrimas en el suelo sintiendo su cuerpo tembloroso apretando la mano fría de Castiel.
Sam rogó por un milagro, porque ellos no se merecían eso, no cuando tenían tantos planes en especial su hermano con él ángel, el Winchester menor espero que en cualquier momento volvieran a la vida Castiel y Dean, pero el llanto desesperado de un bebé lo sacó de su dolor, como su estado de Shock al recordar que un pequeño inocente lo necesitaba más que nunca, se limpió las lágrimas como sus manos ensangrentadas de la sangre de su propio hermano y no pudo evitar ver las manos entrelazadas de su hermano con las manos de su ángel. Ellos se amaban tanto que no pudieron estar juntos. Jack nunca conocería la calidez de los cuerpos de sus padres al abrazarlo, pero si el amor que le tuvieron, qué no dudaron un segundo en sacrificarse para salvar a su hijo amado.
Con Jack llorando en sus brazos, el bebé pareciera como si entendiera que estaba pasando a su alrededor, con sus manitas estiradas trataban de llegar donde estaban sus padres, En ese momento Sam entendió que esta vez ellos no regresarían, que esta vez era él con su sobrino y no pudo evitar llorar al darse cuenta de eso, le dio a la pareja un digno funeral de cazador porque se lo merecían más que nadie en el mundo pero no era justo, nunca lo fue, y más con un bebé inocente de todo llorando en buscar el calor de sus padres, que sus ojitos azules solo buscaban a sus padres par que lo abrigaran, que le hablaran como lo hacían en las tardes con un Dean que maltrataba a todos por sus cambios hormonales, Jack no sabía que estaba pasando de porque su padres no lo venían a ver. Ese día él junto con un bebé tomaron camino a saber dónde, no tenían un lugar fijo para ir, solo quería irse de ese lugar, porque Sam sabía que muchos demonios como ángeles buscarían a su sobrino y él no lo permitiría, ese día los hermanos Winchester murieron. Samuel juró que no cazaría que se dedicaría a cuidar a su sobrino.
Sin rumbo fijo y solo durmiendo en cada motel de turno supo que debía darle una estabilidad a su sobrino de tres meses de edad, dejó caer su dedo a cualquier lugar del mismo deteniéndose en Beacon Hills, un pequeño pueblo olvidado de Dios y él cazador creyó que al fin podría vivir en paz, dejar atrás la vida de cazador que equivocado estaba… no solo Beacon era un imán (literalmente lo era) de seres sobrenaturales sino Sam Winchester conoció a un joven que no poseía filtro boca-cerebro, eso hace cuatro años y medio atrás, un joven tan peculiar, hiperactivo, noble que era capaz de sacrificarse por ayudar a sus seres queridos...
Quizás el joven le recordaba a su hermano fallecido porque Dean era así, se sacrificaba por el bien mayor sin importar cuan roto estaba, pero Stiles era especial y Sammy se vio envuelto nuevamente en la cacería para proteger no solo a su sobrino si no a ese joven; que escucho su historia, y odio a su manada por lo infelices que fueron, porque quizás le recuerdo a Castiel con sus hermanos, odio a cada miembro por dejar atrás a un amigo, a una pareja cómo Derek dejó atrás a su novio; porque Sam hubiera dado todo solo por tener unos segundos junto a Jessica antes de morir, pero tenía que ser sincero daría todo por volver a ver a Gabriel una vez más, si tuviera esa oportunidad aunque sea unos segundos le diría que lo amaba, que solo tuvo miedo de sentir esa clase de amor, uno tan fuerte tan puro… por eso nunca se atrevió hablarle de amor a Gabe por temor al rechazo, y porque quizás él tenía la maldición en sus relaciones terminaban mal, quizás no merecía ser amado. Y lo peor no pudo salvar a Stiles, había fallado nuevamente al llegar demasiado tarde. De nuevo se fue en vuelto a cambiar pañales, la leche no solo con su sobrino querido sino con dos lobitos que sus enormes ojos buscaban el calor de su gestante, y Sam solo maldigo por lo bajo todo a su alrededor, pero había sido fuerte, había aprendido a levantarse para ayudar a los que no podía…
Sabía que no podía volver a dormirse nuevamente, se quedó perdido en sus recuerdos y su vista se quedó en el marco de una foto, su sobrino de 5 años era una copia exacta de Castiel. Dean hubiera amado a su hijo, aunque quizás al principio hubiera sido doloroso verlo y recordar la muerte de Castiel, su hermano a veces era un imbécil. Pero ahora sabía que su falta de sueño era por la fecha, se levantó ejercitándose un poco antes que sus remolinos personales apareciesen, ese par a veces parecían huracanes a diferencia de Jack que su actitud era más tranquila, quizás para tener el control de sus poderes angelicales hasta eso había heredado de su padre celestial, Sam incluso creía que el menor tenía mucho poder, pero con el tiempo podría controlarlo o eso esperaba pero si era sincero había disfrutado cada etapa de su sobrino ya luego vería como ayudarlo cuando siguiera creciendo.
Sam esta todo sudado pero no se sentía incomodo incluso le había ayudado a despejar su mente, pero al mantener su mente relajada perdió la noción del tiempo sabe que debe ponerse una camisa, pero su instinto es ver si su sobrino está en la cama y no revoloteando en la casa en especial que no haya utilizado sus habilidades de trasportarse en cualquier lugar de Beacon, todavía tiene fresco ese recuerdo de ver desaparecer a su sobrino y que a Sam le haya pasado varios escenarios de quien pudiera tener ese poder pero al cabo de unos minutos Noah le informo que su pequeño angelito estaba jugando en la sala con sus nietos, en ese momento sintió que el alma le volvía en el cuerpo al cazador, pero últimamente el cazador siente que algo está en las sobras esperando su menor descuido y llevarse a su sobrino, al entrar a la habitación y no verlo en la cama lo busco en casa su primer instinto fue sacar la Colt y salir semidesnudo a la puerta esperando verlo, pero ni sus años experiencia lo han entrenado para ser tacleado por tres niños al salir de su casa.
—¡Papá Sam!
—¡Tío Sam!
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Luego de haberles caído la verdad cómo culpa la manada estaba destrozada por haber perdido un miembro especial como importante en su familia "Stiles" el cerebro de la manada, y porque no si era una verdad que nunca lo vieron ni dijeron era el "corazón" pero lo habían perdido, sabían que no lo merecían eran conscientes que no debían aferrarse a esos niños, que eran el único recuerdo de Stiles porque eran hijos de su hiperactivo castaño del corazón de la manada.
Pero sus lobos internos estaban de luto y se estaban aferrándose a la presencia de esos niños, los necesitan porque sentían que podían morir de la tristeza, era egoísta lo era por lo que deseaban pero necesitaban pertenecer al mundo de los Infantes, eran los cachorros de la manada, eran él recuerdo de Stiles, lo vieron en su alfa; Derek deseaba tener contacto con sus hijos, su lobo se estaba desgarrando por perder a su pareja destinada pero tenía el fruto de su amor, solo tenía en la mente recuperarlos porque todos eran conscientes que Noah primero les daba un tiro en la cabeza antes de darles a sus nietos.
No fue difícil seguir al sheriff, incluso esperaron verlo regresar a su casa, pero siendo el cumpleaños de los menores eran seguro que iban a celebrarlo en otro lugar pero nunca esperaron ver a Noah estacionarse en una casa que ellos no conocían, su mirada se quedo fija en un pequeño no mayor de cinco años sentando en la grada esa mirada azul era de inocencia como una madurez que no conocían al ver el auto se levanto para dirigirse a esperar que los menores bajaran, los tres se dieron un abrazo para reírse pero la manada pudo oler un aroma de angustia, como preocupación de algo acercarse a la puerta, ni pudieron procesar lo que estaba pasando cuando un hombre alto con cabello largo salió semidesnudo siendo tacleado por tres niños.
—¡Papá Sam!
—¡Tío Sam!
Derek al escuchar como sus hijos llamaron al desconocido sus ojos se pusieron de color rojo estaba a punto de saltarle encima si no hubiera sido por Scott y uno de los gemelos era de seguro que en esos momentos le hubiera desgarrado la garganta a ese tipo, pero la manada se quedo estática cuando la mirada del niño de cinco años se les quedo viendo fijamente como si pudiera saber que estaban escondidos a varios metros de su hogar.
CONTINUARA…