No me rechaces por gdtop801

Esa tarde, toda la manada se había quedo para hablar de todas las posibles opciones que tenía para que Stiles lo aceptará aunque fuera en una cita, no importó cuán cansados estaban de la última pelea o cuan hambrientos estuvieran, por primera vez en mucho tiempo la manada de Derek se mantuvo a su lado pero todas las ideas que le daban para subirle el ánimo o para idearle un plan para conquistar a su compañero, estos no parecieron de gran ayuda ya que el mayor tenía la ligera sensación de que quizás Stiles no sentía nada por él tal y como lo había dicho segundos antes.

Había tratado de olvidar ese shock pero cuando Lydia mencionó que lo mejor sería darle unas cuantas flores repentinamente la imagen de él llevándole flores a Stiles dejó de parecerle una escena romántica para pasar a transformarse en una situación de humillación donde el adolescente tomaba las flores y las arrojaba al suelo como si fueran basura, la sensación tan vivida de esa ilusión y pronto cada una de esas buenas ideas que sus betas le daban se transformaban en eso, en un rechazo horrendo que le haría recordar que no todo el mundo lo veía como un Adonis tal y como le habían hecho creer casi toda su vida.

Todos en la manada estaban seguros de que Stiles estaba asustado, de que necesitaba un poco más de delicadeza y quizás un poco más de mimo y toda esa clase de cursilerías para que al final le dijera que sí, pero Derek estaba seguro de que eso no funcionaría, y que entonces su plan ya no debería ser uno donde Stiles lo aceptaba, sino uno donde Stiles se enamorara de él. Trato de imaginar lo que tendría que hacer para lograrlo y que era lo que le gustaba a Stiles, dándose cuenta de que en realidad todo lo que conocía de Stiles era lo básico y entonces las palabras que le había dicho se repetían con constancia en su cabeza, mareándolo un poco, con la necesidad de cerrar los ojos y respirar.

"Mi relación contigo nunca ha sido buena...".

Derek nunca había tratado mal a Stiles, quizás había sido muy brusco con él, pero había sido por una buena razón. Siendo un humano las probabilidades de que fuera lastimado o algo peor eran mucho más altas que las de los demás miembros de la manada. Esa noche había sido una prueba de ello, si Derek no hubiera ido a socorrerlo, la bestia que lo tenía agarrado de la yugular habría acabado con su vida mucho más rápido que la de cualquier otro y él no podría haber permitido eso. Si algo tenía muy en claro Derek era que podría morir por Stiles, pero su poco conocimiento acerca de la interacción social se confundía con un mal trato y por ello Stiles no lo dejaba entrar más allá de los límites establecidos, y por el momento se maldecía por no haber tratado de hacer énfasis en ello.

«Es sólo que no te conoce» se dijo y eso tenía más sentido en su cabeza que pensar que todo eso había pasado porque efectivamente había sido "malo" ¿cuántos en la manada lo conocen a la perfección? Nadie, Derek tenía la culpa también de haber predeterminado los límites y quizás esa había sido otra buena razón por la que Stiles nunca había tratado ir más allá de lo que Derek había dejado a su disposición.

Había sido una confusión de ambos que nunca habían aclarado, Stiles no permitió que Derek se acercara a él demasiado y Derek había hecho lo mismo con él porque había pensado que lo protegía de algún modo sin darse cuenta que eso había sido lo peor que pudo haber imaginado, llego a la conclusión entonces de que para tener el amor de Stiles debía enamorarlo en un principio como si fueran desconocidos, quebrar esa barrera que ambos habían construido como protección y mostrarse tan sincero como se sentía pero ¿qué tan fácil podría ser eso? Derek no tenía la respuesta a esa pregunta y temía de ella hasta cierto punto.

Sus pensamientos dieron vueltas dentro de su mente en conjunto a todas las voces de sus jóvenes compañeros que inundaban un poco el silencio del loft. Pronto, una vez que todos los betas le prometieron encontrar un plan poco a poco se fueron a sus respectivas casas y una vez estando solo, Derek agradeció mucho sentir la soledad de nuevo porque así podía pensar en sus errores, rememorar el día en sus pensamientos y preguntarse ¿qué fallo? Derek sentía como si un millón de hormigas le recorriesen el cuerpo, la determinación con la que esa mañana se había levantado le parecía muy lejana en ese momento. ¿Había sido muy apresurado todo? Sí, lo más probable era que sí.

Se acostó en el frío suelo del loft y miro el techo hasta que no pudo más, desde hacía mucho no había llorado con esa sensación de fondo.

(...)

El adolescente vio a su amigo entrar por la puerta con el ceño fruncido y una mueca que le hacía verse cómo un estúpido, no se molestó en retener esa mirada por más de 10 segundos porque estaba muy cansado y el dolor de cabeza había aumentado mucho en poco tiempo. Tenía la corazonada de saber por qué su lobuno amigo estaba postrado ahí, con esa expresión de perro a punto de atacar. Y ese hecho le había molestado un poco, porque no imaginaba que era lo que se traía entre las manos el joven moreno o qué pretendía conseguir al regañarle con el asunto una vez más.

Por eso su mirada se posó en la página de Internet que estaba viendo en ese momento, intentando ignorar la presencia del moreno, intentando no darle más importancia al acontecimiento y por supuesto, maldecir el dolor de cabeza que no lo estaba dejando pensar con la claridad que en un momento normal no pasaría.

—Stiles —gruñó el moreno con un deje de irritación, pero el nombrado no se inmuto en voltear a verlo—. ¿Lo dijiste en serio? —preguntó al cabo de unos segundos, rindiéndose un poco aquello. Por lo menos debía saber si todo lo que su amigo había dicho fue verdad.

Stiles se mordió el labio inferior y puso los ojos en blanco, no estaba muy de humor para decirle a su amigo si estaba hablando en serio o no porque ni siquiera recordaba lo que había dicho pero dado que el jovencito era un jodido lobo, no podía ponerse sus moños y decirle todo lo que le pasaba por la mente esos momentos. Una vez más Stiles hacía más énfasis en que el dolor de cabeza le estaba revolviendo los pensamientos, haciendo que todo pareciera confuso y borroso en su memoria.

—Sí —contestó enojado, con el ceño fruncido y sin apartar la vista de la computadora, esa había sido una respuesta correcta—. Lo dije en serio y dudo mucho que tu visita me haga cambiar de opinión.

—Hubiese jurado que te gustaba... —murmuró de nuevo el moreno, pero esta vez acercándose al escritorio de su amigo, al parecer un poco más calmado.

—Pues qué bueno que no lo hiciste... Digo, ¿por qué imaginabas que me gustaba Derek? El hombre es muy egocéntrico y testarudo. Todo esto parece una jodida broma de mal gusto, ¿sabes? Derek es como el chico más guapo del pueblo ¿y se ha fijado en mí? Puff, claro... Eso ni me lo creería yo Scott.

—¿No te gusta, pero se te hace guapo? —Stiles no respondió ante esa lógica—. Stiles, él no está jugando, ¿crees que, si fuera una broma, yo lo hubiese permitido? —Stiles no le contesto de nuevo, sin embargo, lo miró con chulería, porque a veces Scott era un hijo de puta que sabía cómo hacer que las cosas se escucharan bien—. ¡Pues no lo permitiría! Eres más que mi amigo Stiles, me importas demasiado y tu felicidad es muy importante también para mi así que yo no permitiría que un tipo rudo y tres veces más grande que tú te haga daño, ni mental ni físico. Derek lo decía muy en serio y...

—¡Pues yo también lo he dicho muy en serio Scott! —interrumpió Stiles levantándose de la silla en la que estaba sentado y reprendiéndole con la mirada, sintiendo como es que el vértigo se apoderaba de sus sentidos un segundo antes de que todo dejase de dar tantas vueltas—. Él es lo peor del mundo—Stiles pensó un momento pensando si era verdad todo eso que decía, porque lo era, ¿verdad? Stiles ya ni siquiera sabe de quién estaba hablando y después de otro segundo pensando rectifico porque una parte de él que parecía estar más consciente le dijo que efectivamente sí, era así—. Yo no alguien como él.

—Él no es malo contigo Stiles ni con nadie, ¿Cómo puedes decir que es lo peor? ¡Te ha salvado la vida muchas veces! —Scott frunció el ceño sin entender porque decía tantas cosas así, pensando que Stiles nunca había sido capaz de hablar de esa manera de alguien que tantas veces atrás había defendido. Era como si Stiles no hablase de Derek, sino de alguien más.

—Pues, me estoy preguntando por qué no has sido tú el que me salva —grito Stiles.

Scott se le quedo viendo anonado al castaño y entonces Stiles se fue acercando a su amigo con un único propósito. Scott se alejó un poco. Asustado de lo que imaginaba que pasaría si Stiles se le acercaba demasiado.

—¿De qué hablas Stiles? —gimió sintiendo su corazón una décima de segundo más rápido.

—Se supone que soy muy importante para ti ¿no? ¿por qué siempre es Derek quién me salva y no eres tú?

—¡Claro que te he ayudado Stiles! —se defendió.

—Estoy empezando a creer que no eres mi amigo, por lo menos no como antes. Últimamente has pasado mucho más tiempo con la manada, antes salíamos todos los fines de semana, o nos pasábamos horas en el Xbox. Ahora apenas y hablamos.

Scott respiro un poco más tranquilo. ¿Por qué se había imaginado a Stiles declarándole un amor inventado? Se estaba volviendo loco, seguro. ¿O quizás se había traumado por las cosas que Derek y la manada habían dicho de Stiles?

—Stiles, tengo que ayudar a la manada por si un ser sobrenatural ataca al pueblo, lo hago para proteger a todo el pueblo... ¡Para protegerte a ti!

—¡Lo haces porqué te sientes con esa puñetera responsabilidad, porqué te gusta sentirte heroico! —grito exaltado—. ¿No es así? Te gusta llamar la atención, siempre te ha gustado.

—¿Qué?

—Quiero que te vayas Scott, no tengo humor para seguir hablando contigo.

Stiles empujo (difícilmente) a Scott por la puerta que seguía abierta, y después de que el joven moreno le dijera muchas cosas a el castaño, de las cuales apenas y noto algunas palabras, Stiles cerró la puerta con éxito.

Después de que escuchase que Scott bajaba las escaleras, Stiles pudo por fin respirar.

pensó, y decidió seguir concentrado en el website que miraba en esos momentos, aunque en realidad no podía dejar de ver el rostro de Derek. Y aquella escena no dejaba de circular por su imaginación.

El lobo había girado sobre sí mismo y se le quedo viendo fijamente, con las pobladas cejas fruncidas y una mueca de asco en los labios, dado que Stiles iba detrás de él, se detuvo tan abruptamente que casi cae en el lodo. Derek no lo noto, sin embargo, tomo una enorme bocanada de aire y simple soltó un "Me gustas Stiles, ¿quieres ser mi novio?" Ni siquiera pudo reflexionar lo que sus oídos captaron y se quedó en silencio como esperando a que todo hubiese sido el producto de su imaginación adolescente, las hormonas, el cosmos, lo que sea... Pero se dio cuenta de que todo mundo lo veía y esperaba a que diese una respuesta.

No lo pensó siquiera, las palabras salieron de su boca y no se arrepiente mucho de eso. Pero ver que la manada entera alzaba las cejas con sorpresa y después la fruncían, no le dio buena espina ¿y que tenía qué decir? ¿qué sí le gustaba? Eso sería mentirse a sí mismo y a todos los demás.

Derek... simplemente si hubiese actuado de otra forma, quizás si lo tratase bien... quién sabe, quizás le llegaría a gustar un poco. Pero recordaba muy bien todas y cada una de sus amenazas, su muy típico "Haz lo que digo o si no, te arrancaré la garganta con mis dientes" Y eso no parecía tener una índole sexual.

La gente se enamora con otra clase de actitudes.

Y Derek no era exactamente un caballero con él, imaginaba más a Derek como un chico de una noche, sencillo, fácil y sin ningún tipo de compromiso, de todos modos, el hombre lobo tenía buenos atributos, y si tuviera que enumerar las cosas buenas del hombre lobo, pues, simple se limitaría a hablar de su cuerpo.

El bochorno con el que recordaba la escena aún le estremecía. Lydia no había parado de mandarle whatsapp's y Stiles ya se había rendido a hablar con ella de otro tema, prefirió dejarla en visto después de que la pelirroja le preguntará algo súper incómodo.

Ya harto de todo aquello, se alegró un poco de que Isaac no le hablará como sus demás compañeros y que a la mañana siguiente no habría escuela dado que era día de descanso.

Miro la hora con desdén y se sorprendió ver un bonito doce con dos ceros a su lado, había pasado lo que restaba de la tarde viendo cosas en Internet, ni siquiera había hecho la cena. Miro el calendario cerca del reloj de la pared que tenía en la habitación y se alegró de nuevo de ver la nota "No papá" en él.

"Aun así, comeré algo" Se dijo levantándose de su asiento.

Sin quitarse la imagen del pobre Derek en medio del bosque, Stiles comenzó a sentirse culpable de esa imagen, después de todo Derek había sufrido mucho, su familia había muerto, Cora estaba muy lejos y Peter era un sociópata. Pero la imagen de Breaden y la antigua profesora Jennifer. Y todas aquellas relaciones pasadas de Derek le golpearon haciendo pensar que nada de lo que el hombre lobo había dicho esa tarde tenía sentido.

Quizás había sido una pésima broma de mal gusto, quizás mañana el recuerdo se volvería un conjunto de imágenes que nunca habían pasado... quizás mañana despertaría de aquel sueño.

Dio un mordisco al emparedado y sin inmutarse a limpiar su desastre volvió a subir a su habitación.