UNA CORONA SIN REY
El ataque mediático hacia los Príncipes creció en los últimos dos meses, después de la reunión de Thor con El Consejo, algunos medios de comunicación se encargaban de señalar hasta el detalle más pequeño sobre la vida de ambos.
Sacaron a relucir la vida nocturna y desordenada de Thor antes de ese matrimonio y ponían en duda el “amor” de esos dos, señalando que todo lo que dijeron sobre el conocerse con anterioridad fue un invento para crear un cuento de hadas para el Pueblo. Mencionaron como Loki era el único espécimen de casta felina y sangre real disponible y como eso sumaba más puntos a la teoría del matrimonio concertado.
“No olvidemos que el Príncipe Loki correría la suerte de concubino para cualquiera de los nobles de su país de no contraer matrimonio, cumpliendo con su deber como reproductor de una de la castas más antiguas y codiciadas del mundo.”
Había comentado en su noticiero la principal enemiga de la Familia Real, Jane Foster, desde los rumores que esparció sobre su separación y las noticias falsas que construyó era non grata para cualquier evento o noticia sobre todos aquellos ligados directa o indirectamente a la Familia Real y, no tendría eco en sus acusaciones de no tener tras de ella el gran poder de algunos Alphas pertenecientes al Consejo.
Pretendían que el público viese como conflictiva aquella unión, ya que pensaban hacer cumplir la cláusula de separación pues era claro que no tendrían un heredero que pudiese seguir con la tradición del Trono; con Loki fuera de la ecuación ejercerían presión para que, alguno de sus hijos se case con el heredero a la Corona, tal y como pretendían antes de que Loki e Islandia aparecieran en escena.
A medida que algunos medios de comunicación señalaban lo probable e improbable de los Príncipes, Loki y Thor tejían una estrategia mucho más inteligente, impulsada claramente por el Omega. Fandral ejercía su puesto como relaciones públicas acompañado del joven Korg, a quien terminaba de entrenar en todo lo necesario para tomar su lugar y ser uno de los grandes protagonistas de lo que llegaría.
Las leyes antiguas les permitían abdicar al Trono por un tiempo prudencial, dejando sin efecto aquella cláusula sobre el heredero, al salir de la ecuación sabían que el siguiente en la línea del Trono no sería otro que Fandral sobre quien caería toda la presión de conseguir con urgencia una pareja para subir al Trono en dos años, fecha en que los Reyes deberán retirarse. Se asegurarían de abdicar tan solo una semana antes de que el año de matrimonio se cumpla, en ese tiempo desaparecerían del escenario público como Príncipes, pero seguirían su labor de activismo para reformar o derogar más de una ley.
Pero aquel sería el paso final, de momento se concentraban en esas reuniones a puerta cerrada y de índole secreta en una casa de campo en las afueras, con líderes de diferentes organizaciones que han velado por los derechos de Omegas y Betas, si algo tenía claro Loki era que desatarían el infierno para aquellos que osan meterse en su relación.
Desconocían la dualidad del carácter de Loki, hermoso en la superficie, suave como la flor más bella de un jardín, pero horrible, capaz de arrasar con toda forma de vida en el interior, Loki era como el fuego insaciable cuando decidía arruinar a alguien, casi siempre mantenía esa parte de sí controlada, una característica de los felinos, feroces pero inteligentes en el momento de atacar.
Thor no se quedaba atrás, podría ser muy bueno en apariencia, pero planeaba con gusto total la hecatombe en que se servirían con un buen vino el corazón de aquellos que señalaron a Loki.
─¿Cómo va todo?─ preguntó Thor al escuchar que Loki volvió a casa.
─Esta semana presentarán la nueva Ley─ mencionó con una sonrisa triunfal.
El Alpha sonrió tomando en brazos a su esposo y dejando un beso suave en sus mejillas ─Me encanta esta parte de ti, divina… me siento indigno de siquiera poder tocarte.
─Sucede que soy superior a todos esos idiotas, y disfrutaré viéndolos caer─ habló orgulloso ─Sin embargo, debemos cuidarnos, hay paparazzis apostados por todas partes, de no ser por los túneles de escape, hace mucho que nos hubiesen visto.
─¿Y si nos ven?─ propuso el Alpha y Loki le observó confuso ─En uno de los jardines hay un punto donde seguramente ellos estarán vigilando buscando captar algo, podríamos darles un poco de comidilla.
─Nada para mayores de edad ¿entendido?─ advirtió Loki, sabía de lo rápido que su esposo encendía las cosas y lo difícil que le resultaba decir que no.
─Prometido.
Y así partieron hacia uno de los jardines aprovechando para leer algo echados en el pasto, ambos tenían trabajo por revisar, Thor estaba encargándose de algunos acuerdos comerciales que beneficiarían a las zonas pesqueras del país y Loki repasaba una y otra vez la ley que presentarían esa semana para que nada se escape.
Con una cesta improvisada con algunas manzanas y otras frutas tomaron asiento al pie de un enorme árbol, ambos se concentraron en sus respectivos trabajos, compartiendo de vez en vez un trozo de fruta. Con la brisa llegando suavemente a ellos Loki cerró los ojos solo un momento recostando su cabeza en el hombro de Thor que acertó a pasar su brazo por la cintura de su esposo acercándolo a su cuerpo dejándolo dormitar ─Has trabajado muy duro─ dijo Thor dejando un beso en su frente para seguir con su trabajo.
Aquel gesto fue captado por más de uno, como el rubio dijo, aquel espacio podía ser vulnerable a ojos indiscretos.
Loki despertó unos minutos después observando con suavidad a su esposo que leía con aspecto serio ─Te vas arrugar─ se burló sacando a Thor de sus pensamientos y haciendo que una sonora carcajada rompiera con la armonía de los sonidos de la naturaleza.
─¿Y no te gustaré arrugado?─ dijo centrando su mirada y toda atención en el recién despierto Loki.
─Quizás… pero no puedes arrugarte ahora─ señaló serio antes de que ambos se echaran a reír.
─¿Por qué no?
─Imagina a nuestros pobres hijos con un padre arrugado ¡Vaya vergüenza!─ dijo Loki de forma dramática ganando que Thor se tirase sobre él cayendo ambos al suelo.
─¿Piensas que puedo avergonzar a nuestros hijos?─ el Alpha pasó su mano por el vientre plano del Omega dejando un beso en sus labios para después bajar y dejar un par de besos en ese lugar de la anatomía de su esposo del que esperaba, algún día, se formarían sus hijos, porque solo podría imaginar un futuro tan maravilloso si Loki está en él.
─Estoy seguro de eso─ afirmó el Omega abrazando a su esposo para hacerlo girar sobre el pasto ─tengo que enseñarte modales.
─Vaya, vaya, ¿qué tenemos aquí? ¿Acaso su Majestad es un ser lujurioso y pervertido?─ dijo Thor robando un beso lleno de deseo de los labios siempre apetecibles de su esposo, sus manos se deslizaron por la curva de su cintura hasta el inicio de sus caderas sintiendo a Loki tensar el cuerpo.
─Nos observan─ murmuró Loki a modo de disculpa ─¿Volvemos a casa?─ Thor asintió dejando una última caricia sobre el vientre de Loki antes de ayudarlo a ponerse de pie, ir las cosas y volver a la casa que compartían.
Por la noche en los noticieros, redes sociales y básicamente en todas partes no se comentaba otra cosa que el hecho de haber visto a los Príncipes no solo pasando el tiempo sino jugueteando como lo harían dos adolescentes enamorados. Muchos señalaban dos momentos en específico, aquel beso del Príncipe Thor en la frente del Príncipe Loki, gesto protector de un Alpha a su Omega y aquel beso en el vientre del moreno. Así surgió el rumor más grande que dotó de esperanza al pueblo ¿llegaría pronto un heredero?
Algunos decían que sí, otros creían que podía ser solo el anhelo de ambos de que suceda, lo cierto fue que, las fotografías y un video con muy buena resolución captado por los paparazzis, la pareja Real desacreditó las palabras de Foster y los medios amarillistas que seguían buscando señalarlos por cada cosa que hicieran.
Esa noche, en la cena, Frigga y Odín preguntarían si serían abuelos pronto.
Los días se deslizaron rápidamente, el viernes por la mañana, uno de los líderes más reconocidos la IOOBL (Ikke-statslig organisation af Omega og Beta-ligestilling) junto a su equipo de trabajo y otros representantes de Organizaciones que luchan por la misma causa, acudieron al Parlamento para poner en agenda la propuesta legislativa en que estuvieron trabajando con la intervención directa de La Reina y el Príncipe Loki, aquella sería una tarde más que movida,
En los noticieros el hecho acaparó titulares, entrevistas al líder del IOOBL para que explicase el contenido de lo entregado en el Parlamento, los más conservadores no dudaron en señalar directamente a Loki de Terrorista, por atentar contra las buenas costumbres y lo establecido por la naturaleza al dotar de una misión específica y jerarquía para Alphas, Betas y Omegas.
Aquel vejete que lideró el Consejo en la reunión que sostuvieron con Thor, incluso se tomó la molestia de salir en medios de comunicación exigiendo que Loki sea echado de la Familia Real, maldiciendo la hora en que un extranjero ocupó el sitio de sucesión a la Corona.
Como respuesta, esa noche Loki y Thor publicaron en Instagram una serie de historias de Alphas, Betas y Omegas que no se limitaban a las ideas tontas de los conservadores del país, sino que generaban cambios desde sus hogares, Alphas que se hacen cargo del hogar y se ocupan de su paternidad con responsabilidad, Omegas que trabajan llevan el sustento económico a casa, Betas cuyos subordinados son Alphas y que han llevado al éxito sus empresas.
A solo un mes de celebrarse su aniversario, iniciaba la cuenta regresiva para lo que muchos creían, el divorcio entre Dinamarca e Islandia, y lo que Loki y Thor llamarían, unas vacaciones.
Se encargaron de hacer llegar a escuelas, universidades, parques y todo sitio en que las personas pasasen el día a día, la propuesta entregada al Parlamento, necesitaban el apoyo de la población, aunque Loki tenía muchos simpatizantes, no se fiaba y su bonita imagen no le aseguraba nada, así que decidió tomar un último riesgo.
Esa tarde salió solo, sin Thor, sin seguridad, decidió caminar por allí, fue a un centro comercial, visitó algunos comercios, compró un par de cosillas, algunas baratijas que le gustarían seguramente a Sif, un reloj para Hela, quizás así dejaría de legar tarde a sus reuniones, un libro para papá y otro para mamá, y, por supuesto, un postre para sus suegros, además de una sudadera en un puesto callejero para Thor.
Ese paseo cumplió con su objetivo, acercarse a las personas, sabía que fue peligroso con aquellos vejetes tras su cabeza, sin embargo, al volver y soportar el regaño que básicamente todo el mundo le dio, incluidos Fandral y Korg, los noticieros hablaban de como el Príncipe se apareció por todos lados haciendo compras como cualquier mortal.
─¿Qué averiguaste?─ preguntó Fandral esa noche en la cena.
─Creo que se enojarán mucho cuando abdiquemos─ murmuró pensativo ─pero lo superaremos…
─¿Cómo?─ esta vez fue Odín quien habló.
─Contando la verdad, a medias, claro.
─Sigo sin entender─ volvió a hablar Odín.
─Como nuestro acuerdo de matrimonio es totalmente válido, incluso la cláusula toma validez de una vieja ley que nos obliga a dar herederos en el primer año de matrimonio, concepción y nacimiento… omitiremos el tema de que no es un cuento de hadas y, diremos que, creímos que podríamos estar juntos e iniciar una de inmediato, y la cláusula era nuestra forma de decirnos que estábamos seguros de ello pero que, como matrimonio descubrimos que todo tiene su tiempo y que, el abdicar responde a un paso atrás, reconocer que aún no es tiempo de ser padres, explicaremos todo.
─Creo que el Pueblo lo entenderá y siempre tendrán nuestro apoyo─ Frigga sonrió ─Y, después de eso podrán tener tiempo suficiente para darnos nietos.
─Por supuesto, Omegas, Alphas, lo que sea, pero queremos nietos─ puntualizó Odín haciendo sonreír a la pareja, solo el tiempo marcaría el rumbo de las cosas, de momento, los conservadores estaban jalándose los pelos mientras Omegas y Betas aplaudían un cambio donde todos sean iguales por ley, no más violencia de ningún tipo hacia ellos ni la normalización de ella.
Sin importar que algunos llorasen y gritasen, podía esperarse un cambio positivo para un mejor futuro.