Pov. Vanya
Casita de campo ni que mierda!!!!
Después de una eternidad en auto por fin llegamos, y lo que la princesita describía como una jodida casita de campo no es más que una jodida mansión.
Es que acaso aparte de ser idiota es un jodido retrasado.
¿Quién mierdas llamaría casita de campo a semejante mansión?
Después de llegar a la conjetura de que era un riquillo idiota como otros más me doy cuenta que me observa atentamente.
-¿Qué? Tengo monos en la cara ¿o qué?-
-Em no que yo sepa- me contesta mientras retuerce sus manos y mira hacia un costado- solo me preguntaba que tanto piensas-
Me lo pienso un momento decidido a contestarle que esta idiota del cerebro cuando la puerta de la casa se abre con un gran estrepito y veo salir un borrón rojizo que carga de inmediato a la princesita.
-Il mio piccolo Mitya!!!!!!!!!-el borrón rojizo resulta ser una mujer que ha cargado a la princesa y que restriega su mejilla contra la de él mientras grita en un idioma que ni por asomo se cual es.
-Il mio piccolo Mitya ya has llegado por fin- por fin lo suelta y lo deja en el piso- a ¿Quién es este bambino Mitya?-con una sonrisa que solo he visto en carteles publicitarios y anuncios me observa con una mirada que no va en nada con su aspecto feliz.
-Él es mi compañero Ivan mamma- me presenta la princesa a esta mujer.
Pov. María
-Él es mi compañero Ivan mamma- es lo primero que me dice mi pequeño y por cortesía no puedo más que escrutarlo con la mirada de momento.
-O mucho gusto pequeño soy la madre de Dimitri, mi nombre es María- me presento- María de Marcov- eso último pareció haberlo sobresaltado, esto me dice que él es alguien que conoce los bajos mundos.
Es demasiado joven para conocerlos.
Me dice mi conciencia y tiene razón, es demasiado joven para hacerlo.
Paso esto por alto de momento y le extiendo mi mano para terminar mi presentación.
-mi nombre es Iván Vasíliev señora- un tanto extrañada miro refilón a Seriozha que me asiente dándome a entender que mis suposiciones son correctas, es algún familiar suyo.
-es un gusto conocerte pequeño Vanya- le digo suavizando la mirada-pasen hace un frio horrible aquí afuera-tirito teatralmente y los dirijo al interior de la casa.
-Serguei-me detengo sin que los niños lo noten-quiero que me investigues a este niño al derecho y al revés- le imprimo toda la seriedad que puedo a mi orden-si es un buen niño tal vez por fin he encontrado lo que buscaba- Serguei me mira intensamente esperando que termine con la orden-tráeme toda la información que puedas sobre el antes de que se vaya y también-con el estómago rugiéndome- tráeme un pastel de fresas me muero de hambre-
Serguei se suelta a reír mientras asiente.
-claro mi señora María le traeré enseguida lo que me ha pedido- se inclina y vuelve al carro para hacer lo que le he pedido.
-mamma ¿qué haces afuera aun?, entra- Mitya me habla desde la puerta y yo me dirijo hacia el-mamma ¿y Seriozha?-me pregunta con su carita extrañada mi niño.
No cabe duda de que eres mi bebe, eres adorable.
Ya adentro nos dirigimos a la salita del té donde el pequeño Vanya está sentado en el sillón favorito de mi marido con una expresión precavida mirando hacia nosotros.
-bien pequeños míos- les miro a ambos evaluándolos- que es lo que nos lleva a esta escena-
Vanya me ve extrañado mientras mi pequeño Mitya acostumbrado a mis modos me responde.
-tenemos un proyecto mamma- la emoción reluce en sus preciosos ojitos- aremos una maqueta sobre la pradera-junta las manos tan exuberante ante la expectativa de un nuevo proyecto tal como yo acostumbro.
-o eso es genial- les sonrió-por qué no van al cuarto de trabajo e inician en lo que Seriozha llega con el pastel para poder tomar un poquitín de café-
Ellos asienten y veo a mi Mitya dirigir a Vanya hacia las escaleras para ir al cuarto de trabajo.
Me pongo de pie y rápidamente me encamino a la cocina donde Kris y Martha están.
-Kris cariño podrías hacerme un favor- ambos voltean a verme y el asiente-tenemos un invitado-le digo afilando mi mirada-él y Mitya están haciendo una maqueta, porque no vas a ver si puedes ayudarlos-
-claro- deja el vaso con té helado en la mesa de la cocina-será un gusto ayudar al pequeño Dimi-
Él sale de la cocina y tomo el lugar que ocupaba junto a su madre.
Ella suelta una risita irónica- déjame adivinar María, es un pequeño varoncito por demás guapo que podría robarte a tu bebe- me sonríe con ojos entre cerrados.
Entrecierro los ojos y con una sonrisilla por demás picara le contesto-como crees Martha, nadie podrá robarme a mi bebe nunca-mi sonrisilla la cambio por un gesto adusto- es un niño que inmediatamente reconoció nuestro apellido y desde que lo pronuncie no ha dejado de estar en guardia-Martha abre los ojos sorprendida-un chiquillo al cual como única explicación a sus reacciones encuentro que es un niño criado en los bajos mundos y que por lo tanto puede resultar un riesgo para mi bebe- termino apretando las manos sobre la mesa.
-o los problemas te siguen por todo el mundo ¿no es así María?- Martha me pregunta con dulzura.
-claro que donde vaya me persiguen Martha, después de todo soy María L. Espinosa de Marcov y mi sangre atrae los problemas junto con mi nombre- le respondo con tono cansino.
-bueno tal vez este pequeño sea una ayuda y no un problema más- se levanta y se dirige hacia el refrigerador.
-espero y tal como mi madre tengas boca de profeta Martha, de todo corazón lo espero-
Ella ríe y empieza a sacar las cosas del refrigerador para lo que creo será la cena.
-¿qué cenaremos hoy?- le pregunto mientras evaluó que robar de lo que está sacando del refrigerador.
-hoy cenaremos ratatouille- me dice girando la cabeza hacia mi- y como no he ido de compras aún no tenemos más que esos ingredientes, así que ni siquiera pienses en robarme un mordisco de algo ¿entendido?-
-Está bien, está bien- me resigno- no le daré ni un mordisquito a nada lo prometo, seré una niña buena-
Ella enarca las cejas y meneando la cabeza como si dijese no, saca de la alacena más alta una caja de las galletas de avena y chocolate que tanto me gustan.
-ten mitiga el hambre con esto mocosa malcriada- me dice mientras me entrega la caja y continua con la preparación de la cena.
-gracias marthidarti- le respondo como toda una mocosa y con la sonrisa más grande que la del gato Cheshire salgo con rumbo a mi estudio a seguir con la colección de mi próximo desfile.
Espero que tú Ivan Vasíliev seas eso que estoy buscando.
Pov. Mitya
Obedezco las indicaciones de mamma y nos dirijo hacia el cuarto de trabajo.
Con paso tranquilo avanzamos por la casa mientras le observo ver todo detalladamente. Me pregunto.
¿Qué es lo que pasa por tu mente Ivan?
Nos acercamos y me adelanto a él para abrir la puerta y fijarme si mamma no tiene echo un desastre el lugar.
Al comprobar que no, le hago pasar y dejamos nuestras cosas en el perchero junto a la puerta.
-¿y bien princesa?- me mira expectante-¿qué aremos ahora?-
Me lo pienso un omento y tomándole la mano la arrastro hasta el armario donde almacenamos los materiales.
-toma todo lo que consideres necesario para poder hacer una maqueta- le digo mientras me dirijo al primer estante-ya que tengamos lo que creemos necesitar veremos como la aremos y si nos hace falta algo-
El asiente y empieza a buscar en los otros estantes.
Mientras tratando de alcanzar a bases de saltitos una base de madera delgada, una mano un poco bronceada la toma y yo me giro para ver a Kris a tras de mí.
-Kris!!!- grito de emoción por verlo después de 2 semas-has vuelto- me abrazo a él como lo hago desde pequeño y caemos ambos al suelo provocando un sonido sordo.
-hey princesa estas bien- Ivan me pregunta saliendo de entre unos estantes del fondo.
-si-balbuceo-estoy bien-con toda la pena del mundo por mi comportamiento infantil me levanto.
Una vez ambos en pie me dispongo a presentarlos.
-Kris él es Ivan un compañero de la escuela-le digo señalando a Ivan- Ivan él es Kris-
Termino y Kris le tiende la mano a Ivan pero este no la toma solo lo observa y da media vuelta para seguir buscando materiales.