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Secretos de Medianoche por MidNightFlower

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Notas del capitulo:

PAREJAS: Harry x Draco, Severus x Sirius, Lucius x Remus y Bill x Regulus.


DISCLAIMER: El mundo de Harry Potter le pertenece a J.K. Rowling! Yo solo estoy utilizando los personajes por mero entretenimiento sin fines de lucro :3


ADVERTENCIAS: Es un What if,...? (que tal si...?) Hay relación chico-chico, sexo explícito (Si no te gusta el delicioso, ¿que haces aquí? x9), m-preg (embarazo masculino), personajes algo OoC y probablemente palabras altisonantes. Están advertidos!


Como nota extra, les advierto que este fic esta ambientado en lo que sería el 6to libro, tomo casi todo lo establecido del 1-5 como canon (a excepción de la muerte innecesaria de Sirius :'V) y Regulus tampoco esta muerto, ya después explicaré como sobrevivió (y espero que no sea algo tan ambiguo como "un hechicero lo hizo" XD). Si me equivoco en continuidad o las cosas canónicas, me disculpo de antemano!


Gracias por sus comentarios: sus y anmamez! Va para ustedes!~


A leer se ha dicho~

Capítulo 6

Sirius nunca le dio mucho pensamiento a su vida acelerada y despreocupada. ¿Para que hacerlo si la vida era un parque de diversiones, era joven, atractivo, entusiasta y lo tenía todo tan precioso y reluciente frente a sus ojos? Claro que jamás de los jamases se le cruzó por la cabeza que todo se iría al carajo en esa fatídica noche donde no solo perdió a la familia que lo acogió y que lo quería realmente a diferencia de la sanguínea, sino también su preciada libertad. Tenía 21 años por todos los magos.

Así que a partir de que fue arrestado por un crimen que no cometió, tuvo 12 años de inopia y zozobra, de experimentar el verdadero dolor en las entrañas y la infelicidad comiéndose su juventud hasta los huesos. El frío lacerante era terrible, pero el hambre era incluso peor.

Si, Azkaban podía ser peor que morir, pero queriendo ser un poco optimista podía decir que ese tiempo de reclusión le pudo dar la única oportunidad para poder pensar y analizar todo con profundidad por primera vez en su vida.

Durante su juventud tomó cientos de decisiones incorrectas como cualquier persona, cometió acciones cuestionables las cuales algunas se arrepentía (mentiría si no lo hiciera), pero estaba seguro que la mayoría de las cosas las volvería a hacer su tuviese que empezar otra vez desde cero.

Festejó como nadie, conoció a decenas de personas interesantes, detestó al instante a unas, amó a otro tanto, disfrutó de casi todas las delicias del alma y cuerpo como estaba seguro solo unos pocos podían siquiera imaginar y tuvo una amorosa familia como siempre deseó.

Lo único que siempre hacia que su pasado palideciera y que lo atormentara, era aquella imagen de un pequeño Harry que permanecía fija en su mente y lo que abría sido de él en su ausencia. Con la muerte de James y Lily era el único puente que le quedaba y estaba seguro que daría lo que fuera por poder hacerse cargo y cuidar al hijo de su mejor amigo; su querido ahijado.

Jamás temió morir ya que en Azkaban cosas como esas poco importaba, sin embargo, cuando el rayo potente de Bellatrix se impactó contra su pecho, estuvo casi seguro que ya no la contaría.

¿Quién le hubiera dicho que Dumbledore tendría un as bajo la manga y lo salvaría a último minuto, en las narices de todos los que ya lo consideraban muerto?

Un gran tipo Dumbledore, y ahora que le estaba dando esa oportunidad de una nueva vida, no la desaprovecharía y pelearía con uñas y dientes para tenerla segura. Por Harry y por sí mismo que consideraba ya haber sufrido demasiado para una vida.

"Este sacrificio es algo mínimo" se dijo dándose ánimos ya que pasar una temporada a solas con nada más y nada menos que Severus Snape era algo peor que pastillas vomitivas.

"A mal tiempo buena cara" se repitió. Siempre fue su lema y este momento no era diferente.

— Sevy, amor ¿se puede saber cómo vamos a ir a la punta de la tiznada los tres y pasar desapercibidos?- preguntó jocoso con su sonrisa lobuna. Si había algo que disfrutaba era esa expresión ácida que hacia el pocionista cuando algo lo exasperaba y curiosamente se agriaba más cuando lo veía –porque supongo que tu amo no le gustara vernos felices y campantes jugando a la casita ¿verdad?-

—No me digas así, Black- escupió su apellido con una mueca –se supone que ustedes dos son animagos y se las ingeniarán para pasar desapercibidos- dijo como si fuera lo más lógico del mundo; tuvo que concederle esa –y no es mi amo, jamás lo fue…- murmuró desviando la mirada hacia el suelo donde reposaba una gran maleta manchada de hollín –además no creo que vaya a visitarme, tendrá otras cosas que hacer hasta que yo le diga que he concluido la pócima-

—Aja- dijo Sirius jugueteando con una esfera de tonos grises que tenía Snape en su escritorio.

—¡Suelta esto!- chilló ofuscado arrancándosela de las manos -¡Eres peor que un crío! ¿Podrías dejar de ser exasperante por 5 minutos?-

—¿Y dónde está la gracia en eso?- amplió su sonrisa.

—Que de lo contrario, terminaré asesinándote antes que la misión inicie- estaba tan cerca que notó como la vena de su frente brotó furiosa. Era tan predecible, pero no le restaba lo divertido al asunto. Alzó ambas manos en señal de paz y se hizo para atrás.

El pocionista haciendo un par de respiraciones en busca de un poco de paz, siguió acomodando con rapidez las cosas en el baúl de fondo expansible que llevaría de viaje y Sirius siguió explorando las chucherías y cachivaches que había en cada rincón de los aposentos de Snape dándole al recinto un aire solitario y oscuro. "La perfecta cueva de un murciélago" soltó una risilla queriendo echar mano de algo que parecía una mano de mono genuina.

—¡Mete las manos en los bolsillos antes que te las arranque!- gritó -¡Es suficiente de tus niñerías! ¡quédate en una esquina sin estorbar!- dijo furioso, sacando una larga lista del enorme anaquel de madera antigua cerca de de la puerta dejando que flotara frente sus ojos. Probablemente su lista de lo indispensable o algo que poco le importaba a Sirius.

—Claro profesor Quejicus- hizo una señal militar divertido.

Tenía otras cosas en mente para divertirse a cuesta suya, pero decidió dejarlas de lado. El gran reloj de pared anunció cinco para las 6 y ya que no iban a llegar a un entendimiento en poco tiempo decidió escapar un rato; ya después seguirán con sus duelos verbales.

—No creas que no es divertido verte deambulando como buitre al acecho por todo tu cuarto, pero creo que haré algo mas interesante e iré a ver a Harry- El de ojos azabache se crispó en su lugar.

—Ni sueñes que vas a ver a tu condenado ahijado así como así. Si Dumbledore te… ¡¿A dónde crees que vas pulgoso?!- vociferó por lo alto y Sirius comenzó a correr en zigzag. No fuera a comenzar a lanzarle cruciatus por la espalda y cuanto sabía lo que dolía.

—¡No puedo oírte!-

—¡Black, regresa en este maldito instante!- soltó una carcajada triunfal. Si así iban a ser los tres meses posteriores no le molestaba en absoluto.


Los sonidos de los cuchicheos, el tenue olor a humedad y mar junto con las miradas temerosas de los de primer año fue lo primero que captaron sus sentidos. Era como estar en casa nuevamente y pudo respirar con amenidad disfrutando de ese agradable cosquilleo que le generaba. Acomodó sus gafas que se deslizaron por el puente de su nariz para poder ver mejor el hechizo del cielo estrellado del techo. Nada le gustaba mas que esas tonalidades lapidas y ocres de las velas danzando en los alrededores dándole al castillo ese aire mágico y peculiar que lo distinguía.

Los maestros ya se encontraban situados en el gran comedor alargado, lado a lado de la silla del director que estaba ausente,.Harry con suspicacia captó curioso dos cosas. Una: que ahí estaba la profesora Sinistra con una expresión de pocos amigos e intuía que era por sus vacaciones truncadas y dos: faltaban dos personas que antes de ingresar estaba seguro vería; Remus Lupin y Hagrid. Frunció el ceño.

"Que extraño"

—¡Mira camarada, es Bill!- exclamó Ron tan sorprendido como él –¡ese tonto no me lo dijo, seguro quería mantenerlo como sorpresa!- dijo emocionado lanzándole un saludo que su hermano mayor le devolvió jovial.

—¿Que esta haciendo aquí?- dejó escapar incrédulo. Eso se estaba volviendo mucho mas complejo de lo que esperó. ¿De que se trataba?

—Sabe. Pero supongo que va a dar una materia. Solo espero que sea DCAO porque la Umbridge no nos enseñó nada de provecho el año pasado-

—Cierto...- asintió lentamente queriendo agregar algo que prefirió guardarse.

De repente sintió caliente el bolsillo del pantalón y sacó el trozo de espejo que Sirius le obsequió el año anterior y que consideraba le hubiese ahorrado muchos problemas de haber adivinado su función. "No cabe duda que a veces uno da por sentado las cosas y terminan siendo algo totalmente distinto" se dijo exhalando todo el aire que no se había dado cuenta estaba conteniendo.

Abrió aún más los ojos. Era una nota que decía "Ven al final del pasillo"

—¿Harry ¿Qué pasa?- preguntó la castaña mirando el fragmento y luego a él -¿es… Canuto?- Harry asintió tranquilo por la expresión que le regresó –ve, yo te cubro- le dio un asentimiento de cabeza en forma de agradecimiento y se escabulló entre las hileras de alumnos que entraban en el gran comedor que parecía no tener fin.

Corrió tan rápido como pudo emocionado porque su padrino siempre se las ingeniaba para merodear sin que nadie se diera cuenta de su presencia.

Momentos como aquel le hacían pensar lo hermoso que hubiera sido ser criado por él en el campo en lugar de se confinado al cuidado de los Dursley y su papel de elfo domestico. Cuanto se habrían divertido y cuanto habría aprendido, pero principalmente, cuan amado hubiera sido.

"Pero ya no vale llorar por el hubiera" se recordó con una sonrisa triste.

Pudo ver un enorme perro negro ingresando a un salón en desuso y con el corazón galopando en su pecho, disminuyó la velocidad. Tras de él venía Crookshanks con su pausado caminar y lo acompañó a entrar.

Nada más cerrar la puerta se abalanzó contra su padrino como un niño pequeño aferrándose a la seguridad de su cuerpo donde sabía estaría seguro.

—¡Sirius!- prorrumpió emocionado –¡no sabes cuánto me alegra verte!- sentía que se quitaba un peso de encima verle sano y salvo después de un par de meses de estar lejos y de creerle muerto.

—Igual a mi cachorro, como no tienes idea. ¡Te e extrañado horrores!- Harry sorbió su nariz sintiendo como sus ojos se anegaban de lágrimas. No lo había perdido y estaba agradecido, no quería perder a nadie querido nunca más -no te me pongas melancólico Jim, no tengo mucho tiempo que me escurrí del ojo vigilante de Quejicus para poder verte- dio un chasquido de la lengua-Ni siquiera él va a poder impedirme esto- el menor sonrió de oreja a oreja orgulloso.

El gato naranja de Hermione lanzó un maullido exigiendo atención que Sirius no dudó en brindarle. Parecía que habían hecho buenas migas y a Harry le daba algo de envidia.

—¿Qué vas a hacer ahora? Creí que habías dicho que tomarías el lugar de la profesora Sinistra en este curso, que Dumbledore te pidió y…–

—Ese era el plan- lo interrumpió sin dejar de acariciar a Crookshanks que ronroneaba gustoso -pero como mencioné en la pequeña carta que garabateé, ahora todo cambió… hum…- rascó su prematura barba de esa forma que siempre hacia cuando analizaba en su mente que nada trascendente se escapara de su boca -como te imaginas, tengo un encargo de Dumbledore. No te puedo decir que es, pero es algo serio y necesitan mi ayuda en el norte con urgencia-

-¿Que es?-

-Harry... no puedo decirte. Hice una promesa y tengo que cumplirla. Lo siento-

El ojiverde bajó la mirada con tristeza y molestia. ¿Porque seguían dejándolo de lado? Era lo suficientemente fuerte para afrontar cualquier cosa que estuviera sucediendo a sus espaldas; podría manejarlo. "¿Porque no confían en mi?" se preguntó dolido.

—Quisiera que te pudieras quedar como habías dicho en un principio… o tal ver ir contigo…– sabía que actuaba igual que un crío, pero no podía evitarlo; Sirius era prácticamente la familia que siempre anheló conocer, vamos, él era el único vínculo real que le quedaba de sus padres y que a diferencia de los Dursley, si sentía cariño hacia él.

—Y no sabes cuánto me gustaría que pudieras venir conmigo, que gran equipo haríamos- dijo con la ilusión danzando en sus ojos grises -pero ten por seguro que me comunicaré contigo en cuanto pueda- le guiñó el ojo señalando su propio fragmento de vidrio y Harry asintió - cualquier cosa, échame un grito. Ya me las ingeniaré para que podamos contactarnos de manera segura sin terceros molestos- el muchacho asintió aun sintiendo que no era suficiente, pero no podía ponerse exigente.

—Cuídate mucho- volvió a abrazarle.

—Y tú igual, mantente muy alerta de las cosas y vigila bien tus alrededores- hizo una pausa que le pareció que quería decir algo importante, pero se reprimió a ultima instancia antes que brotara algo que no debía -Buena suerte Harry, nos volveremos a ver pronto- besó su coronilla y se alejó lo suficiente para transformarse nuevamente en un enorme can negro y Harry exhaló un suspiro al verlo partir.

Apenas lo conocía pero estaba seguro que no soportaría que le pasara algo malo "Al menos otra vez... y que está ves sea en serio" tembló de solo pensarlo.

"¿Qué será aquello tan secreto que Dumbledore le pidió? ¿Y porque no me ha dicho nada siendo que siempre fue lo más honesto que pudo?" se preguntó súbitamente molesto. No es como si el mismo hubiera sido muy informativo con Dumbledore como decirle sobre sus constantes sueños, pero ¿Por qué Sirius? Esa era la pregunta.

"Y por lo que dijo, seguro irá con Snape…" analizó tratando de atar las ideas que veía y comenzaban a tomar forma.

Caminaba en dirección del gran comedor con Crookshanks muy pegado a sus pies como un vigilante peludo que le ocasionó una risilla ante la cara aprensiva que se cargaba. Algo le decía que tenía una especie de pacto con Sirius para mantenerlo a salvo y el felino se lo tomaba muy enserio.

De tan inmiscuido que estaba en sus pensamientos dispersos, no notó la chica que veía caminando en dirección hacia él igualmente distraída. Lo único que percibió fue el golpe sordo y sus reflejos actuar antes de pensarlo sosteniendo el menudo cuerpo de la chica evitando que cayera al suelo.

—Perdona- dijo rápidamente enfocando su mirada en ella al tiempo que acomodaba sus lentes con la mano libre.

—¡¿Potter?!— preguntó la chica con voz alarmada. Dos gotas de mercurio, claro y brillante le regresaban la mirada y Harry sintió un extraño cosquilleo en la mano obligándose a soltarla. La chica se sostuvo por su propio pie y carraspeó acomodándose el cabello largo platinado que le llegaba a la cintura dando la impresión que no ocurrió nada.

—¿Cómo sabes quién soy yo?-

—¿Cómo no voy a saber?- rebatió acomodándose la falda, quitando cualquier partícula de polvo que pudiera tener –eres Harry Potter, el bendito niño que vivió- ironizó esas ultimas 5 palabras que al instante apretó los labios como si hubiese dicho más de lo que hubiera querido y carraspeó con disimulo que pasó desapercibido por el moreno que estaba perdido en esa peculiar tonalidad de sus ojos –cualquiera que no viva bajo una piedra y que tenga acceso al periódico lo sabe-

Harry se maldijo por esperar alguna otra respuesta que no fuera esa, aunque la forma en la que lo dijo, le sonó extrañamente familiar.

—¿Te conozco?- pregunto Harry intrigado sin poder apartar su mirada de la que ella rehuía.

—Lo dudo- dijo alzando el mentón con prepotencia, gesto que debía molestarle, pero extrañamente le causó gracia –si me disculpas, tengo cosas que hacer- dijo pasando a su lado a grandes zancadas y aunque Harry alargó el brazo para alcanzarla, se le escapó por escasos centímetros.

—¿Como te llamas?- preguntó, pero la chica sin detenerse o voltear, siguió avanzando al lado contrario.

Crookshanks maulló molesto y lo regresó a ver al tiempo que miraba la ya muy distante chica que se contoneaba con gracia al caminar haciendo que su cabello ondeara como una cortina de platino de un lado a otro.

Parpadeó dos veces atónito mirando su mano. El cosquilleo desapareció, pero su extrañeza comenzaba a aumentar. ¿Quién era esa chica?

 

Notas finales:

Como si no fuera obvio quien es :P pero bueno, el pequeño Harry no lo sabe aun .w.U

Si puedo, subo el siguiente capi ahorita mismo!


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