La tarde iba convirtiéndose lentamente en noche y los dos adolescentes volvían a paso lento, sin prisas, hablando tranquilamente de distintas cosas, dirigiéndose sonrisas tímidas de ves en cuando mientras dentro de cada mente y corazón se producía una revolución de sentimientos y emociones con cada palabra del otro.
_ Tal ves deberías buscar otro deporte_ (Bromeó)
_ Mihatsuki solía decir eso, ya sabes... Rika _ (Le respondió mientras destellos de nostalgia se asomaban por sus ojos)
_ Lo siento no quise..._ (Se apresuró apenado)
_ Esta bien no te preocupes_(Le sonrió tranquilizándolo)
_ Yo... bueno..... me gustaría saber más de.... o sea... de ustedes de vos y....._
_ Esta bien no te preocupes pregunta lo que quieras_
_ Bueno... ¿cuanto duraron?_
_ Poco más un año_
_ Lo veo entonces ustedes...._ (Se detuvo de repente sonrojándose para después cambiar su rostro por uno lleno de rabia y envidia )
(Rukawa se sintió extrañamente complacido por esta expresión) "¿Celos tal ves? Ya me gustaría, ¿será celoso? supongo que si "
Los dos se quedaron en silencio por unos momentos
_ ¿Qué me ibas a decir Hanamichi?_
_ eh... eh.. etto... bueno que ustedes... digo con tanto tiempo supongo que habrán..._ (Hizo unos gestos raros con las manos, tratando de explicar, lo que el pelinegro había entendido hace rato, pero fingía no entender solo para molestarlo)
(El ojiazul sonrió por el notorio sonrojo en las mejillas de su compañero se veía tan lindo)_ Ya... ya entendí, si, nosotros hicimos.... bueno no se si llamarlo así por que el sentimiento no era mutuo, pero bueno, dejémoslo en... tuvimos sexo_
Ahora si estaba enojado "Maldita perra afortunada si yo pudiera... ¡ah! Que bronca que me da que esa bruja aya podido probar tan libremente el cuerpo de mi dulce Kaede me muero de la envidia apuesto a que es muy buen amante .... la baba le caía solo de pensar en eso, aunque su cara no perdía el semblante de notable molestia "
(Noto que su silencio se prolongaba demasiado)_ Ya veo _ (Soltó)
_ Y tu los has hecho con alguien_ (Pregunto tímidamente desviando la mirada y sonrojándose al mismo tiempo que su amigo )
_ bueno... yo .... es que.... Con la hermana de Yohei_ (Su sonrojo se volvió más fuerte)
_ Con la hermana de tu amigo, ¡por Kami! no te veía con esas_ (Aunque seguía sonriendo se sentía celoso mucho muy celoso pero trataba de controlarse para no ser obvio)
_ Fue un error es que a ella yo le gustaba y yo bueno no podía tocarla por más que me gustase... pero ella insistió tanto que no pude resistirme ella era tan linda Yohei nunca se entero aunque supongo que lo sabe en el fondo_ (se puso la mano en la cabeza adoptando una mirada algo melancólica y pensativa)
_ Si no te dijo nada eso quiere decir o que no lo sabe o que no le importa y te entie1nde es tu amigo después de todo_
No le gustaba para nada defender a ese que lo hacía morir de celos, pero era mejor que seguir viendo esa mirada triste que le helaba el corazón.
_ Gracias, tienes razón_ (Volvió a sonreírle y Kaede le respondió de la misma manera)
Entre tanto hablar llegaron nuevamente a la casa del mayor, Hanamichi lo acompaño lentamente, a pesar de estar cansado, por las escaleras. Lo que sea por un segundo más a su lado. Al llegar a la puerta ...
_ Bueno nos vemos..._(Saludo Hanamichi)
(esperando que se le ocurriera algo para retenerlo un poco más) _ Hanamichi, estuve pensando... como pasamos navidad en tu casa sería bueno que pasáramos año nuevo acá, ¿qué te parece?_
_ De acuerdo, para mi esta bien y eh..._
_ Otra cosa te parece si mañana nos vemos en el edificio viejo y jugamos un rato ahora que lo pienso y ya llevó casi una semana sin jugar me siento raro ¿Sabes?_
_ ¡JA!_ (Rió y le beso la mejilla, para después decirle, no muy lejos de su oído, jugando a molestarlo como lo había hecho su amigo esa misma mañana )_ Nos vemos mañana entonces_
Después, solo lo miro a los ojos, se giro y se fue alzando la mano en su típica forma de saludo, mientras que con la otra se agarraba el pecho, como tratando de que su corazón no se le escape al respirar.
Por su lado el ojiazul se lo quedo mirando hasta que su figura desapareció al dar la vuelta para tomar el ascensor dejándolo con la estúpida sonrisa de colegiala enamorada, que había tenido todo el día, mirando hacia el vacío sin poder pensar en otra cosa que no sea ese pelo rojo, esos ojos almendra y sobretodo ese hermoso cuerpo, del cual ni el propio Hanamichi era consiente de lo que despertaba.
Y así se quedo, hasta que una fuerte ventisca nocturna lo despertó de su ensueño provocándole un escalofrío en las espalda, después de eso, entró en su apartamento sin perder en ningún momento esa hermosa sensación, ese calor, el palpitar de su corazón junto con las ansias de que llegue el día siguiente, para poder verlo de nuevo, y que ese calor lo envolviera también por fuera junto con los brazos del oji almendra rodeando su cuerpo.
El menor por su parte caminaba ausente de camino a la estación pensando sin poder evitarlo en su amigo, quería aclarar lo que sentía, como actuaría, que le diría, como haría para que el pelinegro no se de cuenta de la obvia atracción que sentía por él aunque presentía que su adorado Kaede ya se había dado cuenta, esto lo atormentaba y lo angustiaba, por lo que prefería simplemente dejar esos pensamientos atrás y dejar que la emoción que le causaba solo pensar en el día siguiente, inmediatamente una sonrisa se apodero de su rostro acabando con la expresión que lo envolvía segundos antes.
Una anciana lo veía contrariada pues en el rostro del chico a cada segundo se veía un nueva expresión totalmente concorde con lo que se le pasaba por la cabeza, en esos momentos eran miles y miles de pensamientos y suposiciones, cosas que decirle a esa persona. Los pensamientos lo abrumaban se sentía ahogado desde que se alejo de aquel departamento donde ahora seguramente Rukawa estaría durmiendo, cada vez que tenía tiempo para pensar cada vea que estaba solo se afrontaba a la realidad, no podía esperar que su amigo le correspondiese "Vamos, tiene a toda la escuela babeando por él, puede tener a la chica que quiera con solo una mirada, no puedo esperar que él me elija, para colmo soy un hombre, eso lo hace el doble de complicado, pero este sentimiento tan cálido que solo él me produce..... lo quiero, y no voy a renunciar, no voy permitir que se aleje por nada en este mundo"
_ No, no lo voy a hacer por que soy un tensai_(Grito al llegar a su estación)
Mientras todos lo miraban como si estuviera loco el pelirrojo caminaba como si nada , ya le era costumbre que la gente lo mirara.
Caminó hasta su casa pensando en lo mismo, una y otra ves, aún después de acostarse, cuando serró los ojos, ahí se encontraba, su figura hermosa, su cara apacible cuando duerme, sus ojos de ese azul tan profundo y su sonrisa la que ya se había acostumbrado a ver y que amaba con cada fibra de sus ser, casi podía sentirlo recostado en su cama, pero no, estaban muy separados por quien sabe cuantos kilómetros, aún así el pelinegro no lo abandonaba, seguía en su mente, y cada ves los pensamientos se hacían más pesados sobre sus hombros que desde ya no había podido relajar ni siquiera con una ducha.
Lo amaba, eso ya le quedaba claro, ya no era un simple gustar, pero no podía esperar que su amigo le correspondiese o que lo no lo odiase, solo podía esperar que su astuto zorrito no se diera cuenta y que si lo hacía simplemente no se lo dijera. "!!!!!!ah ya no puedo pensar más ayúdame Kami¡¡¡¡¡¡¡ mi cabeza es un completo desastre cada ves estoy más confundido siento que voy a explotar" Un torbellino es lo que pasaba por el corazón del oji almendra ya ni sabía lo que quería, obvio quería a Kaede pero ¿tenerlo cerca aunque sea como amigo? ¿decirle y arriesgarse a que no le vuelva a hablar? La primera era un a buena opción pero ¿podría mantener su papel de amigo si cada ves que lo tenía cerca se moría por besarlo? ¿Y si conoce a alguien? ¿Lo voy a soportar? Al final todas sus preguntas no tenían respuesta y solo causaban más angustia.
Ya era muy tarde si no se despejaba y se dormía no podría jugar bien mañana y necesitaba deslumbrar a su amigo al final decidió pesar solo en que lo vería mañana aunque la molestia y pesadumbre de sus dudas no lo abandonaron por completo.
Ya eran las 3:00 e increíblemente no se había podido dormir después de pasar casi 4 horas recostado en la cama, es que la emoción lo ponía nervioso no quería sentirse así no quería pero no podía evitarlo (Se volteó por enésima ves tratando de acomodarse mejor entre las arrugas de la cama ) si que se había acostumbrado al pecho de ese Do´aho ¿Qué es lo que haría con esto? No podía ignorarlo ¿o si? Claro que no y tampoco podía controlarse no era su estilo "No voy a contenerme ya no más, no con el, voy a dejar que me vea tal cual soy, voy a hacer lo que sienta si eso es lo mejor y que nadie se me interponga por que va a salir muy mal parado" (Sonrió y por fin pudo conciliar el sueño)
Al otro día muy temprano en la casa de un alocado Hana este se paseaba de en lado al otro de la habitación tratando de decidir que ponerse había seleccionado varia cosas de las cuales ninguna le servía para jugar basquet si no más bien las había elegido para resaltar sus atributos naturales *Que son muchos* al final se rindió, no había forma de ganarle al Kitsune con uno Jeans ajustados, así que saco del armario un pantalón deportivo negro una remera de manga corta simple de color blanco junto con una capera negra haciendo juego con el pantalón y por su puesto su objeto más preciado en el mundo, la bufanda negra y roja .
Más tarde una cabellera roja se distinguía entre los árboles del parque, el chico estaba esperaba pacientemente el la puerta de un viejo edificio alto con apariencia de mansión antigua por sus decoraciones gastadas, sucias pero visibles bajo cada ventana nada que ver con lo que había adentro, se veía abandonado por lo menos por fuera.
De pronto de entre los árboles un chico de piel blanca y pelo negro aparecía con su usual cara matutina, la de dormido por supuesto, o quizás si lo estaba, ¿quien lo sabe? Con ese zorro no se sabe.
_ Hola Hanamichi ¿hace mucho que esperas?_ (Pregunto despertándose )
_ No acabo de llegar_ (Le sonrió sabiendo que nuevamente era la primera cosa que veía al despertar)
_ ¿Por qué no entraste? ¿O ya te olvidaste donde esta la entrada?_
_ No, no me olvide pero... no se, me dio cosa... es que..._
_ Do´aho, este lugar es también tuyo. Ven, vamos _ (Diciendo esto le sonrío pícaro y lo tomó de la mano arrastrándolo por el agujero de la reja para luego hacer el mismo recorrido que el día anterior hasta llegar a la puerta de madera la cual el pelirrojo se ofreció a abrir)
La puerta estaba vieja e hinchada por la humedad de los días fríos por lo que el pelirrojo tubo algunos problemas al hacerlo el principal fue soltar la suave mano de su lindo zorrito.
Ya dentro la cancha los esperaba reluciente y el zorrito no pudo esperar para sacar el balón del bolso en que lo había traído y comenzar a rebotarlo mientras corría a modo de calentamiento, para después pasárselo al oji almendra.
_ Toma hagamos pases para calentar_
_ Seguro_
El sonido del la pelota rebotando en el suelo se seguía escuchando aún después de varias horas el pelinegro ya había ganado un juego que le costo bastante ya que estaba muy ausente tratando de observar los detalles que hasta entonces había dejado de lado cuando veía jugar al pelirrojo todos ellos ahora lo cautivaban y desconcentraban por su puesto a esto se le sumaban las notorias mejorías que del oji almendra, el otro juego que jugaron ya que Hanamichi que había insistido con la revancha que dudo en darle porque sabía que su compañero lo vencería y así fue aunque por poca diferencia 50-48 estaban jugando a 50 y el N° 10 de Shohoku se arriesgó e hizo una clavada dándole los últimos punto que necesitaba para ganar.
Al terminar ya exhausto Kaede se relajo acostándose en el suelo, algo resbaloso por el sudor, de todos modos esto no lo molesto estaba acostado sobre su propio sabor y el de la persona que amaba, que pronto sintió recostado a su lado.
_ Estoy exhausto, no puedo más_ Se quejo el menor
_ Yo también, muero por una ducha_ "Y muero por que sea con vos" (Se volteó como esperando la reacción de su amigo a esta frase que obviamente no había podido escuchar)
_ Si_(Aunque no quiso, eso último sonó desilusionado) "otra noche que me va a costar dormir cuanto tiempo más podré mantenerlo acá"
_ Si quieres puedes ducharte en mi casa así no tenes que volver a tu casa todo transpirado_ (Le sonrío escondiendo la cara perver que se le estaba formando en la cara)
_ Si no es mucha molestia_
_ Claro que no, pero primero ¿Me ayudas a limpiar un poco esto?_
_ Seguro_
No tardaron mucho en terminar y así volvieron al departamento de Rukawa como estaban cansados decidieron, o mejor dicho Kaede decidió, que era mejor tomar el ascensor.
Una ves adentro el ojiazul se apretujó bien contra el pecho de su amigo.
_ Me siento tan bien necesita jugar un partido además me divertí mucho jugaste bien_
_ Gracias... _ (El menor lo abrazó apoyando su cabeza en el hombro de Hana acercándolo aún más ) _ mnh Rukawa_
_ ¡Ah! estoy todo transpirado lo siento, seguro te da asco_
_ No_ (Lo agarro por la cintura atrayéndolo nuevamente contra sí) _ Nunca me darías asco_ (Murmuro en su oído y lo rodeó con el otro brazo)
_ Por cierto..._ (Subió su rostro del hombro a la oreja izquierda) Kaede... ¿recuerdas?_(Susurró y luego beso un poco el cuello mientras su mano lo acariciaba por el lado derecho, su dedo pulgar delineó los labios y luego acerco su rostro a esta parte) _ ¿Puedo?_(preguntó con inocencia cargada de deseo alzando la mirada la cual colisionó estrepitosamente con las orbes almendra)
El aliento de Kaede le entró por la garganta haciendo nido ahí, sabía en su interior que se quedaría ahí por varios meses, atormentándolo con el recuerdo de esos labios que pedían ser besados, literalmente, en sus boca ahora sentía la respiración de su compañero, pausada y deliciosa, junto con el aroma a jazmines mezclado con el sudor, que le caía por la frente, haciéndolo aún más sexy de lo que ya era, sentía como el corazón le latía tan fuerte que podía oírlo estaba nervioso y tenía la lengua trabada, El pelinegro seguía esperando una respuesta.
_ No tienes que pedir permiso_ (Soltó como pudo con los nervios a flor de piel pero aún así esto sonó confiado y seguro y hasta algo divertido)
_ No te olvides después_ (Sonrió y se relamió los labios)
La sonrisa le surco la cara en ese momento no se pondría a pensar el significada de esas palabras, estaba a punto de atacar el mismo los labios de Kaede que parecía haberse quedado inmóvil, sin decir nada este se volteó y se alejo lo que el espacio le permitía ¿Acaso lo estaba probando?.
El calor le quemaba el cuerpo y le nublaba los sentidos quería besarlo ya, para colmo él no se estaba negando, al contrarío, lo dejaba libre de saciarse sin preguntar, era demasiado, tenía que usar su autocontrol para sobrellevar la situación, sabía de sobra que la puerta se estaba por abrir casi había contado el tiempo, era normal que los vecinos se escandalicen si lo vieran besando a un hombre en el ascensor por eso debía esperar hasta estar en su apartamento, donde lo devoraría sin compasión. Preso de sus ideas corrió tomado al pelirrojo de la mano a lo largo del pasillo.
Detrás de ellos, la puerta de cerró con golpe sordo, producto de la espalda del oji almendra chocando contra esta, en ese momento, Rukawa acorralaba su boca con uno de sus sensuales besos a los cuales el tensai era incapaz de resistirse, más bien se consumía deliberada mente el la pasión dejando a sus manos recorrer la espalda del Kitsune, el cual reaccionaba pegándose con más fuerza a él.
Convertido en una fiera salvaje, sus labios casi se fundían con los del menor, un placer incontenible lo recorría, lo envolvía en frenesí, de alguna forma quería pegarse más a ese cuerpo fuerte, que podía sentir, le acariciaba la espalda incitándolo a más. Su respiración agitada y sus manos inquietas, trataban ansiosas de colarse por debajo de la campera para tocar más su piel, mientras, los gemidos se les escapaban por las comisuras en cada movimiento que el ojiazul aprovechó para profundizar el beso, jugueteo de sus lenguas. El infinito rozar de la pasión y el desesperado movimiento de todo su cuerpo en busca del otro, acariciaba el ambiente llenándolo de calor.
Pero otra cosa se hacía presente en los dos adolescentes frente a su pasión que se quemaba y ardía en cantidad el ínfimo sentimiento de asfixia les llegaba a los pulmones con la falta de aire obligándolos a detenerse para llenarse con vital oxigeno. Aunque todo lo que pudieron encontrar en este fue el aroma a sudor y sus dos esencias mezcladas perfectamente.
Se quedaron en silencio por unos minutos sonriéndose y todavía acariciándose.
_ ¿Quieres bañarte?_
_ Ve tu primero yo te espero acá_
_ Esta bien_ "Así va a estar mejor espero poder sacarme esta calentura de encima si no e lo violo quisiera saber que mierda me pasa" _ Agarra lo que quieras ponte cómodo, yo me apuro_
La figura del pelinegro desapareció detrás de la puerta dejando al tensai inmerso en un mar de confusión, dudas, angustia, dolor, incertidumbre, todo cubierto en un manto de felicidad y calor mucho calor, la fogosa explosión de Kaede lo había dejado con una molestia en los pantalones y un miedo de sobrepasarse que no sabía como controlar "Otro acercamiento de esos y se saltaría encima para poseerlo aunque sabía no era capaz de lastimarlo de esa forma"
A los 20 minutos Kaede salió ya vestido del baño.
_ Te dejé la bañadera llena_
_ Gracias_ (El pelirrojo se encamino al baño)
_ Las toallas están en el armario blanco en la puerta de abajo_
_ De acuerdo _ (le sonrió)
El agua se le colaba por todo su cuerpo que comenzaba a relajarse en esa agua todavía quedaba algo de la esencia de Kaede imprevistamente ese pensamiento lo relajo aún más a pesar de todos los sentimientos encontrados lo único que tenía claro era que lo amaba y solo él lo podía hacer feliz. Suspiro profundamente resignándose "A pesar de esta confusión me hace bien tenerte cerca aunque duela un poco son más importantes los momentos en os que me besas como hace un rato"
Mientras tanto el pelinegro buscaba algo en la televisión sin realmente mirar ya cansado dejo una película a la que no presto demasiada atención.
Mientras en el baño el oji almendra se terminó de bañar y se cubrió con una toalla negra que de tan distraído por su confusión interna no se dio cuenta era una toalla de mano, la cual apenas le tapaba lo justo de su intimidad.
Distraído así sin más salió del baño con rumbo a la habitación, en la cual encontro a Rukawa tirado en la cama mirando la televisión. El pelinegro se quedo sin habla ante tremenda imagen, el pelirrojo estaba todo mojado con las gotas de agua recorriendo su torso y piernas caminando pausadamente sin notar que era observado, buscando su ropa, que casualmente se encontraba detrás de Kitsune en el bolso de Hana. El oji azul poco a poco se quedaba sin oxigeno ya que la visión de su amigo en esas condiciones le había hecho olvidarse de respirar, sin darse cuenta sus preciosos ojos se paseaban junto con el bien formado cuerpo y todos los movimientos del tensai, no podía pensar, de repente lo ataco la sed, no porque tuviera la boca seca, al contrario, se le caía la baba *A quien no* , lo que quería Kaede era beber las gotas que caían incesantes desde el rojo pelo y caían por el cuello luego por el pecho hasta perderse en...¡¡¡ahh!!!, el n° 11 de Shohoku podía sentir la sangre a punto de caer por su blanca mejilla, inconscientemente se llevo la mano a la cara para detenerla, luego sin mirarse los dedos simplemente se limpió en las sabanas sin dejar ni un segundo de mirar a su amigo, relamiéndose los labios de ves en cuando para contener la baba que poco más y le caía a chorros *Yo te entiendo Rukawa solo de imaginarlo y me desangro de la hemorragia nasal e inundo mi casa con la baba*
(Aun distraído Hana dijo)_ ¡ah! Rukawa me dejas agarrar mi ropa_
_ ¿Qué... ropa.... yo... ?_
_ ¿Estas bien?_ (Pregunto preocupado)
_ Bien si bien_ (Algo de lo que dijo Hana llego al fin al cerebro del pelinegro haciendo que este reaccionara y se moviera solo un poco de su lugar para dejar que el pelirrojo tomara su ropa )
El de ojos almendra aún distraído, pero sin que le pase de ser percibido la inminente cercanía del único dueño de sus pensamientos, no se percataba de la intensa mirada azul llena de deseo que lo recorría.
Se recargo un poco sobre el respaldo de la cama inclinándose sobre el cuerpo de su compañero que le estorbaba un poco pero no tanto como para alejarlo.
Su respiración era acelerada, aunque sabía que el pelirrojo no se daba cuenta eso lo ponía nervioso, además estaba muy excitado y eso empezaba a notarse, el calor lo recorría, de repente ya no pudo contenerse sus manos comenzaron a viajar despacio por las piernas del menor delineando los músculos, subiendo delicada sensual y desesperadamente.
El sorpresivo contacto le hizo sorprender y sus piernas flaquearon haciéndolo caer con mucho gusto encima de Kaede el cual parecía fuera de si acariciándolo fuertemente por toda la espalda, mientras el pelirrojo aún más perdido se rindió a sus instintos y aprisionó fuertemente entre sus dedos los cabellos negros tomando con deseo los labios que lo llamaban. El ojiazul le respondió de igual manera.
Ahora los dos cuerpos se besaban una y otra vez inmersos en la pasión de sus cuerpos rozándose el uno contra el otro el oji almendra ni se percato de lo duro que estaba el miembro de su compañero al instante en que entraron en contacto pero si noto lo que este le producía al rozarse con su cuerpo, su miembro reaccionaba de igual manera y a él no parecía molestarle esa enorme excitación que lo recorría junto con las suaves caricias del pelinegro.