Miraba sus fotografías, todo su cuarto en la base estaba tapizado de su hermoso rostro, su rostros, sus ojos, su sonrisa.
Todo en él era hermoso, se había enamorado a primera vista, no solo su hermoso físico, sino su enorme inteligencia, su actitud tan arrogante, se sentía la última maravilla del mundo, y su olor, dios ese olor achocolatado con ese ligero toque de menta era su delirio, todo el tiempo pensaba en el, era un hermoso y perfecto hombre y era tan codiciado, tan deseado, que realmente sentía celos de esos malditos perros asquerosos que querían estar con el, que querían vertir sus asquerosos fluidos dentro de él, el dueño de Industrias Stark, yo siendo el gran Capitán América, el mejor hombre más sexy y deseado según muchos y mi amado castaño no necesitaba a esos malditos, yo me encargaría de darle todo el amor que requiera... Porque así de enamorado me tiene, muchas chicas y chicos se me han ofrecido pero estoy tan asqueado de su mentalidad tan simple, no llegan a emocionarme como ese hermoso genio.
Tenia que estar conmigo, necesito que esté a mi lado, que me quiera solamente a mi, que me bese a mi, que me desee a mi solamente, deseo tanto tenerlo debajo de mi, tomarlo y llevarlo a mi cama, penetrarlo, comérmelo de pies a cabeza, y luego que se entregué a mí para siempre
He tenido que fingir tanto tiempo, siendo el buen símbolo, el modelo a seguir, el héroe de todo el mundo y eso enserio que ha sido un problema, porque tengo que reprimirme de alejar a cualquier hombre de Tony
Peter Quill, Strange, Hammer, T'challa, incluso... Incluso, ese niño se había fijado en su amado Tony!
Dios! Estaba que reventaba de tanta irá
Tenia que concentrarme tanto en las misiones cuando íbamos solos, yo siempre trataba de llamar su atención y el solamente me daba un trato distante... Era tan... Desesperante, pero el caeria, solo debía ser más persuasivo
Pero había un pequeño problema, su nombre... Aún no aparecía en mi muñeca, el indicio de que somos almas destinadas a estar juntas para siempre, pero no me preocupo mucho porque sé que el destino lo hizo para mí, para que esté a mi lado por siempre...
Salí de mi habitación para tener mi entrenamiento, solía desahogarme con ello, golpear el saco de boxeo hasta terminar con los nudillos completamente rojos, empecé a golpear con fuerza y me imaginé el rostro de cada uno de esos imbéciles que deseaban estar con Tony, esos desgraciados deberían de desaparecer
- te lo digo enserio, no entiendo cómo es que funciona
- Bueno es un poco complicado, se debió a un largo proceso de entrenamiento para controlar el poder de la gema
- Vaya...
Su voz... Pero no venía solo, golpee con más fuerza el saco...
- Bien ahora me podrías explicar porque necesito entrenar?
- te lo he explicado miles de veces Tony, sin tú armadura estás desprotegido ante el enemigo
- Ug! Bien...
Maldito... Yo le he dado el mismo consejo miles de veces y jamás me ha hecho caso y a el... Al el... Lo escucha en un día...
Desgraciado...
- oh... steve! No sabíamos que estabas por aquí
- Hola Tony... - le doy la sonrisa más sincera que puede salir dentro de mi ira
- Vaya, mira como has dejado ese pobre saco...
- Bueno que puedo decir... Y tú qué haces por aquí
- Bueno Stephen insistió en que debía entrenar para poder pelear cuerpo a cuerpo... Por mi seguridad... Puedes creerlo...
- La verdad no... Pienso que eres muy increíble ya...
El castaño se sonrojo y dejó escapar una pequeña sonrisa, quede más que fascinado y le sonreí con toda la sinceridad del mundo, porque el me hace sentir lo que nadie mas, ni siquiera Peggy, pero de inmediato fue alejado de mi por culpa de ese maldito doctor de cuarta...
- Bien si nos disculpas debemos comenzar a entrenar -
- claro - dijo lo más calmado que podía pero por dentro ya había tomado su escudo y había decapitado a ese maldito mago de cuarta, era un maldito infeliz, era un maldito hijo de perra, metiéndose en mi camino y lo peor de todo es que no podía hacer nada, la ira estaba llevándole por completo que sin darse cuenta comenzó a golpear el saco de boxeo tan fuerte pero tan fuerte que terminó haciéndolo añicos y cayó al suelo
Así como sus nudillos que estaban completamente rojos y con unas pequeñas manchas de sangre
- el castaño se acercó preocupado al verlo así.. - Steve... Estas bien?
Pero al acercarse le pareció ver un destello en sus ojos, y el rubio tenía una sonrisa extraña... Eso lo preocupo aún mas - le tocó el hombro...
- Steve?
- Eh? - sus ojos volvieron a la normalidad - Tony?
- te encuentras bien? Te mirabas... Extraño...
- Oh, lo siento, estaba perdido en mis pensamientos, nada de lo que debas preocuparte
- Seguro? - El castaño se acercó más a el y se sintió dichoso, tener tan cerca al hombre que amaba era un completo gozó.
- Si, gracias por preocuparte por mí - y el castaño volvió a sonrojarse, y le sonrió de vuelta
- Bueno, creo que deberías ir a la enfermería para curar esos nudillos
- Lo haré, descuida
- Está bien - se despidió y volvió con el doctor de pacotilla
Si tan solo el desapareciera...
Nadie debía estar cerca de Tony...
Ellos compartían algo especial...
Algo que nadie mas tenía...
Tony, era su tesoro más preciado...
No dejaría que nada ni nadie se atreviera a quitárselo...
Pero llegó su punto de quiebre...
Ese día...
Caminaba con normalidad por los pasillos en búsqueda de la fuente de sus suspiros
Cuando escucho esa conversación
Tony y Strange...
Los miro y realmente sentía odio por ese tipo
Pero... Sintió como algo dentro de el se rompia...
Se había atrevido a besarlo... Lo beso...
Y su reacción... Fue...
Se miraron las muñecas...
No... No podía ser posible...
No... No lo eran... El destino no podía estarle jodiendo... no de nuevo
No...
- Somos destinados... - dijo el castaño... Stephen sonrió y lo rodeó con sus brazos...
Su interior se llenó de irá, pero no podía expresarla de ninguna manera, su cuerpo no respondía...
Sintió como era consumido por un sentimiento distinto que jamás había sentido
Y cuando por fin pudo reaccionar, se dirigió a su habitación, tomo su escudo y camino con el en sigilo hasta donde estaba el Strange
Estaba dormido el maldito...
Se veía tan pacífico, pero no... Deseaba verlo despierto y con sus ojos llenos de horror
Serían los último que verían
Le dio un puñetazo y enseguida despertó
- Pero que - Sintió el frío metal en su cuello - Rogers... Qué estás haciendo?
- Lo que... Debía haber hecho hace muchísimo tiempo... -
- Te has vuelto loco?!
- La verdad... Creo que sí...
- T-tranquilo... - trato de activar sus poderes pero sintió el escudo más cerca de su cuello, sintiendo su filo...
- Yo no me arriesgaría - dijo con un tono tan frío que el doctor dudaba que de verdad fuera el Rogers que conocía - Me quitaste lo más amado en mi vida... Y no te lo perdonaré...
- De que hablas?
- El es mío... Y no permitiré... Qué ni tú ni nadie, se atreva a apartarlo de mi...
- Tony?
- El me pertenece...
- Somos Soulmates... - y entonces la manga del hechicero se deslizó con lentitud hasta que el nombre de su amado se mostró, sintió una enorme rabia recorriendo todo su cuerpo - Y el tiene el mío en su muñeca, sin importar que hagas... El y yo estamos destinados a estar juntos...
- No por mucho - Sonrió de manera psicópata
- Esto no resolverá nada! Sabes lo que te pasará!?
- Solo se... Qué Tony será mío, ya no tiene opción
Y sin más el capitán de un solo golpe decapitó a Stephen Strange, dejándole un brillante rastro carmesí en su rostro
- es hora de ir por mi amado...
El castaño dormia pacíficamente cuando la alarma de la torre comenzó a sonar...
- Jarvis?! Qué sucede?!
- Señor tenemos un problema, uno de los... - de repente la voz robótica dejo de sonar por el lugar
- Jarvis? Jarvis! Responde! Mierda!.. - salió de la habitación en búsqueda de los demás vengadores
- Enseguida se encontró con Natasha
- Natasha que está sucediendo?!
- No lo se, hay un intruso dentro de la torre y parece ser que tiene el conocimiento para desactivar todas los sistemas de seguridad de la torre, además de que cerró todas las salidas...
- No puede ser... Dónde están los demás?...
Escucharon un grito cerca de ellos y enseguida se acercaron para averiguar quién era su pequeño invitado
Pero no estaban preparados para lo que verían...
Años de entrenamiento jamás los preparo para eso...
- No! Espera Steve! Qué estás haciendo?! - grito de nuevo cuando una de sus piernas fue cortada por el filo de su escudo
- Estorbas...
- Steve... Somos compañeros... Somos amigos...
- Sonrió de manera enferma y le arrancó un brazo - Lástima que no eres nada sin tus flechas...
- Steve! Porfavor! Tengo familia! - dijo con lágrimas en los ojos
- Que lástima - y sin más enterró el escudo en su pecho mientras se manchaba de su sangre... - no queria matarte pero no me dejaste elección...
- S- Steve...
- Uhm? - miro y ahí estaba lo que tanto estaba buscando... Su amado Tony... - Tony! - dijo con una enorme sonrisa
- Steve... Qué estás haciendo? - dijo la pelirroja mientras le apuntaba con un arma
- Tony estás aquí... Ven a mi ..
- Steve... Qué estás haciendo?... - dijo con un enorme terror el castaño
- Oh... Ignora eso... Vamos tenemos que irnos de aquí
- Pero que... - no podía creerlo, el correcto y pulcro Capitán América jamás haría algo asi, Steve jamás haría algo asi, pero esa mirada era la que había visto por tantos años, a la que le había confiado sus máximos secretos, en el hombre en el cual creia, tendría que ser una maldita broma de mal gusto, pero de inmediato dejo de pensar cuando sintió una enorme dolor en su brazo, alzo su manga y de inmediato el nombre de Stephen comenzaba a llenarse de venas de color rojo y con el proceso un enorme dolor - ARGGG!
- Tony! Que sucede?!
- ME DUELE! - cayó al suelo en el proceso y comenzó a retorcerse del dolor, era tan grande y poderoso
El rubio sonrió - Está sucediendo... El nombre de tu destinado se está desvaneciendo... No tengo tiempo para esto! Tenemos que irnos Tony! AHORA!
- Steve! Te lo advierto! Alejate!
- el rubio sonrió de una manera perversa pero dulce - Natasha porfavor, hemos sido amigos y compañeros por tanto tiempo, no me hagas matarte a ti también.
Sin pensarlo dos veces disparó el arma rozando el codo del rubio
- Muy bien, te lo advertí - El rubio de un segundo a otro había clavado su escudo en el hombro de su compañera sacándole un enorme grito de dolor
- Natasha... Tuvimos la oportunidad de evitar todo esto...
- Steve... Que de..monios te sucedió ..
- Que acaso no lo sabes? Estoy enamorado de él... El... Es el causante de todo esto... - ambos miraron al castaño que los miraba atónitos y sin reacción... - Escucha por la vieja amistad te perdonaré la vida... Pero si intentas de nuevo buscarnos no tendré piedad... - retiro su escudo y le dio un golpe tan duro con el que la espía perdió el conocimiento
- Natasha!
- Tony... - lo miro directamente y su rostro en verdad mostraba terror - No me mires así ...
- A-alejate Steve... - comenzó a arrastrarse por el dolor...
- Tranquilo Tony todo estará bien, te lo prometo...
- COMO MIERDAS ME DICES ESO! ACABAS DE MATAR A CLINT! Y LASTIMASTE A NATASHA!
La mirada del rubio de pronto se volvió oscura
- Tony... He sido demasiado paciente pero creo que ya se me terminó, nos iremos ahora mismo
- Jodete! No iré a ning - su frase quedó en el aire al sentir como su cuello era tomado de manera brusca por el rubio
- No me hagas enfadar Tony - esos ojos... Esos ojos no podían ser del hombre en el cual confío... Del hombre que alguna vez... Amo..
- Ste...ve porfa...vor
- Te amo Tony... - y sin más le dio un golpe en la nuca que lo dejo inconsciente... - pero no te irás de mi lado.
Sus ojos comenzaron a abrirse, sentía todo su cuerpo adolorido y su cabeza le daba vueltas...
- Oh... Ya has despertado... - volteo a ver aquel hombre que estaba a su lado... Traía una bata blanca y tenía un extraño acento... - Le avisaré al Capitán
Al escuchar ese nombre su cuerpo se llenó de una terror increíble pero al tratar de moverse sintió un enorme dolor en el vientre...
- Si yo fuera tu no me movería o me desangraria...
Se retiró la sábana con lentitud y su vientre estaba lleno de puntadas con un enorme corte justo donde estaba el ombligo...
Comenzó a hiperventilar... No esto tenía que ser una jodida broma...
Hasta que de pronto la puerta se abrió y al verlo comenzó a ponerse pálido...
- Veo que has despertado amor... - no... No podía ser cierto... Tenía que ser una jodida pesadilla - Te gusta el nuevo traje?... Es bonito no?
Un traje rojo... Con el símbolo de Hydra en el pecho...
- Te debes de estar preguntando que es lo que te paso no es así? Bueno... Gracias a la experimentación científica de Hydra y a su programa lograron experimentar nuevos métodos para crear soldados perfectos... Sin defectos y sin fallos... Y tú mi amado Tony eres el primer hombre en el que se realizará tal evento... Por eso... Se te retiraron los órganos masculinos... Para darte unos femeninos, un útero y ahora mismo eres fértil...
El ritmo cardíaco del castaño comenzó a subir de manera abrupta...
- Pero cálmate Tony... No es para tanto, por fin podremos cumplir el sueño que tanto he deseado... Formar una familia contigo... Tener mi propios descendientes... Así que que tal si nos preparamos para consumarlo...
- Ah.. Capitán no es conveniente que lo haga en estos momentos... El paciente aún no se ha recuperado del todo y las heridas no han cicatrizado
- el capitán volteo a ver al doctor y sin pensarlo dos veces le disparó en la cabeza... - Bueno en qué estábamos... Oh si... Estaba a punto de hacerte el amor...
Solo se podían escuchar los gritos del castaño... Así como se podía distinguir el enorme olor metálico de la sangre... Las sábanas quedaron adornadas con un color carmesí...
El rubio tomo un poco de la sangre de la herida de Tony... Y escribió su nombre en su pecho...
Ahora... Eres mío