Shun estaciono su auto junto a la salida de pasajeros internacionales con una sonrisa, ese día luego de almorzar había recibido el mensaje de sus abuelos que llegarían en el vuelo de las tres así que se apresuró para ir a recogerlos Hades Ikki y Hyoga llegarían a las seis luego de trabajar a la casa familiar, la casa donde habían pasado su infancia la casa de su vida todos sus recuerdos o al menos la mayoría que tenían era de ahí, de ahí o de la oficina de hades no pudo evitar sonreír al pensarlo
Mientras otros niños llenaban la pared de la sala con huellitas de colores y crayones su primer travesura era su mano entintada (por el propio Ikki) en el muro de la sala de juntas de la oficina de hades en aquel entonces un edificio sencillo unas oficinas simples claro cuando hades había tomado bajo su custodia a los dos niños y enterándose que no podía sacarlos del país, fue que el núcleo de la empresa se movió volviéndose la imponente torre que era ahora en el centro de la ciudad cada paso que el empresario había dado desde que llegaron a su vida no era más que una muestra de su cariño por ellos tanto que no sabía cómo podía agradecerlo o como mostrar el mismo cariño y sabía que a Ikki le pasaba lo mismo
- tito cronos!- no le decía abuelo, a su abuelo le brincaba un ojo cada que lo nombraban así después de todo era joven aun, bueno era muy joven cuando llegaron a su vida le hizo señas acercándose presto para ayudar al hombre adusto con su maleta de mano pero unos brazos que le rodearon le hicieron sonreír en ese calor familiar que su abuela le prodigaba con cariño y amor- mami rea
- mi niño por fin te tengo en mis brazos, ese padre tuyo no debería tenerte tan amarrado aquí ¿Por qué estás solo? ¿dónde está ese esposo tuyo?
- Está trabajando linda no molestes al muchacho esta donde debe estar y eso habla bien de su sentido de responsabilidad
- No estoy de acuerdo, pero tú eras igual supongo que por eso les agrada
- ¿Mi esposo te agrada?- Shun ahora con una maleta de viaje en cada mano llego a su auto para subirlas a la cajuela
- Me agrada su sentido de responsabilidad, el no- cronos contesto abriendo la puerta para que su esposa subiera y el subió en el lugar del chofer lo que hizo suspirar a Shun- te robo muy joven de nuestro lado
- No me ha robado estoy aquí ¿no? Y siempre estaré aquí- Shun tomo el asiento del copiloto su abuelo disfrutaba manejar y conocía la ciudad así que no veía problema en darle el gusto
- ¿Y dónde está mi Ikki?- Shun sonrió al escuchar el tono de cronos para nadie era misterio que Ikki era el consentido de su abuelo tenían un carácter taaan parecido
- Está encargándose de sus responsabilidades nos alcanzara para la cena ya sabes mete las manos en la tierra
- Y se olvida del universo, lo se
- Mis hortensias están hermosas!- rea aprovecho para mostrarle a Shun esas fotos de ese enorme jardín que era su lugar favorito- mis amigas no dejan de preguntar por el mis reuniones de las damas de la ciudad son un éxito deberías ver la cara de envidia de metis al enterarse que tengo mi propia sala del te… con te de verdad, casi se le caen los ojos cuando le dije que podía cortar cualquier planta para su taza aunque no estoy muy segura si le dije té verde al verde rojo al rojo… pero al menos se cuál es la manzanilla la menta y la yerbabuena
- Le dará gusto escucharte tita, ha estado algo disperso por suerte este trabajo lo tiene distraído- Shun le devolvió el teléfono a rea con una sonrisa la pelea de su abue con metis era colosal si una fincaba un cuarto la otra ponía un mirador si una compraba un auto la otra se compraba un yate pero la raíz de todo el problema aunque Shun no lo supiera era mucho más profundo y oscuro
- Esa mujer es una arpía no sé por qué le sigues hablando- cronos apretó las manos en el volante dejando que sus recuerdos se perdieran en el pavimento frente a él, sus muchachos estaban bien eran buenos chicos eran amados y los hacían felices que importaba lo que la vieja arpía pensara sobre su familia y el cómo había sido formada
- ¿Porque es mi hermana?- rea sonrío levemente
- Cierto lo había olvidado- miro a Shun que sonreía ya acostumbrado a eso
Ikki volvió a su hogar-invernadero dejando la moto a la entrada suspiro pesadamente cuando se quitó el casco pero se quedó sentado en la moto por que todo se tenía que complicar al mismo tiempo, no tenía cabeza… nada de cabeza – se bajó de la moto y gruño viendo la correspondencia que había sido pasada bajo la puerta tenía un buzón… ¿por qué ese empeño en arrojar todo bajo la puerta? Cuentas, propaganda, una carta…
- Maldición…- debió suponer que pasaría, cuando llego la primer carta no debió contestar… pero tenía que hacerlo era parte de quien era y merecía ser escuchado sin embargo lo que veía en cada carta que llegaba cada quince días era lo mismo justificaciones tontas- ahora que quieres padre?- fue a la cocina por una lata de cerveza antes de tirarse en el sofá reclinable de una plaza planeaba quedarse ahí hasta que fuera hora de ir a casa de hades pero aun que trato de posponerlo tomo la carta leyendo las pocas frases antes de que frunciera el ceño y la apretara- no viejo… no vas a saber nada de Shun, de eso me encargo yo- lanzo la carta al cesto desde hace un par de años que su padre había tratado de localizarlos, hades lo sabía pero nunca le había dicho que las cartas seguían llegando justo en ese momento sonó el teléfono vio el número y sonrió levemente- que paso Shun?
- Ikki!!! Me secuestran!!- las risas al fondo le sacaron la sonrisa aún más grande
- Ahí Shun, mejor llama a papa yo no puedo pagar un rescate, pero no te preocupes te aseguro que no aguantan ni tres horas y te devuelven
- Oye!- la risa de Shun se dejó escuchar antes que otra voz interrumpiera
- Hijo! Ya llegamos!!
- Cronos no me diga que viene manejando?- Ikki sonrió la tranquilidad había vuelto a su vida con esa facilidad- Shun que modales son esos
- No me tutees niño respétame, llámame….- Ikki rio en su interior el pobre cronos odiaba que le dijeran abuelo podía escuchar los engranes en su mente
- Ikki mi niño tu abuelo trajo las semillas esas que encargaste
- No soy un abuelo!- las risas se volvieron a escuchar- como sea más vale que llegues pronto compre un vino para la cena pero sabes que siempre me gusta tomar una cerveza y un aperitivo antes tu hermano no me sigue el paso y no me puede ganar en las cartas
- Cariño no digas eso, hace mucho que tu no le ganas en ajedrez
- Estamos hablando de cartas- la risa baja de Shun se volvió a escuchar- así que ya estas anotado con hades y con migo para la noche no tienes pretexto para dejarnos plantados aun que ese sea tu trabajo…
- Ikki mas te vale que llegues pronto, salvameee- fue lo último que escucho antes que la llamada se cortara
- Esos locos…- Ikki se volvió a recostar terminando su cerveza con otro ánimo, de todas las familias que le podían tocar tenía la suerte de estar ahí… se levantó con las energías renovadas eran esos pocos momentos cuando su vida valía la pena, los pocos momentos donde sentía que no todo se había arruinado para él, se sacó la campera y fue cuando recordó esa hoja con las medidas y los dibujos…- tal vez… aun había cosas por las que valía la pena levantarse cada día
Seiya miro a Ikki subir a su moto y perderse por la calle negó y se dio la vuelta para entrar cerrando la puerta recargándose en ella se tocó los labios, ¿qué demonios le había pasado? Porque había actuado así y sobre todo… ¿qué le iba a decir a Shiryu?!
- Cálmate Seiya… respira, respira nunca has sido bueno para resolver cosas estando nervioso y tampoco has sido bueno para fingir ni para mentir… que vas a hacer cuando llegue Shiryu?- el castaño se dejó caer en el sillón abrazando sus piernas ¿debería decirle? ¿Debería ocultarlo? ¿Cómo iba a manejarlo? Se removió y miro su computadora en la mesita del café lo primero que se le ocurrió fue sentarse en la alfombra
“el detective entro a su casa dejándose caer en el sofá frente a la televisión en la mesa solo había una cerveza y un Platón con cacahuates salados como botana, pero ya no importaba… los cacahuates la cerveza el programa lo único que le importaba es que de nuevo era viernes por la noche y él estaba solo… solo… sus pensamientos no pudieron evitar desviarse al nuevo compañero que acababa de llegar a trabajar le había dejado una impresión imborrable se hundió en los recuerdos de esa mañana, el capitán les había llamado para presentar a los nuevos elementos en su cabeza nadie podría reemplazar a sus amigos el escritorio de Luka le recordaba lo cerca que habían estado… lo mal que lo habían hecho perseguir un asesino en serie ya era bastante malo, que ese asesino la tomara personal contra quien lo quería atrapar era otra cosa… debería estar orgulloso la víctima estaba viva si… el asesino fue atrapado pero el precio fue muy alto, la vid seguía un nuevo caso y un nuevo asesino… y ellos necesitaban ayuda un reconocimiento no era suficiente Luca merecía estar ahí, burlarse de él robar sus rosquillas incitarle un café… Sebastián no era el mismo desde ese momento, su pareja era taciturno prefería pasar las noches en la estación no lo culpaba la culpa era horrible… él también lo hacía, pensando que pudieron haber hecho que no vieron a tiempo… los casos podían volverse una pesadilla si se volvían personales, pero eran detectives ese era su trabajo volverlos personales ponerse en la piel del asesino y detenerlo antes de que volviera a matar…
-qué bueno que los veo a todos aquí este es Iker será nuestro nuevo elemento a partir de hoy, espero que le ayuden con lo que necesite viene transferido de la estación norte
Eso fue todo lo que escucho y ahora estaba ahí en su sillón, sintiendo que estaba solo, con el resentimiento a flor de piel y la culpa bajo ella, Luca había muerto Sebastián lo ignoraba y él no podía sacar a Iker de su mente… lo que sus ojos vieron cuando llego frente a él y le saludo el aroma de la colonia que cubría esa piel morena bajo el traje caqui que solo le hacía resaltar aún más, un cabello azul noche rebelde tan rebelde como la mirada que le dedico al apretar su mano ni hablar del aliento que le golpeo era mucho más bajo que Iker mucho más menudo sintió que podría romperlo de un solo abrazo levantarlo del suelo y tirarlo sobre el escritorio
-¿perdón?- se obligó a salir de su ensimismamiento no había escuchado nada por estar viendo a ese ares griego que se rio con una voz profunda y grave
- soy Iker, lamento lo de tu compañero
- soy Sergio- estrecho la mano el también sus dedos se perdían en esa mano callosa grande
- lo sé, mis manos son ásperas tengo hobby de constructor si algún día necesitas una reparación de emergencia en tu casa puedes llamarme- y así simplemente se fue a seguir estrechando manos e intercambiando nombres y a él le dejo de pie en ese lugar con el aroma de la loción el eco de su risa y el calor en su mano… ¿Qué demonios le estaba pasando?!
Seiya cerró la computadora con un suspiro y un jadeo… hace mucho que no se quedaba tan inmerso en su libro, hace meses que no podía escribir algo con esa soltura… pero ese no fue el problema, no! El problema era que… que definitivamente Iker… era Ikki! ¿Se había inspirado pensando en el jardinero? Bien… aprovecharía ese momento de inspiración, era solo un libro y era solo un personaje tal vez fuera lo mejor… si podía plasmar lo que sentía en su historia encontraría una forma de lidiar con ello en la realidad, no se estresaría no desearía a Ikki allí porque en su mente Sergio podía interactuar con Iker… Shiryu no tenía por qué saberlo, aunque seguro Sebastián se iba a infartar…
- No le des más importancia de la que tiene Seiya… es solo un flechazo momentáneo, un deseo platónico es que el condenado esta como quiere… el que tenga cuerpo de dios griego no significa que vas a terminar en la cama con el ¿verdad?... verdad!