Stiles se levantó algo aturdido a su alrededor había varios autos patrulla y dos ambulancias - ¿Qué? - el humano camino al lado de la carretera, escuchaba a los oficiales hablar sobre el accidente pero apenas entendía una palabra. De un golpe regreso a la realidad los sonidos le aturdían, reviso sus manos.
Se acercó a uno de los oficiales "Parrish" pudo notar al hombre que hablaba por teléfono. - ¡Parrish! - antes de darse cuenta ya había atravesado al hombre - ¿Eh?- Cayó al suelo de rodillas.
-Lydia- Stiles pudo escuchar gritos del otro lado del teléfono no era la pelirroja, era su hija que gritaba que su madre había soltado un grito hacía apenas unos minutos que había roto las ventanas “¡¿Cómo es posible que no lo escucharan?!” también pudo notar que su voz estaba desmoronándose. -Cariño, yo…
El oficial no sabía que decir no podía evitar aquel instinto de protección hacia la chica del otro lado de la línea que en aquellos momentos se encontraba arrodillada llorando contra la bocina del teléfono.
Stiles salió corriendo mirando a ambos lados de la carretera; buscaba su auto, logro verlo justo a unos cuantos metros de la carretera, pero solo estaban los oficiales revisando la escena. -Dios mío, ¿dónde están mis hijos?
-No tenemos tiempo está perdiendo mucha sangre- decía un paramédico, el equipo médico paso a su lado con una camilla, el humano no dudo en seguirlo. Sus piernas flaquearon ahí se encontraba él, con heridas grabes siendo transportado hasta la ambulancia, paso sus manos por su cabello varias veces “No puede estar pasando esto” se decía una y otra vez. - ¡Deprisa!- grito el paramédico cuando subió a la ambulancia, Stiles aún se preguntaba por sus hijos pero no sabía qué pasaría si se alejaba demasiado de su cuerpo y subió antes de que cerraran las puertas.
Una vez dentro no se atrevía a ver como detenían la sangre, miraba por las pequeñas ventanas, se mordió el labio no podía llorar, algo que se lo impedía y por dentro suplicaba que aquello solo fuera un extraño sueño.
Derek conducía a toda velocidad al hospital, no paso ni una hora de que se había separado y ya estaba perdiendo su familia, siempre temió aquello desde el incendio con que devora la vida de su familia.
Temía que por alguna razón por azares del destino se encontrara en la misma situación; Stiles y él ya habían pasado por demasiados percances, un maldito accidente automovilístico no mataría al castaño o a sus hijos, lo sabía pero en Beacon Hills lo imposible siempre es imposible.
Llego detrás de las ambulancias, Melissa lo detuvo en la entrada del hospital, el padre de Stiles ya estaba ahí junto con Peter que le ayudaron a la mujer a retener al lobo de Derek que quería saltar en busca de su familia -Calma Derek- John lo ayudo a sentarse y a calmarse, sus manos temblaban y sus dientes castañeaban de furias pero no fue hasta que olio el desconsuelo del hombre que se tranquilizó un poco.
-Lo siento tanto se suponía que yo debía protegerlos- Derek se escondió entre sus brazos, intentaba ahogar cualquier intento de llanto. Peter palmo varias veces la espalda del moreno.
La última ambulancia llego, Derek y John se levantaron de golpe mientras los paramédicos aparecían por las puertas llevando la camilla donde descansaba Stiles con una respiración leve y latidos apenas perceptibles para el oído del lobo. Intentaron seguirla peor os médicos se los impidieron llevarían al castaño a operación para detener las hemorragias internas del humano.
Derek gruño por lo bajo, Scott fue quien atendió a Stiles; estaba destrozado al tener que ver a su amigo en aquella situación pero no lo dejaría morir.
- ¡Scott!- Stiles intento seguir a su amigo pero se detuvo no quería dejar solo a Derek y a su padre. Se acercó a su padre que apenas contenía las lágrimas -Tranquilo papá, aquí estoy yo estoy bien. Voy a estar bien- le decía entre gimoteos -Papá.
- ¡Joder!- Derek no podía soportar estar en aquel lugar mucho tiempo así que salió seguido de Peter que intentaba calmarlo.
Stiles no se atrevió a salir del hospital y solo veía como el más grande los Hale apoyaba a Derek que no podía contener el llanto y gritaba en el estacionamientos mientras Peter lo consolaba -Derek.
Después de unas horas, Stiles estaba a un lado de su padre recargado en su hombro esperando noticias, la sala de espera ya no estaba vacía, Lydia y Allison llegaron unos minutos después; abrazo a John y también su hija. La pelirroja no sabía que decir o hacer solo tomo la mano del hombre mientras esperaban noticias. Allison quiso ir a buscar a sus amigos pero al igual que Stiles estaban en quirófano.
Liam, Jackson y Isaac se presentaron minutos después sentían la tensión en el aire e intentaban animar al padre de Stiles que de cierta forma se relajó con todos a su alrededor.
Allison caminaba de un lado a otro, si esta fuera otra situación comprendería que la regañarían por poner nerviosos a los demás, pero ahora mismo todos estaban angustiados y no podían evitar sacar uno que otro tic por ello. Suspiro con fuerza sentía ganas de gritar; podía sentir la muerte rodearla, pedía que no fuera la de ninguno de los que ahora se encontraban en urgencias , quería pensar que era alguien más en aquel hospital, solo ver a su madre que era la más tranquila de todos seguía aferrada la mano del abuelo de Alex.
- ¿Cómo se conserva tan tranquila?- se preguntó Allison, aparto la mirada de su madre unos segundos a su lado vio a Stiles - ¡Stiles!- se levantó de golpe llamando la atención de los demás.
- ¿Qué ocurre niña?- pregunto Jackson pero esta negó con la cabeza, no percibía si lo que vio fue real o solo una ilusión causada por las fuertes emociones que tenía.
-Nada, solo. No importa- La chica se alejó.
Stiles había estado intentando hablar con Lydia pero esta no le escuchaba y no entendía el porqué, ella era una Banshee debía escucharle si era una persona en coma, como había pasado con Peter y Meredic. Y cuando la joven lo noto no pudo evitar sentirse aliviado y seguirla, se detuvo en un pasillo frente a un máquina expendedora.
Allison lucia nerviosa y realmente lo único que hizo fue recargarse en esta y dejarse deslizar hasta el suelo -Keila, Alex- la chica se aferró a su falda -Por favor no me hagan predecir su muerte, se los suplico.
Stiles se quedó viendo a la chica que al igual que Lydia era fuerte y se aferraba con fuerza a un ideal de no ser la predicadora de la muerte de sus amigos; casi hermanos, el chico se acercó y le acaricio el cabello.
Ella sintió una leve brisa -eh? ¿Stiles? - levanto la mirada, pero no había nada, intento sentir algo más que muerte pero no, solo la nada - ¿Estás aquí?
Stiles intento llamarle pero no importaba que tan fuerte gritara, la chica nunca lo escucharía -Maldición- dejo escapar un leve susurro.
“Maldición”- ¡Stiles!- la chica se levantó de golpe - ¿Estás aquí? ¿En verdad estas aquí?
El castaño no comprendió lo que había pasado pero volvió a susurras; “Sí, aquí estoy” la chica salto de felicidad - ¡Están Alex y Keila contigo cierto!- “No” Allison presiono su manos contra su estómago - ¿Dónde están?
“No lo sé, tampoco sé que está pasando aquí o por qué Lydia no me escucho como tú”
La voz de Stiles era débil y apenas alcanzaba a escucharla, así que le pidió que guardara aquellas fuerzas para más tarde, debían decirle a su madre y a los demás tal vez encontrarían una forma de ayudarle, tal vez todo aquello era culpa de alguna magia extraña. La chica no hablaba con Stiles mientras exponía aquellos puntos lo hacía para sí misma.
-Mamá- Allison regreso un poco más entusiasmada pero se detuvo Jeremy estaba ahí, junto con Kira y Steve los cuales no podían creer lo que se les contaba, Jeremy estaba enloquecido y quería tirarse encima de Melissa por la noticia. Lydia aparto a Allison de la escena.
- ¿Qué pasa cariño?- el delicado tacto de Lydia hacia su hija fue lo único que necesito la chica para recuperar las fuerzas y le comunico la pequeña conversación que habían tenido con Stiles, el castaño susurraba para estas pero Lydia no percibía su voz como lo hacía con las demás almas en pena. -No lo escucho.
- ¿Por qué?- Allison se desesperó y señalo hacia un costado de la chica; Stiles e coloco en aquel lugar, -Él esta ahí, mamá por favor, mamá él está ahí.
Lydia abrazo con fuerza a Allison la cual suplicaba que todo terminara que sus amigos y Stiles estuvieran bien.
Toda la manada se había terminado de reunir en la sala de espera Derek estaba junto a John; aunque ninguno de los hablaba, estaban juntos de cierta forma compartiendo su dolor.
Melissa y Scott se acercaron, la manada empezó a preguntar sobre los chicos y Stiles Scott los calmo y pido que no gritaran -Aun viven pero…- Scott quería contar las condiciones en las que se encontraban sus betas pero se le hacía imposible siquiera hablar; eso no le había pasado nunca desde que empezó a laborar en el hospital.
Su madre continúo por el -Keila y Alex fueron los más afectados en este accidente. Keila sufrió daños en los nervios debido al fuerte impacto que se dio al salir dispara del auto; hay una gran probabilidad de que el tratamiento que se le está dando no funcione y muera.
La manada detuvo su respirar por unos segundos Allison se pegó al cuerpo de Parrish temblando. Derek se acercó un poco pero Lydia lo detuvo y negó con la cabeza; ella también había sentido aquello que su hija pero sabía que no era de ninguno de los tres pero aun así la angustia invadía a la banshee y al lobo.
- ¿Alex y Stiles?
Scott carraspeo - Hemos tenido que inducir a coma a Alex.
- ¿Hiciste qué? - Jeremy gruño ante Scott pero este hizo relucir sus ojos rojos haciendo que el adolecente retrocediera.
-Scott explícate -el tono de Derek no era agresivo pero si severo quería saber lo que había pasado con su hijo, según le explico Scott las lesiones en su cabeza causaron laceraciones; las cuales son desgarre de los lóbulos o vasos sanguíneos frontales y temporales del cerebro, la inducción en coma era pera disminuir sus funciones y pueda tener una recuperación; incluso la aceleración de curación de hombre lobo será un problema. - ¿Lo que dices es que Alex?
-No estamos seguro pero tenemos esperanza de que mejore en unos días- dijo Scott calmando un poco al lobo inquieto de su hijo.
John se levantó de su lugar - ¿Y Stiles?- Melissa sonrió con tristeza, el corazón de Derek se detuvo unos segundos antes de que su alfa volviera a tomar la palabra.
Aunque Scott intentaba sonar animado realmente era una mescla de desdicha y falsa esperanza -Sus heridas son graves no de la misma magnitud que los niños. Sufrió una perforación en el pulmón, detuvimos la sangre y está estable pero aun esta en observación.
El castaño no se había movido de su lugar al lado de Derek, intentaba tomar de la muñeca al lobo pero sus dedos solo pasaban atravesó de su piel, quería abrazar a su padre y pedirle que no perdiera el ánimo que ellos estarían bien. Allison quiso decirles sobre que había escuchado a Stiles pero Lydia le pidió que se mantuviera el secreto por ahora, las cosas estaban turbias y aquello empeoraría todo.
El paso para la manada fue bloqueado casi por completo pues debido a la condición de los pacientes solo los familiares directos podían pasar; solo Derek y John.
- ¿Por qué no puedo pasar? - exigía saber Jeremy - ¡Alex es mi ancla yo debo estar con él!- su actitud era agresiva y la recepcionista estaba a punto de llamar a seguridad cuando Scott la detuvo, llevando a su hijo lejos de la manada y los civiles. Jeremy se removió entre los brazos de su padre y le ordenaba que lo soltara.
Cuando salieron Scott lanzo a Jeremy al suelo con fuerza, el lobo intento atacarlo pero al ver los ojos rojos de su padre se detuvo encajando las garras en sus rodillas - ¡No me pueden hacer esto! ¡Alex! ¡Es mi Alex!
-Eso ya lo sé- dijo Scott con una voz gentil, se inclinó al lado de su hijo, -Lo sé- escucho como su hijo gruñía en lo bajo pero no eran gruñidos de ira eran de melancolía y dolor.