Ciego el que no quiere ver por Angelestepario88

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Al llegar al departamento, Shuichi se sentó en el sofá y se puso a llorar, no entiende por que Eiri Su esposo le había tratado mal, es cierto que le desobedeció al llevar a Riku al hospital, no le había parecido mal después de todo no era la primera vez que Shuichi le desobedece a su esposo y este se lo había pasado por alto. Una vez más Shuichi se sintió deprimido.

Shuichi: el esta cambiando, últimamente ha sido así, en estos momentos es cuando se me viene a la cabeza que debería dejarlo. Es imposible, este bebe me liga a él... Maldita la hora, debería perderlo...-sonríe- no seria capas de abortarte, perdoname bebé tú no tienes la culpa de nada, se que eres inocente de todo, somos tus padres los tontos- acaricia su pequeño vientre.
La puerta del departamento se abrió, Eiri venia llegando con Riku de la mano, quien lloraba con tristeza.

Shuichi: ¿y esa cara?- se puso de pies, Eiri no le contesto, pero la pequeña Riku corrió a los brazos de Shuichi y lloro mas- ¿qué sucede?

Riku: tía Mika murió- responde desconsolada la pequeña, quien no llora de arrepentimiento, si no miedo por ser descubierta por su padre y que la deje de querer y por estrés.

Shuichi: ¡Eiri...!- miro a su esposo estupefacto, no cree que sea posible lo que acaba de escuchar.

Eiri: te dije que no la llevaras- le miro con severidad.

Shuichi: Eiri- murmuro.

Eiri: ¿te dije o no...?- grito.

Shuichi: lo siento- dice temeroso por la actitud agresiva de su esposo.

Eiri: entonces ¿qué te cuesta obedecer?- lo zamarreo con fuerza.

Riku: papi dejalo- la pequeña se aferro a la cintura de su padre.

Eiri: tu vete a tu dormitorio- grito a su hija luego de empujar a su esposo al sofá.

Shuichi: que no se te olvide que estoy en cinta.

Eiri: tu y ese bastardo, no sabes cuanto deseo que ese crio no sea mi hijo- de pronto se detiene al darse cuenta de lo que había dicho, pero ya es tarde- desde que te conocí, no he tenido mas que problemas, primero mi hermana y Tohma, nos hicieron la guerra incluso después de que nos casamos si hasta el matrimonio casi lo arruinan, los problemas con Yuki hicieron que mi vida se volviera un infierno, Riku me odio por mucho tiempo...- de pronto Riku le da una patada en la canilla a su padre.

Riku: eres malo, por que le gritas. Aquí el único que se equivoco fuiste tú, por que haces las cosas y te da lo mismo a quien pasas a llevar, yo no se si te casaste por amor o por soberbia ¿cuántas veces te dije llevame contigo quiero conocer a Shuichi, cuántas veces te dije llevame quiero conocerlo?- empezó a gritar la niña- ¿cuántas me dijiste que no era tiempo?, yo no te empece a odiar por culpa de él, te empecé a odiar por ti, y si, mami era loca pero sus problemas empezaron antes ¿o no te acuerdas qué esos problemas eran por tu culpa?, recuerda que el que no llegaba a casa eras tu y cuando llegabas traías contigo ese olor a perfume de mujerzuelas. Hazte responsable de tus actos-

Eiri: yo no se que cosas te metió tu madre en cabeza- en ese momento recordo que su hija no es cualquier niña común y corriente.

Riku: no me subestimes, yo era pequeña, pero no se te olvide que tengo memoria fotográfica y que recuerdo toda mi vida a partir del año y medio de vida, las discusiones con mami siempre eran por tu culpa, tal y cual lo estas haciendo ahora. Siempre quieres culpar a los demás por tus errores.

Shuichi: ¿Riku...?- Shuichi se le olvidaba que esa niña es súper dotada.

Riku: tú callate, que todo esto también es tu culpa- después del pequeño berrinche la menor se encierra en su dormitorio.

Eiri: en primer lugar tú eres culpable, por que si sabias que podías quedar en cinta por lo menos debiste cuidar de no quedar embarazado.

Shuichi: ¡no entiendo!, ¿qué tiene que ver mi embarazo, con la muerte de Mika y con tus otros problemas?- Shuichi no puede evitar que sus lagrimas caigan- yo quería abortarlo- grita- a caso creías que yo quería tener un hijo contigo después de que me has mentido durante cuatro años- las palabras fueron dichas sin pensar, sabia que cuando estaba deprimido actuaba así - sabes que mas, me voy, no quiero saber nunca mas nada de ti en mi vida- sale con lo que tiene puesto del depto.

Eiri: ey espera, ¿dónde crees que vas?- sale tras su esposo y lo detiene camino al ascensor.

Shuichi: ¿y ahora qué?- le mira a los ojos con los suyos llenos de lagrimas.

Eiri: se te olvida que cada vez que sales escapando en ese estado te ocurre alguna desgracia, te accidentas, te acosan o te secuestran

Shuichi: mejor así, quien sabe si en esta ocasión me atropellan y termino muerto, de esa forma nunca mas seré una molestia y este bastardo no seria un estorbo.

Eiri: ya cállate- lo lleva de regreso al depto.

Shuichi: me quiero ir.

Eiri: ve a tomar una siesta- lo entra a rastras.

Shuichi: tú no me mandas.

Eiri: deja de hacer tanto escándalo-

Shuichi: ¿a caso no tengo derecho despues de todo lo que me dijiste?- de pronto queda paralizado.

Eiri: ¿¡Shuichi!?

Shuichi: me duele- llevo una de sus manos a la cola y la otra a su estomago- me duele mucho- Eiri trato de ayudarlo- no me toques- grito- no te necesito- trato de dar un paso pero al momento el dolor se intensifico- no puedo.

Eiri: déjame- le tomo en brazos y en el momento que lo hizo Shuichi se desmayo- maldición ¿y ahora qué?- después de llevarlo al dormitorio llama al doctor, quien lo examina y le dice a Eiri que Shuichi y el bebe están bien por ahora pero que deben hacerles los exámenes de rutina para saber como esta progresando, y le aconsejo al escritor que el muchacho no debe pasar por emociones fuertes, también le recordó que por ser hombre su estado no es tan fuerte como el de una mujer que al contrario lo vuelve débil y será así conforme vallan pasando los meses.
Al otro día el cuerpo de Mika fue entregado, al velorio fue solo la familia, Riku estuvo todo el tiempo observando el ataúd, de vez en cuando se aproximaba para verla através del cristal, la niña deja que sus lágrimas recorran por sus mejillas con total naturalidad, lo único que quiere es verla bajo tierra, después cuando se cansaba de verla regresaba a su asiento, la actitud de Riku no llamo la atención de nadie, pero si la de Tohma que no se explicaba tanto nerviosismo por parte de su sobrina.

Tatsuha: ¿qué sucede?

Tohma: ¿qué va a suceder?- responde mirando el ataúd

Tatsuha: no es malo llorar.

Tohma: me conoces.

Tatsuha: entiendo- no pudo sentir mas que pena por su cuñado, se siente impotente por no poder consolarlo, abrasarlo de la manera en que solo el deseaba, pero seria mal visto por los presentes- ( no vas a estar solo, no lo permitire).

Por otra parte Shuichi no ha asistido al velorio, aun se siente mal, por lo tanto se quedo en casa dormido. La noche llego y todos continúan en el velorio, Hasta el otro día, el entierro sera a las cuatro de la tarde así que Eiri tiene tiempo de ir a cambiarse ropa y traer a Shuichi. Al llegar al depto se encontró con que todo esta igual a como lo había dejado, reviso la cocina y el refrigerador, nada se había movido, reviso el microondas y se dio cuenta que la comida que había dejado para Shuichi aun estaba en su lugar.

Eiri: no creo que se haya ido- subió al segundo piso para rectificar sus sospechas y al entrar al dormitorio ahí lo encontró durmiendo, se le acerco, realmente esta dormido- Shuichi- lo mese- Shuichi despierta.

Shuichi: ¿qué hora es?

Eiri: son las dos de la tarde.

Shuichi: ¿aun no se van?, ya deberían estar con Tohma

Eiri: pero Shuichi ¿de qué hablas?

Shuichi: tengo sueño te dije que quería dormir.

Eiri: ya es martes.

Shuichi: ¿que...?- abre los ojos de una.

Eiri: estas durmiendo desde ayer y el domingo dormiste toda la tarde, te despertaste solo para comer.

Shuichi: ahora que lo dices tengo mucha hambre.

Eiri: esta bien, ve a ducharte yo te preparo algo.
Después de que Shuichi se vistió para el funeral se fue para el comedor, se sentó a comer en compañía de su esposo y durante todo el rato no se dirigieron la palabra.

Shuichi: Eiri- le interrumpe la lectura del diario.

Eiri: ¿qué?- no despega la vista del diario.

Shuichi: se te esta enfriando la comida.

Eiri: no te preocupes, no tengo hambre.

Shuichi: entonces no tienes hambre.

Eiri: no- sin consultar se come el almuerzo de su esposo.

Shuichi: ya termine- me lavo los dientes y estoy listo.

Eiri: ajah- pretendía dar unas cucharadas a su plato pero se dio cuenta de que esta vacio, al igual que las ensaladas- no lo puedo creer, se devoro todo en poco tiempo, si sigue así va a engordar mas de la cuenta.

Son las cuatro de la tarde, la misa fue realizada por el padre de Mika, todos lloraban en silencio. Una vez terminado el entierro, se fueron todos a la mansión de Tohma, para acompañarlo un poco más. Entrada la noche la familia se fue retirando, menos Tatsuha y Ryuichi

Tohma: necesito una ducha, tomare una ducha y luego me iré a la cama.

Ryuichi: cualquier cosa estaremos aquí- le miraba desde los pies de la escaleras. Tohma ya no pudo más y su cuerpo cedió- Tohma...

Tatsuha: ¿qué pasa?- Tohma pierde la conciencia cayendo desmayado de espaldas pero no logra tocar el suelo por que Tatsuha que estaba cerca alcanza a detener la caída- Tohma.

Ryuishi: calmate, solo colapso.

Tatsuha: si puede que tengas razón- lo tomo en sus brazos y llevo al dormitorio para acostarlo en la cama.

Ryuishi: dejalo descansar, vamos.

Tatsuha: No, yo quiero quedarme con él, no quiero que despierte y se encuentre solo.

Ryuishi: ¡Tatsuha! - murmuro- (aqui es donde todo termina, o, todo comienza. Depende de como se mire)- resignado a lo que se veia venir se retira de la habitación, por su parte Tatsuha se acomodo en un sofá del dormitorio para velar el sueño de su desdichado cuñado.

Riku se quedo dormida en el auto por lo tanto Eiri tuvo que cargarla hasta el dormitorio y en lo que lo hacia Shuichi atacaba el refrigerador, tenia ganas de comer algo dulce, por lo que se sirvió un tutti frutti con jarabe de fresa que ya estaba guardado en la nevera en un boll de dos litros mas o menos, se fue al sofá y se puso a ver el televisor.

Eiri: voy a preparar... ¿Te vas a comer eso todo tu solo?- enarca una ceja.

Shuichi: ¿acaso no puedo?- responde sin despegar la vista del televisor.

Eiri: no se, te puede hacer mal.

Shuichi: voy a dormir aquí, no quiero compartir la cama contigo.

Eiri: Mika se suicido

Shuichi: ahora si quieres. Puedes dormir tú aquí.

Eiri: se lanzo por la ventana después de que te fuiste.

Shuichi: no hace tanto frío, con una frazada tengo.

Eiri: no se que me pasa, últimamente te miro y siento que no te soporto.

Shuichi: yo tampoco te soporto- dice sin importancia- ya somos dos... Que no se te olvide, que fuiste tu quien empezó.

Eiri: no aguanto esta situación, tantas cosas en tan poco tiempo.

Shuichi: y yo soy uno de tus tantos problemas.

Eiri:¡...!- se sienta en uno de los sillones soltando un profundo suspiro.

Shuichi: así que esa es tu respuesta- deja el boll en la mesa de centro- ¿Hasta donde vamos a llegar?- tomo el control remoto para cambiar de canal-

Eiri: no hay opción- llevo sus manos a su rostro para restregarlo con fuerza.

Shuichi: Maiko tiene razón, es mejor divorciarnos.

Eiri: nuestra estimada amiga ¿te ha dicho que ningún juez te va a dar el divorcio mientras este embarazado?

Shuichi. ¿Y eso qué tiene que ver?- por primera vez en toda la conversación le mira al rostro.

Eiri: si un bebe viene en camino y si estas casados y si por casos de la vida te quieres divorciar. La ley no permitira que ese bebe nazca fuera del matrimonio, lo protegera y velara por sus intereses. Lo que es peor, eres un hombre.

Shuichi: ¿y eso que tiene que ver?

Eiri: si después de que el niño nazca aun sigues queriendo divorciarte, ellos velaran por los intereses de ambos y a mi me dejaran en la calle aun que tu no lo quieras o si no te quitaran a la bebe y me la entregaran a mi...

Shuichi: Segushi san no lo permitira- el pelirrosa da por terminada la conversación encerrándose en el baño.

Han pasado dos semanas desde que Mika, una mujer de un carácter fuerte que incluso en ocasiones hacia temblar hasta su propio esposo, ha dejado este mundo de manera física, dos semanas en los que Tohma no ha querido salir de su mansión, en estos días solo se dedico a recorrer cada rincón de su hogar, a observar sus detalles, descubriendo decoraciones y cosas que jamas pensó que bajo su techo existían, y, fuera como fuera en cada uno de esos detalles estaba la marca de su esposa que cada vez que los descubre no puede evitar sonreír al darse cuenta de que aparte de haber tenido una esposa con un carácter de los mil demonios, ella era detallista y tenia un buen estilo para la decoración, tampoco entendía como una mujer con ese talento prefería trabajar en finanzas, no estaba mal recordar que como jefa era demasiado estricta y exigente, por un momento llego a pensar que ser de ese modo era su deporte favorito. También en silencio, Tatsuha lo cuidaba, le daba de comer cada vez que Tohma pasaba de largo los horarios de la comida, lo abrazaba y consolaba cada vez que le veia desvanecer y sus lagrimas se asomaban, Tatsuha estaba ahí para cuidar y proteger a su cuñado cada vez que este lo necesitara.

Mientras Tohma lloraba sus penas, Ryuichi se dedico atender todos los negocios que tienen en común y sera de este modo hasta que el reciente viudo se recupere, también no puedo evitar pensar en su relación con Tatsuha.

Ryuichi: se veia venir- sonríe mientras mira a su alrededor- él va a reemplazar lo que se perdió- tomo su saco y se lo coloco con calma, después de todo en casa nadie lo espera- si yo no llamo, él no lo hace- se esta acabando y nadie hace nada para evitarlo- sale de la oficina tranquilo como si nada importara, dirigiéndose al ascensor- ellos dos se han enamorado y aun no se dan cuenta, es cuestión de tiempo y cuando llegue yo solo observare- al salir del ascensor se dirige a su auto el cual monta y hecha andar- se esta acabando todo, en silencio, sin gritos, como si jamas hubiera existido- una silenciosa lagrima cae por su mejilla, una lagrima que anuncia el principio de una nueva vida en la cual Tatsuha ya no estara.

Como se cuenta, han pasado dos semanas, a Shuichi le sacaron el yeso demostrando que estaba completamente sano, también le examinaron su ojo accidentado, el cual ha cicatrizado perfectamente, el problema es que perdió la visión del ojo por completo, lo bueno es que con una intervención quirurgica se puede recuperar, lo malo, es que debido a los resultados habituales que se hacen a las personas que están en cinta, no podrá operarse hasta mucho después del parto, ¿porque?, simple, los resultados de embarazo dieron que Shuichi sufre de hipertensión y diabetes gestacional, nada grave que no se pueda solucionar con las estrictas indicaciones que se le encomendó, como dietas y ejercicios para prevenir la anemia, estos problema duraran solo lo que dura el embarazo, puesto que si se cuida bien después su salud volvera a la normalidad. (No esta de mas recordar que en la vida real, hay mujeres que sufren estos problemas en el embarazo).

Para la pequeña Riku es un día más y aunque ha pasado poco tiempo desde la muerte de su tía a la niña ya no le afecta en lo mas minimo en lo que a cargo de conciencia se refiere, para Riku era una persona que la quería perjudicar poniendola en contra de su padre, estaba escribiendo concentrada en su diario cuando su amiga Ayaka entra sin avisar.

Ayaka: hola amiga.

Riku: ¿qué no golpeas antes de entrar?- pregunto sin interés y hastiada.

Ayaka: no te molestes.

Riku: ¿cómo vas a tener modales, si alguien qué tiene a sus padres divorciados es imposible pedirles mas?

Ayaka: ¿qué te crees, acaso no sabes que tu familia constituida se esta desmoronando?

Riku: no, mi familia no va a ser disfuncional como la tuya- dijo sin mirarla.

Ayaka: te equivocas, para que sepas mi mami estaba hablando el otro día con Shuichi.

Riku: tu mami lo único que sabe hacer es calentarle la oreja a los demás por que es una miserable que no es feliz y por lo tanto no deja ser feliz a nadie.

Ayaka: Shuichi le pidió a mi madre que inicie con los tramites de divorcio y aunque Shuichi no quiere también le esta aconsejando que deje a tu padre en la calle.

Riku: ¡ah si!- la mira con finjida sonrisa.

Ayaka: si- se ríe burlescamente.

Riku: ¿y tú estas lista?- pregunta sin mirarla puesto que esta más interesada en lo que esta escribiendo en su diario.

Ayaka: ¿para qué?- le quita el diario de una.

Riku: ese es mi diario de vida.

Ayaka: no tengo interés en leerlo- dijo con desprecio mientras tiraba el diario al suelo- ¿y para qué se supone debo estar lista?

Riku: hoy es viernes, si no mal recuerdo a tu padre le toca venir por ti este fin de semana, ¡ah si! Este lunes es feriado, tendrás tres días para disfrutar la estadía en lo de tu padre.

Ayaka: eres insoportable, como te habrás dado cuenta al final tu padre y el mio son unos verdaderos incompetente.

Riku: como te habrás dado cuenta estoy ocupada y tu estas estorbando.

Ayaka: te hace falta madurar.

Riku: yo a mi corta edad he tenido experiencias que me hacen ser más sensata que tú

Ayaka: ¿qué clase de secretos son esas experiencias que te hacen ser mas sensata que yo?

Riku: secretos que jamas te revelaria, pero así como van las cosas te haré participe de ellos y jamas sabrás que fue lo que sucedió.

Ayaka: no me asustas.

Riku: ¡¿ah no?!- se le acerca lo suficiente como para invadir su espacio personal y de los puros nervios Ayaka se retiro sin siquiera decir adios- no eres rival para mi, mocosa ignorante con delirios feminista (te castigare con lo que mas te duele, ya veras, te partire el orgullo en mil pedazos)- cierra la puerta del dormitorio.

Eiri: tenemos que hablar Shuichi- dice saliendo del estudio.

Shuichi: ¿de qué?

Eiri: primero que nada, tienes diabetes y te veo comer dulces tras dulces, pasteles tras pasteles, pasas por alto tu dieta.

Shuichi: todos esos dulces, todos esos pasteles son especiales.

Eiri: que tiene de especial- enarca una ceja.

Shuichi: están hechos para personas que padecen de diabetes.

Eiri: esta bien, sera como dices, pero si sigues así vas a engordar.

Shuichi: ¿y cuál es el problema, acaso engordar no es normal en mi estado?

Eiri: me voy de gira y estando lejos no podré cuidarte.

Shuichi: no te preocupes por mi.

Eiri: no, si de quien me preocupo es por el bebe.

Shuichi: se me olvidaba- sonríe.

Eiri: ¿qué cosa?

Shuichi: le pedí a Maiko que iniciara los tramites de divorcio

Eiri:¡... !- sabia que no tenia derecho a pedir explicaciones, después de todo, la determinación de Shuichi es solo por su culpa, esta consciente que lo ha tratado mal- Maiko es una buena abogada, se ira con todo en su contro y con o sin embarazo, ella los puede separar legalmente.

Shuichi: y despues de que nazca el bebe nos iremos del país.- dijo sin prestarle atención.

Eiri: ¿no estas hablando enserio?

Shuichi: puesssss, segun yo si estoy hablando enserio.

Eiri: pues ni creas que te voy a dejar salir del país con mi hija, si lo deseas puedes irte solo, es mas no voy a dejarte salir del depto en lo que yo este ausente. Conozco a una persona que te vigilara evitando que salgas de estas cuatros paredes cuando yo no este y también se encargara de cuidar de tu dieta y salud, deja decirte que es muy estricta.

Shuichi: le diré a mi madre que me venga a buscar.

Eiri: si insistes pondré un guardia también.

Shuichi: no te pases.

Eiri: es mejor prevenir.

Shuichi: y cuando estarás regresando.

Eiri: dentro de un mes. Con respecto al divorcio de ser por ti seria inevitable.

Shuichi: ya inicie los tramites- le mira lo ojos.

Eiri: ¿podrías detenerte, por lo menos hasta mi regreso?

Shuichi: ¿porqué?

Eiri: a mi regreso vamos a estar mas calmados, vamos a poder razonar mas tranquilos y hasta podríamos solucionar nuestras diferencias.

Shuichi: ¿estas seguro de lo que dices, quieres una reconciliación o lo dices para ganar tiempo?

Eiri: si existe la mas minima posibilidad quiero intentarlo.

Shuichi: esta bien, pero si no funciona reiniciare los tramites del divorcio...

Eiri: esta bien, sera como tú digas, yo no me opondre.

Shuichi: el guardia no es necesario.

Eiri: pero la niñera si, ella me ayudara a cuidar de ti y de Riku.

Shuichi: ¿¡si es lo que quieres!?

Eiri: si es lo que quiero.

Aomame: al fin, ha llegado la hora de volver con mi pequeña Riku, mi querida y pequeña Riku. Todo por petición del mismo señor Uesugui Eiri, no solo cuidare de mi pequeña niña, también de su esposo y su hijo que viene en camino- sonríe satisfactoriamente.

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