Soñar, todo en esta vida se trata de sueños, desde los más comunes, como tener una profesión, una casa y mucho dinero, hasta los más complejos, como los sueños de amor. Nunca has tenido esa pequeña sensación de que amas a alguien, pero que esta prohibido por la sociedad. Esto era lo que sentía Yamatto todos los días después de haber regresado del Digimundo, y no tener contacto con Taichi, su querido Tai.
Todos los días al llegar a su casa esperaba la llamada de Tai, pero nunca sonaba el teléfono, sería que Tai l no sentía lo mismo que él sentía. No lo extrañaba...
Los ojos del rubio se ponían más tristes cada día en la soledad de su vida, en la escuela le iba bien pero no era suficiente para su corazón, para su alma, no había algo en el mundo que pudiera compensar el cariño que si padre y su madre no le habían brindado. Él sólo pedía una cosa, poder hablar con su otro yo, su cómplice, su todo.
Cierto día Matt iba caminando hacia su casa después de la escuela, cuando en un inesperado momento entre los arbustos del parque que cruzaba pudo distinguir la voz de su amor, de Taichi. Corrió al lugar donde provenía la voz, y al llegar se encontró con que Tai estaba en un partido de fútbol; al ver ahí a Tai todo sudado por el juego y comandando a su equipo, Matt se emocionó e inmediatamente tuvo una ligera erección, que no pudo disimular. Unos minutos después Tai se dio cuenta de la presencia de su antigua camarada, y al verlo se sonrojo inmediatamente y se distrajo por lo que le dieron un golpe con el balón en la cara. Matt corrió en su ayuda. Lo tomó en sus brazos y acaricio dulcemente la mejilla de su amor. Tai no tardó en abrir los ojos y al verse los dos se sonrojaron y por in instante todo fue perfecto hasta que los compañeros del equipo de Tai interrumpieron la escena para ayudar a su compañero y poder seguir el partido.
El partido termino un rato después y ganando el equipo de Tai, en un momento Matt se acerco y le dijo:-Tai podemos ir a tomar un refresco quisiera hablar contigo-Mmm... no lo se, el equipo quiere ir a celebrar, peroooo... Te prefiero a ti deja les aviso y nos vamos te parece.-Si no hay problema, aquí te espero.Tres minutos Tai estaba de regreso todo sudado por el partido pero con muchas ganas de pasar el rato con su amigo. -Tai que te parece si vamos a mi casa para que te des un regaderazo, al fin y al cabo no hay nadie en mi casa, podemos estar, y si te dejan no se, mmm te invito a dormir.-Me parece una muy buena idea, tengo que platicarte tantas cosas.(Matt estaba muy sonrojado al ver que Tai acepto su invitación, así que haría todo lo posible por que la pasará bien, al fin y al cabo su papá tenía mucha presión en el trabajo y como era viernes lo mas probable es que no llegará a la casa).
Antes de llegar a casa de Matt se detuvieron a ver el atardecer que se divisaba a lo lejos en el horizonte, y que se veía hermoso desde donde estaban, en la zona mas apartada del parque. En un momento los dos estaban sentados en el pasto, se voltearon y al mirarse quisieron creer que ese momento era para siempre, (Dios mio que cursi, pero que puedo hacer la musica me hace ser así) Matt tomo la mejilla y sin pensarlo acercó sus labios a los de Tai quién le correspondió con un hermoso beso que se daba mientras se ponía el sol Soñar, todo es un sueño, hasta momentos como este, en los que deseamos que se detuviera el tiempo ya que todo es perfecto. Sólo soñar, permíteme soñar contigo y haremos un mundo mejor. Por el momento dejarémos a nuestros pequeños pubertos en su primer beso, mientras sueñan que todo es perfecto.