La noche era fría, el viento tenia miedo… el tenia miedo sostenía una kunai entre sus manos a poca distancia del cuello del que hace un momento le había entregado todo, su cariño, su alma, su cuerpo… su amor.
Tanto se había jugado con ese juego que el mismo había comenzado y no ahora no podía… no podía matarlo, no podía arrebatarle la vida al único ser que le había hecho sentir un sentimiento romántico, aun que conllevara a mas poder…no podía.
-Naruto…- susurro bajito.
Se enderezo retirando el kunai, del cuelo de Naru y se sentó en la orilla de la cama… no podía, el gran Uchija Sasuke no podía hacer lo que millones de veces ya había hecho… asesinar. –No lo haré- se levanto y clavo sus hermosos ojos oscuros en el cuerpo que se removía graciosamente entre las sabanas de la cama, lo mas seguro es que lo buscaba para abrazarlo, sasuke lo miro tiernamente… ¿Cómo había llegado a esto?
************* FLASH BACK **********
Habían pasado varios años desde que Sasuke había dejado la villa, con el propósito de buscar más poder y cumplir su ansiada venganza, había crecido bastante y su cuerpo se había formado perfectamente a causa de los arduos entrenamientos a los que se sometía, pero no importaba que tanto creciera o que tantas horas pasaran, solo había una cosa en su cabeza y siempre era la misma, una cosa de ojos azules como el cielo que observaba, con los cabellos como el sol que en ese momento quemaba su piel y que tenían el mismo efecto cuando pensaba en ellos, una cosa de piel canela y una sonrisa que es capaz de calentar al ser mas frió, una cosa llamada Uzumaki Naruto.
Y que por mas que intentaba sacárselo de la mente pos no mas no podía, y es que el solo pensar en el pequeño cuerpo del rubio hacia al Uchija vibrar y que sus hormonas cobraran vida propia, era algo que ya había aceptado al dejar Konoha y al dueño de la mayoría de sus noches húmedas atrás… Deseaba tomar el cuerpo de Naruto y marcarlo como propiedad exclusiva del Uchija.
Es mas había considerado la idea de regresar a la aldea con ese único fin, dejar claro que el Uzumaki era suyo y de nadie mas… aun que este no lo supiera claro.
-Sasuke kun- se escucho una voz detrás del vengador, ese maldita voz que ya comenzaba a sacarlo de sus casillas (y no es la basura).
Sasuke miro Kabuto, que le hacia señales para que bajara de la rama del árbol donde descansaba, si por el fuera hacia mucho que Kabuto ya descansaría tres metros bajo tierra, pero no podía asesinar al lame botas… en este caso sandalias del que ahora era su maestro.
-Orochimaru sama quiere verte- le dijo al acercarse.
Sasuke bujo molesto que cable se le había cruzado ahora a la serpiente (siii maldito arrastrado… ignorarme), mas le valía que fuera algo importante odiaba ser molestado mientras cavilaba mentalmente… según el claro. Camino dirección a la cueva que era su escondite, preparándose psicológicamente para tratar de ponerle atención a los deseo de su “sensei”.
*************
Muy lejos de ahí, mas especifico el bosque de la gran país del fuego el viento, mecía agradablemente los árboles causando que las hojas flojas cayeran irremediablemente al suelo sonde un chico de cabellos rubios dormía placidamente, co0menzo a abrir sus ojos cielo y miro… el cielo.
-me quede dormido tebayo…- se incorporo un poco, que dando sentado y sin mirar algo en especifico.
Miro ahora su mano le dolía un poco, tanto practicar su Odama Rasengan lastimaba a veces, volvería a casa a curarla no sin ante comer un gran plato de ramen *0*, y luego quien sabe podría caminar un poco, o idear un plan para traer a Sasuke de vuelta…
-Sasuke…- pensó- como extraño al teme- dijo bajito con un deje de tristeza para después levantarse y caminar de nuevo a la villa, pensando en su lindo moreno y en que posibles cosas estaría haciendo este.
Era cierto que se había ido y de cierta manera se sentía abandonado… pero pese a todo no perdía la esperanza de que un día al llegar a su casa, lo encontraría recargado en el marco de su casa y le dijera con su típica sonrisa altanera y creída un… “estoy de vuelta Usuratonkachi”… rió un poco al imaginar eso. Cerró sus ojos y levanto su puño con emoción.
-Ramen!!!!!!!!!! *0*- grito y corrió como poseso en dirección a la villa, quien sabe igual y al llegar tendría una gran sorpresa… o algo era seguro un grande y humeante tazón de ramen.
Continuara…