La última carta
A veces siento que te miento
uando digo que te quiero
Por que esto ya no es querer...
La tarde cae como todos los días en el templo Marino. Esta vez me encuentro sentado en el ventanal de mi recámara, dentro de mi pilar; y observo con mirada melancólica como el sol tiñe de rojo todo a su descenso por el horizonte. Sin quererlo, mi mente vuela a mis días en el santuario... a tu lado.
Cuando vivía en tu casa con el gato, y tú te molestabas por que llenaba de pelos la almohada y con sus garritas hacía rasgaduras en las sábanas de seda. Y yo adoraba ver tu mirada ofuscada, aunque en el fondo no estabas enojado y eso yo lo sabía de ante mano. Pero te gustaba que te hiciera mimos, te dijera palabras cursis sobre lo mucho que te amaba y lo bien que me la pasaba contigo.
Yo fui muy feliz a tu lado Milo, rápido me acostumbre a tu forma de ser, explosiva y apasionada; a tu ritmo de vida agitado y a tus celos sin razón, que para mi solo confirmaban que en verdad me amabas... como yo a ti.
Recuerdo también como caminábamos bajo la lluvia, tomados de la mano y con la cara al frente; sonrientes y plenos de felicidad. Que importaba lo que dijeran en el santuario.
¿Estábamos locos? Era la verdad... locos de amor, de pasión, llenos de vida y con muchas ilusiones. Ilusiones que para mi eterna complacencia, se realizaron.
A veces siento que he muerto
Cuando despierto y no te veo
Por que esto ya no es querer...
El equipo de sonido esta tocando la canción que tanto nos gustaba. La que tomamos como himno, o más bien te obligué a tomar; tú nunca te acostumbraste del todo a mi forma de ser tan melosa y romántica, según tu, "teníamos una reputación que cuidar".
Pero se te olvidaban esas palabras cuando salíamos a caminar juntos por los templos, cuando tomaba tus manos y con las suaves notas de una canción te hacía bailar a mi ritmo; iluminados por las velas y con la cama llena de pétalos de rosas... rosas que me había robado del jardín de piscis...solo para regarlas en las sábanas en donde momentos después dábamos rienda suelta a nuestra pasión... entregándonos mutuamente... sin reservas... sin palabras. Solo actos que nos enloquecían a los dos, caricias ansiosas y besos desperados.
Ahora, me levanto de mi cama y a mi lado sigue Milín, me ronronea para que le de su leche de las mañanas. Pero siempre me mira como si esperara algo mas... yo creo que te extraña. Al gato le haces falta y si eso ocurre con un animal tan pequeño, ¿Puedes darte una idea de lo que te extraño yo? ¿Aunque sea remota?...
La verdad es que no creo que ni siquiera me recuerdes... ahora que estas con el, es lo mas conveniente...
Es algo más,
algo que me llena
Algo que no mata ni envenena
Es algo más, algo más que amar...
Han pasado ya algunos años desde nuestra separación.
Quiero que sepas que no te guardo rencor... y si he decido escribirte esta carta es para dar por terminado un ciclo que no me permite seguir adelante con mi vida. Un recuerdo que me hace vivir en un pasado feliz que ya no existe.
Quiero liberarme de recuerdos, quiero enamorarme otra vez y empezar una nueva vida. Pero no puedo... ¿Y sabes por que?... mi corazón se niega a olvidarte. Es estúpido, y necio... esta aferrado a la esperanza de que quizás algún día cruces las puertas del santuario Marino y vengas a mis brazos. Una cosa que jamás pasará.
Yo le digo que tu vives con Camus, que tu eres feliz con el, pero no entiende de razones. Creo que tendré que arrancármelo, por que simplemente esta llana ilusión no tiene sentido.
He decido dejar todo atrás: a ti, a mi vida en el santuario y a todas las memorias que esto me trae. No es saludable que viva aferrado a un hilo, es mejor caer y de una buena vez levantarme...por que aún no lo supero, aún me despierto en las noches sollozando, ¡¡aún te extraño por Dios!! Es algo que no puedo evitar, por más que lo intente tu recuerdo sigue ahí... ha quedado anclado a mi corazón.
Es algo más que la distancia
Que el dolor y la nostalgia
Sabemos que esto no nos va a separar
Amor... obsesión... ¡que se yo!... ya no se ni lo que siento por ti. Solo se que suspiro cuando veo tus fotos y leo tus cartas. Cuando hay una canción que me recuerde a ti, que generalmente todas lo hacen y que sigo sintiendo un vacío tan profundo que no se llena con nada.
A pesar de la distancia, de estos tres años que he pasado lejos de ti, de todas cosas que he intentado hacer y todos los esfuerzos para olvidarte...no lo consigo Milo. Cielos, es tan irónico... tu si pudiste olvidarme, y yo no puedo maldita sea! ¿O es que acaso nunca me amaste?...
Es lo más seguro, fue lindo mientras duró mi fantasía contigo... jajaja y yo de estúpido que creí de que verdad lo nuestro sería eterno; pero no fue así, solo duró 5 meses y en ese corto lapso de tiempo ocurrieron cosas que ni siquiera en mis mas remotos sueños pasaron.
Amé, viví...sentí como nunca creí que lo haría. Y a pesar del triste descenlace no me arrepiento... como dice un viejo poema: lo que el árbol tiene de florido, vive de lo que tiene sepultado. Esos momentos me hacen sonreí ahora, en mis noches vacías, frías y eternas. Parezco un viejo viviendo de recuerdos. Me consumo Milo... me consumo sin ti.
Es darte un beso cada noche
Que tus manos me enamoren
Y que lo nuestro crezca cada día más
Por que somos algo más...
¿La recuerdas amor? ¡¡es nuestra canción!! La que significó tanto para nosotros, la que nos estremeció con sus letras, que nos hizo compartir tantos sueños e ilusiones. Dioses, Milo... no se como me pude enamorar de ti de esta manera tan arrebatada.
Tampoco se como diablos olvidarte y estoy comenzando a desesperarme. El estómago me duele cuando pienso en ti al lado del francés... cuando a mi mente vienen las escenas de ustedes juntos, besándose bajo la lluvia torrencial que caía esa noche. La noche en que lo nuestro llegó a su fin... Cuando cruzando a toda velocidad las escaleras del templo de Libra pronto divisé en la distancia un par de siluetas conocidas para mí.
Me acerqué esta vez caminando tranquilo, aunque en mi corazón una pesada incertidumbre y un miedo tremendo se iban formando. La lluvia caía torrencial y mis cabellos mojados me impedían ver bien. Sin embargo cuando estuve a escasos metros de la entrada, confirme todas mis sospechas bajo el más terrible de mis dolores.Besabas a Camus de una manera casi alocada, lo abrazabas con tal pasión que el francés no tenía escapatoria, como nunca me abrazaste a mí.
"Milo"
El sonido de mis pasos fuertes bajo el agua que corría por el suelo marmolado les hizo voltear; tu desencajado y tembloroso, Camus con un dejo de tristeza o vergüenza en sus ojos, algo que hasta el momento no puedo definir y que sinceramente es lo que menos me importa.
Acuario se alejó casi corriendo de la escena y nuestras miradas se encararon al fin, ¿Que reflejaba mi mirada en ese momento Milo?... yo solo se que sentía el corazón hecho pedazos... y que me ardían los ojos por que lloraba, lloraba y mis lágrimas se confundían con la lluvia que caía sobre nuestras cabezas, empapando nuestras ropas.
"Lo... siento... Kanon..."
Fue todo lo que tus labios pronunciaron, con temblor en tu voz. Pasé a tu lado con la cabeza en alto y una leve sonrisa en mi rostro. Entré a tu casa para recoger lo único que me pertenecía de ese lugar... mi gato... por que en realidad nunca pertenecí ahí. Lo único que creí mío nunca lo fue... tu amor.
Envuelto en una chamarra me lleve a Milín, sin ver atrás jamás, dejándote solo bajo la lluvia. Nunca tuve el valor de voltear a verte, pues temí humillarme una vez más. Cielos, hubiera sido capaz de ser el plato de segunda mesa Milo, ¿Te das cuenta que tan grande es mi amor por ti? Yo me pregunto si Camus te demuestra lo mismo, si el también te hace hot cakes en las mañanas... o te canta una canción mientras te acariciaba esa melena alborotada que en tan poco tiempo aprendí a amar.
A veces siento que he vivido
Más de mil años contigo
Por que esto ya no es querer...
Y pasan los días, los meses... pasan los años y todo sigue igual. Milín esta convertido ahora en un gato gordo y rechoncho.Goza de comer pescado todos los días y revolcarse en la arena mientras yo corro para ejercitar mi cuerpo al lado de mis amigos Eo y Baian.
O también cuando cae la tarde y Sorrento nos invita a tomar té en su pilar, mientras toca hermosas melodías con su flauta. El gato tiene una vida cómoda, pero como te contaba, siempre me mira en espera de algo más, incluso se posa en la ventana, con sus ojos verdes hacia el horizonte... quizás te espera... como yo.
Hoy 5 de mayo cumpliríamos tres años si hubiéramos seguido juntos. Pero el hubiera no existe... y solo estoy yo y el gato, sentados en el ventanal. Permito que el viento mueva mis cabellos, que lucen más cortos ahora pero igual de rebeldes.
Me permito también derramar algunas lágrimas. Una disculpa de ante mano si el papel luce sucio y descuidado, pero no lo pude evitar, salieron solas sin siquiera darme cuenta. Y es que me sigues doliendo... en los labios tus besos y en mi cuerpo tus caricias...
Y a veces siento que es mentira
Por como entraste en mi vida
Por que esto ya no es querer...
La canción sigue sonando, y con sus notas finales dejo salir un profundo suspiro, que espero y sea el último por que ya me aburrí de amarte, de esperarte y no verte venir, de no dormir bien por que la cama de mi recámara no me gusta y de extrañarte como se extraña el sol. Ya Milo, estoy cansado... quiero dejar tu recuerdo... quiero pensar que Camus te hace feliz y buscar mi propia felicidad. Quiero... y no puedo.
Y yo se que no es querer
Porque en tus ojos yo me puedo perder
Acaso no sabes que tú eres para míLa noche, el día en mí vivir.
Amarte duele Escorpio, y esperarte y no verte mas. Lejos de ti me muero lentamente por dentro... extraño tu mirada, tu voz... lo extraño todo de ti... no tengo consuelo... no lo puedo encontrar en nada... ni en nadie.
-Kanon! estas ahí?-
La voz de Eo me interrumpe, ha venido por mí por que vamos a ir a celebrar por que al fin Sorrento decidió andar con el. Trataré de sonreír lo mejor que pueda, me enseñaste a fingir muy bien y en estos tres años he refinado mi técnica. La he vuelto...perfecta.
-Eo! pasa hombre... en seguida estoy contigo- Contesto mientras me seco las lágrimas, nadie sabrá que aún lloro por ti.
La sangre en mis venas lo doy todo por ti
Contigo el mundo no tiene final
Y el tiempo no se nos va a acabar...
Para mí el tiempo ha terminado, no puedo llegar tarde a una reunión tan importante... Me despido de ti no sin antes pedirte un favor muy grande: Si llegas a leer esta carta quémala cuando termines de leerla.
Olvida mis palabras y sigue tu vida... dentro de todo yo estoy bien... entre paréntesis "te amo..." Pero ya me resignaré a nuestra separación... tendré una eternidad para hacerlo.
Seguirás viviendo en mis sueños y estarás presente en mis noches de insomnio... por que para mi desgracia te sigo queriendo más de lo que desearía. Esta noche voy a divertirme con mis amigos y entre risas y vino trataré de olvidar que te he escrito esta simple carta, ocultare mi tristeza y ya verás... mañana iniciaré mi programa de olvido... con milín de compañía y la música en el equipo de sonido me relajaré y leeré un buen libro.
Adiós para siempre Milo... Y has de cuenta, que jamás me crucé en tu camino.
Es algo más que la distancia
Que el dolor y la nostalgia
Sabemos que esto no nos va a separar
Es darte un beso cada noche
Que tus manos me enamoren
Y que lo nuestro crezca cada día más
Por que somos algo más...
Sea Dragon.