Capitulo nº 1: “Mátame”.
Un joven ninja saltaba a la mayor velocidad que podía, de rama en rama en la más completa oscuridad de la noche. Respirando alterado y un semblante lleno de preocupación.
Algunas hojas de los árboles se caían al recibir en sus ramas el peso de un adolescente, tan bruscamente, mientras recuerdos de hace unas horas llegaban a su mente. …Un joven de 17 años, ojos negros como el carbón y un cabello de igual tono con reflejos azules entraba al despacho de la Hokage.-“¿qué sucede?… ¿por qué me llama a estas horas?”-el pelinegro entra y ve directo a la Hokage que lo esperaba con paciencia, mientras miraba a su alrededor, viendo que todos sus amigos estaban allí, incluyendo a Gaara, el pelirrojo de la arena-“¿qué hacen todos ellos aquí?”-cuestiona con altanería.-“yo los llamé Sasuke”-le responde la Hokage con severidad-“y también a Kakashi…”-lo mira de reojo-“necesitamos toda la ayuda posible”-junta sus manos sobre el escritorio y luego apoya su mentón en ellas.-“¿para que requiere nuestra ayuda?”-cuestiona una chica de cabello rosado y unos grandes ojos verdes-“además… ¿por qué fue necesario pedir ayuda a Gaara?”-mira al pelirrojo a un costado suyo.Sasuke comienza a mirar a cada uno de los presentes, deteniéndose en cada uno de los conocidos. Empezando del extremo derecho, Kakashi-sensei, al lado Sakura, seguida de Gaara y sus dos hermanos, Temari y Kankuro; luego el equipo de Gai-sensei, Rock Lee, Ten-ten y Neji Hyuuga; el equipo de Kurenai-sensei, Hinata Hyuuga, Shino y Kiba y por último el equipo de Asuma-sensei, Ino, Shikamaru y Choji. Realmente todos sus amigos estaban allí; pero… faltaba alguien-“eh?!… ¿dónde está Naruto?”-preguntó alzando su voz, esperando ser el primero en ver en la habitación. Levanta su mirada para ver los ojos de Tsunade-sama, sin embargo esta desvió la mirada al escritorio y apretó con fuerza sus puños-“¿dónde está?”-volvió a preguntar.-“esa es la razón por la cual he llamado a todos”-dijo al fin la Hokage.-“eh?… algo… ¿algo le ocurrió a Naruto-kun?”-preguntó muy preocupada la ojiblanca.-“no…no creo… Naruto está de misión… ¿verdad Tsunade-sama?”-Sakura mira a la Hokage esperando una afirmativa que jamás llegó-“pero…entonces…”Tsunade golpeó con los puños la mesa-“debió haber regresado hace tres días… y ninguno de los ninjas que he enviado a logrado encontrarlo…maldición…”-frunce el ceño-“si algo llegase a pasarle a Naruto…yo…yo”-toma su frente con la mano izquierda mientras que con la otra se apoyaba en el escritorio.-“Tsunade-sama… ¿Naruto fue solo a la misión?”-le preguntó Kakashi, esperando encontrar algún punto de partida para iniciar su búsqueda.-“fue con Sai… pero…”--“¿pero qué?”-pregunta fieramente el Uchiha-“¿qué le ocurrió a Sai?… él debe de estar con Naruto ¿no?”-aprieta sus puños con fuerza.-“Sai apareció hace dos días…pero su memoria fue borrada… no recuerda nada relacionado con la misión… ni mucho menos el paradero de Naruto…”-se sienta para intentar calmarse-“a raíz de eso envié a ninjas en su búsqueda…pero regresan con nada”-levanta la vista y ve en general a todos los presentes-“por eso los llamé… ustedes son amigos de él… y deben conocer mejor los lugares a los cuales podría haber ido en el mejor de los casos…pero… sino es así… es probable que sólo encuentren su cuerpo sin vida…”Con esas palabras grabadas en su mente, Sasuke corre de la habitación y parte en la búsqueda de su amigo. ¿Qué haría si llegase a encontrar a Naruto sin vida? No quería pensar en esa posibilidad, sin embargo lo dicho por la Hokage fue tan directo, que lo hizo dudar de sus esperanzas.
-“maldición… ¿dónde estará ese dobe?”-mira por todos lados del bosque cercano a Konoha-“no está…”-brinca a otra rama-“iré a revisar cerca de donde tuvo su misión”-empieza a brincar mucho más rápido que en un comienzo.
Sasuke parecía una sombra moverse entre las ramas y la oscuridad de la noche.
De vez en cuando su cuerpo era alumbrado por la luz de la luna, que en su estado de llena, brillaba como una lámpara que le servía para ver con algo más de claridad entre los arbustos.
-“diablos… ¿por qué ese dobe siempre anda causando problemas?”-se detiene para beber agua de un lago. Baja de la rama y camina a paso rápido hasta el borde del lago. Se hinca y sumerge su mano para luego llevarse algo de líquido a su garganta. Por mero instinto levanta la mirada al otro lado de lago-“eh?!…”-sus ojos se abren de sorpresa-“¡¡Naruto!!”-gritó al ver el cuerpo de su amigo recostado de espaldas sobre el césped. Sin dudarlo usó chacra en la parte baja de sus pies, y caminando sobre el agua cruza al otro extremo del lago-“¡¡Naruto!!”-volvió a llamar, pero no recibió respuesta alguna. Al llegar con su amigo su cuerpo se le hiela al ver el estado en el cual se encontraba su mejor amigo-“no puede ser…”-sus ojos se contrajeron al ver tan deplorable estado.
El rubio seguía con vida, eso era un hecho, su casi imperceptible respiración se lo hacía notar. Sus rubios cabellos estaban opacos, su piel estaba tan pálida como un papel y sus ojos celestes miraban abiertos de par en par el cielo; pero estaban completamente vacíos, inexpresivos, como si su alma hubiese abandonado su cuerpo; pero lo que llamó más la atención de Sasuke, fue las marcas de lágrimas secas que se dibujaban en su rostro.
-“Naruto”-susurró esperando que el rubio captara su presencia. Se acercó y luego hincó-“todos están preocupados por ti… regresemos a la aldea”
El rubio abre sus labios para intentar hablar, pero el tono de voz era muy bajo, tan bajo, que incluso para el oído de Sasuke le era difícil entender.
-“Sa…su…ke…”-susurró-“yo… no tengo derecho de regresar a Konoha…”-Sasuke se asombró por las palabras de su amigo-“…no soy necesario… para…nadie…”-dijo mientras sus ojos se inundaban de lágrimas.
-“¿qué estás diciendo dobe?… déjate de bobadas… regresemos a la aldea…”-toma a Naruto de los hombros y lo sienta. Le costó hacerlo, al parecer el ojiazul no tenía energías ni siquiera para pararse-“vamos… Tsunade-sama te espera”
-“no es cierto… no merezco seguir con vida…”-las lágrimas corren por sus mejillas-“… sólo causo problemas… sólo causo daño… sólo causo dolor…”-levanta con dificultad los ojos para mirar la luna-“…nadie…jamás… necesitará a un demonio como yo…”-esas palabras chocaron en la mente del pelinegro, no evitando un abrazo para su amigo, que en otras circunstancias hubiese rechazado al instante, sin embargo ni eso le importaba, su espíritu y autoestima estaba más abajo que bajo tierra-“Sasuke… quiero…quiero morir… quiero desaparecer…”-el abrazo de Sasuke se hizo más fuerte.
-“¿quién demonios te hizo esto?…dímelo…”-dijo con un leve quiebre en su tono de voz-“dime… y haré lo posible por matarlo…”
-“no puedes matar a la verdad…”-Sasuke se separó del cuerpo de su amigo para ver algún rastro del Naruto que había conocido dentro de aquellas orbes celestes; pero al verlas solo encontró tristeza, vacío, soledad, oscuridad como nunca antes la había visto en una persona-“Sasuke…”-con dificultad se pone de pie y camina a la orilla del lago-“… yo… en este mundo nadie me necesita…”
-“pero… ¡¿qué hay de tu sueño de ser Hokage?!”-le reclamó al instante.
-“una aldea jamás confiará en un demonio como yo… nadie verá en mi… más… que al demonio Kyuubi… Naruto no existe para los demás… sólo soy un contenedor que puede romperse en cualquier segundo… no soy nadie… jamás fui alguien… y jamás voy a ser alguien…por eso…por eso…”-voltea con lentitud, transformando los segundos en eternidad-“Sasuke… quiero que me mates…”-los ojos de Sasuke se contrajeron por la petición de su amigo. Sus piernas empezaron a flaquear y de su boca no salía ni una sola palabra-“Sasuke… mátame… no le sirvo a nadie”-levanta su mano derecha para alcanzar al pelinegro, pero la enorme falta de energía le hizo desmayarse, cayendo en los brazos de su amigo.
-“¿quieres…quieres que te mate?… pero… yo…”-mira el rostro pálido de Naruto-“yo… jamás podría hacerte daño… jamás…”
El pelinegro, toma al rubio en sus brazos y a paso rápido regresa a Konoha, siendo recibido de inmediato por Tsunade-sama, quien manda a que preparen la mejor habitación del hospital e internar a Naruto allí, para revisarlo y saber en que condiciones se encontraba.
Sasuke dejó a Naruto en el hospital y salió de inmediato a caminar por las calles de la aldea, con su rostro invadido por la tristeza que de una u otra forma sentía Naruto al momento de decirle todas aquellas palabras.
-“pero… ¿por qué me pidió eso?… ¿quién le hizo tanto daño psicológico como para que quisiese morir?”-empuña sus manos con fuerza.
-“necesito preguntarte algo”-
-“eh?…”-mira sorprendido hacia la voz-“¿Kakashi-sensei?”-el peliplata baja de donde estaba hasta quedar al lado de Sasuke-“¿Qué quiere preguntarme?”
-“acabo de salir del hospital para saber sobre Naruto…”-Sasuke le miró fijo para que siguiera-“Tsunade-sama dijo que estaba deshidratado… y lo más probables es que no haya probado bocado en casi tres días… más o meno cuando venían de regreso a la aldea”
-“¿y qué con eso?… hay cosas más importantes de las cuales preocuparse”-Kakashi se alertó.
-“¿cómo qué tipo de cosas?…”
-“como el estado mental de Naruto…”-dijo mirando el suelo-“alguien le metió cosas en la cabeza… y dejó de ser el Naruto que todos conocemos”-apretó con fuerza sus puños.
-“a eso venía precisamente…”-Sasuke levantó la mirada para ver el rostro de Kakashi-“quería saber si Naruto te dijo algo… si es que estaba consciente cuando lo encontraste”-metió sus manos dentro de los bolsillos.
-“mh…”-hizo una pausa muy larga-“la verdad… sí”-dijo fríamente.
-“¿sí qué?”
-“Naruto estaba consciente cuando lo encontré… pero… su estado mental estaba o muy destruido o muy fuera de la realidad”
-“¿qué quieres decir Sasuke?”-frunció el ceño confuso.
-“Naruto me pidió que lo matara”-Kakashi abrió su ojo de par en par por la sorpresa de aquellas palabras. Si Sasuke tenía razón, existía la posibilidad que su alumno intentara morir por su cuenta-“…quedé inmóvil ante esas palabras…y cuando intentó acercarse a mí… se desmayó…”
-“¿qué harás?…”
-“quiero saber el estado real de Naruto… no dejaré que su vida y su sueño acaben así como así… no permitiré que muera, ni por él ni por nadie”-da media vuelta dándole la espalda a Kakashi-“iré a verlo mañana a la hora del almuerzo…”-empieza a caminar de regreso a su casa.
-“claro”-dice con pasividad antes de desaparecer.
Al día siguiente. Tal como Sasuke le había dicho a Kakashi, iba camino al hospital para ver el estado real de su amigo; pero algo inesperado lo detuvo.
-“¡¡Sasuke-kun!!”-lo llamaban desde atrás.
-“eh?… ¿qué sucede Sakura?”-le pregunta secamente.
-“Tsunade-sama te espera en su despacho…debes ir ahora…”-hace una pausa-“es sobre Naruto”-la sorpresa se hizo notar en el rostro del Uchiha, así que sin esperar, partió con dirección al despacho de la Hokage.
En cosa de minutos se encontraba de pie en frente del escritorio de Tsunade-sama, esperando el veredicto médico de su parte.
-“bien Sasuke… te mandé a llamar…porque sé que eres el mejor amigo que ha tenido Naruto en nuestra aldea…y creo que eres el primero que tiene que saber en que estado se encuentra…”-Sasuke tragó saliva, pues las palabras de la Hokage sonaban demasiado serias y eso le asustaba un poco.
-“¿qué le sucede a Naruto?”-frunció el ceño entre molesto y preocupado.
-“…no tiene una sola herida física…exceptuando una deshidratación grave, por no haber ingerido agua ni alimento en casi tres días…”-Sasuke le interrumpe con voz molesta.
-“eso ya lo sé… quiero saber como se encuentra en estos momentos”
-“a eso voy… Naruto sufre de una depresión crónica aguda…”-Sasuke quedó estático-“después que trajeras a Naruto anoche… despertó y lo único que repetía era que quería morirse… Sakura le inyectó un sedante para calmarlo y esta mañana… no desayunó y lo peor de todo… es que no ha dicho una sola palabra”-Sasuke bajó la mirada al suelo, tapando sus ojos con el flequillo de sus cabellos, ocultando sus tristes ojos de la mirada de Tsunade-“está internado con suero… al meno es hasta que decida regresar a comer… le haría bien que vinieras a verlo todos los días”
-“pero… ¿qué hay de mis misiones?”
-“puedo dejarlas para otros ninjas”-toma aire en un suspiro de cansancio-“…todo para que la sonrisa de Naruto regrese a su rostro”-un denso y eterno silencio se creó en el despacho de la Hokage. Un frío aire comenzó a circular por el lugar, haciendo notar de inmediato los alborotos que causaba aquel desesperante rubio-“puedes irte…”-le dijo antes de tomar asiento y regresar a su quehaceres.
Sasuke hizo una reverencia y salió del despacho de la Hokage para dirigirse enseguida al hospital de Konoha.
Iba a paso lento y calmado, intentando asimilar todos los datos clínicos que Tsunade-sama le había dicho y la posible situación en la cual se encontraría Naruto. Por unos instantes pensó que estar sólo con suero no sería tan malo, al menos no tan terrible al ojo de los demás.
Sasuke entró al hospital y se dirigió de inmediato a la recepción.
-“disculpe… ¿cuál es la habitación de Uzumaki Naruto?”-dijo con fría cordialidad.
-“eh…pues…”-una chica del pasillo la detuvo.
-“no te preocupes Marín… yo llevo a Sasuke a la habitación”
-“está bien Sakura…”-hace una reverencia a Sasuke-“que tenga un buen día”
-“ven Sasuke… te llevaré con Naruto”-Sasuke la sigue sin chistar.
-“¿qué haces aquí Sakura?…pensé que estarías con Tsunade-sama”-dijo algo contrariado.
-“por hoy me pidió que cuidara de Naruto…”-suelta un suspiro de tristeza-“si supieras como se encuentra”
-“Tsunade-sama me dijo que tenía depresión crónica… no creo que sea tan grave”-mintió descaradamente.
-“te equivocas”-Sasuke se detiene por la sorpresa-“no sabemos que hacer… Naruto no come… sino le hubiese inyectado el sedante de seguro no hubiera dormido… además que de esta mañana que no reacciona a ningún estimulo…”-se aflige-“ni siquiera mira a las personas que entran en su habitación…”-se muerde el labio inferior en un intento vano por detener las lágrimas que salían de sus ojos verdes-“snif… Naruto es como un muerto viviente…”-las últimas dos palabras le cambiaron el paradigma a Sasuke-“jamás creí ver a alguien en aquel estado…snif…ni mucho menos…snif… ni mucho menos a Naruto…”-se lanza a llorar a los brazos de Sasuke-“Sasuke… ¿que vamos hacer?… me duele verlo así…snif…ahhh… snif…”-sollozaba en el pecho del pelinegro-“¡Naruto baka!…snif…”
La habitación de Naruto quedaba en el cuarto piso del hospital, el piso donde se quedaban los pacientes más graves, además de ser el más lujoso de todos los pisos.
La habitación era única por paciente y esta daba directo a una ventana con vista a toda la aldea, incluyendo el rostro tallado de los anteriores Hokages del lugar.
Dentro de tan bella habitación, se encontraba un joven de 17 años, hermosos cabellos rubios e igual ojos celestes, recostado de espalda, mirando el techo sin ver nada en verdad, las manos a los costados y ligeramente tapado por las sábanas de la camilla.
La puerta se abre lentamente y de la misma manera se logra apreciar un chico de cabellos negros y piel blanca, en definitiva, Uchiha Sasuke.
Entró y cerró la puerta antes de tomar el valor suficiente para dirigirle la mirada a su amigo.
Levantó con desesperante paciencia la vista y la imagen que vio de Naruto, era una que no se la esperaba ni en el peor de los casos.
Cables por todos lados, el brazo izquierdo conectado a suero, el derecho con una mariposa y en el pecho, una cantidad increíble de sondas que terminaban en una máquina que mantenía la constante revisión de los latidos del rubio.
Sasuke quedó estático, apoyando su espalda en la puerta, Sakura le había advertido antes de entrar; pero nunca pensó que verlo directamente sería tan terrible y lo que hacía aún peor su estado, era esa constante ausencia de su espíritu. Sus ojos completamente vacíos le hacían parecer que en cualquier segundo la máquina que lo sondeaba empezaría a sonar, avisando la detención del corazón de tan alegre chico.
Los pasos lentos y dudosos de Sasuke hacían eco en la habitación, alterando el constante sonido “bip” que producía la sonda.
-“¿por qué te ausentas?”-preguntó intentando hacer reaccionar al chico; pero nada salió de la boca del rubio, de hecho, ni siquiera movió la vista para hacerle saber de su presencia-“¿por qué no dices nada?”-sus ojos fríos se impactaron en los vacíos de Naruto-“…grrr…”-cierra sus ojos con fuerza para abrirlos con furia-“¡¿Por qué demonios no reaccionas?!”-aprieta sus puños con fuerza, haciendo temblar sus hombros.
-“mátame”-fue lo único que salió de la boca del rubio. Las pupilas de Sasuke se contrajeron al oír esa horrible palabra salir de los labios de Naruto.
-“¿qué?”-fue lo único que atinó a decir-“¿por qué?”-enfrió su rostro.
-“mi existencia no es requerida…”-cerró los ojos-“mátame rápido…”
-“no lo haré”-le dijo cortantemente.
-“mátame”-repitió en tono inexpresivo.
Un silencio sepulcral inundó el aura de la habitación, sólo se oía el constante “bip” de aquel desesperante aparato, la débil respiración de Naruto y unos débiles espasmos de parte de Sasuke.
-“te haré regresar… lo juro”-mordió su labio inferior.
Una leve sonrisa se formuló en los labios del kitsune; pero se fue tan rápido como la vida de un mosquito.
-“te regresaré… tal como lo conseguiste conmigo…lo juro…”-se acercó al rubio y luego de besar su frente sale de la habitación-“lo juro Uzumaki Naruto… regresarás a mí cueste lo que me cueste…”
Continuará…………………