Kaede no supo cuanto tiempo pasó desde que llegó a su casa esa mañana, desde entonces estuvo de pie frente a la ventana de la sala, perdido en los recuerdos de la noche que pasó con Hanamichi
Akira se asomó de pronto en aquel lugar, sorprendiéndose un poco de que el moreno se halla dignado a aparecer luego que se fuera sin decir nada el día anterior, éste parecía no advertir su presencia, por eso carraspeó para hacerse notar
-¿Dónde se supone que estuviste anoche?-preguntó pero como era de suponer, no hubo respuesta del chico, se acercó mas, hasta quedar a un paso a sus espaldas- Kaede, si mal no parece, te he hecho una pregunta que no me has respondido-
-estuve por ahí...de todas formas no creo que te importe mucho-
-claro que si, eres mi novio y estoy preocupado...no estuviste aquí, ni en casa de tu padre ni en la de tu madre, puede ser que te hayas quedado a dormir debajo de un puente-lo miró despectivamente-...pero por tu apariencia creo que no fue así-
-bueno, piensa lo que quieras, no te diré-Kaede habló tranquilamente
-voy a averiguarlo...-dijo reduciendo toda distancia con el otro dejando que su nariz olfateara el cuello de éste quien ni siquiera se inmutaba por aquel hecho-...creo que te estuviste divirtiendo...Kaede, ese olor que traes no es tuyo, debiste al menos haberte bañado para quitarse la fragancia de otro-
El moreno sonrió irónico
-y tú debiste prever que llegaría temprano, si mal no recuerdo, aun no he visto salir a tu amante de nuestra habitación-
Akira retrocedió un par de pasos y habló con descaro
-tú no estabas aquí y necesitaba que alguien calentara mi cama-
-ni siquiera lo niegas...entonces es cierto, solo quise adivinar y parece que no me equivoqué-
-traición con traición se paga Kaede-
Kaede no habló mas, no tenía intensiones de discutir con su pareja y se quedaría en ese mismo sitio hasta saber que el otro se hubiera marchado
xXx
Cuando llegó el primer receso de las clases del día, Touya fue el primero en abandonar el salón de clases. Hanamichi lo vio salir desde su pupitre, apenas le saludó cuando se encontraron en la mañana, y se preguntaba si su actuar tenía que ver con el hecho que lo hubiese encontrado con Kaede la tarde anterior.
No quiso seguirlo, guardó sus cosas con calma y se dirigió a su lugar predilecto, allí se quedó con la vista fija en la superficie del lago hasta que Touya llegó y se sentó a su lado
-esta mañana te comportaste extraño-habló Hanamichi tranquilamente y sin mirarle
-son imaginaciones tuyas Hana, es solo que estoy preocupado por los exámenes que se aproximan, recuerda que necesito buenas calificaciones para mantener mi beca-
-¿estás seguro que es por eso?-finalmente lo miró a la cara
-¿habría otra razón?-contraatacó
Hanamichi suavizó su mirada inquisidora y respondió
-supongo que no-
-cuéntame ¿qué tal la tarde de ayer con tu amigo?-
-nada muy especial-mencionó vagamente Hanamichi sin pretender entrar en detalles que no convenía contar
-no sabía...que tuvieras un amigo como él-
- es Kaede Rukawa, el hijo de James, ya te he hablado de él-
-ah si, lo recuerdo, el zorro, tu enemigo en la duela-
-ese mismo-
-¿pero que hacía aquí?, no se supone que a pesar de todo ustedes no se llevaban...-
-no del todo mal ahora- Hanamichi rió y luego continuó hablando al ver en el rostro la exigencia de una respuesta mas completa-...vino por que está aburrido de su miserable vida en Kanagawa, necesitaba escapar de ese ambiente que James, su madre y su novio provocan...no tiene amigos y creo que soy lo mas cercano que puede tener-
-ese James es un desgraciado, nunca se cansará de dañar a los que tiene a su lado, tiene una lección muy grande que aprender-
Hanamichi vio seriamente a Touya
-parece que le tienes más rencor que yo-
-tal vez, por todo lo que hizo y sigue haciendo, mientras mas detalles me cuentas me provoca mas ansias de que le des la lección de su vida-
-sabes que aun no estoy listo para eso...ni siquiera sé si tendré el valor de hacerlo...además que él ni siquiera ha dado señales de aparecer o querer acercarse a mí-
Touya puso su manó en el hombro del cabizbajo Hanamichi
-anímate Hana, él algún día vendrá a tu puerta estoy seguro de eso, y ese será el momento en que todo comience, así podrás vengarte por él que no tiene salida por que es su hijo y está pagando las consecuencias de un mal padre-
-pero eso es absurdo...no tengo que hacerlo, no me hizo un mal tan grande...-
-mírate Hanamichi-Touya habló con voz potente, Hanamichi lo miró a la cara-...él te obligó a estar en una ciudad lejos de tu hogar, perdiste a tus amigos por eso, él ha desecho toda esa buena imagen que un día tuviste de tu padre...tan solo recuerda el rostro que viste ayer, eso es suficiente para que te decidas de una vez-
-tal vez no soy una persona que pueda ser capaz de vengarse de nadie-
Hanamichi se puso de pie y caminó unos pasos hasta la orilla del lago
-eres muy bueno pero de esa forma solo estás dejando que te pisoteen...dime Hanamichi ¿qué pasará el día en que te encuentres con ese hombre y quiera acosarte de nuevo? ¿acaso seguirás en ese postura pacifica de " tan solo huiré de nuevo"?...James vendrá a ti, tu mismo lo dijiste que cree que está enamorado, si el amor que sintió por tu padre nunca murió ¿crees que este nuevo capricho muera así tan pronto?...ni siquiera con tu padre muerto pasó, entiéndelo de una vez-
Hanamichi meditó un buen rato en silencio, Touya esperaba una respuesta y finalmente fue hacía él y le abrazó por la espalda recargando el rostro en su hombro
-no quiero dañar a los inocentes-murmuró el pelirrojo con amargura
-eso es inevitable Hana, pero uno sufrirá más que otro y tú sabes quien será esa persona-
-James-
-si Hanamichi, ya lo conversamos antes, él debe sufrir y tú sabes cual es la forma de hacerlo-
-sé perfectamente cual es el modo-
Se hizo el silencio nuevamente entre ellos, el que fue roto mas tarde por el sonido del timbre de retorno a clases.
Hanamichi esperaba que Touya tuviera razón en todo, pero dudaba en su actuar...tal vez lo haría, por el momento tenía tiempo para pensarlo mejor y estar seguro, por una parte temía por el hecho de causarle dolor al zorro, pero considerando su miserable vida y todas las palabras dichas por su amigo, solo acumulaba mayor certeza y razón de que James debía sufrir.
xXx
Hubo pasado un poco más de un mes desde la visita de Kaede a Tokio.
Como cada tarde después de clases, Hanamichi y Touya caminaban acompañándose hasta la casa del primero, llegaron hasta el final de una calle y doblaron en la esquina, continuaron un par metros mas hasta llegar a entrada del edificio, dentro, en la recepción, Hanamichi fijó sus ojos en la figura de James Connor que conversaba amigablemente con el conserje. Suspiró profundamente y mencionó su nombre en tono bajo. Touya, comprendiendo que su presencia estaba demás, se despidió prontamente susurrándole una palabras de ánimo al oído
El pelirrojo no pudo evitar recordar la escena de la última vez que habló con ese hombre, como si hubiera ocurrido el día anterior. Pero allí estaban otra vez, frente a frente, mirándose a la distancia
James se acercó a él un poco dudoso, creyendo que de un momento a otro el muchacho que tenía en frente huiría, sin embargo, Hanamichi se mantuvo quieto, esperando a que éste llegara a su lado para iniciar la marcha hacia el ascensor luego de señalarle que lo siguiera con un gesto de cabeza. El silencio profundo los acompañó hasta la puerta del departamento, sólo ese entonces el chico abrió la boca para invitarlo a pasar.
-dígame señor Connor, ¿a qué se debe su visita?-preguntó Hanamichi al tiempo que señalaba un sillón para que el hombre tomara asiento
-antes que nada Hanamichi...-lo miró fijamente a la cara-quiero disculparme por la forma en que me comporte contigo la última vez, hubieron muchas cosas que no debí decir o hacer...lo siento por eso-
- es ridículo pedir disculpas cuando el daño está hecho...he pensado muchas veces la situación en que me puso, llegué a odiarlo como a nadie, pero lo he pensado...puedo perdonarlo señor Connor-Hanamichi hizo una pausa y respiró profundo, James suponía que deseaba decir algo mas y esperaba impaciente que continuara-...antes, quiero que me diga mas con respecto a mi padre y usted...necesito conocer los detalles que me fueron negados-
James guardó silencio y bajó la vista suspirando
-cuénteme sobre ustedes y lo que pasó después con mi madre...- Hanamichi insistió
-está bien Hanamichi, voy a contarte todo-James levantó la vista y la enfrentó a la del muchacho como preguntándole si estaba listo, éste asintió- ...llegué a este país con mis padre cuando tenía dieciséis años y ellos me matricularon en una preparatoria en la cual conocí a tu padre, él se volvió mi amigo desde un principio y me ayudó mucho a aprender el idioma y las costumbres...con el tiempo nos empezamos a dar cuenta que lo que sentíamos el uno por el otro, era mas que una simple amistad...nuestro primer beso...-James sonrió al recordarlo-...fue en la casa de tus abuelos cuando estábamos estudiando, luego de eso nos volvimos novios y mantuvimos nuestra relación oculta por mas de un año hasta que mis padres descubrieron lo que estaba pasando y se lo hicieron saber a tus abuelos, ninguno de ellos aceptó que dos hombres estuvieran enamorados y mi padre, furioso conmigo, me llevó de vuelta a Estados Unidos solo para separarme de Satoru...-
Se oyó otro suspiro de parte de James, a ello lo siguió un momentáneo silencio. Hanamichi lo miró expectante, podía ver en su expresión que recordar todo eso no era muy satisfactorio, por eso dejó que se decidiera a continuar cuando pudiera hacerlo
-...regresé a Japón casi tres años después, cuando ya era mayor de edad, entonces me encontré con la gran sorpresa que tu padre salía con una chica, tus abuelos aprobaban completamente esa relación...quise luchar por él, todavía lo amaba y fue muy duro para mi enterarme que él había llegado a amar a esa muchacha que sus padres eligieron para él luego que yo me marchara...meses mas tarde me entero que había decidido comprometerse, como nunca lo vi muy feliz e ilusionado y yo me retiré para venir a hacer mi vida aquí en Tokio, formé mi propia empresa y allí conocí a Kaoru, en ese entonces yo quería un hijo donde apoyarme para aminorar el dolor de perder a tu padre y ella quiso ser la madre aunque sabía que no la amaba...nació Kaede, tu entonces venías en camino...-
-luego vino mi nacimiento y la muerte de mi madre-interrumpió Hanamichi con amargura
-siento que no hayas llegado a conocerla-
-pero así es la vida...cuando ella dispone no hay nada que hacer, mis padres se fueron y nada pudo evitarlo-
-yo...-
-continué...dígame como llegaron a ese trato-
-tenías mas o menos un año cuando volvimos a hablar, como amigos...en ese entonces el me consideraba en nada mas que un amigo ya que nunca pudo recobrar aquel sentimiento, él me lo confesó, me dijo también que mantuviéramos contacto pero yo no quise, lo amaba y su cercanía me haría daño, no sé como llegamos a tener en mente ese trato, pero fue como si nos hubiéramos puesto de acuerdo en la idea, hicimos el pacto y nunca mas volví a saber de él, bueno...hasta el tiempo que tú conoces-
Hanamichi sin decir nada se puso de pie y caminó en círculos como digiriendo la información recibida, luego se detuvo y enfrentó a James
-es lo que necesitaba saber-
-te lo debía-
-ahora dígame la razón de su visita y como se enteró donde estaba viviendo-
-un día cualquiera te vi caminar con otro chico y te seguí-Hanamichi enarcó una ceja contrariado-...lo siento Hanamichi, después de todo soy tú tutor y necesitaba saber que estuvieras bien, eso fue hace mucho tiempo atrás y no creas que te perseguía, pues no lo hice, solo me aseguré que estuvieras viviendo en buenas condiciones para dejarte en paz y ahora no habría venido a ti sin una razón verdadera-
-¿y cual es esa razón?-
-servicios sociales me ha hecho un par de visitas y la verdad es que me están exigiendo que me haga cargo de ti como se debe, me he excusado con que vigilo tu estadía y tu colegiatura aquí, en esta ciudad, pero eso no les convence... tienes que regresar Hanamichi, aun no cumples la mayoría de edad, supongo que tú tampoco quieres problemas-
-eso es difícil, yo no puedo regresar-Hanamichi sonó convencido
-lo que hice antes fue un error que no volverá a repetirse, puedes hacer lo que se te antoje, no necesariamente debes estar bajo mi techo, pero si no se comprueba cabalmente que estás bajo mi tutela...-
-estaré bajo cargo del estado ¿no es así?-James asintió-¿y cual sería el problema de eso? Yo no veo ninguno...tal vez designen a otro tutor o me envían a vivir a una residencia que ellos dispongan, de todos modos, sería lo mismo-
-como tú decidas, yo no voy a obligarte...solo te digo que si quieres libertad, yo te la ofrezco, y esta vez sin ningún tipo de condicionantes...además, hice una promesa que no pienso dejar de cumplir-
-lo pensaré, pero no prometo nada-
James se puso de pie y se dispuso a marcharse
-si tomo una decisión se la haré saber-
-bien Hanamichi, hasta pronto-
Luego de que James dejar el departamento, Hanamichi apoyó la espalda contra la puerta
-mientes...no me has convencido de nada - sonrió- pero te daré lo que quieres James Connor...