- Aaaaaahhhhh, que sueño- dijo cuando ya se encontraba tirado en su cama.
El Uzumaki, tomo su auto, tomo su celular
<Hola>
-Hola Sasori-
<¿Qué te hizo esta vez?>
- Yo...yo...rompí con él-
<¿Otra vez?>
-Si, pero esta vez s para siempre-
<¿Qué te dijo?>
-Nada, le dije que tenía nuevo novio-
<¿QUÉ?, ¿Estas loco o qué?, sabes muy bien como se pone Itachi, cuando le mienten>
- Lo se, por eso necesito de tu ayuda-
<Entiendo, ¿Quieres que no veamos?>
-Por favor-
La cita quedo hecha, ambos chicos se vieron en la oficina del tal Sasori. El rubio llegó a su casa ya pasada media noche. Cuando se dirigía a su pieza escuchó los sollozos de su hermano pequeño. Se acercó ala puerta.
-Sasuke- escucho un pequeño suspiro, pobre de su pequeño hermano, pero porque lo habían hecho, porque, Naruto jamás hubiera hecho eso, seguramente fue cosa de Itachi, se decía para si el mayor.
Caminó hacia su habitación allí se encerró y al igual que su hermano se puso a llorar, esta vez era la definitiva, iba a dejar a la persona que mas amaba, para que fuera feliz con quien se le antojase.
Los días pasaron, Naruto no quería comer, Deidara se la pasaba fuera casi todo el día cuando se veían Naruto trataba de hablar con su hermano pero el otro lo evitaba. Itachi le llamaba a su móvil por lo tanto tuvo que cambiarlo mientras Naruto se la pasaba viendo su celular todo el día, indeciso.
Ambas familias ya estaban enteradas de la decisión tomada por sus hijos, los compromisos no se llevarían acabo. La madre de los rubios trato de hablar con ellos, pero ambos chicos no lo deseaban, ya había pasado una semana desde lo acontecido. De pronto el celular de Naruto empezó a sonar, emocionado, al pensar que podía ser el menor de los Uchihas corrió a contestar, pero su sorpresa fue que era un Uchiha pero no el que el deseaba escuchar
-Hola Naru... ¿Cómo estas?-
-¿Cómo crees que estoy?- dijo con voz demacrada
-Ya veo, me imagino como estas, al menos tienes que relajarte, ¿Quieres que pase por ti? , vamos a tomar un jugo o lo que quieras, ¿Qué te parece?-
-Ahora no Ita, estoy muy cansado-
-Como que no, paso por ti en diez minutos y si no sales entrare y te sacare como estés ¿vale?-
Y colgó, el pequeño dio un suspiro de resignación, sabía que cuando si ex-cuñado se ponía en ese plan nadie podía contradecirlo, igual era Sa...él.
Se vistió casi sin ganas, después de diez minutos tocaron ala puerta, Iruka abrió, y allí estaba un galante Itachi luciendo una camisa negra y unos jeans muy ceñidos a su escultural cuerpo.
-Señor Itachi, pase- invito el castaño
-Gracias Iruka- se encamina a la sala, su desconcierto fue encontrar allí a Deidara con Sasori, un amigo, con tanta naturalidad les sonrió a los dos, Naru iba bajando, y se quedo viendo la escena, su hermano mayor lo quedo viendo un poco sorprendido.
-Buenos días nii-san, Sasori-san- saludo muy sonriente, falsamente obviamente. Quien en ese estado de depresión lo haría.
-Buenos días, Naruto-kun-saludo el segundo, su hermano solo lo quedo viendo, fue entonces que Sasori se lanzo y le robó un beso al rubio mayor. Naruto agachó la cabeza y caminó hacia su el pelinegro.
-Hasta luego Sasori, Deidara- se despidió muy cortes el moreno
- Lo siento, no sabia que ellos estaban allí.- se disculpo el menor con una cara de culpabilidad.
-No te preocupes- y revolvió el cabello- ¿A dónde quieres ir?-
- No se, adonde tu quieras esta bien-
Ambos subieron al auto del Uchiha y se encaminaron a quien sabe donde.
La tarde había pasado lenta, Naru al menos ya esbozaba una sonrisa no tan fingida. En este momento se encontraban en un parque comiendo helado.
-¿Cómo esta...?- pregunto un poco cohibido
-Pues se podría decir que bien, pero la cara de estreñido todavía no se le quita, no se porque lo han hecho, pero Hinata me ha confesado algo y creo saber cual fue su razón "lógica" para terminarnos, no pudo creer que mi ototo-baka te haya hecho eso, tanto que decía quererte, como sea seguro se arrepiente y regresa pidiéndote perdón-
-Lo dudo, él no es así-
-Veo que a toda costa no quieres escuchar mucho menos pronunciar su nombre-
- Itachi yo, yo lo amo, y no pudo...-
-Esta bien, no te preocupes, bien vamos que ya se esta haciendo algo tarde-
Itachi se levantó y ayudó al pequeño a ponerse de pie, caminaron algo sonrientes hasta el auto, el mayor adelante y el rubio atrás.
- Sube- dijo abriendo la puertezuela del copiloto pero el rubio no se subió, de hecho no estaba detrás de él- ¿Naruto?- dijo un poco asustado, giro a todas partes pero su pavor fue peor al encontrara a Naruto en el piso, pálido, aun mas que en la mañana- Naruto- dijo mientras iba en su ayuda.
Itachi se encontraba en el hospital, en una sala discutía un hombre que portaba una bata.
-Debe decírselo Itachi-san, él le tiene mucha confianza a usted-
-Si lo se, pero porque ahora que ha dejado la relación con mi ototo, no se si le alegrara o se pondrá mas triste-
-No creo que se ponga así, debe decírselo-
-Esta bien, lo haré-
-¿Itachi.-san ya solucionó las cosas con Deidara-san?-
-No, me he dado cuenta que ahora le ha dado por darme celos con Sasori-
-¿Sasori ha dicho?, por lo que tengo entendido, él siempre estuvo enamorado de Deidara-san, él mismo me lo confeso-
-Con que si mmm, pues ni modo, ya veras que Dei-chan regresa a mi-
-Itachi-san, Naruto-san ha despertado- intervino en la conversación una enfermera.
- Bien, iré a hablar con él, solo espero lo tome bien-
Tendido enana de las tantas camas del hospital estaba un pálido rubio.
-Naru... ¿Estas despierto?-
-Si, Ita... ¿Qué pasa? ¿Qué tengo?-
-Naru, no se como lo tomaras pero...de ahora en adelante debes cuidarte bien, ahora no solo tienes que pensar en ti si no también en la vida que llevas dentro de ti-
-¡¡Eeehhhh!! ¿A qué viene eso Ita-chan?-
-Naru, ¿Hace cuánto fue que te acostaste por ultima vez con mi ototo?-pregunto el mayor muy serio
-Este...pues fue hace como tres semanas, el día del cumpleaños de Sas...él- dijo algo confundido y triste al recordar que habían rotó el compromiso
- Pues Naru ese día no te cuidaste, tienes mas o menos tres semanas de embarazo...estas en cinta Naru, seré tío- concluyó un feliz azabache
-¿Qué? Yo embarazado, ¿Qué voy hacer? Sasuke me dejó, mis padres me mataran cuando se enteren- decía un triste ojiazul
-No te preocupes hablaré con mi ototo y todos e solucionara-
-No lo creo Ita-chan de la manera en que me habló ese día no creo que acepte a mi pequeño, fue horrible, aun recuerdo sus palabras hirientes, por favor Ita-chan dime que no el dirás a nadie, será un secreto entre tu y yo- rogaba el pobre chiquillo
-Si tu lo deseas así, esta bien por mi, solo promete que no pensaras en hacer algo estupido, que te alimentarás bien y que podré irte a visitar, además de que tratare de hacer todo lo que este en mis manos para poder ayudarte y no me lo puedes negar ya que yo seré el tío de esa lindo bebe-
-Hai, te lo prometo, ahora tengo por quien estar bien ¿Verdad pequeño?- acariciaba delicadamente su estomago.
- En ese caso, yo también lo prometo- ambos formaron una linda sonrisa.
- Pequeño, ya tenemos quien no cuide- dijo con una sonrisa. Itachi sonrió también, esa imagen de Naruto lo hacia verse muy tierno.
Los días pasaron y aunque había prometido comer bien Naru no lo hacia, el apetito no le venia y las ganas de vivir se iban desapareciendo, saber que tendría una linda criatura fruto del amor hacia Sasuke lo animaba para seguir con la carga que era no vivir sin tenerlo cerca.
Su móvil sonó, otra vez era su cuñado, que le hablaba para que saliera en realidad para que fuera a hacerse un chequeo.
-Naru, estas libre-
-Hai-
-Pasare por ti, de hecho sal porque ya estoy afuera-
Naru se asomo por su ventana y allí estaba el Uchiha mayor saludando al chico. Bajo a la estancia y allí se encontró con su hermano y Sasori, educadamente saludo y se fue.
-Otra vez va salir con él ¿verdad?-
-Si, es lo mas probable- contesto con una semblante triste
- ¿Ita-chan que me llevaras a comer hoy?- pregunto con una sonrisa
- ¿Qué se te antoja?-
-Arroz frito con fresas con crema- dijo feliz
En el restauran, todos quedaban viendo como el rubio comía, y es que no era por su buen apetito si no que encima del arroz frito estaban esparcidas las fresas con crema. Itachi veía como comía, el pobre estaba que vomitaba, pero entendía los antojos extraños de los embarazados.
-¿Hoy no me llevaras a consulta?- preguntó cuando acabo de comer su comida postre y comenzaba con un filete bañado en una salsa de cajeta.
-No, quiero proponerte algo-
-¿Qué?-
El mayor empezó a hablarle sobre lo que había estado pensando, por las cara que hacia Naru era algo importante, dejo de comer, apoyo sus manos en las rodillas, tratando de pensar pero luego mover la cabeza en afirmación.
Formaron un plan para que lo que habían decidido se llevara acabo, luego de la comida, Itachi llevó a su casa al rubio.
Trato de dormir, pero lo que le había pedido Itachi seria una cosa que cambiaria toda su vida. Los días pasaron. Todos los días salía de paseo con Itachi. El día acordado hace una semana por fin llegaba.
El abogado de ambas familias los había citado para anunciarles algo importante, como ambas familias compartían algunas acciones de unas empresas, tenían que estar presentes, todo miembro de la familia Uchiha y Uzumaki debía de estar allí.
La familia Uchiha llego justo cuando los Uzumaki bajaban del auto. Naruto y Deidara como de costumbre, cuando había una reunión, vestían con un kimono. El rubio bestia uno color azul cielo con un estampado de flores y el mayor uno de color azul oscuro y sin estampado. Los Uchihas vestían de traje el menor de color marrón y el otro de color gris. Naruto quedo viendo algo embobado a los Uchihas pero con una sonrisita picara de Itachi miro a piso un poco rojo. Deidara, veía de reojo al Uchiha como le sonreía a su hermano y como este se ponía rojo. Sasuke retenía sus impulsos para no hacer un escenita allí mismo.
Las familias se encontraban conversando. Kaseiyo platicaba de negocios con Fugaku. Mikoto Uchiha platicaba sobre una nueva boutique con Kushina y Naruto platicaba alegremente con Itachi. Mientras el rubio mayor y el azabache menor los veía. Naruto se notaba nervioso e itachi solo sonreía. Por fin el celular de Fugaku Uchiha sonó.
-¿Qué pasa Kakashi?-
-Lo siento señor Uchiha pero a mi me pidieron que hiciera esta cita. Itachi-san y Naruto-san desean anunciarles algo. Nos vemos-
El hombre quedo viendo a los mencionados quienes al sentir la potente mirada del Uchiha se tensaron.
-Oto-san, Oka-san, Ototo, señor Uzumaki, Señora Uzumaki, Deidara-san, por favor pasen a sentarse- pidió amablemente el Uchiha mayor. Todos quedaron viendo pero para no hacer una tormenta en un baso de agua decidieron seguir la petición.
Naruto temblaba como un hoja. El momento había llegado.
La comida empezó a servirse pero nadie tomaba nada, solo veían a la parejita que estaba sentada uno junto al otro.
- ¿Y bien Itachi, que es eso que no quieren decir Naruto-kun y tu querido?- preguntó amablemente Mikoto, por fin rompiendo el silencio del lugar.
Naruto tembló, apretó sus puños, cerró los ojos, contuvo algunas lágrimas. Itachi, tomó la mano de Naru, la apretó fuerte, suspiro. Todos notaron la reacción del rubio.
- Oka-san, Naruto-kun y yo sabemos cuanto deseaban que nuestras familias se unieran pero debido a las rupturas de nuestros compromisos eso no se llevo acabo-
-Eso es cierto, pero ¿A que viene esto?- pregunto Fugaku
-Pues, veras Oto-san, Naruto-kun y yo tomamos una decisión...hace tres días nosotros...nos casamos- termino el azabache.