-Akira… mentí al haber dicho que aún me gustaba Aoi… tan sólo quería que sintieras celos al igual que yo…-
-¡Bravo! Lo conseguiste- aplaudió en forma sarcástica, pero no demoró en sonreír –al parecer no podré evitar colocarme celoso si alguien te ronda de esa forma-
-Al igual que yo. Así que aléjate de Shima por el resto de tu vida o sufrirás las consecuencias de un ruki deprimido, y valla que soy molestoso cuando me coloco así, me tendrías que llenar de golosinas todos los días y mi rostro tendría forma de trasero- rió.
-quiero conocer esa etapa de ti, así que me iré con shima ahora- rió.
-¡Ja! No me causa para nada de gracia tu comentario- se cruzó de brazos –entonces yo iré a recordar viejos tiempos con Aoi-
El rubio frunció su cejo –tú no te acercas a nadie más- lo acercó contra la muralla una vez más, y lo besó suavemente, pero no demoró en transformar tan bello y lento beso, en uno apasionado lleno de lo que shima llamaría Amor.
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-¡¡Ryu!!- habló sorprendido el castaño claro.
-Takas… ósea ¿shima?- se detuvo el chico ante el castaño que se encontraba sentado en el césped.
Pero no demoró en levantarse para quedar frente al cuerpo de Ryu -¿cómo has estado?- preguntó con una sonrisa que llenaba por completo su rostro.
-Bien- sonrió -ahora venía por mi hermana a buscarla a su escuela-
-cierto que hoy la divisé en la hora recreativa, nunca pensé que tu hermana asistía al mismo colegio que yo-
-¿Vas acá también? Creo que el destino incita que nos unamos una vez más- sonrió.
“Nos unamos una vez más” Ok, ¿quién era este boludo que se presentaba así nada más? Aoi comenzaba a ocupar términos extranjeros. ¿quién mierda era este niñito bonito? Y aún más que hablaba felizmente son SU shima, sonriendo y aparentando los mejores amigos del mundo o aún peor la mejor pareja del mundo. Por favor que alguien le explique lo que ocurría frente a sus ojos, sus pensamientos lo carcomían al tan sólo ver una pequeña imagen de conversación con otro sujeto, estaba peor que solterona celosa.
Y por otro lado, el chico un poco más inteligente que el pelinegro que pensaba todo un poco más detallado sin que su euforia le ganase, observaba la imagen tranquilo, después de todo nada anormal estaba ocurriendo ¡Esperen! ¿Acaso es normal ver a shima con un chico el cual sólo él conoce? ¿y es normal que shima tenga otro amigo que no sea Akira? ¡Mierda! pensó el castaño oscuro, esto no estaba bien y no avanza de lo mejor, ambos continuaban sonriendo y el castaño claro se ruborizaba con pequeños cortejos que decía sin ni siquiera darse cuenta el otro.
-¡OYE!- se levantó, sin aguantar más el pelinegro.
-¿Hm…?- observó Ryu.
-¿Quién eres?- habló con voz firme hasta para asustar al mismito barbudo (profesor)
-es un amigo yuu- contestó shima por el chico alto, casi de la misma estatura que shima, tan sólo que tenía uno o dos centímetros menos que el castaño claro. –Ryu te acompaño a buscar a tu hermana- sonrió.
El chico con cabello negro, asintió con la cabeza y una tenue sonrisa que se dibuja en su rostro.
-¡¡¿Qué?!!- quedó hablando solo o más bien acompañado de kai –Nos ha dejado solos KAI- gritó el nombre de este para que reaccionara -¡Que nos ha dejado y se ha ido con ese boludo mi chico- (nota autora: misa esto es tu culpa! XD me pegaste “mi chico” no puedo creer que lo escriba hasta acá xD)
-no me hables raro… para serte franco no creo que haya algo entre esos dos…-
-¡¿Acaso no notaste como se sonrojaba shima?!- preguntó el pelinegro.
-¡Claro que lo vi!-
-¿Entonces?- continuaba insistiendo yuu.
-no lo sé…-
-¿Cómo que no lo sabes?-
-Dime tú l oque pretendes hacer, algo ha de pasar por esa cabeza ¿no?-
-agh- se desordenó el cabello con fuerza –el inteligente aquí eres tú, no yo-
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-al parecer te veré más seguido ¿no?-
-por lo visto sí- respondió con una tenue sonrisa, que alegró el corazón de su acompañante.
-mira hay está tu hermana- señaló a la pequeña.
-¡Megu!- gritó el de cabello oscuro.
-hermano…-suspiró -¿cuántas veces te debo decir, que ya no es necesario que me vengas a buscar?-
-pero aún eres muy chiquita para andar sola por las calles, y yo te debo de cuidar- sonrió.
-¡Ya tengo 12 años hermano!-
-por eso te digo, aún eres pequeña-
El castaño claro soltó una pequeña risita, la imagen entre estos hermanos le causaban una gran ternura.
-pero todas mis compañeras, inclusos niñas de cursos mayores se acercan a mí sólo porque tú eres mi hermano- suspiró.
-¿A qué te refieres Megu?-
-como eres el chico más apuesto que se ve por acá, todas quieren que te presente con ellas, y yo no quiero eso- realizó una pequeña mueca en su rostro.
-ni si quiera voy en esta escuela, y el horario en que sales no son muchos los estudiantes que hay, así que no debe ser un grupo muy grande el que te diga esas cosas, además estoy seguro que ellas son niñas sin cerebro- rió -¿cómo es eso que se te acercan sólo por mí? Cuando te digan esas cosas mándalas al diablo, y las personas que son tus amigas que sea sólo porque les agrada estar contigo-
-lo sé- sonrió –pero hermano, de verdad son muchas las alumnas que me preguntan por ti y se dicen llamar mis amigas, diciendo “yo soy amiga de la hermana de Ryu Kamenashi” no es agradable escuchar ese tipo de cosas-
-hm… y yo que pensaba que quería cambiarme a esta escuela, creo que te armaré un revoltijo aún peor ¿no?- rió.
-¿enserio hermano? Es que si es así… yo no tengo problema alguno, pero te aseguro que te acosaran mucho y esas niñas querrán ser tus amigas a la fuerza-
-Ryu- interfirió el castaño claro, que al escuchar la frase “cambiarme de escuela” su rostro se mantenía atontado y algo estupido –pero en la secundaria las chicas no son así- trató de convencer a Ryu. ¡Ok! Shima estaba mintiendo, en la secundaria las chicas parecían víboras vivientes asechando a su presa, cuando llegaba un nuevo chico y aún más apuesto que los demás, se volvían locas como nunca y dejaban atrás cualquier postura de señoritas, se peleaban entre sí por quien salía primero con él, pero no importaba todo esto, después de todo existía la posibilidad de que RYU estuviese en su misma escuela ¡ósea verlo todos los días!
-¿enserio?- preguntó sorprendida Megu.
-sí, en la secundaria las chicas son mucho más civilizadas- sonrió el castaño claro.
-entonces si es como dice shima, creo que no habrá problema que me cambie ¿no? la otra escuela me queda bastante lejos, bueno, lo estaré pensando mediante esta semana- sonrió –oye shima ¿Quieres ir a casa ahora?-
Esa pregunta golpeó el corazón del castaño claro, sonaba algo como “amor, vayamos a casa, ya se ha echo tarde” Fruto de tanta telenovela, es soñar despierto a cada segundo. -¿a.. a tu casa?- preguntó embobado.
-¡Sí! Shima ven- habló entusiasta la pequeña megu.
-bueno- respondió como un bobo sonriente.
Comenzaron a caminar, mientras eran observados por todos, Ryu siempre se llevaba las miradas de cada persona que pasaban por su lado.
-¡Que no me empujes!- habló con su ceño fruncido.
-idiota ¡calla! Nos pueden escuchar- habló mientras observaban a estos tres avanzar.
-¡Pero kai! Deberíamos ir ahora y detenerlo y punto-
-¿eres imbecil o qué? ¿cómo los vamos a detener? Shima se enojaría con nosotros y no queremos que ocurra eso nuevamente- avanzaron al siguiente árbol para poder ocultarse.
-¿entonces por qué los seguimos?- preguntó confuso el pelinegro.
-para ver que tipo de relación llevan estos dos…-
-¿acaso de verdad a shima le gustará ese tipo?-
-por lo visto, al menos le atrae…- habló mientras aún mantenía su vista puesta en estos tres que hablaban como la familia feliz del año.
-¡¿Cómo que le atrae?!-
-¿acaso no te das cuenta como le mira shima?-
-insisto ¡golpeémoslo! Yo le podría ganar fácilmente, no por nada soy cinturón negro-
-créeme, no necesitamos tu mente bruta ahora- habló kai.
-¡¡Pero entonces ¿qué hacemos?!!- avanzaron al siguiente árbol espiando cada movimiento que estos hacían-
-ya se me ocurrió algo- sonrió.
-¡¿qué cosa?! ¡¿qué cosa?! ¡¿qué cosa?!- preguntó el pelinegro de manera infantil.
-ya lo sabrás mañana…-
-¡¿Qué haremos mañana kai?!-
-¡Conquistar el mundo pinkiaoi!-
-¿Enserio? No ando de ganas para conquistar nada kai-
-¡no seas idiota! Bromeaba-
-yo también bromeaba kai- observó de re ojo a otro ángulo.
-¡nos iremos a la playa por todo el fin de semana!- habló por fin.
-¿y qué tiene que ver eso con que a shima le deje de gustar a ese tipo?-
-que este fin de semana será nuestra oportunidad con shima-
-pero… eso quiere decir que en esos días seremos rivales…-
-aoi, lo somos desde el primer día en que dijimos que nos gustaba shima-
Y entre tanto dialogo ya se les había perdido el castaño claro con ese “niño bonito” pensamiento sarcástico de yuu.
Al día Siguiente
Venían llegando el rubio con el castaño claro como era de costumbre por la mañana.
-¡Hola amor!- se precipitó rápidamente el pelirrojo al rubio.
-¡Buenas!- sonrió, mientras dejaba su bolso en la silla. -¿aún no llegan kai y aoi?-
-sip- respondió enseguida el pelirrojo –pero no sé donde están, sólo sus bolsos están aquí-
-ah ya veo, deben de estar por hay, quizás haciendo que cosas- rió el rubio.
-¡Ellos son amigos Akira!- contestó rápidamente el castaño claro, sin ni siquiera querer imaginarse lo que quizás en esos momentos estaban realizando.
El rubio no alcanzó ni a responder cuando estos dos venían entrando al salón de clases con una sonrisa de cómplices.
-te lo dije shima- habló el rubio con una pequeña sonrisa burlona –estos dos ha de estar haciendo algo muy interesante-
-claro que estábamos haciendo algo interesante los dos- sonrió cómplice junto al pelinegro.
-¡¿Qué cosas hacían?!- preguntó enseguida el castaño claro.
Estos dos se voltearon y comenzaron a murmurar entre sí, mientras sacaban un “algo” de sus bolsillos, y esa pequeña risita que mantenían se hacía oír en los tres que se encontraban observándolos.
-¡toma!- se acercaron al pelirrojo entregando un papel -¡toma!- se acercaron ahora al rubio –y para nuestro shima, ten- entregaron de igual forma al castaño claro.
-¿qué mierda es esto?- preguntó el rubio.
-léelo- respondieron al unísono.
-¿señorito akira matsumoto?- observó la tarjeta ROSADA que le habían entregado
-Akira Matsumoto has sido invitado para asistir a la bitch fun durante todo el fin de semana. De tus queridos y buenos amigos yuu y uke. Te estamos agradecidos si aceptas ir de viaje con nosotros, además con tu novio Takanori Matsumoto. AttE Yuuke.-
-¿Akira Matsumoto?- Volvió a preguntar el rubio.
-ya sabemos que el hombre de la relación es ruki, así que tu vendrías siendo… ¿cómo decirlo? ¿la mujer? Si eso, vendrías siendo el NO hombre, así que como NO hombre pasas con el apellido de Ruki- sonrieron.
Arqueó su ceja y en signo de molestia -¿a que se refieren con No hombre?-
-nada, a nada se refieren- rió el pelirrojo –Esto fue escrito por yuu ¿cierto?-
-¿cómo lo sabes?-
Rompió en risas el pelirrojo –jajaja porque tú eres el único que escribirías “Bitch Fun”-
-PLAYA DIVERTIDA- habló de forma superior.
-¡idiota! Has escrito PERRA DIVERTIDA-
-¡¿Qué?!- todos rompieron en risas.
-aoi es un idiota jajaja-
-no soy idiota- frunció su ceja. –Bueno y….- dio pie para cambiar de tema -¿van o no van este fin de semana?-
-un fin de semana en la playa con akira ¡yo me anoto!- se sujetó del brazo del rubio.
-por lo que veo ya está decidido, entonces también iré- sonrió el rubio observando al pelirrojo.
-¡¿y tu shima?!- se acercaron a este quien aún observaba detallado la invitación.
-¿por qué me dibujaron como un pato?- preguntó confuso.
-porque pareces pato-
-yo no soy un pato ToT-
-si que lo eres-
-¡que no lo soy!- respondió.
-¡Shima ¿vas o no vas? Ok, eso significa un sí, entonces todos mañana nos vamos a la playa-
-pero ni siquiera he respondido ¡Escuchen mi opinión!-
-¡Yeeeeh, mañana todos a la plaaaya!-
-me siento ignorado ¬o¬- suspiró el castaño claro.
Continuará….