Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Pecado por Alinna

[Reviews - 103]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo: Un amanecer agradable para Lay para dar paso a aclarar temas con Luca, dejarlo todo zanjado para dar paso a la felicidad y futuro de Lay y Dick.
Me desperté con una sensación agradable paseándose a lo largo de mi estómago. Abrí los ojos poco a poco, encontrándome con el cabello negro de Dick por mi pecho, besándome el abdomen y bajando, me reí como un niño pequeño y su mirada azul se clavó en la mía de igual color. Se acercó a mi rostro poco a poco, rozándose con mis labios.

“Buenos días…” susurrando pasé mis manos por su rostro, ronroneando como si fuera un gatito, besando la comisura de sus labios. “¿Estás de buen humor?”

“Mmm… puede…” riéndose ligeramente me devolvió el beso, mordiendo mi labio inferior. “… es que tenemos un problema…”

“Sorpréndeme…” tirando la cabeza hacia atrás me entregué a la sensación de su lengua recorriendo mi cuello. Agarró una de mis manos y la llevó a su entrepierna, notando su erección matutina. “…Hace tiempo que no te despiertas tan animado… ¿Has rejuvenecido?”

Me pellizcó la barriga.

“¿Me estas llamando viejo?” sentándose encima de mis caderas se quitó la camiseta de tirantes, mirándome desafiadoramente. “…no estaba de humor estas últimas mañanas por diferentes problemas familiares…”

“Lo sé…” reincorporándome ligeramente atrapé sus labios, intercambiando posiciones, colocándome yo encima, mordiendo y lamiendo sus labios, sin dejar que hablara, besándole profundamente sin cesar. Notando como nuestras lenguas se encontraban e iniciaban un baile caliente, una lucha para ver quien ganaba a quien.

Perdiendo yo al notar como los dedos de Dick se paseaban por encima de mi entrada, sin quitarme la ropa interior, haciendo que gimiera y soltara sus labios, sintiendo su lengua morder mi cuello.

“Acércate más…” tumbándose en la cama me dejó de rodillas encima de él, con una pierna a cada lado de su cuerpo. “… sino no podré atender a tu amigo…” bajándome la ropa interior me acerqué a su rostro, agarrándome al cabezal de la cama cuando noté su lengua recorrer mi entrepierna.

“Ahnn…” mirando hacia abajo me encontré con la mirada afilada de Dick, que se introducía mi miembro en su boca, lentamente, haciéndome sufrir. “…má – más rápido…”

Escuché una suave risa por parte de él y me estremecí, gimiendo al notar sus dedos rozando mi entrada, adentrándose poco a poco mientras aceleraba el ritmo de su boca en mi verga. Haciéndome gemir y mover mis caderas. Se separó de mí haciendo que gruñera por haber parado esa deliciosa sensación, apartándose ligeramente y colocándose detrás de mí.

“Vamos a comprobar la resistencia del cabezal de la cama… ¿Te parece bien?” riéndose traviesamente agarró mis manos, colocándolas en el cabezal de la cama rozando su miembro erecto en mi entrada. “…Aunque primero te haré sufrir un poco…”

“Maldito…” al decir eso noté un azote en mi trasero, haciéndome sonreír con travesura. “¿Ahora te van estas cosas?” tirando la cabeza hacia atrás atrapé sus labios, notando como una de sus manos atrapaba mi miembro duro, masajeándolo lentamente, acariciando la punta deliciosamente, haciendo que mis piernas temblaran.

“No…pero si te portas mal y dices palabras feas…te tengo que castigar…” lamiendo mis labios volvió a atrapar mi boca, sin dejar que rechistara, colocando su miembro en mi entrada, jugando con mi cuerpo, haciendo entrar la punta lentamente para luego sacarlo, haciéndome sufrir. “…¿Y qué Lay? ¿Qué deseas?”

“Ahnn…lo sabes desgraciado…” volviendo a recibir un azote se acercó a mi oreja, mordiéndola.

“He dicho que palabras feas no…soy tu hermano mayor…debo castigarte…” excitado volvió a rozar su miembro en mi entrada, ejerciendo presión pero sin entrar dentro de mí, haciéndome enloquecer. “…pero si me lo pides de forma sucia a lo mejor accedo…siempre se puede hacer una excepción… ¿No?”

“Parece que si… aaah…pues ya sabes que tienes que hacer…” rozando mi trasero con su miembro, moví mis caderas, mirando de refilón a Dick, provocándole, por mucho que me estuviera haciendo sufrir él también necesitaba entrar en mí, lo notaba. “…méteme tu miembro duro en mi culo…”

“Como mandes…” riéndose pícaramente agarró mis caderas, entrando de golpe dentro de mí, haciéndome gemir fuertemente, agarrándome al cabezal de la cama, notando como mis piernas temblaban al estar aguantándome de rodillas encima la cama.

“…muévete o me correré…” respirando a bocanadas sentí su miembro entrar y salir frenéticamente de mi cuerpo, haciéndome gemir fuertemente, sintiendo como mi cuerpo no aguantaba tanto placer. Acariciando con una de mis manos mi propio miembro, masturbándome al ritmo de las estocadas de Dick, sintiendo que iba a morir por tanto placer, ese día estaba más sensible que de costumbre y mi cuerpo lo estaba notando con cada vez que el miembro duro de Dick entraba y salía de dentro de mí. Haciendo que mis gemidos excitaran aún más a mi novio, que aumentaba el ritmo y mordía mi cuello mientras entraba duramente en mí. “¡Ahhn, sii!”

“Córrete… te voy a llenar por completo…aaah…” agarrando con sus dos manos mis caderas entró lo más profundo en mí, tocando ese lugar que hizo que me corriera al instante, sintiendo como Dick me llenaba por completo, gimiendo ambos. Dejándonos llevar por la pasión y el desenfreno, agarrándome el rostro, besándome profundamente, notando como parte de la esencia de Dick se derramaba entre mis piernas. “…Te amo…”

“Y yo Dick…” saliendo lentamente de dentro de mi me volteé tumbándome encima de él, cayendo los dos en la cama, abrazándole fuertemente, sintiéndome apegado a él. “…¿Y si nos vamos a la ducha? Ya llego un cuarto de hora tarde…” sonriendo entre sus labios me puso morros. “… ¿Qué ocurre?”

“Nada…que hoy querías hablar con Luca… ¿no?” acariciando mi cabello húmedo por el sudor, besó mi frente, bajando hasta los labios. “…y no me hace gracia.”

“Piensa que una vez hable con él… los problemas se habrán acabado…” dándole un último beso me levanté, estaba todo pegajoso. “… ¿vienes a la ducha?”

“¿Cómo puedes dudarlo?” sonriendo ligeramente se levantó y me siguió a la ducha.











“¿A qué hora llegarás hoy?” acompañándome con el coche hasta la salida del parking me miró fijamente, encendiéndose un cigarro.

“Pues…contando que llego casi una hora tarde…no lo sé…si me hacen quedar más tiempo llegaré casi a las seis de la tarde…” colocándome el casco de la moto como gorra me quedé parado al lado de su lujoso coche. “…tu espérame en casa como un buen niño, que hoy solo tienes una reunión y llegarás temprano a casa…”

“No me provoques Lay…” mirándome de forma traviesa desde el coche sonreí. “…¿o no has tenido bastante con lo de esta mañana?”

“Oh no señor…estoy más que satisfecho…” pensando en el leve dolor de caderas que tenía en esos momentos sonreí recordando el origen. “…bueno, me voy o aún entraré en tu coche y no te dejaré salir.” Acercándome a la ventana abierta de su coche besé levemente sus labios. “…hasta luego cariño.” Guiñándole un ojo me coloqué bien el casco y arranqué.

Hoy sería otro día completo.









Entré como alma que lleva el diablo a la oficina, disculpándome con mis compañeros que se reían al ver mi cara de prisa y mis cabellos medio secos de la ducha. Y allí estaba sentando en su mesa, Luca, con ese aire de superioridad y esa mirada de picardía, intenté no pensar en ello, no era momento de hablar las cosas, sería mejor en el descanso para la comida. No era para montar una escena en medio de los otros compañeros.

“Lay…buenos días.”

Me estremecí al escuchar la voz de mi jefa.

“Bu – buenos días Rosalie…estás tan hermosa como siempre.” Sonriendo ampliamente noté como me pellizcaban las dos mejillas. “¡Auch, Auch!”

“¡Debería dolerte más! ¿Cómo que llegas tarde Lay?” cruzándose de brazos me miró fijamente
.
“Esta vez sí que es culpa mía…” suspirando la miré con cara de pena. “…me entretuve con mi novio.”

“¡A mí me da igual! Me alegra que tengas una vida sexual activa pero intenta no llegar tarde… tu porque llegas tarde muy pocas veces y te tengo cariño…pero a la siguiente te vas a la calle.” Dándome un golpe en la cabeza se fue riéndose ligeramente.

“Que fuerza tiene esta mujer…” rascándome dónde había recibido el golpe miré a Luca que se reía por debajo de la nariz. “…no tiene gracia.” Poniendo morros comencé a ordenar mis cosas. “…ah, por cierto…luego tengo que hablar contigo Luca.”

“¿Sobre…?”

“Sorpresa, pero debo hablar contigo así que en la hora del descanso vamos fuera a fumar y te lo cuento con tranquilidad.” Sonando simpático y tranquilo volví a mi trabajo, si me ponía a la defensiva o con ironía sería peor, sé que había descolocado a Luca, ya que nunca había sido tan cordial con él, pero quizá, si hubiera sido así desde el principio me hubiera ahorrado la mayoría de problemas con él.

Pasaron las horas y la hora del descanso había empezado, Luca se había adelantado ya que tenía que pasar antes por la cafetería a por un café solo, su rutina de cada descanso, café y cigarro. No podía haber una cosa sin la otra.

Agarrando mi paquete de tabaco salí fuera, encontrándome con Luca, que fumaba con tranquilidad.

Era atractivo, todo hay que decirlo.

Si no hubiera conseguido estar con Dick hubiera sido uno de esos amigos con los cuales me acostaba para divertirme.

Ladeé la cabeza, más vale borrar esos pensamientos o si se me llegaban a escapar no me serviría de nada hablar con Luca.

“¿Ya estás aquí?” mirándome fijamente asentí. Quedándonos ambos en silencio, él fumando y yo encendiéndome un cigarro con tranquilidad. “…Bien… ¿de qué querías hablar? Porque si hemos quedado para estar en silencio se me ocurren cosas que hacer para romperlo…”

“De eso mismo quería hablar contigo…” suspirando profundamente me armé de valor. “…quiero que paren estas insinuaciones descaradas y provocaciones.” Me miró sorprendido y se echó a reír fuertemente, haciendo que me enojara. “¡¿Qué te hace gracia imbécil?!”

“Oye…que yo no quiero nada más aparte de sexo contigo ¿eh?” secándose las lágrimas que le caían de tanto reírse me crucé de brazos. “…me has recordado a esas novelas tan dramáticas con esa decisión…” volviéndose a reír le di un golpe en el brazo.

“¡No te rías!” riéndome ligeramente miré hacia otro lado para que no viera que también me hacía gracia. “Ahora en serio…sé que solo quieres sexo conmigo…o lo que sea, me da igual…pero la cosa es que me incomoda muchísimo porque tengo pareja…y no conseguirás nada…por mucho que me provoques, solo que al final acabe por odiarte…y dentro de todo no me caes del todo mal como para odiarte.”

“…” mirándome fijamente le dio una calada a su cigarro y soltó el humo poco a poco, dejándome inquieto. “…¿eso es todo?”

“Mmm…si.” Ladeando la cabeza sin entender demasiado me quedé mirando a Luca. “…no me saltes con que te dan igual mis palabras porque ya he tenido más de una pelea con mi novio por culpa de tantas provocaciones tuyas…y me ha costado mucho estar con él.”

“Pareces una mujer casada…” volviéndose a echar a reír hizo que no entendiera nada. “…lo – lo siento…” volviéndose a reír intentó serenarse al ver mi cara de pocos amigos. “…solo quería molestarte, bueno, es claro como el agua que me atraes y que quería tener sexo contigo pero no quiero el peso de destrozar una relación…para que luego te enamores de mí.” Riéndose hizo que yo también me echara a reír.

“Eres idiota.” Empujándole ligeramente me sentí más tranquilo.

“¿Eso es todo?” asentí y él se encogió de hombros. “…bien, pero no puedes evitar que siga diciéndote lo bueno que estas.” Riéndose ligeramente entró en la oficina, haciendo que rodara los ojos.

“¡Luca, espera!”

Con este tipo no acabarían nunca las bromas.










Aparqué la moto y subí las escaleras rápidamente, entrando en el ascensor y picando con energía el botón, quería llegar a casa cuanto antes. Salí y abrí la puerta de casa, escuchando ruido en la sala, extrañado dejé el casco de la moto encima de la mesa de la entrada y tras colgar la chaqueta me adentré a ver quién era. Viendo a Kira y a Jason sentados en el sofá mientras hablaban con Dick que tomaba una cerveza con tranquilidad.

“¡Hola!” tirándome encima de Kira se sorprendió, riéndose al ver que era yo, correspondiéndome el abrazo, viendo la cara de Jason que era un cuadro. “¿Qué hacéis aquí?” separándome ligeramente vi que Jason estaba rodeando a Kira por los hombros.

Y entendí.

“Pues mira…que al final el idiota este me ha convencido para volver con él…” dándole un golpe en el pecho Jason se encogió ligeramente riéndose, ya volvía a ser el de antes, iba con su traje y su cabello bien recogido y peinado, sonriendo torcidamente. Como siempre.

“Son mis dotes seductoras.”

“Y tus disculpas con lágrimas.” Kira sonrió triunfante, recibiendo la mano de Jason tapándole la boca, mientras Kira se resistía como podía.

“Ahora tienes una persona que es capaz de hacerte chantaje…” riéndome miré a Dick que me miraba fijamente.

“¿Hola, no? Ni me has dado un beso, ni nada…te tiraste encima de Kira como un animal.” Sonriendo ligeramente miré a Dick que me ponía morros al decir eso.

“Lo siento cariño…” besándole ligeramente me senté a su lado, dándole besos cortos y continuos. “¿Contento?”

“No…luego ya me harás feliz.” Diciéndome eso en la oreja hizo que me sonrojara. “…¿solucionaste lo de Luca?” enarcando una ceja me miró y yo asentí.

“¿El que debías solucionar?” Kira con curiosidad consiguió quitarse la mano del rostro de Jason, mirándome con intriga.

“Nada importante, que ahora, como tenemos todo bien arreglado quería solucionar las cosas. Porque ahora que mamá y papá saben que estamos juntos, que Vincent, el padre de Dick también y la gente cercana lo mismo, pues solo me quedaba solucionar lo último que me incomodaba…Luca y sus comentarios.”

“Y provocaciones e intentos de darle besos, un largo etcétera.” Dick terminó mi frase y yo rodé los ojos al ver que aún se enfurruñaba al pensar en todo eso. Aunque también me divertía. “…pero bueno, ¿Cómo se lo ha tomado?”

“Bien…es un tipo listo…supongo que sabe cuando alguien le rechaza seriamente y ha sabido quedar bien él por delante de todo. Así que no me lo ha puesto difícil para nada.” Apoyándome en el pecho de Dick le di un sorbo a su cerveza. “Así que cariño no debes preocuparte más.” Mirando hacia arriba me encontré con la mirada de Dick que irónica me transmitía un: si claro.

“Este tipo de tíos no se rinden.” Jason soltó lo que Dick seguramente estaba pensando en ese mismo instante.

“¡Tú no estropees las cosas!” pellizcándole la barriga Kira le miró severamente. “…yo creo que si lo habrá entendido y más un tío que solo quiere sexo.”

“Exactamente…él mismo me lo ha dicho…que todo captado pero que me seguirá diciendo lo bueno que estoy.” Riéndome vi como Dick enmudecía, y me tapé la boca. “…¡Pero no importa cariño!”

“¿Ves? ¡Te lo dije!” cruzándose de brazos me puse a reír y me senté encima de él. “…no me sobornes.”

“Te juro Dick que lo ha entendido…lo que solo quiere tomarme el pelo…¿vale?” riéndome ligeramente por la situación besé sus labios.

…l también estaba actuando como un niño caprichoso para molestarme, y daba gracias por esos momentos de diversión y tranquilidad. Nunca había estado tan feliz.

Catherine y papá sabían que estábamos juntos. Lo aceptaban y respetaban nuestra decisión.

Vincent el papá de Dick, también. Junto con unos amigos extraordinarios que siempre nos dieron apoyo y palabras de ánimo para todo.

Y mamá...donde estuviera seguro que me estaba sonriendo al verme tan feliz.

Amaba a Dick, y lo amaría por siempre.

Ahora empezaba mi felicidad.

Ahora empezaba todo.

Porque para mí, Dick, era mi todo.
Notas finales: Hola de nuevo!
Si...lo siento, he estado ausente por meses y meses,
pero por motivos personales no he podido dedicarme a esto
en ningún minuto o ratito...así que en una maratón de dos días he terminado un capítulo, el penúltimo para ser más exactos.

Así que el siguiente será el que ponga punto y final a esta hermosa historia.

Espero que os haya gustado el capitulo, y vuelvo a disculparme por la tardanza u_u

Muchas gracias a todos/as aquellos/as que leen y comentan!

Nos vemos en el próximo capitulo!

Dejen comentarios, opiniones, etc. Muchas gracias!

Besos y cuídense :3

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).