Muchas gracias a Paula por corregir.
Atención: Batman, la JLA (y todo su mundo) pertenece a la Warner Bros y DC Comics, esta historia es para entretener, no se gana ningún dinero con ella.
Batman... ¡Embarazado! o-O
Un Bebé para la JLA
22- Problemas, complicaciones y el destino
Robin por su parte miraba a uno y otro como si su cabeza fuera la aguja de un reloj. Ninguno decía nada y él no entendía el por que... "Si solo es un bebé" Se dijo y sin pensárselo dos veces soltó.
_ Bruce tendrá un bebé_
...
_ ¡Señor Bruce!_ Grito Alfred completamente alucinado al oír esas palabras_ ¡¿No me diga que usted y la señorita Kile?!_
_ ¡NO!_ Exclamo Batman, negándolo también con las manos "¡¿Cómo podía pensar eso?!" Aunque claro, el hecho de que hubiera tonteado con ella para satisfacer a la prensa era una posibilidad.
_ ¿Y entonces?_ Le preguntó alzando una de sus cejas "¿Qué hay otra mujer?" Perecían decir sus ojos en ese momento.
"Lo que es mujer... "Mujer"" Pensó Batman tragando saliba con angustia. Se sentía anulado en ese instante, no sabía que hacer o decir. Nunca, jamás en su vida se había encontrado en una situación así.
Y nada podía complicarlo más.
"Nada"
_ Es complicado..._ Susurró sintiéndose como el niño que un día fue.
_ Ya veo, señor..._
_ ¿Traer un bebé es complicado? _ Intervino Dick de repente, mirando a los dos hombres sin comprender.
_ ¡Cállate!_ Le ordenó Bruce sin mirarlo, ya tenia más que suficiente. No podía más...
Esteba en su límite.
_ ¡Señor!_ Le riñó el mayordomo por su tono.
_ Bruce _ Gimió Robin afectado por el grito.
Batman miró a Alfred, que le mirada molesto por su brusquedad con el niño, y luego miró a Robin, que lo observaba con los ojos brillantes por la aflicción. Iba a llorar... "Oh no" Se dijo sintiéndose mal, no quería que Dick llorara por su culpa. Y él ya se sentía desbordado, todo eso le venía grande... y no era capaz de seguir adelante.
Se sentía mareado, triste, angustiado... "Solo"
"Maldito embarazo" Pensó intentando centrarse "¿Pero como salir de esa situación?"
"¿Cómo?" Se dijo cuando un sonido le devolvió al mundo real de golpe.
El timbre de la mansión Wayne había sonado.
_ Alfred _ Le dijo tras oír el segundo tono del mismo... No podía haber sonado en mejor momento "Estoy salvado" Pensó respirando más tranquilo.
_ Señor..._ Le contestó el Mayordomo saliendo de la cueva para atender la llamada. Y por su tono lleno de reproche, Batman entendió que ese interrogatorio no había terminado, solamente se había aplazado.
Bruce se sentía tan coaccionado en ese instante, que hasta perdía la cabeza, se mareaba "¿O eran nauseas?" Ya no se entendía ni a sí mismo.
Se paso las manos por la cara para intentar calmarse, pero los ajetreados bombeos de su corazón no parecían atender a razones. Sus sentidos estaba a flor de piel y un sentimiento de fragilidad le envolvía como si estuviera dentro de una burbuja.
_ Dick..._ Le llamo al verlo aún ahí de pie, con la cabeza bajada y sin mirar a ningún lugar concreto. El niño no se movió al oírlo, ni dijo nada. Sólo estaba quieto como si se encontrara en otra dimensión.
_ Lo siento..._ Le susurró segundos después y por su voz Bruce supo que estaba llorando.
_ Dick..._ Exclamó Bruce sintiendo una fuerte presión en el pecho. Había sido como un fuerte impacto la voz del muchacho, una que le había perforado el corazón. Y ese dolor no era más que los remordimientos engulléndolo por dentro _ No te disculpes _ Le dijo acercándose a él _ No es tu culpa_ Le aseguró cuando estuvo a su altura y agarrandole los hombros con afecto le continuó diciendo _ Toda es mía, es mi culpa_
_ Bruce _ Repitió este mirándolo. Sus ojos azules estaban rojos por las lágrimas y en ellos se podía ver una gran angustia y dolor.
"Soy un idiota" Se dijo Batman al ver el resultado de sus acciones. El sabía que Dick aún estaba muy sensible por la muerte de sus padres y todo lo que vivió entonces ¿Y él que hacía? Comportarse como un imbécil.
_ Venga..._ Le dijo con ánimo_ No llores más _ Le pidió retirando sus lágrimas con los dedos.
Robin sonrió y le dijo que sí con un movimiento de cabeza.
_ Eso esta mejor..._ Exclamó y luego de sus palabras Dick lo abrazó con fuerza y cariño.
Bruce se sintió petrificado por un momento, no estaba familiarizado con esos actos espontáneos y llenos de afecto. Notó que una oleada de ternura le recorría todas las células del cuerpo, de arriba a abajo como una sacudida interior que llegaba hasta su misma alma.
Y entonces lo único que pudo hacer era corresponder ese abrazo.
***
Minutos después el Murciélago de Gotham se dejó caer derrotado en el sillón de su ordenador central.
Había pedido a Robin que le dejara solo. Necesitaba esa soledad, esa tranquilidad para poner en orden todas sus ideas... Se sentía tan perdido, tan desamparado.
Y sólo recordaba un momento comparable con el cual estaba viviendo. El día que perdió a sus padres, el día que le arrebataron todo, todo aquello que quería en el mundo.
Había decidido abortar y pensaba que eso era lo mejor... pero se había olvidado de algo muy importante ¿Cómo explicar lo sucedido y conseguir así la ayuda que necesitaba?
Como explicar algo que ni el mismo comprendía, ya que carecía de toda lógica... Y era para decir "Mi vida bizarra" Esta situación le hubiera causado gracia, si el embarazado no hubiera sido él.
Y él que nunca había creído en los dioses. Había descubierto que estos existían y hasta que tenían sentido del humor.
Algo retorcido la verdad...
...
Los minutos pasaban y Bruce podía verlo en la pantalla de su ordenador, los números digitales iban cambiando... De una forma lenta, le parecía... mientras los observaba para escapar de todo pensamiento y conseguir la tranquilidad, deseada... esperada.
Añorada.
Una tranquilidad que no sentía desde ese día fatídico en el callejón de la muerte.
"Papá"
"Papá"
Se recordó de niño mirando la cara de su padre "¿Ahí trabajas?" Le preguntó señalando la grande y magnífica Torre Wayne, parecía estar en el tranvía de la cuidad. Nuevo, recién inaugurado.
"No hijo" Le contestó sonriéndole con cariño.
Como añoraba esa sonrisa sincera de su padre... Cuando le veía entonces se sentía tan a salvo, tan protegido. Era como si supiera en ese instante que todo estaba bien, que nada del mundo, ni nadie podía causarle ningún mal.
"No, yo trabajo en el hospital. La empresa la dejo en manos de personas capaces."
"¿Capaces...?"
"Bueno... con mucho más interés"
"Papá"
"¡Papá!" Volvió a pensar, llamándolo, intentando retener aun más esa imagen en su memoria. La imagen de su padre mirándolo, sonriéndole con cariño y ternura... Pero esta se iba alejando, envolviéndolo en la oscuridad, en la absoluta y solitaria oscuridad.
Y en lo más profundo de esta, una voz lo llamaba.
"Bruce"
"Bruce..."
Como un susurro en el viento, suave y calmado... "Bruce Wayne"
_ ¿Quién?_ Exclamo abriendo los ojos, al entender que realmente había oído esas voces y no eran producto de su imaginación.
"Somos nosotras, Bruce..." Le contestó una de esas voces de mujer, pero dentro de su cabeza.
"Sí nosotras, Bruce Wayne..." Le contestó una segunda voz, más fina y delicada.
_ ¡¿Cómo?!_ Gritó este, levantándose de golpe y mirando a todos lados nervioso.
Pero... "Nada"
Ahí no había nadie.
"¡¿Entonces?!" Se preguntó. Movió la cabeza con energía como para quitarse todo eso de su interior. Realmente todos esos acontecimientos le estaban afectando. "Cálmate... Cálmate" Se decía.
"No" Volvió a escuchar en un susurro.
_ Estamos aquí, Bruce Wayne_ Oyó una tercera voz.
Y como por arte de magia una mujer se manifestó delante de él, como por un poder divino. Estaba ahí mirándolo con unos ojos demasiado brillantes para ser humanos. Esta le sonrió y entonces las otras dos mujeres que habían hablado aparecieron detrás de la primera.
_ Bruce Wayne ..._ Dijo la de la derecha y sus cabellos morenos parecían moverse con independencia propia.
_ Hemos venido _ Exclamó la tercera _ Para enseñarte tu futuro_
Batman parpadeó. Y varias veces de hecho.... Eso era como el cuento de los tres fantasmas de Navidad.
"No puede..." Se dijo completamente alucinado "¡No puede ser real!"
_ ¿No te parecemos reales, Bruce Wayne?_Le preguntó la primera, que parecía ser la más joven. Era alta, igual que las otras dos y tenía un cabello fino y rubio y unos ojos azules y luminosos. Hubiera parecido hermosa, igual que sus compañeras, sino fuera por su aspecto severo_ Soy Cloto _ Se presentó.
_ Yo soy Láquesis _ Hablo después la morena.
_ Aisa _ Exclamó la tercera al encontrarse con la mirada de Bruce. Era una joven con los cabellos rojos y brillantes como la sangre e igual que Cloto y Láquesis, sus ojos eran azules y de expresión dura como la piedra.
_ Las moiras..._ Dijo Batman más para sí mismo. Entonces se fijó en sus vestimentas. Túnicas griegas y en cada una de estas estaban bordados los símbolos de cada una de ellas con hilos dorados como el oro.
La rueca, el mundo y las balanzas...
Los símbolos de aquellas que determinan el destino de los hombres.
"¿Quieres ver tu futuro?"
"¿Quieres ver tu futuro, Bruce Wayne?"
"¿Quieres?"
Las voces de las tres mujeres le envolvieron como un manto, eran fuertes y se adentraban en su cerebro provocándole como una especie de hipnosis. Bruce se sentía desfallecer, como si se durmiera... lentamente, despacio.
Adentrándose poco a poco en un profundo y plácido sueño...
Segundos después... Despertó.
Abriendo los ojos, se encontró en alguna otra parte, lejos de la cueva. No reconocía el lugar, era como una explanada, un terreno enorme lleno de desperdicios "Un vertedero" Se dijo.
Miro a todos lados y sólo veía trastos de toda clase: electrodomésticos, coches, motos... cacharros de todos tipos. El olor era nauseabundo y mirara donde mirara todo era basura.
_ ¿Te gusta, Bruce Wayne?_ Le preguntó Cloto apareciendo a su lado.
Batman se apartó de ella en un acto reflejo. Y después de unos segundos le contestó_ ¿Por qué tendría que gustarme?_
_ Porque es tu casa_ Le respondió como si nada.
_ ¡¿Qué?!_ Exclamó sintiendo que su corazón se había detenido ante esas palabras.
_ En realidad lo era hace 21 años..._ Le explicó con una incierta sonrisa en los labios.
_ ¿Pe...Pero cómo es posible?_ Consiguió preguntar en estado de shock... No le cabía en la cabeza que todo aquello antes hubieran sido los terrenos de la Mansión Wayne "¿Qué había pasado?" "¿Y por qué?" Se preguntó sin ser capaz de decir esas preguntas en voz alta. Algo le oprimía en su interior y no era capaz ni de hablar, ni de moverse "De nada" Estaba anulado por la impresión y observando a su alrededor atentamente, empezó a reconocer el terreno... y sentía, viendo lo que tenía delante, que sus ojos le engañaban "¿La Mansión Wayne había...?"
_ Tú... _ Hablo la Moira, deteniendo su inspección _ Tú eres el responsable, Bruce Wayne_ Le dijo mirándolo a los ojos con su mirada antinatural.
Batman se perdió en esos irises, tan buen punto se encontró con ellos. Era como si en ese instante esos ojos fueran lo único que existía en el mundo, en el universo... Sólo esa mirada azul y brillante, que parecía acariciar su alma. Arrastrándola, engulléndola y trasportándola a otra realidad.
Entonces todo a su alrededor cambió. Ya no estaba en ese vertedero. Se encontraba en otro lugar, en las afueras de Gotham.
Una zona marginal dónde sólo mal vivían vagabundos, prostitutas y otros engendros de la sociedad...
Caminó por una de esas calles, por allí sólo había estado cuando perseguía a algún criminal y en ese instante se sentía extraño rodeado de todos esos vagabundos que parecían no ser conscientes de su presencia.
Y más con esas ridículas ropas.
Al llegar a una esquina, se encontró con un individuo de aspecto sucio y vulgar... Era un hombre de la calle y dormía entre cartones, formando una especie de tienda de campaña que apenas le protegía del frío. Tenía una baba larga y descuidada, al igual que sus cabellos que sobresalían de un gorro negro gastado y viejo.
Bruce arrugo la nariz en un acto inconsciente, casi lo había pisado. Pero ese vagabundo parecía no verlo... sus ropas eran un antiguo traje roto por varias partes y una chaqueta gris larga hasta los pies.
Batman lo observó con más detenimiento, le era familiar ese hombre, pero no sabía de que... no conseguía asociar su rostro en ningún lugar conocido.
_ ¿No lo reconoces?_ Le preguntó Lásquesis apareciendo a su lado, del mismo modo que antes lo había hecho Cloto.
Bruce la miró, sin asustarse como antes. Ya se lo esperaba ¿Eso que era?... "¿Una especie de prueba?" Se preguntó, sin saber como actuar y tomarse todos esos acontecimientos.
_ Si lo quieres llamar así..._ Le contestó la Moira, sonriendo mientras se movían sus largos cabellos a voluntad.
_ No es real _ Exclamó mirando todo lo que le envolvía _ Nada de esto es real ¿Verdad?_ Le preguntó sintiendo angustia. No podía serlo.
No era capaz de aceptarlo.
Lásquesis caminó con unos pasos casi felinos hasta llegar a él. Se detuvo delante suyo y inclinando su cabeza hasta llegar a su oído izquierdo, le susurró_ Pero puede serlo, Bruce Wayne... sino pregúntaselo a tu fiel Alfred_
_ ¿Alfred? _ Gimió al comprender que ese vagabundo era su mayordomo.
"¿Cómo es posible?" Se preguntó completamente desbordado por el descubrimiento, se giró y miró a ese hombre ... y al mirarlo con más detenimiento, reconoció a Alfred "¿Pero cómo?"
_ No, no puede ser..._ Se dijo a sí mismo sin poder apartar los ojos. Sus latidos eran salvajes y su corazón le dolía por la angustia de esa imagen. "Yo nunca permitiría algo así".
"Nunca"
_ Digamos que no puedes hacer nada_ Le dijo la Moira y tras sus palabras...
Todo se modificó de nuevo, como sí de una nube de humo se tratara, todo se esfumo delante de sus ojos. Hasta formarse en otra imagen diferente... extraña.
Desoladora.
Era Gotham City, podía reconocer su ciudad, pero estaba totalmente cambiada, la suciedad y el desorden la dominaban, parecía uno de esos poblados de películas de terror. Con pintadas en casi todas las paredes, destartaladas y malogradas por ves a saber que... coches rotos o quemados invadían las aceras con farolas y carteles de comercios destrozados.
Esa no podía ser su ciudad... "Es imposible" Se dijo mirando con atención hacia todos lados "Imposible" Se repetía sin creer lo que le mostraban sus ojos, todas esas imágenes se agrupaban en su interior y le hacían sangrar: Alfred, la Mansión ... Gotham
No podía, no era posible que fuera real... "Mentira" Gritaba su conciencia, pero algo en su interior le decía que todo aquello era la verdad.
"Pero... ¿Por qué?"
_ ¿Qué te parece, Bruce Wayne?_ Apareció Aisa a su lado, con sus rojos cabellos ondulándose por culpa del aire de la ciudad.
Batman no le hizo el menor caso, esa visión lo tenía atrapado como si estuviera viviendo una terrible pesadilla de la cual no era capaz de despertar... podía ver como la ciudadanos de Gotham vivían con miedo, como la delincuencia dominaba el día a día. Esas visiones que se manifestaban como de una pantalla de televisor se tratara, le enseñaban todo por lo que había luchado "¿Y dónde había quedado su misión?"
"¿Dónde estaba él?"
"¿Y sus compañeros?"
_ ¿Compañeros?_ Exclamó la Moira como si esas preguntas hubieran sido expresadas en voz alta _ No tienes compañeros, en el futuro no existirán los héroes..._ Le explicó cuando este se giró para observarla.
_ ¿Y cómo es posible eso?_ Le preguntó alterándose por momentos "¿Cómo que no habían héroes?" "¿Y la JLA?”... “¿Y Wonder Woman?"
"¡¿Y Clark?!"
_ Mira...._ Le respondió señalándole algo detrás de él _ Mira la consecuencia de tus actos, Bruce Wayne..._
El Murciélago se giró con miedo, una ansia feroz se acumulaba en su pecho "La consecuencia de mis actos" Escuchó de nuevo esa afirmación en su cabeza, pero expresada por su propia conciencia que se revolvía en su interior como el mar en plena tormenta.
Sus ojos se abrieron de par en par, como si antes no los hubiera tenido abiertos realmente "No" Se dijo negando esa imagen "No es cierto" Se intentó engañar, pero cuando sintió que sus ojos se humedecían por culpa del dolor... se dio cuenta de que esa visión era tan real como el mismo.
La policía perseguía un joven de unos veintitantos años, el muchacho huía de un atraco a mano armada, en su huida había matado a un joven policía.
"Comisario Gordon..." Pudo escuchar la voz que salía de la radio policial del coche patrulla " El ladrón es el famoso Robin, ya está confirmado..."
_Bien..._ Exclamó este desde el volante del coche _ Esta vez lo atraparemos y pagará por todos sus crímenes_ Continuó diciendo sin perder la vista del coche robado que perseguía.
...
_ ¿Quieres ver más, Bruce Wayne?_ Le preguntó Aisa en un susurro en el oído.
Batman tembló intentando controlar sus emociones, pero estas ya estaban descontroladas "¿Cómo es posible?" Se preguntaba sintiendo el calor de sus propias lágrimas quemándole el rostro.
_ ¡No!_ Pudo gemir al fin. Y esa negación pareció ser el llanto de su propia alma _ Dick no..._ Exclamo pero su voz se perdió por la fuerza de su angustia.
_ No te mostrare más..._ Le volvió a susurrar, deshaciendo la imagen al mismo tiempo que expresaba esas palabras _ Pero debes saber, Bruce Wayne, que esos fueron los últimos minutos de vida de tu amado Robin_
_ ¡NO!_ Gritó intentando no asimilar esas palabras, cerrando los ojos con fuerza como para así escapar de esa realidad. Pero su imaginación le hizo una mala pasada y en la profundidad de su mente, vio como su muchacho moría de una bala en el centro de su cabeza y caía desplomado en el frío asfalto.
_ No lo niegues, Bruce Wayne, sabes que es verdad. Al igual que ya no existirán héroes, porque no tendrán la inspiración y un ejemplo a seguir. Y así sus valores se perderán por la corrupción que les rodea_
_ ¿Cómo?_
_ ¿Cómo?_ Repitió con cierta burla _ ¿Quieres ver a tus amigos?_ Le preguntó y con un movimiento de mano, fue formando imágenes intercaladas... Y en ellas los reflejos de aquellos que un día formaron la JLA.
_ Diana_ Le dijo la Moira y en la imagen contempló una mujer vieja y de aspecto triste _ El sentimiento de culpa la consumió y por eso se aisló en su Isla..._
_ ¿Culpa? _ Exclamó Bruce sin creer que esa anciana fuera Wonder Woman.
_ Oliver Queen _ Continuó su explicación sin hacer caso a la pregunta del Murciélago_ Se puso a trabajar como cualquier otro mortal y se olvidó de sus ideales..._ Y le mostró con otro movimiento de mano a un hombre algo obeso trabajando en un supermercado.
Batman sólo pudo parpadear incrédulo... Ese no podía ser Green Arrow.
_ Y tus otros camaradas Hal, Dinah y Wally... murieron por intentar salvar a la humanidad _ Y tras esas palabras algo irónicas de Aisa, le enseñó los cadáveres de Green Lanter, Black Canary y Flash junto con otros civiles asesinados por alguna amenaza terrorista.
Bruce apartó la vista, no podía ver eso... no podía aceptarlo, era demasiado duro, demasiado macabro para ser cierto. La presión de su pecho no le dejaba respirar y le dolía el estómago por los nervios. Sus lágrimas se habían secado por la angustia. Sentía tantas cosas que no podía consigo mismo.
_ ¡¿Y yo?! _ Le preguntó mirándola con incertidumbre _ ¡¿Qué fue de mí?! ¡¡¿Y por qué soy el responsable?!!_
_ ¿Quieres ver tu futuro, Bruce Wayne?_ Le contestó con otra pregunta y con otro movimiento de sus manos, le mostró la tumba de sus padres.
_¿Qué?_ Dijo Batman al ver aquello.
_ Mira _ Exclamó ella _ Mira con más atención_
Y La imagen fue creciendo y acercándose, enseñándole más aquello que tenía que ver. Las tumbas no eran dos, sino tres.... Y la tercera era la suya.
_No_ Gimió Bruce sin poder decir más ¿Cómo que estaba muerto? ... y "¿Por qué?"
Contempló con más detenimiento su lapida, era igual que la de sus padres. Sólo que en ella estaba su nombre grabado... Ponía su fecha de nacimiento y la fecha de defunción...
_ ¿Dentro de un año?_ Preguntó más para sí mismo.
_ Aja... _ Le contestó la Moira _ Cuando abortes te darás cuanta de lo que has realizado. Al ver a tú bebé muerto de cuatro meses... Entrarás en depresión por que te sentirás como un asesino y eso te hará perder toda voluntad de seguir adelante. Sentirás que has manchado la memoria de tus padres, ya que ellos no estaban de acuerdo con matar por ninguna razón. Y por eso entrarás en una cadena de autodestrucción que te hará perder todo lo que conocías. Tus empresas entrarán en bancarrota... Batman desaparecerá y tú te suicidarás._
_ ¿Suicidarme?_ Eso si que no le cabía en la cabeza "Jamás haría algo así".
_ Con la pistola que mató a tus padres_ Le respondió la Moira, atravesándolo con la mirada.
"Con la pistola que mató a tus padres"
"Con la pistola que mató a tus padres..."
Esas palabras parecieron perforar su cerebro, Bruce sólo pudo negar con la cabeza. No era capaz, no podía creer esas palabras. "No podía ser verdad" Pero estas resonaban con fuerza en su interior... y algo le decía que eran reales...Muy reales. Todos cayeron en desgracia por su suicidio... Dick por ser el que lo encontró muerto en su despacho. Alfred por no poder hacer nada por él, ni por el muchacho ... Diana por el sentimiento de culpa que la consumía, Ollie por no saber ayudarlo ... igual que sus otros camaradas. Y Clark...
"¿Clark?"
La imagen del cementerio de Gotham se dibujo en su mente. Perecía ser un día de primavera, la brisa suave envolvía el clima y las plantas y árboles estaban en flor... Unos pies se pararon delante de su tumba, el hombre se agachó y con una de sus manos acarició el nombre de Bruce Wayne con cariño.
Entonces le vio la cara "Era Superman" Clark le había traído flores... Su aspecto no estaba muy cambiado al de ahora, pero algunas canas bañaban sus negros cabellos y sus ojos parecían tener unas ojeras permanentes. Parecía triste.
Dejó unas rosas rojas debajo de su nombre y cerrando sus ojos por unos instantes le dijo como si él estuviera en ese momento presente "Hola mi amor, hoy nuestra hija hubiera cumplido 21 años"
"Espero que estés bien allí donde estés..."
...
"¿Cómo?" Se preguntó sintiendo un nudo en el estómago y un puño en el corazón "No, no, no..." Sólo podía pensar intentando apartar esa visión de delante de sus ojos.
Pero esta no se iba, todo lo contrario... se volvía más nítida, más real.
Más dolorosa.
"Él nunca te dejó de amar, Bruce Wayne... “ Escuchó la voz de Aisa como un susurro en el visto.
"No estuvo con ningún otro..." La volvió a oír.
"Siempre pensó en ti"
"Siempre"
Continuará...
¡Hola a todos!
Espero que les guste el Capitulo ^^
Aclaraciones:
*Las Moiras son seres pertenecientes a la mitología griega (su equivalente romano son las Parcas o Fatum). Aunque se las reconoce en ciertos pasajes como hijas de Zeus y Temis, es más probable, sin embargo que sean hijas de Nix, la Noche, diosa que concebía por sí sola (Teogonía de Hesíodo).
Las Moiras son tres, Cloto, Láquesis y Átropos o Aisa, "la que hila", "la que asigna el destino" y "la inflexible". Son la personificación del destino, y su misión en el horizonte mitológico griego, es la de asignar el destino a los seres que nacen, deparándoles suertes y desgracias.
Como diosas del destino velan porque el destino de cada cual se cumpla, incluyendo el de los propios dioses. Asisten al nacimiento de cada ser, hilan su destino y predicen su futuro. Se las representaba como tres mujeres de aspecto severo: Cloto, con una rueca; Laquesis, con una pluma o un mundo y Átropos, con una balanza.
En los orígenes del mito estos espíritus estaban relacionados con el nacimiento. Ya que en el momento del nacimiento decidían cuál iba ser la vida del nacido, predestinaban sus actos y el momento de su muerte. Posteriormente el mito evolucionó a la forma que conocemos de las tres hermanas. El destino era determinado mediante un hilo de lana blanca o dorada, para los momentos de felicidad, o de lana negra, para los momentos de dolor. La más joven, Cloto, preside el momento del nacimiento y lleva el ovillo de lana con el que va hilando el destino de los hombres; la segunda en edad, Láquesis, enrolla el hilo en un carrete y dirige el curso de la vida y la anciana Átropos, la propia Parca, coge del carrete el hilo de la vida y lo corta con sus tijeras de oro, sin respetar la edad, la riqueza, el poder, ni ninguna prerrogativa, y así ésta llega inevitablemente a su fin.
*Cloto: En la mitología griega, Cloto (en griego Κλωτηω Klōthō, de klōthein, «hilar») es la más joven de las tres Moiras, hijas de Zeus y Temis que presidían el destino del hombre, pero una de las diosas griegas más antiguas. Su posición era la primera de los Tres Destinos, pues era Cloto quien hilaba las hebras de la vida con su rueca.
También se creía que era la hija de Nix (la Noche), para indicar la oscuridad del destino humano. Su equivalente en la mitología romana era Nona.
*Láquesis: En la mitología griega, Láquesis (Lakhesis - Λάχεσις "la que tira la suerte"; del griego λαγχάνω - obtener por suerte, o por regalo de los dioses) es la segunda de las tres parcas, o moiras. Determina el futuro de las personas.
Es ella quien decide la longitud del hilo de cada una de las vidas humanas y, por tanto, la duración de la vida correspondiente a cada persona.
Láquesis es representada como una matrona desenrollando una tira de papel en la que está escrito el destino de los humanos; otras representaciones la muestran como una mujer vieja, coja y fea
*Átropos o Aisa: En la mitología griega Átropos (en griego o48;τροπος, ‘inexorable’ o ‘inevitable’), a veces llamada Aisa, era la mayor de las tres de las Moiras, quien elegía el mecanismo de la muerte y terminaba con la vida de cada mortal cortando su hebra con sus «aborrecibles tijeras». Trabajaba junto con Cloto, quien hilaba la hebra, y Láquesis, quien medía su longitud. Las tres eran hijas de Zeus y Temis, diosa del orden, o de Nix, la de la noche. No está claro si Zeus era superior a las Moiras o si estaba sujeto a ellas igual que los mortales. Su equivalente en la mitología romana era Morta (‘Muerte’).
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Zoe Wayne