Era apenas el comienzo de la semana. Para ser exactos el lunes 27 de Octubre, y de uno de los departamentos de aquel lujoso edificio salían varios ruidos, se estaba dando una riña entre una de las parejas mas famosas de todo Japón.
¡Yuki! Por favor, te juro que te vas a divertir.- El mas joven no se había cansado de rogarle desde hacía un poco mas de una hora.
Ya había usado todos sus métodos de persuasión desde los ojitos de cachorro, los lloriqueos o la persuasión sexual y el rubio aún no cedía.Había llegado a un punto en que simplemente se negaba a perder la discusión.
Ya te dije que no, mocoso. ¿Cuántas veces más te lo tengo que repetir?- Dijo esto logrando al fin empujarlo fuera de su estudio y cerrar la puerta en su cara.
El cantante se sentó recargado en la puerta, hasta cierto punto se podría decir que estaba mas que acostumbrado a este tipo de actitudes.
Sin embargo no se iba a dar por vencido tan fácilmente esta vez. En realidad tenía muchas ganas de que Eiri le acompañara a la fiesta este año.
La fiesta de Halloween de NG era ya toda una tradición entre los empleados y artistas perteneciente a la disquera, aparte de las múltiples celebridades que eran invitadas.
Había un concurso de disfraces, que era considerado uno de los mejores concursos de aficionados también la comida y el entretenimiento eran siempre de primera.
Este año era aún mas especial pues Bad Luck sería el artista principal del evento, ya que la banda estaba en plena promoción de su nuevo disco.
Anda Eiri, en verdad quiero que me acompañes.- Guardó silencio, esperando una respuesta y aún nada- No tenemos que quedarnos toda la fiesta, Yuki en serio tengo que ir y...-El mejor de los argumentos había cruzado su mente.- Esta bien Eiri, si no quieres ir le llamaré a Sakuma-san para pedirle que me acompañe.
Esperaba escuchar una respuesta cuando de improviso la puerta de la habitación se abrío violentamente tirando al chico recargado al piso. - ...Esta bien...lo voy a pensar..-Dijo el rubio mirando al chico con fastidio.
- ¡Gracias Yuki!- El cantante se levanto de un salto y se le colgó a su amante en un abrazo, mientras el mayor se tragaba su enojo.
Finalmente el mocoso le había ganado, y tendría que presentarse en aquella estúpida fiesta.
No olvides que tienes que pensar en muy buen disfraz eh Yuki, - dijo el chico a la vez que soltaba el abrazo y salía corriendo por el pasillo hacía la habitación.
Yo no dije nada de usar un estúpido disfraz- cortó el rubio- Pero Yuki, no seas aguafiestas, podemos inclusive coordinar los disfraces, que dices?- Se notaba la emoción en el tono de voz del cantante. No abuses de tu suerte mocoso...- El rubio termino la discusión con el sonido de la puerta del estudio cerrándose.
Al final Shuichi se sentía satisfecho de haber logrado que el rubio le acompañara “voluntariamente” a la fiesta, ahora solo había que pensar en el disfraz perfecto para usar, tomando rápidamente sus cosas salió del departamento corriendo.
Ya llevaba media hora de retraso para el ensayo del espectáculo que harían en la fiesta y le sorprendía que K aún no hubiera llegado a su departamento amenazándole con una de sus metralletas.
Yuki escuchó a su amante salir del departamento, su inspiración se había ido y estaba empezando a frustrarse por no encontrar las palabras adecuadas para sus personajes.
Decidió guardar el archivo,sin poderlo evitar su mente comenzó a pensar en la dichosa fiesta del viernes, y cuando una buena idea surco su mente decidió hacerle una llamada a una vieja amiga que actualmente era una reconocida maquillista del cine japonés.
Si tendría que disfrazarse no lo haría patéticamente, de eso estaba seguro.
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La semana pasó rápidamente y llegó la noche del viernes había llegado. Shuichi apenas y había tenido tiempo de ver a su amante durante la semana pues había estado todo el tiempo en los ensayos y no tenía ni la mas mínima de idea del disfraz que usaría Yuki, ni siquiera estaba seguro de que usaría cualquier cosa para la fiesta fuera de su acostumbrado atuendo.
Al final no pudo evitar sonreír, su amante vendría a la fiesta y esa era la parte que contaba.
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Yuki estaba harto, llevaba sentado en aquella incómoda silla una hora y durante los últimos 15 minutos no había dejado de preguntar cuanto faltaba para que le dejaran la cara en paz.
¿Ya?- Dijo el rubio por décima vez.
No recordaba que fueras tan desesperado Eiri-san , bueno solo unos toque mas...y, listo vaya en serio has quedado igualito! – La chica sonrío, orgullosa de sí misma por su trabajo.
Yuki se miro en el espejo, estaba satisfecho con la imagen que este le devolvía, sin más se levanto y tomo el disfraz que estaba colgado para él.
Definitivamente había aplicado eso de sacar lo bueno de las malas situaciones y esta noche sería bastante entretenida.
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Shuichi había llegado al evento junto con la banda. Ahora estaba tras bambalinas ya que ningún miembro de la banda podía salir hasta que su presentación se terminara, hasta entonces podrían estar con los demás en la fiesta.
Le había mandado varios mensajes a Yuki sin embargo aún no le había contestado, le preocupaba que su amante no llegará a tiempo para ver la presentación en la que había trabajado durante toda la semana.
-Tienen 10 minutos para salir chicos- dijo K, mientras interrumpía por un momento la conversación que entablaba con los encargados del lugar.
-¿Estas bien Shu?- El guitarrista revisaba la afinación de su guitarra, pero no podía evitar ver como su amigo iba y venía nerviosamente de una esquina del cuarto a otra, revisando su celular constantemente.
-No he podido comunicarme con Eiri en todo el día, espero que no se vaya a perder nuestra presentación- decía el cantante a la vez que revisaba otra vez su celular en busca de alguna respuesta por parte del rubio.
-No creo que se la pierda Shuichi, tu mismo dijiste que el había aceptado venir.-Con este argumento, El pelirrojo se levanto para animar a su amigo a subir con el al escenario, su presentación estaba a punto de comenzar y el tecladista como siempre ya estaba listo esperándoles.
La disquera había elegido vestuarios de visual kei para los tres integrantes de la banda, estilo que iba bastante bien con la fiesta de Halloween pero les daba un toque elegante.
Todos compartían un look similar: con maquillaje gótico, ropa negra ajustada y botas altas. Habían tenido que practicar mucho con el vestuario pues ninguno de ellos estaba acostumbrado a moverse en el escenario con ese tipo de atuendo.
Las luces del salón se apagaron, y las voces que antes platicaban animadamente se fueron extinguiendo dando paso al sonido de teclado y guitarra. El escenario fue iluminado y la interpretación de la banda comenzó causando gran emoción entre el público.
Mientras cantaba Shuichi no podía evitar buscar a Yuki con la mirada, se movía de un lado a otro sin embargo no lo veía por ningún lado. No pudo evitar sentirse bastante decepcionado.
Durante las siguientes 3 canciones que interpretaron el cantante mantuvo la vista en un punto fijo, sin embargo se sentía extrañamente incómodo. Finalmente llego a la conclusión que esto se debía al enojo tan grande que sentía en ese momento.
Una vez que acabo la interpretación, los 3 integrantes pudieron bajar a la fiesta.
Tan pronto el cantante puso un pie fuera del escenario fue atacado por un sorpresivo abrazo que lo tumbo al piso.
-Shuichi!! Has cantado tan bien!!, las nuevas canciones son taan buenas, ¿ quien elegió los disfraces? te va muy bien el visual kei!!- Ryuchi quien portaba un traje de pirata, hablaba tan rápido que el pequeño chico no lograba poder contestar nada de lo que se le preguntaba.
-Sakuma-san, me estas aplastando- alcanzó a decir el chico que estaba tumbado aún el piso con el emocionado cantante encima. Alguna personas ya los veían con ojos reprobatorios y murmurando.
-Que? Ah si! Jaja disculpa Shuichi todo el espectáculo me ha emocionado mucho- Finalmente se levanto ayudando al otro quien no podía levantarse por sí mismo entre tanto vestuario.
Cuando estaba acabando de acomodarse sintió su celular vibrar y desesperado contesto esperando que fuera Eiri. -
-¿Yuki?- contesto al fin, cuando dio con el teléfono oculto bajo la ropa.
-¿Esperabas a alguien mas?- la voz irónica del rubio resonaba del otro lado sin rastro alguno de arrepentimiento.
-Me prometiste que vendrías Eiri- dijo con resentimiento -
-Dije que lo pensaría...- contesto secamente el rubio.
-En realidad quería que vieras la presentación- al cantante se le notaba decepción marcada en la voz.
-Necesito que vengas al departamento, es urgente.- El rubio se sentía mal por entristecerlo pero sabía que valdría la pena, solo tenía que seguir el plan al pie de la letra.
-¿Estas en el departamento?, ¿por qué estas marcando de tu celular entonces?- A Shuichi algo no le sonaba bien.
-No hagas preguntas tontas, es urgente.-Antes de que el interrogatorio arruinara todo, el rubio colgó el teléfono dejando al chico con la rabia contenida.