Era una soleada mañana de viernes, Jake Long miraba por la ventana de su habitación hacia la calle, camino hacia su escritorio y tomo una pequeña caja de madera, la abrió y dentro de ella había una pequeña figura de un dragón de color dorado, a un costado de la caja había una pequeña manivela para darle cuerda, giro la pequeña manivela por unos momentos después una dulce melodía lleno la habitación de Jake, después unas lagrimas comenzaron a brotar de los ojos del joven Jake.
Aquel chico ya había esperado demasiado tiempo, pero Jake, aun sentía algo por ese joven alto y de cabello castaño, anqué ya hacía tiempo que no lo veía por una relación que había iniciado con alguien más, ahora Jake se sentía completamente solo, aun extrañaba a Spud el quería estar con él.
Su relación solo había durado seis meses, pero para Jake le parecía muy poco tiempo, el vacio que sentía dentro de el, aun no podía llenarlo con nada ni con nadie. Jake aun esperaba que Spud fuera a visitarlo a su hogar, llevándole algunas rosas, como lo hacia todos los viernes, pero el no aparecía.
La dulce melodía de la caja había terminado, y el Jake se limpio sus lagrimas, aquella mañana de viernes, Jake decidió dar un paseo para poder distraerse un poco, el caminaba por un parque mirando las hojas de los arboles, Jake no se dio cuenta de que solo unos metros más adelante, se acercaban hacia el dos jóvenes, se percato de ellos solo cuando reconoció a esos chicos, sintió un horrible escalofrió que recorrió todo su cuerpo, era su amado, era Spud que tomaba de la mano a su enemigo quien se la pasaba molestándolo en la escuela, el estaba con Brad Morton. Spud miro por un segundo a Jake, pero volvió su vista a su acompañante y lo beso en los labios, Jake no pudo contener el dolor que sintió en su corazón, comenzó a llorar y corrió a su casa.
Spud no podía creer lo que él había hecho a Jake, la crueldad de esa acción despertó una horrible sensación nacida en su pecho, la culpa invadía todo su ser, no sabía lo que debía hacer ahora, sentía que aun amaba Jake, lo amaba desde el día en que se conocieron. Jake corría lo mas rápido que podían sus piernas, estaba perdiendo el aliento, se detuvo para tratar de recuperarse, el dolor que sentía en su alma era lo más insoportable que podía sentir jamás, el dolor que sentía al recordar a Spud y a Brad juntos le provocaba una herida en el corazón de Jake, a cada minuto se hacía mas grande.
-¡Alas de dragón!-. Grito Jake y unas hermosas alas de color rojo aparecieron en su espalda, el chico levanto el vuelo, podía sentir el viento golpeando su rostro, quería llegar lo mas rápido posible a su casa.
Las lagrimas de Jake recorrían sus mejillas mientras veía una fotografía de él y Spud, la herida que tenía en el corazón ahora eran mas difíciles de cerrar, los recuerdos de su relación con Spud iban y venían de su mente a su mente, lastimándolo aun mas, recordaba el día en que inicio la relación con el chico que aun amaba, era un día como cualquier otro en esa escuela, Jake empezó a sentir algo de atracción por un joven que fue su mejor amigo desde hace mucho tiempo, tal vez seria algo pasajero, algo de la pubertad, algo que tal vez se le pasaría, pero no era así, esa atracción iba creciendo segundo a segundo.
No sabe como paso, solo ocurrió, los dos jóvenes se encontraban patinando como lo hacían siempre, Spud se sorprendía por los movimientos que hacia Jake, por un pequeño impulso, Spud quiso imitar los complicados movimientos de su mejor amigo, por un ligero tropiezo, Jake y Spud chocaron entre si, Spud cayó encima de Jake, los ojos de Spud estaban cerrados por el dolor de la caída, pero Jake, pudo apreciar mejor su rostro, aun que Spud estaba maldiciendo y diciendo las peores palabras que conocia, parecía un ángel, jake sintió su corazón latir más rápido, el calor que sentía del cuerpo de Spud le agradaba, no le molestaba ni en lo más mínimo, algo dentro de él le ordenaba acariciar el cuerpo del joven de cabello castaño, metió su mano debajo de la camiseta y comenzó a acariciar el abdomen de Spud, el se dio cuenta y tomo el brazo de Jake apartándolo de su abdomen.
-¿Qué haces?-. Le pregunto Spud.
-N… nada, solo….
Jake no encontró palabras para explicar a su amigo lo que le había ocurrido, Spud solo pudo apreciar el rostro de Jake que se sonrojaba, y algo que llamo su atención en la entrepierna del joven de cabello verdoso, Jake se dio cuenta de en donde estaba la mirada de Spud se dio la vuelta tomo su patineta y se alejo corriendo, Spud se quedo ahí, algo sorprendido y con una serie de sentimientos encontrados.
Spud, llego a su hogar pensando en Jake, aun no podía sacarse de su mente la caricia que había recibido del joven dragon, había una sensación dentro de el, tenia una fuerte necesidad de estar con su amigo quería estar con Jake, no con nadie más.
Jake se encontraba dando vueltas por su habitación, no podía quitarse al joven castaño de su mente, también el tenia una gran necesidad de estar con Spud.
-Demonios, ¿Qué me ocurre?-. Se preguntaba Jake.- Es mi mejor amigo, y demás es un chico, ¿Por qué tengo este sentimiento? ¿Me estaré enamorando de el?
Jake se recostó en su cama siguió haciéndose la misma pregunta hasta quedarse dormido. El amanecer había llegado, pero Jake no sabía que también muchas sorpresas le esperarían ese día. Spud había llegado al salón de clases, no saludo a nadie ni siquiera volteo a ver a Jake, solo tomo asiento y nada más, Jake quería hablarle, pero las palabras no salien de su boca, no sabía cómo explicarle a Spud lo que había pasado, escribió una nota en un trozo de papel de su cuaderno aguardo a que la campana sonara para salir a su descansó, el tiempo pasaba muy lento, pero al fin llego la hora, el sonido de la campana alarmo un poco a Jake, lo puso un poco nervioso, pero al fin se levanto de su asiento, y dejo la nota encima de la mesa de Spud, después solo salió del salón de clase sin decir nada.
Spud miro el trozo de papel que el joven de cabello verdoso le había dejado, la tomo con cuidado, desdoblo el papel, el cual decía: “QUISIERA HABLAR CONTIGO HACERCA DE LO QUE OCURRIO AYER, TE ESPERO EN EL CAMPO DE FUTBALL”.
Spud no se hizo de esperar, llego de inmediato, y ahí lo esperaba Jake, Spud llego frente a él, pudo observar como el joven de cabello verdoso se sonrojaba levemente.
-Bien aquí estoy, ¿de qué querías hablar?-. Pregunto Spud.
-Solo quería decirte que siento lo que paso ayer, no era mi intención acariciarte así, es solo que…
Ocurrió así de repente, de un momento a otro estaba rodeado de los brazos de Spud, el joven de cabello verdoso, quedo sorprendido, no sabía cómo reaccionar a lo que Spud estaba haciendo.
-Todos creen, incluso tu que soy algo distraído y algo tonto, pero no es así, ayer me di cuenta de todo lo que estaba pasando, se que te gusto, y tu… la verdad… a mí también me gustas, se que ambos somos hombres, pero tal vez, podamos tener algo que sea más que solo amistad, claro siempre que tu quieras.
Jake no podía creer las palabras que escuchaba de Spud, quien comenzó a abrazar y acariciar el cuerpo del joven dragón, después de un momento, Spud introdujo su mano dentro del pantalón del chico, este dio un fuerte gemido, cuando, aquel joven alto comenzó a dar un suave masaje a su miembro.
-S… Spud, n…no-. Decía Jake con mucha dificultad, la descarga de placer que le daba el masaje le impedía hablar con facilidad.
-¿Te molesta?, perdón, fui un idiota-. Dijo Spud algo decepcionado mientras sacaba su mano de los pantalones de Jake.
-No es eso, solo que esto es algo extraño, como dijiste somos hombres, y la verdad yo…
Spud cayó a Jake con un beso, el intento oponerse, pero no lo consiguió, se rindió ante el sabor del beso que Spud le dio, la lengua de Spud intentaba colarse en la boca del dragón, al cabo de un segundo lo logro y se toopo con la de Jake, después de un minuto, el minuto que Jake no quería que terminara se separaron.
-Bien, ¿Qué te pareció?-. Pregunto Spud a Jake.
-Bueno, demasiado bien, para ser mi primer beso-. Respondió Jake sonriéndole.
-Bueno, sé que esto tal vez se escuche estúpido pero tengo una pregunta para ti, bueno, ¿Qui…quisieras ser mi, mi n…novio?
-Claro que quiero serlo-. Respondió el joven de cabello verdoso sin hacerse esperar, una gran felicidad invadía su cuerpo, este era el día más feliz de su vida.
Jake regreso de aquel recuerdo, aun lloraba, aun quería estar con ese joven que fue su primer amor verdadero.
Spud planeaba ir a ver a Jake, pero, no sabía cómo disculparse de lo que le había hecho, “¿oh si lo sé?” pensó, se despidió de Brad, inventándole algún otro compromiso, Brad lo entendió, y lo dejo ir, Spud corrió a comprar algo que sabía que podría gustarle mucho a Jake algo que siempre lo alegraba cuando recibía ese regalo.
Entre más intentaba dejar de pensar en Spud, mas lo recordaba, aun recordaba en los días en que se citaban para estar juntos, otro recuerdo comenzaba a recorrer la mente de Jake, uno muy especial de ellos dos. Aquel día, Spud invito a comer a Jake a su casa ya que sus padres no estarían en todo el día y toda la noche, ese día sería muy importante para ellos, ambos caminaban tomados de la mano hacia el hogar de Spud, no les importaba lo que la gente hablaba, solo el amor que ambos sentían era suficiente para ellos.
Spud había preparado la cena antes de llegar a su casa con su pareja al llegar ahí, Spud le dijo a Jake que le daria algo especial para él, se lo entregaría después de cenar, cuando terminaron, llevo al dragon a su habitación, al llegar, Spud tomo algo que se encontraba en su cama, era una pequeña caja de madera que encima tenia grabado las letras: J Y S, Spud, se acerco lentamente a Jake, depositando la caja en sus manos.
-Esto es especial para ti, representa el amor que nos tenemos, anda ábrela, se que te gustara.
Jake abrió la caja y de ella emergió un dragón de color dorado, le dio cuerda con la pequeña manivela y después comenzó a emitir una dulce melodía, al término de esta Jake abrazo con gran fuerza a Spud, el chico de cabello castaño tomo de la cintura a Jake, un brillo especial se reflejaban en los ojos de Spud, sonrió levemente y llevo una de sus manos hasta el trasero del joven dragón.
Jake presentía lo que Spud quería hacer, aun no se sentía preparado para aquel paso tan importante para su vida, intento alejarse un poco del chico de cabello castaño caminando hacia atrás, pero quedo acorralado al quedar en medio de la pared y Spud, el corazón de Jake comenzó a latir más rápido, Spud se acerco mas al joven dragón, lo abrazo y comenzó a besarle el cuello mordiéndolo de vez en cuando, Jake daba pequeños gemidos tras sentir las sensaciones que los besos de Spud le daba el dragón dejo la caja en una mesa que estaba a su lado y sin pensarlo, Jake comenzó a acariciar lentamente el abdomen de Spud, mientras el introdujo ambas manos dentro de su pantalón, acariciando nuevamente su miembro, el rostro de Jake, se torno de un color rojizo al sentir la mano de Spud, la pasión estaba dejando atrás su sentido de la razón, era tiempo de demostrar de verdad cuanto se amaban, Spud comenzó a quitarle la camisa a Jake, lo recostó en su cama y se postro encima de él, Spud comenzó a lamer su pecho, recorriéndolo con su lengua hasta el cuello, después el mismo se quito su camisa, dejando al descubierto su abdomen plano.
-¿Te gusta lo que ves?-. Pregunto Spud a Jake con una voz muy seductora.
Jake solo asintió, por lo nervioso que estaba, no podían salir las palabras de su boca, Spud comenzó a quitarle los pantalones a Jake, dejando ver su erección, Spud comenzó a lamer el miembro de Jake, el solo gemía por la descarga de placer que le producia, Jake aun no podía creer que esto estuviese pasando, pero dejo ese pensamiento dejo aparte, Spud se desabrocho su pantalón, tomando su miembro en sus manos y estimulándose a si mismo mientras aun lamia la erección de Jake, después tomo el miembro del joven de cabello verdoso con la mano y comenzó a darle un masaje que inicio lento, pero iba aumento la velocidad a cada segundo, Jake no pudo más y derramo su liquido en la mano de Spud y en parte de su abdomen, Spud lamio el semen de su mano, después, el resto que había manchado el pecho del dragón también lo limpio con su lengua.
-¿Te gusta?-. Pregunto Spud.
- S…si.
Jake llevo su mano hacia el miembro de Spud haciendo el mismo masaje que él le había hecho, Spud comenzaba a respirar entrecortadamente, por la sensación que sentía, Spud llevo su mano derecha hacia la nuca de Jake dirigiéndolo hacia su erección, Jake introdujo a su boca el miembro de Spud y comenzó a lamerlo lentamente, el joven de cabello castaño lo estaba disfrutando.
Spud recostó nuevamente a Jake e hizo que se diera vuelta quedando boca abajo, Spud tomo un preservativo de un cajón, lo saco de su empaque y lo coloco cuidadosamente en su miembro, Jake estaba algo asustado por lo que seguía, pero no podía pedir que se detuviera, Spud noto el miedo que se reflejaba en el rostro de su pareja.
-Cálmate, solo relájate-.dijo Spud.
Empezó a penetrar a Jake lentamente para no lastimarlo, pero aunque fuese lo más despacio posible aun le causaba dolor al joven dragón, Spud termino de introducir su miembro en Jake y espero unos momentos para que el dragón se acostumbrase a esto, después comenzó a dar un va y ven lento, que después comenzó a aumentar de velocidad, Jake no podía ocultar el dolor que le daba la intromisión de Spud ya que daba unos fuertes gemidos de solor, pero después de un momento el dolor comenzó a desaparecer dejando en su lugar un placer que jamás había sentido, le agradaba, los gemidos de Jake cambiaron de ser de dolor a ser de placer, los dos jóvenes comenzaron a sudar por el aumento de temperatura en sus cuerpos, en realidad era el momento más importante en su vida, Spud ya no pudo soportar más y termino, Spud se recostó en su cama y se retiro el condón de su miembro, pero lo jalo bruscamente haciendo que se rompiera y que derramara su liquido en sus dedos, Jake sin pensarlo, tomo la mano de Spud y comenzó a lamer los dedos en los que se había derramado el liquido tibio de color blanquizco.
Jake aun no podía dejar de llorar, el creyó que en aquellos momentos en que se entrego a Spud serian los que sellarían su amor para siempre, pero eso no fue así, los días con el joven de cabello castaño siguieron pasando, después semanas, luego meses, después de seis meses Spud comenzó a comportarse de manera extraña, se distraía mucho mientras estaba con Jake, algo estaba ocurriendo.
Aquel día, Spud salía de clase, Jake lo estaría esperando en el patio de la escuela para ir juntos al cine, pero antes tenía que ir al sanitario, Spud no se dio cuenta de que lo seguía un joven de cabello rubio.
-Hola Spud.
-¿Qué quieres Brad, no tienes a alguien más a quien molestar?
-No quiero molestarte, solo quiero saber ¿Si es verdad que tienes una relación de noviazgo con el idiota de Jake?
-Sí, y el no es un idiota, además ¿tienes algo en contra de nuestra relación?-. Respondió Spud algo molesto.
-Claro que la tengo-. Dijo Brad sonriéndole maliciosamente.- Estoy celoso de que el este a tu lado y no yo.
Brad se acerco a Spud acorralándolo, Brad rodeo la cintura de Spud con sus musculosos brazos, el joven rubio llevo sus labios a los de Spud, quien trato de zafarse de los brazos de Brad que lo abrazaban, pero no lo consiguió, ya que Brad era más fuerte que él, al final, Spud se rindió al beso que Brad le daba y asi se quedaron un largo minuto.
-Mejor que los de Jake ¿verdad?-. Dijo Brad después de separar sus labios de los de Spud.
-¿P…por qué hiciste eso?-. Pregunto Spud.
-Porque me gustas, además puedo ser mejor novio que el idiota de Jake.
Spud quedo sorprendido, las creencias que tenia de Brad acerca de que a él le gustasen las chicas se vinieron abajo, comenzó a tener un sentimiento similar hacia Brad al que sentía por Jake, mientras que lo que sentía por el joven dragón, comenzaba a olvidarlo poco a poco después de ese beso, Spud se estaba enamorando de nuevo se estaba enamorando de Brad Morton.
-M…me t…tengo que ir-. Dijo Spud nervioso.
-Está bien, te estaré esperando, se que vendrás a mi algún día.
Spud se reunió con Jake, y fueron al cine, pero desde aquel día Spud ya no volvió a ser el mismo con Jake, parecía como si él no estuviera, ya no quería besarlo, ni tampoco tomarlo de la mano Jake comenzaba a preocuparse.
Spud veía muchas veces a escondidas a Brad, el joven castaño cancelaba muchas citas con Jake, ya casi no lo veía, solo en la escuela y cuando Brad tenía algo más que hacer, Jake comenzaba a sentirse triste porque Spud ya casi no podía estar con él.
El recuerdo del peor día de la vida de Jake, inundo su mente, comenzó a llorar mas, aquel día Spud estaba en una cita con Brad, el joven rubio le había llevado unas rosas a Spud, quien al recibirlas, lo abrazo fuertemente.
-¿Realmente me amas Spud?-. Pregunto el rubio.
-Claro que si, ¿Por qué dices eso?
-Porque aun estas con Jake, y la verdad que estes con el y conmigo al mismo tiempo, y la verdad quiero que termines con él.
-P… pero yo…
-Si realmente me amas termina con él.
-Está bien, lo hare.
Ese mismo día, Spud fue a casa de Jake a decirle que ya no podía estar con él, por que habie encontrado a alguien mas.
-Hola Spud, ¿Cómo estás?-. Le pregunto Jake.
-Q…quiero hablar contigo-. Dijo Spud.
Jake lo llevo a su habitación, ahí el joven dragón intento abrazar a Spud, pero él se negó a recibir el beso.
-Solo quiero decirte que lo nuestro no puede seguir mas, ya no podemos seguir juntos.
-¿Por qué?-. Le pregunto Jake soltando algunas lágrimas.
-Encontré a alguien más, por eso no puedo seguir a tu lado, perdóname Jake, pero las cosas son así.
Después Spud salió de la habitación de Jake para irse, Jake intento detenerlo, tomándolo del brazo, pero el chico de cabello castaño se soltó de forma brusca, después salió de la casa dejando a Jake llorando, los padres Jake se dieron cuenta de que él estaba llorando, y fueron a con él para preguntar qué había ocurrido, Jake no les quiso responder y después se encerró en su habitación, pero, ellos se dieron cuenta, ya que era casi imposible de que un chico llorara por otro chico por el término de una amistad, más bien lloraba por el fin de una relación amorosa, después ellos intentaron hablar con Jake para calmarlo un poco, lo consiguieron, pero no lograron que dejara de pensar en Spud.
-¿Por qué fue tan cruel conmigo?-. Se preguntaba a si mismo Jake.-Aun lo extraño.
El atardecer había llegado, y Jake aun no salía de su habitación, su corazón destrozado le dolía aun más ya que era un día viernes, el día en que Spud siempre aparecía con rosas para él, pero ya no más.
El timbre de la casa de Jake sonó, la madre de Jake abrió la puerta, y encontró a un joven de cabello castaño.
-Buenas tardes-. Dijo Spud educadamente.- ¿Esta Jake?
-Sí, está en su habitación-. Respondió ella mientras miraba algo que llamo su atención en las manos de Spud.-Adelante sube a buscarlo.
Spud subió corriendo por las escaleras, y abrió lentamente la puerta de la habitación de Jake, y ahí lo encontró, recostado en la cama dándole cuerda a la caja musical que le había regalado y con lágrimas en sus ojos.
-J…Jake, soy yo, Spud.- Dijo Spud al mismo tiempo que la dulce melodía volvia a escucharse.
-¿Spud?, ¿Qué haces aquí?
-Solo vine a pedirte perdón por lo que te hice, estoy completamente arrepentido por lo que te hize, y deso desde lo mas profundo de mi ser que regresaras conmigo, se que fui un idiota al abandonarte, solo espero que me perdones, pero si no quieres regresar conmigo, lo entenderé. Jake tardo un poco en responder, el también deseaba estar con Spud, no quería perderlo otra vez.
-Si quiero regresar contigo, pero, ¿que pasara con Brad?
-El lo entenderá, solo quiero estar contigo-. Dijo Spud
mientras le entregaba un ramo de rosas a Jake, el recibió el ramo y una tierna sonrisa se dibujo en el rostro de Jake, lo que habia esperado, por fin paso, después beso a Spud en los labios.
-Te amo Spud-. Dijo Jake susurrándole al oído.
-Y yo a ti Jake, solo quiero estar a tu lado para siempre, nada ni nadie nos separara de nuevo, siempre vamos a estar juntos.
Después se quedaron ahí abrazándose, sabían que nada los separaría jamás, que siempre estarán juntos, que se amaran toda la vida.
-Quien era cariño-. Pregunto el padre de Jake.
-El novio de tu hijo.
-Oh, está bien, pregúntale si quiere quedarse a cenar.
En la habitación de Jake, los dos chicos compartían besos y caricias, mientras la hermosa melodía que emitía la caja de música los rodeaba dándoles una sensación de paz, cuando termino, Jake y Spud se besaron nuevamente, en el fondo de sus corazones, ambos chicos sabían que, de ahora en adelante, todo va a estar bien, y que a partir de ese día, solo se tendrían el uno al otro para compartir una vida, para compartir su vida para siempre.
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