El primer día sin ti
Por: loveless fighter
Pareja: YukixShuichi
Un chico de hermosos cabellos rosados y con orbes amatistas se encontraba solo y deprimido en el pent house del Tokyo Hotel... había pasado ya casi un mes desde el rompimiento con su "actual" pareja, Yuki Eiri, el famoso escritor de novelas románticas.
Sumido en sus pensamientos y sentimientos de dolor y abandono, trataba de componer la última canción del concierto que estaba próximo a dar, el 11 de Julio para ser exactos /N: A wii en mi cumple ^0^ o_o ejem n_nU continuemos n_nUU/ donde promocionarían su último sencillo, "Recuerdos del alma" /N: A no crean que es un álbum de ellos, el nombre lo inventé yo por la canción que incluí aquí xP/ pero por más que intentaba nada se le ocurría; y es que aún, a pesar del tiempo que llevaban separados, no podía olvidar las palabras tan hirientes dirigidas hacia su persona y, de las cuales, todas eran mentiras.
- Yuki...- dijo en un murmullo que se perdió en esas cuatro paredes- ¿por qué Yuki? ¿Porqué?... no tienes idea de cuanta falta me haces... te amo tanto que ni siquiera me atrevo a borrar tu recuerdo de mi mente... -dijo, mientras abrazaba con enorme fuerza entre sus brazos un lindo oso gigante de peluche, regalo del escritor por su cumpleaños número 23 y se perdía definitivamente en sus pensamientos, mientras recordaba con amargura aquella noche en la que el escritor, dió por finalizada su relación /N: A ajá si tú como no ¬¬ eso lo veremos ¡ja! xD/
♥അ♥♥അ♥♥♥അ♥♥അ Flash Back ♥♥♥♥♥♥♥♥♥
- ¡Ya estoy harto de tus estupideces maldito mocoso del demonio! -gritó un huraño escritor mientras azotaba con fuerza la puerta de entrada y al mismo tiempo obligaba a caminar hacia dentro al pobre de Shuichi por medio de empujones-
-¡Pero Yuki! -dijo tratando de defenderse un poco
-¡Pero nada! ¡Ya me tienes HARTO! ¡Nunca llegué a pensar esto de tí! ¡y lo bueno es que asegún tú me amabas! ¡ahora imagínate si no lo hicieras! ¡sería el hazme reír de todo el mundo!
- Yuki... - susurró el pelirosa con dolor... jamás había visto tan molesto al escritor, pero, sobretodo, jamás lo había oido dudar tanto de su amor- pero... pero Yuki.... yo....¡no fue mi culpa! ¡te lo juro!
- ¿No? ¡Cómo te atreves siquiera a negarlo eh? ¡no eres más que un ofrecido! ¡hasta una prostituta se comporta mejor que tú!
- O_O Yuki... - el pequeño se dejó caer al piso usando como peso su cuerpo, dejándose caer de rodillas mientras se abrazaba a sí mismo... esas palabras le habían herido tanto....-
- ¡Y no vayas a empezar con tus estúpidos sentimentalismos! ¡bien sabes que conmigo no tienen ningún efecto! -jamás pensó que llegaría a tanto... Shuichi, SU Shuichi... lo había engañado, no podía creerlo, no quería, pero era la verdad, la cruda y dolorosa realidad, lo había descubierto en su camerino besándose con el loco del conejo esa misma tarde al ir a recogerlo a los estudios de NG...-
- ¡¿Y cómo quieres que me ponga?! ¡¿Crees que soy de coraza fría como tú? ¡¿Crees que no me duelen tus palabras?! ¡Eres muy injusto Yuki! ¡mucho! ¡yo... yo no me merezco este trato! - le grito con furia al escritor- ¡¿Por qué no me crees?! ¡¿POR QUÉ YUKI?!- dijo el cantante mientras empezaba a llorar amargamente... definitivamente eso ya era demasiado-
- Ja, -río cínicamente el escritor y, con una mirada tan tranquila y serena miró al muchacho, el cual al ver la mirada tan escalofriante del rubio, no pudo evitar sentir miedo de la persona que tanto amaba y por la cual él daría la vida- ¿Qué no te lo mereces? ¡¿QUÉ NO TE LO MERECES?! ¡SHUICHI POR DIOS! ME DOY LA MEDIA VUELTA Y CORRES INMEDIATAMENTE A LOS BRAZOS DE ESE IDIOTA DE SAKUMA RYUICHI
- ¡ESO NO ES CIERTO! ¡YO JAMÁS TE HE SIDO INFIEL YUKI! ¡SIEMPRE TE HE PERTECIDO! ¡EN CUERPO Y ALMA! ¿POR QUÉ TE ES TAN DIFÍCIL ENTENDERLO?
-...-
- RESPÓNDEME -le dijo hecho un mar de lágrimas-
- Por que un hecho vale más que mil palabras, y tú... - suspira mientras se apretaba ligeramente el tabique de la nariz... le estaba empezando a dar una gran jaqueca- no haces mucho para que crea lo contario
- ¡Pero es que yo no fui! ¡fue Sakuma-san quien...!
- ¡A mi no me importa quien haya empezado! ¿y sabes qué? ¡SE ACABO SHUICHI! ESTO SE ACABÓ ¡TERMINAMOS!
- ¿Q...Qué dices? ¿Cómo que terminamos?
- si Shuichi, terminamos, se acabó, ya te soporté mucho tiempo ¿y sabes qué? esta fue la gota que derramó el vaso -se dirige a su armario y saca una maleta mientras metía todas las pertenencias del menor en ella- ¡te quiero fuera de mi vida desde este momento!
- -al ver esto, se pone de pie rápidamente a tratar de convencer al otro- pero Yuki yo te a...
- ¡No te atrevas a decirlo! - dijo volteando a verle a la cara rápidamente con un expresión tan fría y áspera que Shuichi retrocedió un par de pasos-
- Yuki...
- -termina de empacar sus cosas y lo toma del brazo sin importarle la fuerza que ejercía sobre el pequeño y lo saca de su departamento violentamente- sayonara, Shindou-san >SLAM< -se oyó el azotar de una puerta en aquel solitario pasillo, mientras que Shuichi, trataba de ponerse de pie de aquel frío y duro piso, puesto que Yuki, al sacarlo del departamento, lo había prácticamente aventado, ocasionando la pérdida de equilibrio del menor-
- Yuki...- murmuró tristemente el pelirosa, mientras se acercaba a su maleta para apoyarse en ella y así poder ponerse de pie, mientras intentaba vanamente en no derramar más lágrimas ante lo sucedido-... te amo, Yuki
♥അ♥♥അ♥♥♥അ♥♥അ Fin del Flash Back ♥♥♥♥♥♥♥♥♥
- si tan solo Yuki hubiera llegado por mi 3 minutos antes... esto no habría pasado- se dijo tristemente- ¡buaaaaaaaaaaaaaa Yuki! ¡Te juro que yo no te engañé! ¡Fue Sakuma-san
quién me besó! ¡yo no quería, en serio! T^T
Tooku de me o hikarasete mezameru monotachi matte iru yoru no jouheki sasowarete utsurisumu mure no nukegara ni
- mi celular... ¿dónde demonios dejé mi celular? -dijo mientras se ponía de pie y empezaba a buscarlo como loco por toda la habitación- ¡aquí está! -sonrió victorioso al encontrarlo debajo de la almohada de su cama- ¿moshi moshi?
- ¡¡Nanoda!! ¡Kumagoro dice Konnichiwa!
- oh... Sakuma-san... kumagoro... konnichiwa -dijo con tristeza, pensaba que la llamada era de Yuki, pero, seamos realistas... el escritor si tiene algo de sobra, era el orgullo y jamás se dignaría a llamar a Shuichi para disculparse aunque de ello dependiera su vida-
- ¿uh? ¿Shuichi, daijobu? -dijo con algo de preocupáción el peliverde- Kumagoro dice que te oyes muy triste.
- nandemonai Sakuma-san, dile a Kumagoro que no se preocupe -sonrio con debilidad ante la respuesta expresada al ojiazul- no tengo nada, en serio.
- hum... -al escuchar el tono del ojiamatista, la faceta infantil de Sakuma Ryuichi desapareció para dar paso a la adultaque tanto temor infundía en contadas ocasiones- Shuichi... ¿siguen peleados?
-... ni siquiera tengo una esperanza Sakuma-san... -dijo con el típico tono de lágrimas- creo que esta vez, si fue el adiós definitivo
- ¿pero dónde quedó el Shuichi tan invencible y lleno de vida que conozco? ¿no que tu amor por Yuki sería por la eternidad?
-exacto, lo acabas de decir, MI AMOR POR ÉL, más no el suyo...por eso digo que esta vez si es definitivo -respondió con un gran hueco en el corazón mientras sus ojos se llenaban, irremediablemente, de lágrimas dolorosas-
- Shu-chan... -murmuró el otro cantante-
- ¿ha... hai?
- Sumimasen...
- ...-
*********DÍA DEL CONCIERTO (1 SEMANA DESPUÉS)*******
- Well little pink boy, espero que des lo mejor de ti - exclamó con alegría el mánager de la banda, mientras apuntaba a Shuichi y compañía con su inseparable mágnum- and I wait que tu ruptura with you boyfriend no afecte tu entusiasmo tan característicao, Shui-chi n_n ¡ y eso va para uds dos también guys! ¡no quiero ningún orden! ¡QUIERO UN CAOS TOTAL MUAJAJAJAJAJAJAJAJAJA! así que ahora, ¡A CANTAR! -dijo el americano mientras los sacaba a empujones del camerino, riendo malévolamente-
- n_nU no era necesario que K-san nos amenazara con su arma- dijo con algo de miedo el integrante más joven de la banda, Suguru Fujisaki-
- ni que lo digas... en fin...-suspiro- ¡A BRILLAR, BAD LUCK!
- ¡Así se habla, Shuichi! -exclamó con alegría su mejor amigo, Hiroshi Nakano
Las luces se fueron encendiendo una a una, iluminando lentamente a cada integrante de la banda Bad Luck, primero a un bello chico de ojos violetas y cabello rosado, el cual vestía con una blusa color rosa pastel que caía por sus hombros sensualmente, un mini short negro de cuero que se le pegaba totalmente a su esbelto cuerpo, unas calcetas del mismo color que su blusa, largas hasta por encima de la rodilla y unos converse rojos con graffitis incluídos -nuevo modelo que Shu iba a patrocinar? ¿así se dice? o.O? bueno me entendieron xD,
Gritos y ovaciones se escuchaban por todo el lugar, el concierto aseguraba un éxito seguro desde que se agotaron las entradas la 1 semana después de ser comentado ante los medios de comunicación, sin embargo...
-((falta Yuki...))- pensó con tristeza el pelirosa, y es que al subir al escenario lo primero que hizo fue buscar con la mirada a su ex-novio, con la esperanza de que después del concierto hablaran y pudieran llegar a un acuerdo, pero ni un rastro de él por todo el lugar- ((después de todo, ya no somos nada))
- ((ja, ¿tanto tiempo sin mi te ha afectado Shu-chan? mira que no reconocer a tu ex-novio aunque este trajera peluca y gafas oscuras... creo que habrá que recordarte como reconocerme, ¿cierto?)) -pensó con una media sonrisa el famoso escritor-
- Konbanwa!!! nosotros somos la banda BAD LUCK, mi nombre ya todos se lo saben al igual que el de mis compañeros, así que sin tantos rodeos... ¡¡¡QUE EMPIECE EL CONCIERTO!!!
Gritos de toda clase de personas se escucharon por todo el lugar, esperando con grandes ansias el mejor concierto de sus vidas.
- Esta canción está dedicada a una persona muy especial para mi, pero que para mi desgracia, ya no se encuentra a mi lado... -contuvo las enormes ganas de llorar con gran esfuerzo, cuando vió que su voz se empezaba a estabilizar, dijo- sin embargo, apesar de todo lo que me dijiste, yo solo quiero decir: TE AMO YUKI Y ESTO, ES PARA TÍ
Una ola de exclamaciones positivas de todo tipo se escucharon por todo el lugar, mientras Shuichi le daba la señal a Suguru de empezar a tocar la intro de la canción en compañía de Hiro.
Ayer, en esta hora,
En esta misma mesa,
Tu sentado justo enfrente
Donde ahora se sienta tu ausencia
Me dijiste que te vas
Wooo
- ((Yuki... te amo, Yuki))
Dos docenas de mis años
Veinticuatro de tus horas
Atraviesan como balas
Una detrás de otra
Mi existencia
Me muero si no estás
Wooo
Y ahora que ha vuelto
el ansia del primer día sin ti
y el presagio es tan oscuro
que te juro que el futuro
se presenta como un muro
frente a mí
- Je, creo que me equivoqué... si tienes talento, un 1%, pero tienes -sonrío para sí mismo mientras se disponía a escuchar el resto de la canción-
Sin tu compañía, tu calor,
Tu sonrisa, tu mirada traviesa
Tus palabras sencillas
Pronunciando te quiero
Regalándome un beso
Que inundaba de luz mis mejillas
Sin tu telepatía, tus enfados,
Tus risas, un poquito de todo
Lo mejor de esta vida
Se me escapa volando
En dirección al espacio
Que dejaste al marchar aquel día
- KYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!! -los fans estaban con los ánimos al por mayor... esa canción era hermosa-
Ayer al marcharte
Por aquella puerta
Te siguieron por la espalda
Futuras reservas de sonrisas
Y de felicidad
Hoy me sobran las palabras
Mis besos y mis miradas
Los minutos de mis horas
Cada gesto de mi cara
y de mi alma
eran por y para ti
wooo
- ((pero qué estúpido fui... supongo que ese loco del conejo tenía razón... Shu no deseaba para nada que ese beso se consumiera... nota mental para mí, asesinarlo por haberse atrevido a aprovecharse de mi novio... después de que me disculpe con ese baka..)))
Y ahora que ha vuelto
el ansia del primer día sin ti
y el presagio es tan oscuro
que te juro que el futuro
se presenta como un muro
frente a mí
Sin tu compañía, tu calor,
Tu sonrisa, tu mirada traviesa
Tus palabras sencillas
Pronunciando te quiero
Regalándome un beso
Que inundaba de luz mis mejillas
Sin tu telepatía, tus enfados,
Tus risas, un poquito de todo
Lo mejor de esta vida
Se me escapa volando
En dirección al espacio
Que dejaste al marchar aquel día
Millones de recuerdos pasaban por la mente de ambos amantes al escuchar la letra de esta canción de amor, definitivamente el cantante se había esforzado al escribirla...
Sin tu compañía, tu calor,
Tu sonrisa, tu mirada traviesa
Tus palabras sencillas
Pronunciando te quiero
Regalándome un beso
Que inundaba de luz mis mejillas
Sin tu telepatía, tus enfados,
Tus risas, un poquito de todo
Lo mejor de esta vida
Se me escapa volando
En dirección al espacio
Que dejaste al marchar aquel día
Los últimos acordes estaban por terminar.. entonces, con la voz más dulce que jamás Shu haya entonado, cantó el último renglón de la canción
Que dejaste al marchar aquel día...
*******Departamento de Yuki Eiri, 1:45 am*******
El cuerpo tostado de Shuichi brillo en la oscuridad de la noche. El rubio estaba maravillado, no sabia cuanto lo había extrañado hasta que lo vio... en realidad mas de una vez había tenido que reprimir las ganas de salir corriendo tras el y traerlo de regreso a su lado
¿Tan así de posesivo se había vuelto su amor? Si... tan así... pero el orgullo ¡ese maldito orgullo!
Lo volteo sobre la cama... El cantante seguía asombrosamente mudo y se dejaba hacer... solo quería sentir.
Lo tumbo lentamente sobre el mullido colchón, acomodándose sobre sus caderas para besarlo a gusto... Las lagrimas del pequeño mojaron su piel antes de que pudiera probar sus labios
-¿Shu-chan? - Preguntó sin entender muy bien a que venían esas lágrimas /N: A es que los hombres son estúpidos ¬¬U/
-Yo... yo creí que aún seguías enojado conmigo Yuki... - admitió avergonzado el ojivioleta
-¿Enojado porque?... No... ya no estoy enojado, pero no vuelvas a acercarte de esa forma al idiota del conejo o si me voy a enojar... - dijofrunciendo el ceño ligeramente - Y lo digo enserio... -
- ¡¡Kyaaaa!! ¡¡Estás celoso!!- rió con alegría el joven de cabellos rosados -Yuki está celoso... -
- Hmmmmmfffff- gruño por lo bajo el rubio poniéndose de pie visiblemente molesto, quizás porque el pequeño lo había descubierto, pero Shuichi lo siguió y se pegó a su espalda deslizando las manos suaves por la piel de su estomago para luego desabrocharle el botón del pantalón en una clara insinuación de deseo
-Ai shiteru Yuki- suspiró suave y provocativamente contra su piel
El rubio cerró los ojos a la sensación tan rica e infinita que le producían esas palabras con las manos tibias de su koibito sobre su más íntima parte y su desnudo cuerpo pegado a su piel... se giró lentamente para tenerlo de frente y besarlo como más le gustaba, con hambre contenida, mientras sentía como inmediatamente el cantante se abrazaba a él por su cuello y tiraba levemente de su cuerpo dirigiéndolo hacia la cama que les esperaba ansiosa, tumbándose suavemente usando como peso su cuerpo propio y el de su novio, mientras el rubio se acomodaba entre aquellas esbeltas pero bien contorneadas piernas y las acariciaba sutilmente desde los pies hasta la ingle del menor, arrancándole un sonoro suspiro...
Hubiera podido apagar ese ardor, la sed que le provocaba necesitarlo, pero no... No podía pensar en compartir intimidad con nadie más... Shuichi era su vida hasta ese momento...
La piel de Shuichi estaba bañada de un sudor suave que la cubría, sus ojos entrecerrados de placer, las mejillas suavemente rosadas haciéndole lucir aún más apetecible, ¡Cómo amaba verlo así! Tan frágil, tan deseoso tan... suyo...
Esa sensación exquisita de posesión que tenía hacía con él no había tenido con nadie... El mismo descubría cada día el poder que tenia Shuichi sobre él...
¿Celoso? Claro que estaba celoso, no podía siquiera soportar el perderle, eso seria como una pesadilla que no pensaba asumir... aunque, por sus estúpidos arranques de furia,esta vez si había estado a punto de verlo en brazos de otro, cosa que él jamás permitiría mientras siguiera siendo la pareja de ese hermoso niño que por suerte y azares del destino llegó a él, destruyendo poco a poco la coraza fría que había creado hacia para con los demás...
Un gemido fuerte de Shuichi lleno la habitación cuando empezó a acariciar su sexo de forma suave, su propio pantalón había volado lejos y solo llevaba puesto aún su ropa interior, con aquel miembro palpitante esperando a ser liberado. Lo beso con ansias y deseos... si había algo que le había gustado de el desde el principio era su boca... sabía tan bien, un delicioso sabor a frutillas.
Shuichi seguía siendo la misma criatura inocente desde el primer día, capaz de sacarlo de quicio con sus cosas o de hacerlo sentir el mayor de los placeres con tan solo poseer su cuerpo... simplemente estaba enamorado de su ruidoso compañero.
Deslizó la lengua ávida sobre su piel, sintiendo como esta se contraía al tacto, erizándose en cuanto la saliva se secaba obra del oxígeno de la habitación. Sintió las manos de Shuichi enterrarse en su cabello en un gesto desesperado... conocía bien ese lenguaje corporal... no por nada llevaban 5 años de noviazgo, por lo que se deslizó hacia abajo lenta y sensualmente a complacerlo.
Su boca se cerró sobre su sexo a la vez que un fuerte temblor en su compañero los movió a ambos
--Yuki... -exhaló placenteramente temblando ante aquel contacto sobre su zona más erógena - Awwnnn Eiri... -
Se sorprendió que el lo llamara así, por lo general no se atrevía a hacerlo, así que imaginó que ni siquiera se había dado cuenta, pero le gustó... le gustó oír su verdadero nombre escapar de los embriagantes labios de su koi, con una voz mezclada entre deseo e impaciencia por consumir sus actos. Sintió como poco a poco el cuerpo de el se tensaba hasta hacerlo explotar en fuertes espasmos musculares acompañado de un coro de roncos gemidos...
El corazón de su pequeño batía como loco en un golpeteo desesperado, mientras suaves gemiditos imperceptibles burbujeaban de sus labios como una dulce canción... ¿Sabría el lo delicioso que era oírlo gemir así?.
Se separó lentamente del sexo del menor, escuchando un reclamo de su parte al dejar de ejercer esa excitante acción, pero en seguida se dió cuenta de los deseos de su seme al ver como este buscaba con impaciencia una botellita pequeña del costado de la cama mientras observaba sensualmente como su amante se embadurnaba los dedos con ella. Él queriendo ayudar en el acto, entrelazó sus piernas en la cintura de su amante mientras que este utilizaba los dedos para prepararlo.
Shuichi se tensó levemente de dolor pero se relajó al sentir nuevamente la boca de Yuki sobre la suya, bajando lentamente por su barbilla, mordisqueándola sensualmente arrancándole un sonoro suspiro de placer...
- Ahhh... Y..Yuki... onegai... hazlo ya...- exclamó el pequeño con un tono de voz tan sexy que el escrito r pensó que se vendría en ese momento con solo escucharlo. Rápidamente reemplazó los dedos con su sexo dejándose llevar lentamente en ese estrecho pasaje.
-Ngn... Shuichi... ahhh... eres... eres deliciosamente estrecho... ¡¡¡ahhh!!! -
Exclamó el ojimiel con lujuria y pasión al entrar por completo en aquel pasaje rosa oscuro que le acogía con gusto; una vez dentro de su koi, detuvo las embestidas dejando a su compañero acostumbrarse a la invasión, pero la urgencia le ganó segundos después cuando empezó a moverse dentro de el incitado por los sollozos de placer que exclamaba sin pudor alguno su pequeña bola de pelos rosada.
Ambos estaban envueltos en un éxtasis total, indescriptible, las caderas del ojivioleta pronto tomaron la misma danza que el compás de su amante le marcaba con fervor... El vals estaba por terminar, ambos podían sentirlo, así que el mayor, con la poca cordura que le quedaba, tomó el miembro del cantante y lo empezó a masturbar al ritmo de sus estocadas, ocasionando que este se pusiera aún más sonrojado si esto era posible y deseara sentir más de esa placentera situación, empezando a mover sus caderas al ritmo que su Yuki le marcaba, indicándole con la respiración agitada y con mucha dificultad que le diera más, un poco más, quería un poco más de esa placentera tortura que le hacía pensar que desfallecería en cualquier momento… al sentir esto, el ojimiel aceleró las embestidas aún más -si es q esto era posible-, tanto que había dado con el punto en el q el pelirosa sentía q estaba a punto de desfallecer.Entraba y salía de aquella estrecha entrada con maestría, quería sentirse rodeado por esa hermosa calidez un poco más, solo un poco más…
No duraron mucho, estaban demasiado al borde para ello... Cayó lentamente sobre él cubriéndolo con su cuerpo... jadeando, sintiendo como el corazón se volvía uno con el del cantante. Sin moverse, aún dentro de él, satisfaciéndose aún más de sentir aquella piel al fin pegada a la suya, de aquella exquisita calidez rodear su sexo.
Luego se movió un momento liberando al pequeño por fin... Las mejillas ardientes de Shuichi se apoyaron en su piel con amor, mientras que este cubría a ambos con las sábanas blancas que les rodeaban y se acurrucaba entre los brazos de su novio que le invitaban a sentir la piel del otro pegada a la suya por más tiempo.
- Shuichi... por favor perdóname- dijo el escritor con profunda sinceridad mientras enterraba su cara entre el espacio vacío del cuello y hombro del menor, pegándolo aún más a su cuerpo, entrelazando ambas piernas, acariciando levemente con su pubis las estrechas caderas del menor, sintiendo como su cálido líquido escurría por estas hasta llegar a las sábans que les cobijaban y perderse entre ellas-
- ¿De qué hablas Yuki? -dijo el menor, acariciando con dulzura los rubios cabellos de su amante- yo no tengo nada que perdonarte...
-Ja, baka -exclamó con cariño el escritor- te extrañé
- Igual yo
- Hum... que rico se siente estar dentro de tí, Shuichi-dijo sin pena alguna el escritor, viendo como las mejillas de su niño se coloraban al instante-
- Y que rico se siente tu néctar dentro de mi... aún está tibio...- dijo con algo de pena-
- Te amo, Shuichi, lo sabías, ¿verdad? -un miedo indescriptible se asomó en sus preciosos ojos color miel... en verdad no deseaba perderlo-
- - un exalto por parte de el menor se hizo presente, esas palabras... las había añorado por tanto tiempo...- si Yuki, lo sé... y yo también te amo, y mucho -exclamó con felicidad contenida mientras le besaba apasionadamente-
- conocerte...ese fue mi milagro- dejó sali el escritor con una sonrisa tan hermosa, que Shuichi simplemente se enamoró más de ese hombre-
- Ai shiteru Eiri
-....- dudó por un segundo pero luego suspiró...el chico se lo merecía, le había hecho sufrir bastante- Watashi mo, Shuichi... con toda el alma.
Y así, abrazados fuertemente, esperarían un nuevo amanecer, lleno de incertidumbre y sorpresas inesperdas, pero que, ellos estaban seguros, de que los afrontarían con gusto y, más que nada, con un amor infinito entre ellos, uno tan puro e inocente, que nada ni nadie podría romperlo jamás...
Owari.