El tiempo pasaba y en la aparente oscuridad de aquel sótano solo se veían momentáneamente cientos de chispas de luz, mientras retumbaba contra las paredes la atronadora y a la vez delicada voz de Amy Lee, su voz entonaba “Call Me When You're Sober” mientras una figura ataviada en una gabardina, pantalón y botas negras movía sus manos enguantadas diestramente entre cables y microchips , entre toda esa oscuridad lo único que resaltaba de ella era esa inconfundible piel pálida y ese cabello rojo que parecía ser llamas vivas.
-Por el gran Chase Young, ¿Cuándo podre lograr que mi poderoso Camaleón-bot funcione como dicta el manual?- aquel pálido ser, mejor conocido como Jack Spicer se lamentaba de que su camaleón-bot llevara ya mas de un mil derrotas y todas las anteriores le había reparado y mejorado algo y aun así caía al primer o segundo golpe esto quebrantaba el espíritu del auto proclamado “chico genio del mal”, pero no se rendiría aun si estaba mas solo que la peste, Wuya para el ya era una maldita traidora y lo único que había aprendido de ella era precisamente eso, traicionar, lambisconear y por supuesto escapar cuando la cosa se pusiera de ojo de hormiga.
-Al menos eso debo agradecerle- farfullo descontento mientras continuaba su trabajo mientras la canción cambiaba sonando The Kill y esta parecía darle un nuevo ímpetu a su actitud mientras continuaba con el camaleón-bot- Esa asquerosa bruja Heylin, si la tuviera en frente yo…-
-¿Tu que?- se escucho una voz susurrante de mujer tras de el, causándole un grito demasiado infantil y afeminada, haciendo que soltara sus herramientas y mirara aterrado tras de si- No haz respondido ¿Tu que?-pregunto la bruja mirándole con una sonrisa que dejaba ver malevolencia, mientras los ojos de el no podían dejar de mostrar su miedo, si bien no era las mas poderosa de los villanos si podía acabar con el si le apetecía.
-Nada en especial solo…solo alardeaba conmigo mismo- sonrió forzada y nerviosamente a la bruja que le miro enarcando una de sus cejas con elegancia, lo que hizo pensar a Jack que era elegante, era bella pero no era tan bella, y su elegancia rayaba en lo normal, no era nada comparándole con Chase Young el era la elegancia, la belleza, la altivez y la maldad en carne y hueso, ella en cambio era una simple mortal comparada con el, cosa que hizo que su miedo se desvaneciera ante la bruja.
-Así que solo alardeabas- dijo notando el repentino cambio en la expresión del joven pelirrojo, que su miedo hubiera desaparecido le irritaba de sobremanera el debía temerle después de todo era la bruja Heylin mas poderosa, los ojos de la bruja mostraron su molestia un instante para cambiar de un momento a otro como si eso jamás ocurrió, pero este cambio no paso desapercibido por Jack, que no dejo que notara como un escalofrió le recorría la espina dorsal con solo notar eso.
-¿En que te puedo servir Wuya?- la bruja le miro con tranquilidad y desprecio al notar que el termino por ignorarla y continuo con su trabajo, aun así el oír la pregunta del mas joven trajo a sus labios una sonrisa, por su mente paso el decirle directamente lo que necesitaba de el pero no podía dejar pasar la oportunidad de humillarle como la sabandija que para ella, el resultaba ser.
-Tu en lo particular no me sirves para nada, eres inútil a cualquier hijo del Heylin por eso estas ahora solo- ella sabia que lo estaba hiriendo en lo mas profundo y que le quitaba el aire que le daba la razón de existir- Pero tus cámaras espías me sirven muchísimo, quiero tener vigilado a Chase Young, ¿Entendiste?- termino por fin su tortura hacia el pobre joven que se tragaba con orgullo las lagrimas que pugnaban por salir y romper su corazón sabia que la estúpida bruja tenia la razón pero planeaba darle el placer de demostrarle lo mucho que le lastimaban sus palabras por eso cuando escucho el uso que le daría a las cámaras se armo de valor y le miro algo desafiante y a la vez temeroso.
-¿Espiar a Chase? Creí que eso ya lo cubría tu aliado el frijol parlante- dijo mirando de pronto a todos lados buscándole temía que estuviera por ahí y le hubiera escuchado, la fría carcajada de Wuya le dio la respuesta, Hannibal no estaba allí, la miro de nuevo- ¿Piensas traicionarle?- pregunto mirándola a los ojos cosa que desde que había recuperado su cuerpo no hacia, consiguió como respuesta una nueva carcajada y un asentimiento de la bruja, ella parecía complacida de la agilidad con la que el chico había armado la red el solo, lastima que pocas veces demostraba tal virtud.
-Es correcto Jack, ya no confió en el, no me dice lo que trama, no confía en mi- los ojos de Jack rodaron en una clara expresión que parecía gritar “¿Quién lo haría?”, esto pareció molestar a Wuya- No juzgues mis acciones Spicer, tu eres peor escoria que yo- en ese momento los ojos de Wuya se abrieron asustados, como le había dicho y admitido que ella se sentía escora a aquel mocoso.
-Relájate Wuya yo no te estoy juzgando- dijo algo encogido sobre si mismo con preocupación, no pensó que ella fuera a ponerse tan histérica con solo esa expresión- Te daré las cámaras, tengo algunas ya hechas, no te será difícil usarlas- se puso en pie sacudiendo su gabardina, camino hasta uno de sus estantes, todo parecía un caos, piezas, cables, tornillos, esparcidos por aquel lugar a Wuya siempre le sorprendió que el chico supiera donde estaba todos, camino movió unas cuantas cosas con precisión y tomo una caja saco de ella algo parecido a un control remoto para carritos de juguete tamaño miniatura, presiono un botón, segundos después salió un grupo de mini cámaras con forma de insectos, se acerco a la bruja y mostro el control en este había una pantalla- En esta podrás ver lo que las cámaras ven, puedes manipularlas a tu antojo presionando el numero de cámara y moviéndola con las palancas, este es el botón de acercamiento y este de alejamiento, eso es todo lo que debes saber, las cámaras se cargan con luz solar y tienen batería residual de doce horas, bien ya tienes lo que necesitabas ¿algo mas?- pregunto algo despectivo sin darse cuenta, p0ues en su pecho aun ardía el resentimiento por las palabras de la bruja, esta le miro impresionado por lo bien planeadas que estaban las cámaras, mas no hizo comentario alguno tomo las cámaras y el control y se dispuso a salir.
-No, solo necesitaba esto- se retiro por fin dejando a Jack sumergido en sus pensamientos, estaba molesto, furiosa, sentía ganas de desgarrar uno a uno los miembros de esa asquerosa bruja pero el nunca se dejaba llevar por esos impulsos, dejo caer su cuerpo hasta el piso con un enorme suspiro, cerro los ojos y se quito los googles de espiral y los miro mientras pasaba su mano libre entre sus cabellos, tal vez debía rendirse de una vez, con la banda de los googles en una mano se apretó el rostro con desesperación, no tenia aliados, los poco Shen Gong Wu que aun poseía eran una broma, y no había ganado un solo duelo en mucho tiempo, arrojo sus preciados googles lejos y se abrazo con furia contenida mientras encajaba su uñas en la tela de la gabardina.
-Me das pena Spicer- un joven de cabellos negros casi tan pálido como Jack camino en dirección de los googles y los levanto viendo que uno de los cristales se había estrellado, levanto su verdes ojos y los encontró contra los carmesí que le miraban fijo- Esto es en lo que te convertiste después de prometerme que serias el mas grande Villano del mundo, me decepcionas- dijo caminando hasta el y entregándole los googles.
-¿Ricky?- pregunto asombrado viendo a aquel chico, que parecía un bello cuervo frente a el, este le sonrió con simpatía a pesar de sus palabras, Jack le miraba como si de un fantasma se tratara para después darle un revés con malicia- ¿Y tu ya eres un ladrón reconocido?- le sonrió mordazmente a su compañero de juegos de la infancia, pues eso era ese chico había sido su vecino y a diferencia de los demás niños ellos disfrutaban siendo los villanos, el pequeño Ricky siempre tenia raspones, moretones, banditas y costras pues el gritaba a los cuatro vientos que quería ser un ladrón, de agilidad, inteligencia y astucia incomparable, mientras que el siempre había estado pulcro construyendo robots pequeños con piezas de sobras de su casa y la de Ricky pues queriendo ser un genio del mal, tan brillante y malvado como para ser capas de crear cosas que aterraran al mundo no podía lastimarse su preciado cuerpecito por eso para defenderlo siempre había tenido a Ricky, que a pesar de su apariencia delicada podía acabar con niños de tres veces su tamaño y peso.
-Por supuesto que lo soy, pero serlo en Gran Bretaña es un asco- le sonrió a Jack, y este con alegría se levanto del piso y le abrazo, mientras sentía que una parte de su corazón se volvía a vivir, ese chico era la gloria caída en el momento exacto- Me conocen como “Ghost”, hasta ahora no he tenido un verdadero reto, y por lo que veo a ti si te han caído muchos, para que estés pensando tirar los googles- dijo en son de burla guiñándole un ojo con picardía, con Jack un poco separado de el viéndole con un dejo de molestia.
-Si bueno es que solo no es divertido y tampoco me lo hace mas fácil- dijo haciendo un mohín gracioso que causo una carcajada limpia y clara como una campanilla por parte del otro, que sin poder evitarlo acaricio los rojos cabellos de su amigo de la infancia.
-Es acaso ¿un propuesta?- le pregunto con una amplia sonrisa a lo que los ojos carmesí de Jack brillaron con afirmativa respuesta mientras le mostraba uno a uno sus inventos, robots, equipos de seguridad y demás, ruborizándose ante los halagos del otro y desviando la mirada avergonzado cuando tenia que admitir que algunos fallaron, le conto sobre Wuya, sobre los Wus y sobre los guerreros Xiaolin, sobre Hannibal y Sobre Chase ruborizándose al hablar sobre este ultimo- Vaya suena a que tu vida a sido muy interesante estos años- eso no era una pregunta era una afirmación tal cual, mientras Jack le miraba con asombro, es que acaso no dudaba de el.
-Ricky, tu... ¿Tu me crees?- pregunto a su amigo que le miro asintiendo con convicción, Jack sonrió ampliamente- Entonces si te quiero proponer seamos aliados, con tu ayuda lograre mis propósitos como cuando niños-
-Y yo acepto gustoso Jack- cerraron su pacto como cuando niños se cortaron la palma y juntaron sus manos ese era un pacto de sangre, que fue visto por alguien que parecía no estar de acuerdo con este suceso, un par de ojos dorados se entre cerraron con molestia ante esta escena.
-De ahora en adelante somos socios y por lo tanto somos uno si nos traicionamos, moriremos al instante-dijeron ambos al unisonó cerrando su pacto de ahora en adelante Jack no estaba solo.
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