La noche continuaba extrañamente cálida y el presentimiento de Yoh aún continuaba. Dos chicos caminaron por la calle, riendo de las anécdotas que se contaban, los chiches y de las burlas que se hacían Anna a sus espaldas, como era costumbre.
"Jijijijiji tienes mucha razón Manta, jijijiji"
"Jajajajajajaja"
Al pasar el tiempo de risa, los chicos llegaron a la tienda, a comprar más bebidas, ya que no alcanzaron las que tenían.
"Bien Manta, ¿qué tenemos que comprar?"
"Más licor, ¿si traes el nombre?"
Yoh se puso a buscar por sus bolsillos por la nota donde estaba el nombre e increíblemente...se le olvidó.
"Ah creo que la dejé, jijijijijiji"
"Ay Yoh..." Manta cortó lo que iba a decirle al castaño, al llamarle la atención un cartel pegado en el vidrio de la tienda. "¿Qué es esto?" el diminuto chico se dirigió a ver.
Los dos chicos vieron el anuncio y gritaron...
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"Muy bien Ren, siéntate"
El hombre alto lo dirigió a un sillón. Ren hizo lo que su padre le dijo, pero todavía dudaba; las acciones de su padre eran demasiado raras... gentiles.
'Por qué actúa de ese modo, algo no está bien en todo esto...'
"Bien Ren, te diré porque pedí que vinieras aquí" le dio la espalda. "Como sabrás la honra de nuestra dinastía ya no es como antes y tú te convertirías en el Shaman King para restaurarla, pero ahora al parecer ya no se podrá..."
"No sabemos si habrá otro torneo y de cualquier forma yo seré el sucesor de la familiar, yo conseguiré la honra de la familia Tao a como de lugar" Ren dijo una sonrisilla de orgullo mostró.
"Hmmm...y así será"
El pequeño volteó a ver a su padre, había mucha seguridad en sus palabras.
'Nunca me había apoyado en lo que decía...esto ya no me gusta' pensó el chico. "¿Qué quieres decir?"
"Jajajajajajaja" el hombre alto volteó con una mirada triunfante. "Lo que quiero decir...es que tú serás comprometido en matrimonio"
"¡¡¿QUÉ?!!" Ren quedó shock.
"Como lo oyes, tú serás comprometido en matrimonio, a la persona que gane tu mano en un torneo"
Una gran aura roja apareció por todo el cuerpo del pequeño, sus ojos se pusieron negros y pico de cabello creció como su furia incremento.
"¡¡¡¡COMO QUE EL QUE GANE MI MANO EN UN TORNEO!!!!"
"Jajajajajaja, así es, será un torneo organizado por mi"
"¡¡¿qué?!!, ¿y por qué me quieres casar?, ¿por qué yo? ¡¡¡¿QUÉ SIGNIFICA TODO ESTO?!!!"
Llamas aparecieron por todo el cuerpo del pequeño. "Es una tradición" una simple respuesta.
Todas las acciones desesperadas de Ren acabaron de golpe, al igual que una gran confusión apareció en él.
"Verás, nosotros la familiar Tao, somos una gran dinastía de guerreros poderos" Una pausa se dio lugar. "Durante todo este tiempo, la familia se a representado no sólo como los mejores guerreros, sino también por tener a hijos atractivos y con una cualidad rara en todo la existencia humana"
El pequeño chico chino continuaba atento a cada palabra que su padre decía, jamás había oído de otra peculiaridad que hiciera famosa a su familia más que el sen grandes guerreros.
'¿Una cualidad rara?.......' pensó Ren frunciendo el entrecejo.
En había volteado a ver de frente a su hijo, que se mostraba con cara fría, como era siempre.
"Esa cualidades es..." hubo más silencio.
"¿Qué?, ¡¡ya dime!!" el pico de cabello del chico creció al desesperarse de todo ese suspenso.
"Que los hombres puedan procrear"
Un shock petrificante cayó sobre el chico, que estaba más pálido de lo normal...de inmediato apareció su espirito gritando en shock al igual que él.
Después de un reaccionó, para decir las únicas palabras en su mente:
"¡¡¡¡¡QUE DEMONIOS ES ESO!!!!!
En Tao volvió a dar la espalda.
"Cada cien años sucede esa forma y un barón de la familia tiene que ser casado con el mejor guerrero que exista en el mundo"
"¡¡¡¡¡¿¿POR QUÉ YO NO SABÍA ALGO TAN IMPORTANTE??!!!!!"
El enorme hombre se carcajeó, haciendo estallar más furia en su hijo.
"En realidad...no lo sabía hasta hace poco"
En chico blanco se cayó al suelo fuertemente, Bason que sólo lo miraba, ya que todavía no podía reaccionar.
"¡¡¡¿¿QUÉ??!!!" el chico se recuperó de inmediato y saca su arma como siempre lo hace y apunta hacía la cara de su padre. "¡¡Como puedes decirme que apenas acabas de saber algo así de delicado, y sin decirme ni una palabra al respecto!!" Unas venitas aparecieron por toda cabeza.
"Es una tradición, y ahora que sabes que tú no sirves como hombre sino como mujer, tienes que casarte con el mejor guerrero, para eso es el torneo"
"¡¡Cómo puedes decir eso así como así!!"
La cara de En Tao continuaba serena, su voz inquebrantable continuó hablando.
"La familia Tao se ha engrandecido debido a esto, así que para lograr restablecer la dinastía, tú...¡tienes que casarte!"
"¡¡¡JAMÁS!!!" Una risa cínica apareció en la boca del hombre.
"JAJAJAJAJAJAJAJA...demasiado tarde, todo los preparativos estás listos...JAJAJAJAJAJAJA"
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"¿E-e-e-ese n-n-no e-es R-Ren?"
El diminuto chico tartamudeó como si uno de los hielos de Horo Horo lo hubiera atrapado.
"S-si e-e-es é-él"
Yoh masculló al igual que su amigo. El cartel que habían visto los impactó; en el se encontraba la imagen del Ren Tao, en una pose muy sensual, que jamás habían en la faz de la tierra se había visto, lo que hací ver al chico más sexy de lo que ya era.
"P-pe-ro, ¿para qué es este anuncio?" Manta preguntó. Su pequeña estatura le resultaba demasiado complicada para poder leerlo obviamente.
"Dice: «A todos los guerreros del lugar, se les informa que el joven heredero al trono de la dinastía Tao, Ren Tao; será dado a matrimonio al guerrero que gane en un torneo de artes marciales de cualquier tipo. El mejor guerrero será acreedor de la mano del joven y por lo tanto heredero al trono de la dinastía al igual que él. Cualquier interesado en concursar, por favor registrarse en la mansión Tao, las inscripciones son del día que se haya colocado el cartel hasta el día 16 de este mes y propiamente se le dirá cuando será la fecha de la lucha. Suerte»"
Yoh y Manta quedaron sin decir nada... Pero de inmediato los dos chocaron en histeria nuevamente.
"¡¡¡¿¿REN SERÁ DADO EN MATRIMONIO??!!!" gritó Manta.
El chico castaño flaco, sólo rió como siempre solía hacerlo.
"¿Yoh?"
"Jijijijijiji...con que un concurso, jijijijiji... ¡muy bien entraré!" Muy feliz, el castaño empezó a caminar de vuelta a casa.
"¡Oye Yoh!"
"¿Si?"
"¿Cómo que vas a participar?....... estás comprometido con Anna, además el chico es Ren" una exasperación se oyó en la voz del diminuto güero.
"Jiijijijiji, si lo sé por eso voy a participar...y lo de Anna" rascó su cabeza. "Si mi padre se va a casar con Silver, no veo por qué yo no me pueda casar con él, jijijijiji" continuó su marcha.
"Oye espérame"
Manta corrió para alcanzar a su amigo o más bien para saber qué es lo que tenía él en mente...
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"¡¡¿¿¿QUÉ????!!"
Todos gritaron sorprendidos, pero de inmediato la güera enfureció como nunca, se levantó de la mesa y agarró a Yoh lo más fuerte posible de su camiseta.
"¿Qué quieres decir, con que terminas conmigo?" los ojos de Anna eran oscuros con unas grandes estrellas diabólicas.
" Ji-ji-ji- si Anna que...que ya...seremos...prometidos..Ji-ji-ji-ji"
Anna estaba apunto de darle su súper cachetada pero su mano fue detenida por la de Silver.
"Anna siéntate" fue lo único que dijo y la chica lo hizo, claro no podía darse la tarea de ofender a su futuro «suegra».
Al sentarse, todavía enfadada, sólo le dio miradas de muerte al chico. Un gran alivio recorrió por todo el cuerpo de castaño al ver a Anna lejos de él y de que no recibió la súper cachetada, aunque las miradas también eran espantosas.
"Yoh dinos, ¿por qué quieres terminar con Anna?" La voz de Silver fue tan cariñosa como la de una madre real.
"Bien madre, jijijijijiji" Dijo Yoh, mientras que Silver se sonrojaba al oír que el chico le había dicho madre, para los demás fue algo raro a excepción de Mikihisa.
"Ah..."Silver se sintió elogiado por lo dicho por «su» hijo.
"Bien es que, jijijijijiji, quiero casarme con alguien más" Dijo Yoh finalmente.
Todos los del cuarto quedaron atónitos, hasta Anna.
"¿QUÉ?" La chica bufó.
"Ahhh...bueno si mi padre se va a casar con un hombre, no veo por qué yo no puedo hacer lo mismo"
La cara de Anna casi se le caía. No podía creer lo que oía.
"Espera Yoh, quieres decir que con la persona que quisieras casarte, ¿es un chico?" Mikihisa habló todavía un poco confuso.
Mientras Silver sólo estaba algo apenado.
"Si así es, es Ren, jijijijijiji"
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Lejos del lugar, en otro lujar un chico de cabellera azulada, tez blanca se divertía, si así se pudría decir cultivando plantas para los espíritus de la tierra de la madre naturaleza.
"¡¡¡Argh!!!" gruñó el chico al no poder hacer funcionar el tractor... Nuevamente. "¿Por qué esta porquería no quiere trabajar, ¡¡argh!!"
Mientras soltaba unas cuantas patadas a la máquina una dulce chica, de color de cabello igual que del, se acercó al chico corriendo y gritando:
"¡Hermano!, ¡hermano!"
Pilika había llegado al lugar que se encontraba su hermano, exhausta, tomó un poco de aire antes de hablar.
"¿Qué te sucede Pilika?"
"¡¡Hermano no vas a creer esto!!" La chica brincó de un lado para otro.
Horo Horo trató de detenerla y que le dijera.
"¿Qué es lo que no voy a creer?"
Una gran sonrisa de gatita apareció en la cara de la chica y le mostró un cartel que traía. Para la sorpresa más grande del chico azul.
"Esto no puede ser posible" Dijo incrédulo. "La mano de Ren en matrimonio al ganador del torneo" dijo casi en shock.
Pilika cabeceó todavía con sonrisa tierna.
"Hermano, si participas tú serás el quien gane, ya que eres un shaman...tendrás al chico de tus sueños, ¡¡¡como tu futura esposa!!!" brincó de alegría.
Al quitarse de lo aturdido, el chico sonrió triunfante.
"¡¡¡SI!!!, ¡¡Ren será mío!!"
Kororo sonrió al igual que Pilika al ver al chico más feliz que nunca.
Pronto tendrían que empacar para irse...
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En otro lugar...dos chicos paseaban por el lugar, uno de ellos que cargaba todas las cosas del otro chico.
"¿A dónde vamos Ryo?" preguntó el chico de cabellera castaña larga, luchando contra el inmenso peso de las bolsas, que le eran difíciles de cargar.
"No te importa, cállate y sígueme" dijo con voz dura.
El pequeño chico guardo silencio como le había dicho y continuó llevando las cosas. De repente el centró su mirada en un cartel que vio en un poste.
"Ryo, mira"
"¡Te dije que te callaras!" el otro chico moreno volteó furioso.
El chico blanco tembló y le señaló con el dedo al cartel.
"Hmmm...que tenemos aquí..." Una sonrisa maliciosa apareció en su boca.
El chico castaño abrió un ojo para asegurarse de que el otro chico no le iba a pegar.
"Vaya hasta que haces algo bueno inútil"
"¿E-en serio?" Una frágil voz salió del chico.
"Jajajajajaja, muy bien, empacarás mis maletas y quiero que lo hagas bien, o si no..."
El chico se espantó a la amenaza, sabía bien cual era el castigo que le pondría si hacía mal las cosas.
"L-lo haré b-bien"
En ello los chicos continuaron su marcha...
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Continuará...Oki^°?
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