-E... esto... no está bien...
-Ya lo sé.
-¿Entonces...?- volví a besarlo pero en esa ocasión se resistió.- No... ¡Espera!
-¿Qué?
-No podemos.
-Tú... no tienes idea de cuánto llevo aguantando.
-No es la manera de... ¡AH!
-¿Ahora me vas a decir que no te gustó?
-Yo...
-Admite que te gusta.
-N-no...
-Bien. Tú lo quisiste así
- Ah... g-ganaste... ah...
-¿Te gusta?
-S-si...
-¿Quieres que continúe?
-Yo... ----
-¿Eh?- un sonido ensordecedor no me dejaba oírlo.
-Que---
-No te escucho...- se puso de pie listo para irse. Antes de hacerlo, me dijo algo que no logré escuchar.- ¿Qué?- parecía molesto, dio media vuelta y se marchó.- No ¡Espera!- mas no hacía caso y lo peor era que ese sonido aumentaba su intensidad- ¿Qué es ese ruido?
Hallé la respuesta cuando desperté. Todo había sido un sueño, las sábanas y mi despertador me lo confirmaron. Me levanté, me di una ducha, tomé un rápido desayuno y me dirigí al estudio. Debíamos arreglar unas cuantas cosas aun, como la búsqueda de un tecladista.
Al poco tiempo encontramos uno: Yuuki. En un principio, parecía no estar del todo cómodo, no podía adaptarse al estilo de vida que lleva una banda activa; pero gracias a Teruki (que actuaba como un padre para todos) pudo incorporarse rápidamente. Pareciera que compartían varios gustos con Kanon, así que ese no fue un gran problema. Aunque todavía faltaba presentarle a Takuya.
Así caí en la realidad: te fuiste y nos dejaste con ese chico, Takuya. La verdad es que me molestó un poco verte tan feliz cuando lo escuchamos por primera vez. ¿Por qué reaccionaste así? …l sería tu reemplazo, ocuparía el lugar que desde un principio te perteneció. ¿No te importaba? A mí, esa idea, no me gustaba en lo absoluto, pero no había nada que pudiera hacer, ya estabas decidido y a nadie más pareció molestarle (a simple vista).
Quería dejarlo todo, pero la promesa que hicimos tenía que cumplirla o no podría vivir tranquilamente conmigo mismo. No sabía cómo hacerlo si ya no estabas, me sentía perdido, algo me faltaba, algo muy importante, mi adicción: tú.
Ya no quiero pensar más en ello, es molesto.
En la primera reunión que tuvimos ya los cinco, hicimos las presentaciones entre los nuevos miembros formalmente. Yuuki se veía nervioso, no lo culpo: para él todo estaría por cambiar rotundamente. Takuya, al igual que en la audición, actuaba muy tímidamente pero aún así no dejaba de mostrar que era una persona educada. Fue muy raro verlo a él y no a ti. Me sentía vacío y algo desilusionado.
-Bien. Desde hoy somos todos compañeros.- dijo Teruki alegremente.- Será un placer trabajar con todos ustedes.
-Lo mismo digo.- Kanon tan simple como siempre.
-Muchas gracias por dejarme ser parte de An Cafe.- dijo Yuuki e hizo una reverencia.
-Daré mi mejor esfuerzo. Gracias por brindarme esta oportunidad.- y al igual que Yuuki hizo una reverencia. Después de eso todos quedaron en silencio, Kanon y Teruki me miraban esperando que dijera algo, pero no sabía qué.
-Eh... bueno... no soy bueno para estas cosas...- qué tonto- Espero que nos llevemos bien y que podamos hacer que An Cafe sea una banda reconocida, no sólo en Japón, sino también mundialmente... eh...- no estaba de humor como para decir cosas maravillosas- y hagamos que todo el mundo se sienta Nyappy.- bravo, Mikusuke, eso fue patético.
-Ya que estamos todos es el momento para arreglar algunos detalles.
-¿Qué detalles?- cuestionó Kanon.
-Como el nuevo estilo de cada uno de nosotros. Tenemos que renovar nuestra imagen. Ya saben, An Cafe es una banda de Visual Kei. Si bien la música es muy importante, lo visual también...- y así Teruki sigo dándonos lecciones sobre "¿Qué es el Visual Kei?". Kanon se estaba aburriendo, sus bostezos lo delataban, Yuuki y Takuya sólo asentían y yo seguía en Mikulandia.
Los días siguieron pasando, nada fuera de lo normal, ensayábamos, componíamos música, escribía canciones, como siempre. Si no fuera porque ya no estabas todo estaría igual.
Ya estábamos preparando nuestro próximo álbum. Todos aportábamos algo. Kanon compuso la música de "Baby King", Yuuki de "Daybreak", Teruki de "Kakusei Herosim" (que se usó como opening para una serie de anime) y "Ryuusei Rocket". Un día que llegué al estudio, Teruki apenas me vio dijo "¡Tienes que venir a oír esto!", me tomó del brazo y me llevó hasta una sala en la cual entramos. Allí estaba Takuya.
-Ah... Buenos días, Miku-san.
-Buenos días. ¿Qué era lo que querías mostrarme, Teruki?
-Ya verás. Taku-chan, muéstranos.
-P-pero... Teruki-san...
-Sin peros, Takuya. Miku ha venido- fui arrastrado- hasta aquí sólo para oírlo. ¿Verdad, Miku?
-Eh... si Takuya no quiere no hay que obligarlo...
-…l quiere, sólo es muy tímido. ¿No, Taku-chan?
-Yo...
-Si no lo haces tú, lo haré yo.- interrumpió Teruki.
-Ya, Teruki, no lo molestes más.- al decir eso, Takuya me miró como diciendo "Gracias por ayudarme", después de todo éramos compañeros, eso es lo que uno tiene que hacer.
-Takuya, no sé por qué no quieres que los demás lo oigan si te he dicho que lo que hiciste es muy bueno.
-No lo creo. No soy bueno en estas cosas.
-Caro que si. Sólo deja que Miku lo escuche y que te dé su opinión.- Takuya bajó la mirada y se quedó en silencio por un momento. Teruki lo miraba y yo ahí sin entender nada.
-Está bien que Miku-san lo escuche.
-¡Si!- gritaba Teruki de felicidad- Miku, sólo espera a oírlo, es genial.
-Teruki-san exagera un poco.
-No seas tan modesto, Taku-chan.
-Takuya tiene razón, Teruki.- dije- A veces exageras las cosas.- Takuya y yo reíamos mientras Teruki fruncía el seño.
-Bueno, ya. Takuya, ve a hacer lo que te dije.
-Está bien.
Takuya se acercó a un equipo de música y presionó unos botones. Al hacer eso, la música comenzó a sonar. Era algo que nunca antes había escuchado, un sonido único, oírlo hacía que no pensara en nada más que en ello. No sé qué ocurría a mi alrededor, solamente éramos la música, envolviéndome, y yo. Luego comprendí de qué se trataba: Takuya había compuesto aquel increíble sonido esperando ser el acompañamiento de una canción que me encargaría de crear más tarde. Todo era sorprendente, especialmente la guitarra, instrumento que ese chico amaba. Así entendí qué fue lo que viste en él que te llevó a elegirlo como tu reemplazante. No te habías equivocado.
-Esto...- después de un rato rompí el silencio- es... increíble. Teruki no bromeaba.
-¿Acaso dudaban de mi?
-Ahora si estás exagerando.- me dio un pequeño golpe en la cabeza.- ¡Oye!
-Te lo mereces.- hice uno de mis famosos pucheros y Teruki volteó a ver a Takuya.- ¿Lo ves, Taku-chan? Te dije que a Miku le iba a gustar.
-Si... pero...
-Takuya,- dije- debes tener más confianza en ti mismo. ¿Por qué pensaste que no me iba a gustar?
-La verdad... no lo sé... tal vez fue porque no creí que te agradaría para adaptarla a una de tus canciones.
-Quizás le faltan algunos arreglos, pero no demasiados. Así como está ya es un muy buen trabajo.
-¿En serio?
-Claro. Te felicito por tu gran esfuerzo.- le dije con una sonrisa para que se sintiera seguro de sí mismo.
-Gracias, Miku-san.- al decir eso, también me regaló una sonrisa. Su sonrisa era hermosa, jamás había visto una igual. En ese momento sentí algo extraño, seguramente mis mejillas se iban tornando de un color rojo.
-Y... y no te preocupes por la... la canción... yo... me encargaré de escribir una que... que se adapte perfectamente a tu trabajo.- me estaba poniendo nervioso.
-Si. Espero que no sea una molestia para ti.- no dejaba de sonreír y eso hacía que me incomodara más y más.
-No será... ninguna m... molestia.- volteé enseguida para que Takuya no notara mi cara roja pero me topé con Teruki, quien me miró extrañado. Me había olvidado que él también estaba allí. Estaba en shock, Teruki se dio cuenta, no había duda de ello, pero antes de que pudiera decir algo al respecto interrumpí diciendo.- Oh, casi lo olvido, tenía que hablar con Yuuko-san. Con permiso.- Y salí de allí corriendo dejándolos atrás.
No entendía qué me pasaba, no actuaba así desde... no... no podía ser verdad.
-…l es sólo un reemplazo...
-¿Qué pasa, Miku?- preguntó Kanon mientras caminaba por el lugar.
-¿Eh?- no me había dado cuenta que estaba allí.
-Tienes la cara roja.
-¿En serio?
-¿Te sientes bien? Debe ser fiebre.
-No. Estoy bien, no es nada- aunque me sentía acalorado.
-De acuerdo. Oye, ¿has visto a Teruki?
-Si, está allí adentro con Takuya.
-Ah, gracias.- me miró extrañado una última vez, abrió la puerta y entró al lugar. Gracias a Dios, Kanon es un poco distraído y es fácil convencerlo de que todo está bien.
Fui a uno de los baños a refrescarme. Al verme en el espejo, noté que aún conservaba un poco de aquel tono rojo que Kanon creyó era causado por fiebre. La culpa llegó a mí. ¿Por qué me ponía así al ver a otro sabiendo que yo aún te amaba?
-Por favor, regresa... te lo pido... te amo... Bou...