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Harry Potter and the secret of the Lord of Fire por Silverwind

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-Harry, Harry, despierta- lo llamó una voz moviéndolo suavemente

 

-Mmmm- fue lo único que salió de su boca

 

-Arriba perezoso que ya amaneció- esta vez la orden fue seguida por una buena cantidad de cosquillas que despertaron al pequeño niño de diez años que estaba en la cama

 

-jajajaja basta Alex no más jajajaja- Harry se retorcía de la risa mientras Alex solo sonreía, cuando la chica consideró que había sido suficiente tortura soltó al pequeño y le dio un beso en la cabeza mientras se levantaba de la cama

 

-Hora de desayunar Harry- comenzó mientras buscaba algo de ropa en el armario- hoy tenemos un día muy ocupado- caminó hacia el baño para dejar la ropa y regresó junto a Harry que estaba sentado en la cama con cara de sueño

 

-Es muy temprano- dijo con un puchero y rascándose el ojo

 

-Oh vamos, te has levantado más temprano cientos de veces, arriba que hoy vamos al callejón Diagon por tus cosas-

 

-¿Hoy?- preguntó sorprendido- pero si aún no recibo mi carta- dijo mientras se levantaba de la cama

 

-Lo sé, pero todos los alumnos la reciben el mismo día y no quiero estar entre tantas personas, si vamos ahora estaremos más tranquilos-

 

-Pero no sabes qué libros comprar- volvió a decir

 

-No vamos a comprar los libros, pero si todo lo demás, las plumas, los tinteros, pergaminos, esas cosas- le aclaró- ahora ve a vestirte rápido, saldemos los siete juntos

 

-¿Los siete? Pero nunca salimos los seis juntos-

 

-Pues hoy es un día especial- fue el último comentario que hizo antes de salir de la habitación, Harry solo que qudó observando la puerta un momento antes de entrar al baño y entrar en la regadera, cuando miró el patito de hule junto a esta no pudo reprimir una carcajada y recordar lo que había sido la primera broma de Liam y la primera vez que vio a su prima furiosa

 

-Flash Back-

Harry estaba sentado en una silla en medio de una gran biblioteca, estaba aburrido y a punto de dormir, la voz que escuchaba le daba sueño

 

-Harry James Potter mas te vale que me pongas atención- dijo esa voz seriamente y el pequeño niño de seis años abrió los ojos de golpe y se sentó derecho en la mesa, frente a él una niña de 11 años lo miraba reprobatoriamente con una mano en la cadera y otra con un libro abierto

 

-Lo siento- dijo bajito, esperaba que le regañara pero en lugar de eso escuchó un suspiro y luego sintió una mano en su cabeza

 

-Está bien, yo sé que esto es aburrido pero debes aprenderlo- dijo la chica

 

Harry solo asintió y levantó la cabeza encontrándose con la mirada horrorizada de Alex que miraba a la pared detrás de él, Harry también vio la pared y tuvo que contener la risa, frente a la pared se podía ver a Dante en la bañera, desnudo, con un patito de hule entre sus manos y cantando una canción infantil

 

-¡Liam!- gritó Alex y salió como torbellino del estudio completamente roja de furia dejando a Harry riendo a carcajadas por lo visto y por el rostro de su prima

 -Fin Flash Back-

 

 

Harry bajó a desayunar muy contento, en todos los años que llevaba viviendo con sus primos nunca habían salido los siete juntos, casi siempre salían los gemelos con Dante, Jesse y él con Alex, y Jack se quedaba en casa entrenando, por lo que esto era un acontecimiento único en su clase e iba a aprovecharlo por completo.

 

Al llegar a la cocina lo recibió una escena que lo hizo sonreír con nerviosismo, Alex estaba tratando de calmar a un desconsolado Jesse que solo repetía “lo rompió”, Dante estaba regañando a Liam por haber tomado algo que no le pertenecía, Luca estaba con cara de fastidio mirando a Liam y Jack, un hombre de unos 25 años, de cabello rubio y ojos marrones, solo comía su desayuno sin prestar atención a nadie.

 

-ejem ya estoy listo- dijo Harry intentando llamar la atención de las otras personas, cosa que consiguió, Jesse dejó de llorar para solo emitir leves sollozos, Alex le sonrió y le mostró su desayuno con la cabeza y los gemelos y Dante se sentaron en silencio a desayunar.

 

 

Harry miró a todos los presentes, en esos años habían cambiado bastante, los gemelos, de 11 años, eran bastante más altos que él a pesar de solo ser mayores con unos meses, ambos tenían el cabello castaño y largo hasta la barbilla, sus ojos habían tomado un color azul zafiro con el centro de un dorado pálido, pero bastante llamativo, ambos podrían ser dos gotas de agua por fuera, pero por dentro no podían ser más diferentes, Liam siempre era el compañero de travesuras de Harry, siempre riendo y haciendo bromas, mientras que Luca era el serio, el estudioso y el calculador, sin mostrar nunca sus emociones ante los demás.

 

Jesse, con sus siete años, tenía el cabello rubio, con la edad se había aclarado bastante, sus ojos eran violetas y los tenía detrás de unas gafas cuadradas de marco azul que lo hacían verse más adorable, era el consentido de todos, los mellizos lo cuidaban como si fuera su hijo, cosa que no extrañaba a Harry ya que ellos lo habían criado desde la cuna.

 

Dante había dejado crecer su cabello castaño por lo que lo llevaba recogido en una cola baja que le llegaba hasta debajo del hombro, sus ojos azules eran extraños ya que uno era azul zafiro y el otro azul cobalto, a sus 15 años Dante era bastante atractivo con un físico que cualquiera envidiaría, además de poder político y económico por ser el mayor de los hermanos y heredero de la fortuna de su familia, siempre estaba serio en público, pero en familia era bastante cálido y protector.

 

Alex había dejado crecer también su cabello, gracias a un hechizo este ahora le llegaba hasta debajo de la cadera, dando el aspecto de una cascada completamente negra, cortada en capas por lo que los mechones más cortos enmarcaban su cara, siempre lo llevaba suelto dentro de la casa, en público, sin embargo, lo sujetaba en un apretado moño alto, sus ojos violetas se habían aclarado un poco con los años, por lo que ahora tenían mas bien un color amatista, Alex era la más tranquila de todos, tratando de que no haya peleas entre los miembros de la familia, a demás era la líder “secreta” de la familia junto a Dante, el pequeño ojiverde recordaba perfectamente el día en que el hermano menor de Ian Lekker, el padre de sus primos, llegó y cómo se comportaron los mellizos

 

-Flash Back-

-Señor, su tío ha venido a verlo- dijo un elfo doméstico que había aparecido en el estudio en el que estaban Dante leyendo unos papeles en alemán, Alex traduciendo un libro sobre runas y Harry leyendo un antiguo libro de leyendas

 

-Hazlo pasar- dijo Dante, en ese momento de 13 años, y enseguida el elfo desapareció

 

Alex se levantó rápidamente de la silla en la que se encontraba y guardó los libros que tenía junto a ella y todos los pergaminos con las traducciones que estaba realizando, un momento después un hombre de cabello y ojos cafés entró a la habitación, Dante dio un asentimiento y Alex solo lo miró fijamente

 

-Dante, tenemos negocios que atender, deja de intentar enseñar a leer a tu hermana y vamos a un lugar más privado- fue lo primero que salió de la boca del hombre al ver a Alex junto a su hermano con un libro de cuentos infantiles muggles en la mano

 

-Alex, llévate a Harry- dijo apretando los puños, la chica solo asintió y tomó al pequeño de la mano sin decir una palabra

Al salir de la habitación Harry no pudo evitar preguntar

 

-¿Alex, por qué ese hombre pensaba que no sabías leer?- preguntó inocentemente, la chica lo miró con algo de dolor en la mirada y lo llevó al jardín trasero, una vez sentados en los bancos de piedra Alex soltó un suspiro y comenzó a explicar

 

-Harry, tu sabes que nuestra familia se divide en varias partes ¿verdad?- preguntó, a lo que el pequeño solo asintió- pues Dante y yo, a pesar de ser hermanos y de que nos queremos mucho, somos de diferentes partes- Harry frunció el seño sin entender-mira Dante es hombre y el mayor de los dos, por lo que él tiene la responsabilidad de guiar a la familia, dirigirla

 

-¿Cómo un capitán?- preguntó el oji verde

 

-Si, como un capitán, en cambio yo soy mujer y tengo los ojos violetas -comenzó a explicar- por lo que mi única función en esta familia es ser bonita y casarme con alguien poderoso, ni siquiera tengo que saber hacer nada más que decorar la casa y cuidar a los niños

 

-Pero eso es injusto, tú eres muy inteligente, incluso más que Dante, él mismo lo dijo- replicó indignado Harry viendo eso como una tontería

 

-Lo sé, también me lo dijo a mí la primera vez que nuestro tío insinuó que era una cabeza hueca, y sé que es cierto, pero eso no quita que las tradiciones sean así, por eso es que no hablé allí dentro, está prohibido que alguien de menor rango hable en presencia de un adulto, pero no importa- dijo rápidamente al ver que Harry estaba a punto de replicar-solo son apariencias

 

-Pero las apariencias pueden engañar- dijo una voz a sus espaldas, ambos voltearon para encontrar a Dante bastante serio acercándose a ellos

 

-Eso es cierto- dijo Alex con una sonrisa y dejando espacio a su hermano para que se siente junto a ella- ¿qué fue lo que dijo?-preguntó

 

-Habló de los negocios en América y siguió con su letanía del matrimonio- dijo molesto- no lo entiendo, solo tienes 13 años y Jesse solo tiene 5, es increíble que ya quiera casarlos

 

-Sabes que quiere poder, si él elije nuestros matrimonios  lo tendrá, pero no te preocupes, estoy segura que no insistirá más por un tiempo

 

-¿Por qué?- preguntó sospechoso Dante

 

-Porque he estado encontrándome con Christopher Nott durante algunos meses, solo como amigos, pero eso debe estar calmándolo por el momento

 

-Eso espero, aunque ese chico es un año menor que tú- suspiró Dante- ahora con respecto a los negocios necesito tu ayuda

 

-Está bien, más tarde hablaremos- dijo Alex

 

-¿Sabes de negocios?- preguntó Harry sorprendido

 

-Un poco, a veces ayudo a Dante con problemas que se presentan

 

-Pero es un secreto- aclaró Dante poniendo un dedo encima de sus labios- nadie debe saber que hay algo de materia gris debajo de este hermoso cabello- dijo revolviendo el cabello negro de su hermana

 

-¡Dante!- gritó Alex intentando quitar las manos de su hermano de su cabeza- deja de hacer eso

 

-Jajajajaja- se escuchó la risa de Dante al levantarse y ser perseguido por una furiosa Alex con el cabello completamente desordenado

 

-Fin de Flash back-

  

Harry salió de sus pensamientos solo para ver que Jesse estaba a punto de llorar otra vez y que Dante estaba asesinando a Liam con la mirada

 

-¿Qué pasó?- preguntó muy bajito Harry a Jack, este lo miró y solo se encogió de hombros

 

-Jesse es un llorón- dijo Liam

 

-No lo soy- replicó el nombrado y le lanzó un pan en la cabeza al que le había insultado, con tan buena puntería que le dio en la mitad de la frente

 

-¡Mocoso!- gritó enfadado y estaba apunto de lanzarle el pan de vuelta cuando la voz de Dante lo detuvo

 

-Hazlo y te inscribo en Bleuxbottom- con esas mágicas palabras Liam dejó el pan a un lado y terminó de comer sus huevos revueltos, o más bien masacrarlos con el tenedor

 

-En cuanto terminen nos iremos- ese hubiera sido un claro intento de evadir el tema inicial si es que no hubiera sido Jack el que lo hubiera mencionado, él siempre estaba distraído.

 

 

Todos comenzaron a comer en silencio hasta que un aleteo en la ventana llamó su atención, era una lechuza negra con ojos cafés que se paró sobre la silla de Alex, la chica tomó la carta y la lechuza se retiró enseguida

 

-¿De quién es?- preguntó Dante

 

-De la escuela- dijo la chica abriendo el sobre y leyendo- dice que tengo que llegar una semana antes que los demás estudiantes para poder arreglar todo lo relacionado a mi nuevo cargo

 

-¿Nuevo cargo?- preguntó Harry

 

-Lo siento, no se los dije- se disculpó la chica- soy la nueva asistente de la directora

 

-Eso es importante- dijo Dante con una sonrisa

 

-Si, solo elije una cada tres años, la que tenga las mejores notas y haya ganado al menos cinco competencias en diferentes áreas, lo malo es que tendré que estar otro año en el colegio para poder entrenar a mi reemplazo- se lamento, para luego sonreír – me preocuparé por eso después ¿vamos?- preguntó a los presentes que ya habían acabado de desayunar.


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