-¿Sirius? ¿Estas aquí?
Remus había subido al dormitorio. Peter y James seguían en el gran comedor, molestando a Lily y Marian había dicho algo sobre ir a ver al profesor de pociones para aclarar algo sobre los deberes y como la morena había dicho que Sirius estaba muy molesto por lo ocurrido quería verlo.
-¿Que quieres? ¿No tienes que ir a ve a tu novia? -. Si, en definitiva si estaba molesto, pero no terminaba de comprender por que su amigo actuaba así, no era para tanto.
-Oye, se que te molesta que salga con tu prima, pero no logro entender porque.
-Olvídalo, no importa. Ella es… perfecta para ti, te aprecia mucho y te entiende como nadie.
Remus se había acercado a la cama del moreno y ahora estaba sentado en la orilla de esta y miraba a su amigo mientras este hablaba.
-Entonces ¿Que es lo que te molesta?
Sirius, que hasta ese momento había estado recostado en la cama se incorporo y pensó la respuesta unos momentos. No podía decirle la verdad, después de todo no sonaría nada bien que dijera: ‘’Es por que estoy enamorado de ti y ella lo sabia y ahora te vas a acostar con ella antes que conmigo. ’’ Tenia que mentir.
-No es nada, solo que me sorprendió lo repentino de la noticia. Además… es mi prima, es como una hermana para mí.
El castaño sabía que el Black mentía, pero no dijo nada, no era el momento. Tenia que seguir con el plan.
-No te preocupes por eso, yo jamás le haría daño, además ella sabe cuidarse sola.
-Si, lo se…
-Bien, voy al baño de prefectos. Después de esto, creo que necesito un respiro.- Dijo para después dedicarle una tierna sonrisa que lo dejo sin aliento.
-Bien, adiós
-Adiós.
Remus salió de la habitación dejando al animago de nuevo solo. James y Peter todavía no regresaban, debían seguir en el Gran Comedor, ojala Marian estuviera con ellos…
Estaba ya en el segundo piso cuando vio a la rawenclaft subir por las mismas escaleras en compañía de Richard Park, un chico de su mismo curso que era, además, el compañero prefecto de la chica.
-¡Marian!-Grito Lupin mientras bajaba rápidamente las escaleras.
-¿Que sucede?
-Valla Remus, ya me dijo Marian que están saliendo. Que suerte tienes.- El rubio (NA: Si, Richard es rubio XD) que venia con la morena lo miraba con algo de recelo, pero este no se dio cuenta.
-Ahh…
-Increíble… serás la envidia de medio Hogwarts y me incluyo a mí entre ellos…
-Este…
El ojimiel estaba bastante incomodo pues parecía que el chico realmente lo envidiaba, por suerte fue la chica quien hablo a continuación, evitándole tener que responderle algo al rawenclaft.
-No exageres Richard, no es para tanto, además la única que será envidiada soy yo. Muchas chicas andan tras de Remus y el nunca les hace caso.
-Bueno si, pero…
-Ahora si nos disculpas, quisiera hablar a solas con mi novio.
-De acuerdo. Te espero en nuestro piso para las rondas.- Una vez dicho esto, dio media vuelta y se fue, no sin antes dedicar otra mirada de profundo dolor al ojimiel.
-Parece enfadado.
-Si… pero no importa, luego hablo con el. ¿Y bien?
-Y bien ¿que?
-¿Que paso con Sirius?
-Ah, eso. Dijo que solo estaba sorprendido y que para el tu eras como una hermana.
-Oh si claro, como no, sobre todo después de lo de hoy.
-¿En verdad crees que este celoso?
-Estoy segura
-¿Como lo sabes?
-Ya te dije que no puedo decir más de lo que ya dije (NA: Valla la rebusnancia XD), lo prometí, al igual que te lo hice contigo. ¿Recuerdas?
///FLASH BACK///
Era sábado, por tanto todos los estudiantes estaban en los jardines disfrutando del hermoso día que hacia, incluso Lily Evans estaba afuera gozando de lo lindo. Todos excepto un par de chicos se encontraban en la biblioteca, estudiando en una de las mesas del fondo.
Remus Lupin, un chico de 16 años, con cabello castaño claro que en esos momentos brillaba debido a los rayos de sol que se colaban por la ventana. Tenía un par de ojos hermosos y de un color dorado poco usual. Estaba pálido, debido a la cercanía de la Luna llena y aun así sonreía de una manera que solo el podía lograr. Era delgado, pero eso no significaba que no tuviera lo suyo, pues a pesar de que su espalda no era tan ancha como la de James o su trasero tan grande como el de Sirius era hermoso a su modo. Probablemente el único defecto de Remus -además de tener una irremediable obsesión con los deberes- era que el mismo no podía ver su propia belleza, siempre hacia comentarios sobre lo afortunado que era y que no merecía tal cosa o que no debían tener detalles con el por no valer la pena. Era desesperante… ¿Que pasaría si ella…?
-¿Marian?
-¿Eh?- Al parecer había estado perdida en sus pensamientos hasta que el castaño se encargo de regresarla a la realidad.
-Te pregunte di habías leído a Wilde
-Ah eso, si Wick si…
-No, Wilde
Oh… no creo que no
-Bien, en ese caso, te prestare mi libro
-Gracias…
El chico sonrió para después sacar un libro bastante grueso de pasta color azul marino de su mochila y dárselo a la morena y luego comenzó a guardar sus cosas de estudio.
-Ya termine. Si me necesitas estaré cerca del lago con Sirius y los demás.
-¿Cuando se lo dirás Remus?
La chica miraba al ojimiel fijamente con aquellos ojos que tanto se parecían a los de su mejor amigo. ¿Cuantas veces no se había perdido en las profundidades de estos imaginan que eran los del animago?
-¿Eh?-Logro decir el chico mirándola con confusión.
-No puedes fingir conmigo, es obvio que estas enamorado de Sirius.
-N-no se de q-que me hablas, yo…
-Nunca has sido bueno mintiendo Remus. ¿Desde hace cuanto?
El gryffindor estaba impresionado, Marian lo había descubierto ¿Tan obvio era? No, debía ser que la ojiazul lo conocía demasiado bien. Era evidente que estaba segura de lo que decía, por eso lo directo de la pregunta, así que no tenia caso seguir negándolo.
-Me di cuenta hace dos años.-Contesto el chico con un leve sonrojo
-Valla, yo me di cuenta hasta hace un año… que mal-. La rawenclaft estaba bastante relajada y habla de ello como si le estuvieran preguntando sobre el clima.
-¿Cómo lo…?
¿Qué como lo supe? Fácil, se nota en tus ojos, cuando lo miras a é tienes ese brillo que solo aparece cuando ves chocolate o un libro muy interesante.- Respondió a la pregunta no hecha con una sonrisa.-Descuida, solo 2 personas podrían saberlo además de mi, una de ellas es Lily y el otro es un idiota al que su estupidez no lo deja darse cuenta.
-¿Por que dices todo eso?
-Por que si Sirius lo supiera todo seria muy diferente…
-No te entiendo
-Olvídalo, el punto es que debes decirle.
-¿¡Que!? ¡No!.- El licántropo estaba escandalizado ante la simple idea y causo que la bibliotecaria volteara a verlo de una forma muy estricta, como advirtiéndole que guardara silencio.
No era que no quisiera confesar sus sentimientos a Sirius, pero la perspectiva de ser rechazado y perder la amistad de este lo aterraba. No podía darse el lujo de dejar que el animago se apartara de su lado. SI durante el mes que no se hablaron ese mismo año se había deprimido demasiado ¿Que seria de él si lo perdía para siempre?
-No… no puedo decirle, no quiero perderlo…
El semblante de Lupin se había ensombrecido y ahora tenia la mirada fija en alguna parte del suelo. El efecto que sus palabras tuvieron en su amigo la consternaron un poco. Remus le tenia miedo al rechazo, no quería quedarse solo y ella lo entendía, la situación del joven mago no era sencilla y precisamente por ello haría todo lo que estuviera a su alcance para que el castaño terminara a lado de su primo.
-Esta bien, en ese caso, no le diremos nada. Ya luego me las arreglare y veras como ustedes dos terminaran juntos.
El ojimiel estaba sorprendido, pues según le había dicho Lily, Marian estaba enamorada de el y debido a su relación con los Black y a su parecido con Sirius supuso que ella seria igual de posesiva que este. Y ahí estaba ahora, ofreciendo su ayuda para hacer que el conquistara al moreno, se sentía tan feliz. No merecía tener amigos como ella.
-Gracias. Muchas Gracias.- Dijo sonriente.
///FIN DEL FLASH BACK///
No lo se Marian, yo…
No te preocupes Remus, que yo me encargare de todo. Solo confía
-Pero…
-Ya, ya, ya, mucha platica por hoy, somos prefectos y tenemos que ir a dar las rondas. Date prisa o Lily se enfadara conmigo.
-Pero…
-Ya, adiós.- Le dio un pequeño beso en los labios y después desapareció al final del pasillo.
La chica tenia razón, se le hacia tarde y no quería tener problemas con su pelirroja compañera así que subió rápidamente por las escaleras.
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No sabia que hora era pero seguramente pasaban de las doce de la madrugada y no podía dormir.
James hablaba entre sueños y luchaba contra las sabanas de la cama, Peter se abrazaba a su osito de peluche y de vez en cuando soltaba sonoros ronquidos que resonaban en toda la habitación y Remus… Remus respiraba acompasadamente y tenía una ligera sonrisa en el rostro, seguramente soñaba algo lindo sin saber que era observado pos uno de sus mejores amigos: Sirius Black llevaba toda la noche en vela y en esos momentos observaba a su compañero dormir, de pie a lado de su cama.
-Desearía poder decirte toda la verdad-. Dijo el moreno en un susurro mientras se acercaba más al rostro del licántropo.
-Si supieras los celos que me dan al verte con Le’ Nier, las ganas que me dan de lanzarle una maldición imperdonable cuando te besa o te toma de a mano.- Todo lo decía en un susurro para que el castaño no despertara, esta era la única forma en la que se atrevía a rebelarle sus sentimientos hacia el.-En esos momentos desearía ser Marian, desearía haberte dicho todo esto antes de que ella entrara a tu corazón… y no tener que hacer esto a escondidas.
Acaricio suavemente la mejilla de Moony y quito un mechón de cabello que caía sobre sus ojos. Finalmente, venciendo la poca distancia que lo separaba de los apetecibles labios del chico lo beso. Fue más bien un roce, una pequeña caricia entre sus labios con los del ojidorado.
Se separo lentamente, aunque quisiera haberse quedado así por siempre. Se incorporo y dio media vuelta, iba a irse ya a su cama cuando lo escucho…
-Sirius…
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